Sexo con Amor (sin comparación)
Tu boca entre abierta, tu lengua húmeda, en busca de la mía; la encuentra, y juntas entretejen los más dulces y sabrosos besos. Lames y besas mi cara recordándome que eres mi dueño, mi hombre el único que puede poseerme. Tu cuerpo fornido, excelso acoplándose al mío, se reconocen, se desean, se buscan, se encuentran Tu virilidad erguida me apabulla, me delira Espero les guste este corto relato con destellos poeticos si se me permite la expresión. Ruego encarecidamente COMENTARIOS, me gustaria subir muchos más, pero al ver poco entusiasmo de comentarios me lo estoy pensando. Besitos humedos para tod@s desde Argentina Martina
Tu boca entre abierta, tu lengua húmeda, en busca de la mía; la encuentra, y juntas entretejen los más dulces y sabrosos besos. Lames y besas mi cara recordándome que eres mi dueño, "mi hombre" el único que puede poseerme.
Tu cuerpo fornido, excelso acoplándose al mío, se reconocen, se desean, se buscan, se encuentran
Tu virilidad erguida me apabulla, me delira
Mis manos lo acarician, lo masturban siento como se engrosa con mis estimulaciones. Unas pequeñas gotas de jugo preseminal hacen de lubricante, mis dedos se resbalan, tu pene late y mi boca se desespera.
Mis labios bajan, mi lengua lo explora, lo seduce, lo incita, lo recorre, lo saborea;
poco a poco se va perdiendo en mi boca, entra profundo, late en mi garganta, roza la tráquea, me atragantas hago arcadas.
No dejas de mirar, gozas exacerbado viendo como llenas mi boca con tu miembro lujurioso. Lo sacas y lo manipulas enérgico contra mis labios, das pequeños golpecitos sobre mi boca abierta, comienzan a chorrear hilos de saliva, no los quieres dejar caer, lo levantas con tu glande y lo comienzas a desparramar por toda mi cara.
Ya no me aguanto, lo quiero tener dentro de mí ser. Te miro, te beso, te sonrió picara, ya me conoces, sabes a lo que voy. Te gusta, te excita sobremanera vérmelo hacer
Lo tomo con ambas manos, sosteniendo tu mirada, apoyo la punta del pene en mis labios vaginales, "están empapados, hambrientos", deseosos de recibirte. Empujo suave, sin prisa, muerdo mi boca, disfruto, entrego el mando, me dejo llevar
Comienzas a deslizarte por mi sexo. Siento como entra cada centímetro de tu hombría; convirtiéndome en tu presa, como una estaca va penetrando sin tregua mi cuerpo jadeante.
Tus grandes manos aferradas sobre mis nalgas hacen presión en cada embestida, arrancando mis gemidos más profundos, sostienes mi cuerpo que no para de vibrar.
Tus jadeos se mezclan con los míos, el olor a sexo nos envuelve, tus piernas tiemblan, tu cara se transforma.
Estallamos de placer, nuestros orgasmos sincronizan de manera audaz. Me besas, me miras, me dices cuanto me amas. Te quedas inmóvil dentro de mi cuerpo, lo disfrutas, lo disfruto, sabiéndonos el uno del otro nos quedamos dormidos hasta el amanecer.
fin