Sesión con Aghata

Sin preámbulos encuentro entre el personaje de "hermanas castigan machito" con uno de sus fans. Ballbusnting humillación

Esa noche, Agatha estaba a solas en su cama mientras su hermana dormía plácidamente en la otra. Chateaba con sus fans mientras les enseñaba el vídeo. Alguno de ellos, pidió una sesión con ella para que pateara sus huevos no sin antes recibir humillaciones sobre el tamaño de su pene.

Permaneció hablando con uno de ellos por sesión privada. El chico tenía un pene algo pequeño pero ella sonreía, le encantaba, adoraba ver cualquier pene que se pusiera duro con ella.

—Agatha, quiero que me humille—rogó.

—Bueno, con esa cosita taaaaan pequeña...venga, dale, diez...nueve...ocho...—pero al llegar a ese número, el joven se corrió—¿tan rápido?, creo que si te has ganado una sesión.

Después de darle una corrección a Carlos, Dani y a Santi y tras subir el vídeo de la humillación, Damián había vuelto a chatear con Aghata y le había rogado que le concediera una sesión.

-por favor Aghata humillame- chateo el chico.

-bueno pero primero quiero que te corras para mí y salpiques tu pantalla- respondió ella sonriendo

El chico agarró su polla la movió rápidamente de arriba abajo y no tardó en correrse en la pantalla manchando la cámara… Aghata pasó el dedo por su pantalla como si recogiera el semen y se chupo el dedo mientras sonreía lascivamente.

Lo que el chico no sabía es que con la otra mano había introducido los dedos dentro de su coño y se masturbaba a toda velocidad.

-lo prometido es deuda- dijo ella disimulando sus gemidos.

Acordaron en verse en casa de Aghata, ella se lo arreglo para que su hermana y su madre no estuvieran, aseo la caseta de herramientas de la piscina y llevo lo que ella pensaba que iba a necesitar, llevo un dildo cogido a un cinturón, cuerdas una botella de licor fuerte y unas esposas dobles juntas entre sí por unas correas que una parte era para las muñecas y las otras para los tobillos.

Dejó el licor y las esposas en una mesa junto a la pared de la pequeña caseta y la cuerda la dejó junto a un pilar central de madera que sujetaba una viga del techo mientras que el dildo lo escondió para que Damián no lo viera.

Llegaba la hora y repasaba lentamente lo que tenía intención de hacerle a Damián mientras se ponía unos short vaqueros muy muy cortos que apenas tapaban sus nalgas, una fina camiseta de tirantes blanca que marcaba sus pezones y finalmente una botas altas con unos tacones impresionantes.

Sonó el timbre de la casa y se dirigió rauda para abrir la puerta, allí estaba Damián, era más alto y guapo de lo que parecía por la cámara, vestía unos vaqueros cortos por encima de la rodilla y una camiseta verde, el pelo castaño enmarañado y unas gafas de pasta negras que no llevaba en las sesiones online.

-hola- dijo el chico algo tímido mientras repasaba con la mirada a una impresionante Aghata, casi noto como se le ponía morcillona solo de verla.

Aghata también se dio cuenta pues también lo repasaba y sonriendo le tomó la mano llevándolo hacia la caseta mojando sus bragas de solo pensar en lo que estaba por venir.

Damián la seguía mirando el bonito culo que le dibujaba el short, ella ni siquiera le había saludado pero esa visión hacía que le diera igual.

Rodearon la casa hasta la piscina y entraron en la caseta, el chico observó el lugar sin perder detalle de los objetos cuidadosamente colocados en una mesa y fijándose en la cuerda del Pilar.

-me gustaría que…- el chico no pudo terminar de hablar pues Aghata se giró cruzando la cara de un bofetón.

-me importa una mierda lo que a ti te gustaría- dijo Aghata señalándole con el dedo -has aceptado estar conmigo y ahora eres mío- dijo con una mirada severa.

Damián asintió y Aghata cerró la puerta de la caseta para luego acercarse a Damián sensualmente y rodear su cuello con sus brazos pegando su cuerpo al de él.

No tenía una polla muy grande pero notaba como crecía bajo sus pantalones mientras acercaba sus labios a los de él.

Podía escuchar la respiración nerviosa de Damián mientras sus alientos se entremezclaban, los labios de Aghata rozaron los de Damián que se preparó para el beso mientras bajaba sus manos con disimulo hacia las nalgas de Aghata.

En el momento que él abrió la boca Aghata subió su rodilla con fuerza hundiendola  en los huevos de Damián que se dobló hacia alante dando un grito sordo.

Aghata sonreía mientras notaba como su rodilla aplastaba los huevos de Damián deformando su escroto. Solo el hecho de que ella estaba delante impidió que cayera al suelo.

Aghata bajo su rodilla y llevó su mano a la entrepierna de Damián masajeando la zona dañada, el chico dio un respingo pero se dejó hacer.

-quítate la camiseta.- dijo ella sin dejar de manear sus pelotas.

El obedeció, irguió su cuerpo y se dispuso a quitársela rápidamente mientras sentía las caricias de Aghata, en el momento que la tenía sobre su cara para sacarla por encima de su cabeza tuvo que detener sus movimientos pues la mano de Aghata se cerró con fuerza sobre sus huevos.

El no veía nada, solo notaba la mano retorciendo sus huevos sin piedad, podía escuchar la risa de Aghata mientras retorcía. Lo empujó de los huevos y ando de espaldas hasta que chocó contra el pilar central, allí soltó los huevos de Damián que quedó apoyado sobre él respirando con dificultad por el dolor.

-la camiseta- dijo ella imperativa.

El chico se la fue quitando de nuevo esperando recibir más golpes, estaba empezando a sentir miedo de su decisión de quedar con ella pero en realidad estaba muy excitado

Cuando se quitó la camiseta apoyó sus manos sobre sus muslos para tratar de mitigar el dolor viendo cómo Aghata lo miraba sonriente, ella lo rodeo y quedó detrás de él mientras él trataba de seguirle con la mirada.

-¡no me mires!-. Le espetó ella -los brazos a la espalda cruzando el pilar-

-si mi señora Aghata… pero que me?-

-shhh ya te dicho que me perteneces, obedece perro-

Él asintió de nuevo y llevó las manos hacia atrás, noto como ella lo ataba a la pequeña columna con fuerza, luego la vio acercarse por delante con una correa y la clásica pelota roja.

Después de amordazarle se dispuso a bajarle los pantalones y quitárselos.

Se arrodilló delante de él que solo de verla ahí delante de él a la altura de su polla se le olvidó el dolor.

Aghata posó la palma de su mano sobre su polla presionando suavemente por encima de los boxes, notando como se endurecía.

Estiró los dedos y bajó el boxer lo justo para que su polla y sus huevos quedan delante de su cara, miró sonriente la palpitante polla de Damián y rodeó el tronco de esta con su mano, casi la cubría por completo solo la punta salía fuera de su puño.

Pasó su lengua por el capullo mientras meneaba suavemente el tronco de la polla mientras con la otra mano cogía los huevos de Damián cómo si fuera a coger un fruto de un árbol.

Lamió la polla y acarició con sus dedos los huevos mientras a Damián le doblaban las rodillas por el placer.

Aghata fue incorporándose poco a poco sin soltar la polla de Damián la cual movía cada vez más rápido. El chico echó la cabeza atrás cerrando los ojos, de no ser por la mordaza sus gemidos habrían resonado en la caseta.

-mírame- dijo Aghata moviendo sus labios cerca de los de Damián -si apartas la mirada te arrepentirás- dijo ella con voz fría mientras meneaba su polla lentamente.

Él la miró a los ojos, y la mirada de gata de Aghata le derritió por completo, ella comenzó a mover su mano más rápido mientras mordía los pezones del chico.

Damián luchó por mantener la mirada pero los movimientos de ella eran muy placenteros y cuando está aceleró más ritmo no pudo evitar cerrar los ojos por el placer que le producía.

Fue tarde cuando quiso darse cuenta pues la mano de Aghata abofeteó sus huevos con precisión arrancando un gruñido de dolor de sus labios.

-tu pierdes- dijo Aghata soltando la polla de Damián al tiempo que palmeaba sus bolas de nuevo.

Ella se puso delante de él y cogió un huevo con cada mano, comenzó a apretar con fuerza ambos testículos del chico que comenzó a retorcerse de dolor mientras sus lágrimas caían por sus mejillas.

Aghata no dio cuartel sus puños se cerraban cada vez más sobre los huevos del pobre chico que de no ser por estar atado sin duda se retorcería en el suelo por el dolor.

Ella soltó los huevos de Damián para alivio de este, solo para coger su polla y retorció con fuerza hacia un lado, Damián pensó que iba a perder su virilidad pero  ella soltó de golpe su polla.

Cuando el abrió los ojos ella no estaba delante, noto como manipulaba las cuerdas y las aflojaba.

-no te muevas perro- susurró ella a su oído desde detrás.

Luego se acercó a la mesa y se sentó sobre ella doblando una rodilla y poniendo el pie sobre la mesa y estirando la otra pierna quedando muy abierta de piernas.

Sin dejar de mirar a Damián comenzó a acariciar su coño por encima del short mientras con la otra mano se pellizcaba los pezones, apretaba su coño por encima del pantalón y se acariciaba de arriba abajo son soltar sus tetas.

Damián noto como su polla cobraba fuerza de nuevo ante semejante espectáculo, comenzó a babear deseoso de tomar ese cuerpo espectacular ante la imagen que le ofrecía.

Ella desabotono el pantalóncito e introdujo su mano dentro metiendo sus dedos en su coño, se levantó la camiseta y sus redondeados pechos quedaron a la vista.

Damián no podía más necesitaba saltar sobre su "presa" como un león lo hace cuando caza, ella lo miraba seductoramente mientras movía sus dedos más y más rápido dentro de su coño.

Pronto sus gemidos inundaron la caseta mientras Damián veía como sus short se mojaban cada vez más.

-follame perro- dijo ella entre jadeos.

El reaccionó como un animal y tiró de las cuerdas con fuerza haciéndose algún verdugón que otro, noto que estaban más flojas de lo que pensaba y de otro tirón logró liberarse.

Cegado por el deseo la alcanzó de una zancada, ella separó más sus piernas para recibirlo, el agarró el short y lo bajó de un fuerte tirón para luego agarrar las mojadas bragas de Aghata y arrancarlas provocando un querido en ella.

Miró su coño perfectamente rasurado y empapado y tomando sus caderas la atrajo hacia si dejándola recostada contra la mesa.

-haz que me corra antes que tu- siseó ella excitada.

Damián apuntó y clavó su polla en el coño de Aghata y llevando sus manos a las tetas de esta comenzó a embestir con fuerza mientras apretaba sus tetas con fuerza.

Los jadeos de Aghata resonaron por toda la estancia, el chico metía y sacaba su polla con fuerza mientras apretaba sus tetas torpemente.

-más fuerte cabron, dame duro cerdo-

El reaccionó ante sus palabras y aceleró sus embestidas emitiendo unos extraños jadeos ensordecidos por su mordaza.

Noto que estaba apunto de correrse y trato de aguantar, pero la falta de experiencia y  el hecho de tener a una diosa a su "merced" no ayudaba, pronto noto como su semen subía y no pudo evitar las descargas a chorros dentro del coño de Aghata que jadeaba aceleradamente.

Poco a poco fue bajando el ritmo hasta que no pudo más y se recostó sobre Aghata agotado

-has vuelto a perder- dijo ella entre jadeos

Aghata llevó su mano a las pelotas de damián que se puso pálido al notar como le agarraba, trató de escudarse pero no emitió ningún sonido coherente.

Damián se preparó para el apretón, pero este no llegó ella lo empujó de los huevos suavemente hasta que que quedo a la distancia de su brazo.

Soltó su presa y el chico respiró aliviado, solo unos segundos pues lo que Aghata buscaba era la distancia apropiada para asestar una tremenda patada con el empeine en los huevos de Damián que cayó al suelo retorciéndose de dolor.

Aghata se quitó la camiseta tranquilamente mientras Damián seguía en posición fetal para luego voltearlo boca arriba con el pie.

Él la miró suplicante pero ella no cedió, puso el tacón de su bota sobre los huevos de Damián y apretó con fuerza.

Damián pensó que iba a morir y suplicando entre sollozos agarró la bota de Aghata que apretó con más fuerza hasta que vio como la polla de Damián se hacía cada vez más pequeña.

-mira como llora el pichacorta- dijo ella entre risas. -eres patético, tu y tus pequeños huevitos los sois-

Aghata se lo estaba pasando en grande pero todavía no había terminado la función, levantó su pie de los huevos de este para sentarse sobre su cara.

Damián vio mientras ella se agachaba como su propio semen caía sobre su cara.

-lame perrito haz que me corra de una vez-

El abrió su boca para recibir el coño de Aghata y su propia corrida, en verdad esto era como un sueño para él, ser humillado así por una diosa como ella.

Su lengua recorrió el clítoris de Aghata y lamió metiendo su lengua dentro de su coño recogiendo su propio semen y tragandose lo junto con el flujo de ella.

Mientras Damián lamía su coño ella puso los brazos de este por delante y le puso las esposas quedando todavía libres las dos que iban a los tobillos.

Damián seguía lamiendo casi sin darse cuenta de lo que pasaba, y no lo hacía mal, Aghata se tomó un tiempo disfrutando de sus lametones y pellizcando sus propios pezones.

Él aceleró el ritmo de sus lamidas y noto como ella jadeaba cada vez más.

Aghata comenzó a mover sus caderas de alante atrás disfrutando de la manada y agarro los huevos de Damián que estaban rojos e hinchados.

El dio un respingo solo el roce de su mano le causaba dolor pero era eso lo que le excitaba.

Pronto Aghata se corrió sobre la cara del chico entre jadeos y su mano se cerró con fuerza sobre los huevos de Damián que instintivamente dobló sus rodillas.

Mientras Aghata notaba como el chico comenzaba a atragantarse por beberse sus flujos cogió las piernas de Damián y logró ponerle las esposas en los tobillos dejándolo como si fuera un escarabajo boca arriba.

Aghata se levantó y observó su obra, Damián se movía como si fuera un balancín y esto le hizo reír, luego le dio la espalda y se acercó a un armario del cual extrajo su cinturón polla.

Damián miraba su escultural culo sin saber muy bien que iba a pasar.

Aghata terminó de colocar el dildo y se fue hacia la mesa para coger la botella de licor, abrió el tapón mientras se volteaba hacia Damián que abrió los ojos desmesuradamente ante la imagen y pronto supo lo que iba a pasar.

Aghata dio un largo trago del licor sin pestañear y dejó que se derrama sobre sus pechos disfrutando de la cara de terror de Damián.

Ella se arrodilló ante él que hacía negativas con la cabeza que cesaron cuando ella tomó su polla y empezó a menearla suavemente logrando que endureciera de nuevo.

Lo miró sonriente y bajo la piel de la polla de golpe, para luego dejar caer licor sobre ella.

El escozor fue insoportable para Damián que notaba cómo le ardía la piel de la polla, pero el hecho de que Aghata la menease muy rápido al tiempo que dejaba caer más alcohol sobre su polla le producía un extraño placer nunca sentido.

Aghata apuntó con el dildo al ano de Damián y rocío licor sobre el mojando lo a modo de lubricante y lo clavo de golpe disfrutando del sufrimiento del chico.

La dejó dentro del culo de Damián mientras vaciaba la botella sobre sus huevos que se pusieron tan rojos que parecían tomates.

Todo sucedía sin que Aghata dejase de menear su polla.

Damián se sentía humillado de verdad con el dildo dentro de su ano y sus huevos y polla empapados de alcohol, se dio cuenta de que su voluntad había sido destruida, pero le daba igual su diosa lo tenía en sus manos y pronto noto las embestidas Aghata sobre su ano.

El dildo entraba y salía sin piedad mientras ella meneaba su polla a toda velocidad.

Damián noto como estaba apunto de correrse de nuevo mientras ella le daba más y más fuerte estimulando su próstata, el dolor se transformó en placer y su polla escupió descarga tras descarga al aire manchando la cara de Aghata que se relamía viendo la escena.

Pronto Damián perdió el conocimiento por la mezcla de dolor y placer pero Aghata no le importó y siguió empotrado sin piedad.


Casandra estaba recostada sobre el sofá con las piernas estiradas.

Tenía a Carlos y a Santi haciéndole un masaje en cada pie mientras Dani lamía su coño.

-venga tío esmerate más que me voy a dormir- le dijo a Dani mientras le daba un capón.

El chico trató de complacer a la chica que miraba el móvil con desdén.

Le llegó una notificación de que su hermana estaba emitiendo y entró a ver en la web.

Lo que vio la dejó boquiabierta, había un chico que no conocía sujetándose una bolsa de hielo sobre los huevos.

El chico tenía la cabeza agachada y su hermana soltaba una parrafada sobre lo corta que la tenía ese tío.

Vio como Aghata le arrancaba la bolsa de hielo de las manos del chico y vio como su hermana señalaba y hacía comentarios sobre lo pequeña que era

Casandra comenzó a reír "qué hija de puta" pensó entre risas "por eso quería que me fuera de casa".

Casandra no se podía aguantar la risa ante la imagen del chico y su empequeñecida polla.

-mira Dani jajaja, como la tuya el otro día jajaja- dijo recordando el calvario por el que había pasado el chico.

-no pares de lamer idiota-

Fin

Otra flipada mis basada en uno de los personajes que más me gusta de creado por rosameler, ni que decir tengo que cuento con su consentimiento para usarla y usar también el final de "hermanas castigan machito" parte uno para el comienzo de este.

Gracias por perder vuestro tiempo conmigo.

Un saludo.