Servir para ser feliz (6)

Vivo en concubinato

SERVIR PARA SER FELIZ

6ª PARTE

DORA: (apartándome unos metros tomándome del brazo.) siempre doy y me gusta dar una vez nada más, algún consejo a las nuevas. Debes olvidarte que te llamabas Paula, que eres divorciada y como llegaste acá. Piensa que ahora eres un animal de carga, que te llamas Burra. Borra de tu mente toda tu vida anterior desde que naciste hasta hoy, porque sino la borraremos a latigazos y otros castigos. Entendiste!

BURRA: si Sra.

DORA: ahora solo debes pensar que te llamas Burra, bestia de carga, de 41 años, concubina del Burrito con el que tendrás hijos, ya que eres una reproductora de niños. Esta claro?

BURRA: si Sra.

DORA: ahora entra

Con lagrimas en los ojos entre a la habitación. El ya estaba adentro.

Solos en ese misero cuarto, no sabia que decir y temía el ataque del Burrito por las buenas o por las malas. Retumbaban en mi cabeza las palabras de Dora: Burra de carga, concubina, reproductora etc. El me ofreció agua o leche y negué con la cabeza. Se sivio un vaso de viso, que degusto lentamente. Yo miraba como bebía, ni siquiera quería mirar su terrible polla. Cuando termino el vaso de vino, lanzo un eructo tremendo, que me dio asco, porque casi me lo tiro en la cara.

BURRITO: bueno, Burra vamos a lo nuestro

Se acerco a mí y me abrazo con esos potentes brazos, en su torso negro azabache. Luego su mano bajo hasta mi coño, jugando con mis labios vaginales y tomando mi clítoris. Me erguí de pronto al ser tocada con unas manos tan rudas y callosas. Una de sus manos llevo a la mía hasta su polla para que la palpite con ella. Sentí en mi mano una polla larga y gruesa como nunca había conocido. Mi mano de mujer no llegaba a cubrir el grosor de esa polla, nervuda y aun más negra que su cuerpo. Sentí que una ola de calor subía por mi cuerpo, mis pezones erectos, duros y puntiagudos parecían reventar en mí. Me abandone a él, para hiciera lo quiera con mi cuerpo pero que llene con su polla mi últimamente olvidado coño.

Nos tiramos abrazados en la cama, fundidos los dos cuerpo en uno. Se notaba la diferencia de color de ellos. Mordió mis orejas, y las chupeteo con su lengua. Busco mis labios abrí mi boca y él la suya y pude ver una garganta rojo sangre. Jugamos con la lengua de boca en boca, que él venia, que yo iba. Yo estaba completamente, sudada, mi cuerpo y el de él emanaban el olor clásico de dos personas sucias. Seguí adelante y note que dirigía con su mano, su polla hacia mi coño. Trate de abrirme lo mas posible de piernas para facilitar la tremenda penetración que se venia. Le murmure al oído que por favor fuera despacio porque temía que  su  me desgarrara. El ingreso despacio dentro de mí coño y yo sentía como que una víbora se deslizaba por dentro de mi cuerpo. Una vez estuvo toda adentro, sentí sus testículos en la entrada de mi coño y comenzamos el ir y venir, primero despaciosamente y acelerando a medida que mi coño se amoldaba al tamaño de su polla.

Yo ya había sentido dos orgasmos en todo ese camino. El acelero su ir y venir y yo lo acompañaba con mis movimientos de pelvis que lo enloquecían aun más. Comencé a gritar de placer como nunca lo había hecho. Sentía moverse dentro de mi semejante polla venosa y me derretía de placer. Mezclamos los sudores de los cuerpos y empecé a gritar, llorar, gemir de placer, sintiendo que un río de flujo bajaba por mi cuerpo y de pronto la explosión de su polla mezclando su semen con mis flujos. Acabamos juntos y el recostado sobre mis tetas y yo tratando de tomar aire y frenar mi agitación y el corazón que marchaba a mil.

Se tiro a mi lado

BURRITO: por fin me dieron una blanca hermosa y que sepa coger, aunque al principio parecías tener temor

BURRA: temerosa de semejante polla y es la primera vez que me coge un completamente desconocido.

BURRITO: si ángel eres una diosa cogiendo. Es cierto que estas ovulando

BURRA: si, hay posibilidades grandes de que en estos días quede embarazada.

BURRITO: espero no nos separen si lo estas

BURRA: no por favor, quiero deleitarme con tu polla. Además porque no iban a separar?

BURRITO: verán como esta tu cuerpo y a lo mejor te aíslan preservando la criatura.

BURRA: lo han hecho antes?

BURRITO: si muchas veces.

BURRA: espero que esta vez no, por favor. Dime cuantos años tienes

BURRITO: 31 años.

BURRA: te llevo diez años, con razón tienes esa potencia sexual.

BURRITO: lo que pasa, que así como a vos te dan muchos lácteos, como yogures, leches y vitaminas para alimentar a una futura madre, a mi me hacen comer muchos picantes y vitaminas para fecundarte.

Luego de un rato, comencé a buscarlo yo. Me había obsesionado con semejante polla. Lo pajee llevando mi mano de arriba abajo por el largo de su polla y también acariciaba y sopesaba sus testículos. A esta altura yo ya estaba lista para ser servida de nuevo y trataba y lo conseguí que su polla se irguiera y endureciera en mis manos. Luego la bese mojándola para favorecer la penetración. El me tomo por la cintura como quien levanta una pluma y sentado apoyado en el respaldo de la cama, llevo a mi coño a la cabeza de su polla. Con cuidado me fui insertando dentro de mi coño semejante tronco. Una vez adentro empece a moverme de arriba a bajo, ya completamente mojada. El acompañaba mis movientos. Se tiro sobre la cama y yo sentada con su polla adentro galopaba sobre él. Mientras él con sus manos apretadas sobre mis tetas sosteniendo mi cuerpo. Fue delirante el movernos. Se sentó nuevamente, mientras yo seguía galopando subiendo y bajando y el tratando de morder mis pezones, y lo logro, cada vez que me elevaba.

Yo ya estaba liquidada y me bamboleaba de un lado a otro como una borracha caminando, mientras sus férreas manos me sostenían de la cintura. Solté un grito y me enchastre a mi misma y a él con el flujo que estaba tirando. Tuve un momento de vergüenza por no esperarlo, pero fue incontenible de mi parte. En ese momento él tiraba todo su semen dentro de mí.

Nos tiramos uno al lado del otro, fundidos, jadeantes pero inmensamente satisfechos.

No se el tiempo que estuve dormida y cuando me desperté él me estaba mirando con una vaso de leche y tres vainillas en su manos para darme el desayuno, mientras tomaba una taza de café.

Se ubico a mi lado y me señalaba con su vista, una cámara.

BURRA: nos están filmando?

BURRITO: es una cámara fija que miran, cuando ellos quieren, el Amo y Dora y alguno más seguro.

BURRA: que vergüenza y yo desbordada