Sentirse acosada
Hace mucho tiempo que no he escrito nada, aunque ya tengo abierta una cuenta. Sabéis perfectamente quien soy, me llamo Susana.
Sentirse acosada
Hace mucho tiempo que no he escrito nada, aunque ya tengo abierta una cuenta. Sabéis perfectamente quien soy, me llamo Susana.
De mí quien me conoce sabe como soy realmente, los chicos o chicas que han tenido la suerte de haber estado conmigo intimadamente, dicen de mí que soy realmente ardiente, que soy un volcán. Si a esto unimos la morbosidad, que me atraen los sitios públicos y la idea de calentar al personal es un cóctel explosivo.
Me voy a describir como soy si algunos no me conocéis, soy una chica de Sevilla de 21 años, pelirroja, ojos castaños, altura 1.75 cm., peso 74 Kg., mis medidas 90 / 59 / 88 aproximadamente y bisexual. Algunos me conocen de haber entrado en paginas de contactos ya sea por www.explanada.com, www.chueca.com entre otras obteniendo muchos contactos muy satisfactorios en su mayoría, practicando incluso tríos.
Mi forma de vestir a propósito hace que sobre todo los chicos se fijen en mi, el 90% de las veces siempre llevo faldas ya sea sobre las rodillas o cortitas, la ropa interior me chiflan es decir una prenda de lencería en mi piel hace que me excite enormemente. Botas o zapatos de tacón, medias siempre de ligas y demás prendas sexy, me gusta maquillarme y ponerme siempre muy hermosa.
Hace un par de años que no se que me ocurre realmente, me explico me siento con la necesidad de masturbarme pues me siento muy caliente. Desde que me levanto ya humedecida, me siento delante de mi PC antes de irme a trabajar chateando con un amigo el cual me ayuda a excitarme aun mas, pero nada mas en el trayecto a la oficina no me importa quien me pudiera sofocar, pues pretendo que tanto un hombre como una mujer me posea.
Os quiero relatar algo que me ocurrió precisamente gracias por el relato de una amiga, el ser manoseada en un servicio publico (autobús). Cierto día de noviembre bastante temprano un día lluvioso, tuve que coger el cercanías hacia mi oficina ya que el coche me fallo. Ese día aunque estaba lloviendo, no era motivo para mí por no ponerme guapa.
Una vez pague mí ticket espere en el andén a la espera de la llegada del cercanías, que mas nada llegar entre en el último vagón situándome casi en el fondo. Normalmente me gusta ir de pie apoyada al respaldar del último asiento, cuando voy en el bus, pero esta vez había cogido el cercanía por lo que asientos había bastante por la hora que era. Había algunas personas en el vagón, una señora dormida, un chico escuchando música otro leyendo un periódico. Estaba incomoda por lo que me levante del asiento y me dirigí tras este colocándome detrás apoyada entre el respaldar y observando por el cristal el paisaje.
El cercanía se detuvo de nuevo llegada a una nueva estación, subiendo precisamente en el vagón un señor mayor con aires de intelectual, algo atractivo y vestido de sport. De lejos lo mire de arriba hacia abajo, volviendo a mis pensamientos y a la música que escuchaba gracias a mi móvil. Este se dirigió hacia donde yo me encontraba, colocándose al lado mía en un principio pensé con tanto sitio en el vagón y se tiene que venirse hacia aquí, en verdad no me molestaba pero no se me resultaba raro. Me sentí observada varias veces, mirando yo hacia atrás retirando este su mirada de mi, me sentía alagada.
Miraba hacia adelante por ver si nos observaba alguien, hizo un movimiento que al principio no entendí, por el reflejo de la luna del vagón vi como se alzaba casi de puntillas moviendo el retrovisor. Pero seguí recostada sobre el asiento escuchando la música de mi móvil, empecé sin darme cuenta a contonear mi cuerpo al ritmo de la música, no me di cuenta que estaba llamando la atención. Por el reflejo del cristal me di cuenta como me miraba, una chica y la forma de vestir que llevaba estaba seguramente provocando y aun mas cuando nada mas entrar en el vagón me quite el abrigo largo que llevaba, gracias al calor de la calefacción.
Empecé a notar como este sujeto cada vez mas cerca, notaba su presencia y ese olor a colonia. Note como de forma superficial pasaba su mano por encima de mis nalgas con una disculpa por su parte, pero no le respondía. Pero poco a poco fue cada vez mas insistiendo en sus tocamientos cada vez mas descarados, le mire con cara de pocos amigos y le aparte la mano de mala manera. De nuevo volvió a comenzar levantándome la falda desde atrás, que rápidamente echaba mi mano derecha hacia atrás para bajármela y apartar su mano.
Os debo reconocer que me estaba gustando la situación, me estaba entrando un cosquilleo el cual me estaba calentando, sentí como me estaba humedeciendo.
Volvió a posar su mano sobre mis nalgas apretándome fuertemente uno de mis glúteos, me volví advirtiéndole -"por favor me quiere dejar en paz"-, se lo dije con un tono casi amenazante, pues en verdad no quiero armar un escándalo, pues en vez de quedar como una inocente chiquilla quedaría por mi atuendo como una calentona.
Durante unos 10 minutos me dejo en paz pero de nuevo lo sentí detrás mía, colocándose casi de lado, atacando de nuevo. Estiro su brazo izquierdo por delante de mi cuerpo, posándola sobre mi vientre por encima de mi falda, aprovechando que gracias a los asientos estaba resguardado y que en mi mano izquierda tenia cogido el móvil. Rápidamente dirigí mi mano a apartar la mano del intruso, pero en eso siento como su mano derecha se cuela por debajo de mi falda, tocando mis nalgas por encima de mis braguitas echándola hacia un lado.
Ante este acoso solté el móvil dejándolo colgado de mi cuello para intentar quitar su mano, mientras que la de delante insistía en introducir la mano por debajo de la falda pero siendo broqueado por mi mano, me sujeto por la muñeca. Me sentía manoseada por ese hombre por mis partes inferiores, mientras de nuevo siento que la mano que me tiene sujeta por mi muñeca me suelta, introduciéndome de nuevo su mano por debajo de mi falda desde delante hacia atrás recorriendo mi rajita y notando mi húmeda.
Su mano derecha descaradamente estaba posada sobre mis nalgas por encima de mis braguitas, comenzando a recorrer y buscar el borde de esta no siendo tan difícil siendo un tanga, hasta introducirse por el lado de la costura y notar sus dedos como empieza a tocar mi coñito, a hurgar en mi interior haciéndome estremecer e inclinarme del gusto.
Poco a poco por mi parte empiezo a dejarme hacer, aunque intentaba retirar sus manos no lo hacia con demasiada decisión. Una de sus manos la de mi trasero fue bajando por mis muslos recorriéndomelos gustándome sus caricias, cuando esta subía de nuevo para introducirse dentro de mi vagina y haciéndome llegar a un maravilloso orgasmo, su mano derecha que ocupaba mi vulva desde delante frotándome muy suavemente. Empezó a subir por mi vientre hacia mi abdomen e introduciendo la mano por debajo de la blusa alcanzo mis pechos.
Me producía temor mirar hacia delante por si alguien nos estuviera observando, mientras que este hombre me acosaba y la verdad es que me gustaba. El notar esos dedos anchos y ásperos en mi interior me produjo de nuevo un segundo orgasmo, el cual acercándose el a mi oído y en forma de susurro me dijo -"sabia que te gustaba, si quieres mas te espero mañana", acabo por decirme mientras me coloco varios de sus dedos húmedos en mis labios, olían a mi jugo entre abrí la boca y se los limpie. Me quede con una duda y rápidamente eche mi mano hacia abajo a su entrepierna, notando su bulto, notaba como su miembro estaba duro, no me importaba como fuera pero me dejo con las ganas de probarlo, y bastante satisfecha con dos orgasmo logrados.
Una vez en el trabajo, donde antes tuve que entrar en los servicios a prepararme un poco se me hizo muy larga la jornada, deseaba llegar a casa y chatear con algún amigo o amiga y contarle lo ocurrido. Pero en vez de eso quede con una amiga, a la cual se lo conté y la muy puta me animo a volver a hacerlo pero con la condición que ella debía de acompañarme, como testigo y observadora. Pero eso ya os lo contaré en otra ocasión.
Aquellos que quieran contarme, relatarme, o cualquier cosa os dejo mí email: susanabix@hotmail.com