Sensaciones Inesperadas (2)
El relato de la misma situación, desde la experiencia de él
Entro en chats, no necesariamente de sexo, aunque también lo hago. En contra de lo que muchos creen, y más creían antiguamente, hay gente con conversaciones interesantes, con sus inquietudes, sueños, fantasías.
Por la teórica proximidad, entro en el chat de la provincia donde vivo. Hay varias páginas de chats con esta opción. En alguna de esas acude menos gente y en otro al que también entro hay más gente conectada. La proporción HM, no suele cambiar mucho, eso es, muchos hombres y pocas (o ninguna) mujeres. Siempre con el riesgo de que alguien que parece mujer no lo sea, que también los hay.
A temporadas, entro con el mismo Nick y otras voy cambiando según el día. En una de esas temporadas de cambio de Nick, varias veces coincidí en el chat con una chica que entraba siempre con el mismo Nick. Creo recordar que alguna vez le había hablado, pero no puedo asegurar que antes de ese día, me hubiera contestado ninguno de mis mensajes.
Con sorpresa por mi parte, ese día si me contestó. Lo que cambiaba ese día era que el nombre de mi Nick coincidía con un “conocido” suyo. Me preguntó si vivía en una localidad concreta, pero siendo sincero, le hablé de la localidad donde vivía yo realmente y que evidentemente no coincidía con la de sus pretensiones. Así y todo accedió que habláramos sin ser la persona que ella creía que era.
La conversación fue amena, entretenida, hablando sobre gustos, aficiones. Entrando en el lado más personal, descubrimos que ambos teníamos pareja. Ella está casada y yo emparejado, que al final, es lo mismo un estado que otro.
Dando un paso más, hablamos de lo que nos gustaría tener y notábamos a faltar en cada una de las relaciones, para descubrir que había similitudes entre nuestras circunstancias de pareja.
Por mi parte era una relación que funcionó en su momento con pasión, complicidad, sexo y qué debido a distintas formas de vivir el sexo, se convirtió en rutina y monotonía.
Por la suya, era más compañerismo por el roce del tiempo. La pasión y el sexo nunca habían sido una prioridad en esta pareja (más por parte de él que de ella, aunque pueda parecer increíble). Afortunadamente, ella descubrió hace unos años por una serie de circunstancias, que había otras formas de entender el sexo.
En ese intervalo, fuimos contando cada uno, experiencias vividas, fantasías pendientes, gustos, etc, descubriendo y analizando si podíamos tener compatibilidad llegado el caso.
Al considerar interesante la charla que mantuvimos, le insistí en que me diera el contacto para el whatsapp (implica dar el teléfono) y ella, recelosa, me habló de una app para contactar a través del Nick sin tener acceso en ningún momento el número de teléfono.
Ese mismo día, antes de abandonar el chat, instalé dicha app en mi Tablet y la agregué a mi lista de contactos en dicha aplicación. A partir de este momento, siempre hablamos a través de dicha app.
Pasado este día, mis recuerdos son confusos. Por una parte creo que pasaron muchos días hasta que pudimos coincidir y por otra que al ser días muy intensos de hablar mucho y de muy diversas cosas me provocan esta sensación.
Durante esos días, pocos o muchos, hicimos varias video-llamadas. Hablando de algún detalle del trabajo, ella envió alguna foto de detalles que hace por propia voluntad en su trabajo….eso ya decía cosas de ella…detallista, poner el corazón en las cosas que le importan.
Yo tenía varios temas de trabajo, añadido a tenerlo que combinar con los horarios de na de nuestras parejas. Nuestra idea era aprovechar uno de sus días libres y pedir yo un día de vacaciones en el mío, ya que tengo esta posibilidad.
Entonces llegó el día, todos los astros se alinearon y los horarios eran los adecuados, ella tenía el día libre y yo pude generar un hueco entre diversos trámites que tenía que hacer esa mañana sin levantar sospechas.
Por el tema del trabajo, me notaba acelerado y también nervioso por esa primera cita. Al llegar, ella ya estaba allí, me envió la coordenada de su aparcamiento. Debido al vehículo que llevaba yo, no pude llegar hasta allí, tuve que llegar hasta ella a pie. Ese trayecto a pie, me dio a pensar que ocurriría en esa cita, ya que recordaba tra cita que no había cuajado completamente.
No había mucho que recorrer, llegué, vi su coche aparcado donde me dijo, el momento estaba cerca. La saludé, abrí la puerta y me senté en el asiento del copiloto. Nos presentamos, los dos estábamos nerviosos, le toqué la pierna desde la rodilla sobre el vestido que llevaba.
En ese momento, vi que acercaba sus labios a los míos, es un momento que al ser tan intenso, se vive como en cámara lenta y después la explosión de la pasión del primer beso, intenso, con lengua, nos comimos con pasión desmedida, pasión acumulada. Todas las partes de mi cuerpo reaccionaban, todo iba bien. Los fantasmas del pasado desaparecieron de repente.
Después de ese beso tan intenso, no sabía dónde estaría el límite, seguimos los dos guiándonos por los gustos que habíamos hablado en el chat y a través de la app.
Mientras duraban los besos, nuestras manos no estaban quietas tampoco. Las mías en su cuerpo ya que no quería perderme ningún detalle que pudiera encontrar con mis dedos y las suyas subiendo por mis piernas, cuando llegó a mi polla pareció que le gustaba lo que encontró.
Estuvimos de acuerdo en que era más cómodo para los dos pasar al asiento de atrás.
Ella se afanó en desabrochar mis pantalones, bajar la cremallera y apartar el, en este momento, molesto bóxer. Cuando sacó mi polla, también en cámara lenta, viví el momento en el que ella iba acercando su boca hasta lamer y después chupar mi polla.
Fue tan intenso (y corto, también hay que decirlo) el momento mientras me estaba comiendo, que me dejé llevar y no recordaba ni por asomo que en el chat ella me había comentado que no le gustaba recibir mi orgasmo en su boca. Al cabo de unos minutos, muy pocos, sentí que mi orgasmo estaba por llegar. Sólo intentando evitar que llegara mí orgasmo, la obligué a separar su boca de mi polla. Eso salvó el desastre de no cumplir lo hablado en el chat. Por otra parte, el desastre fue aguantar pocos minutos una chupada, cuando siempre me había pasado todo lo contrario, aguantaba todo lo que quería. Definitivamente esa boca tenía algo especial.
Al principio de ella comerme la acariciaba por donde podía, cuando ya me dejé llevar solo me dediqué a disfrutar de esa boca maravillosa.
Me enfadó correrme tan pronto, aunque lo había disfrutado.
Para intentar paliar el desastre, me puse de lado en el asiento trasero del coche y le fui tocando y comiendo, la notaba muy húmeda. A pesar de mis esfuerzos, con la postura que teníamos, no conseguí que se corriera ella, aunque me confesó que le había gustado la sensación.
Dedicamos unos minutos antes de tener que irnos, a hablar de diversos temas como hacíamos en la app. Realmente, los dos vimos que las ganas de irnos eran inversamente proporcionales al tiempo que quedaba para irnos. Por ello, alargamos la charla más de lo aconsejable pero bien a gusto que nos quedamos.
Ya no podíamos retrasar el momento de la partida. Salimos los dos por la puerta trasera izquierda. Ella salió antes que yo y quedó pegada al coche para dejarme sitio para pasar por detrás. El espacio no era muy amplio, y……..mmmmmmm, rocé sus nalgas, las amasé, acerque mi cuerpo al suyo, la rodeé con mis brazos, la tenía apretujada con el coche. La verdad, ya se me estaba olvidando las prisas que teníamos los dos, pero ya la emplacé para una próxima cita y le dije:
- Que pena haber descubierto esas nalgas tan tarde, espero poder disfrutarlas muy pronto
Nos despedimos con otro beso húmedo o seguramente fueron varios, aunque menos de los que hubiera deseado.
Subió a su coche y la vi partir esperando por mi parte un pronto encuentro….o quizás ella tuviera otro pensamiento después del desastre que había protagonizado un rato antes.
Cuando volvía hasta mi vehículo, pensaba en todo lo ocurrido, un momento de relax en medio de una mañana alocada. Una magnífica experiencia a pesar de mi rápido orgasmo.
¿Habrá más encuentros como este o incluso mejores?
En unas horas lo sabría, cuando habláramos por la app y nos contáramos las sensaciones, contando eso sí que ella quisiera seguir en contacto conmigo.
Cuál de las dos opciones sería la elegida por ella, ¿más encuentros o la indiferencia?. Si estáis interesados, tendréis que esperar a la próxima entrega…. Si la hay.