Semen y sudor
Este poemilla improvisado va dedicado a H., el muchacho hermoso que fue y el hombre espléndido que es. Siempre tuvo la habilidad de ponérmela dura. Ahora que estamos en Navidad, me he propuesto ser casi lírico. Casi.
SEMEN Y SUDOR
Semen y sudor;
El falo gotea,
El falo siempre gotea,
Inunda la grupa de los jóvenes efebos
Que penetran y son penetrados.
La carne es desgarrada,
Los músculos en tensión
De la belleza que golpea.
El muchacho hermoso cabalga, gime,
Entrelaza sus piernas en la polla ruidosa.
El flujo se esparce por doquier,
El jugo extraído del rabo glorioso.
El muchacho y su cuerpo sublime
Que extrae de la vida su esencia.
Los músculos brillan al compás de la cópula,
El joder salvaje de los cuerpos,
Del macho y de la hembra en potente belleza,
Martillo candente de las horas del sexo.
Todo se disuelve en la gloria del vacío
Al abandonar su cuerpo al tiempo.
Semen y sudor,
El sexo despide destellos de luz,
El cuerpo exuda alegría,
La polla entra y sale de sus pliegues
Y la carne ruge de deseo,
Arde y muere en el abrazo,
Se desliga y se funde en el zumo de la vida.
Semen y sudor.
El muchacho goza y ríe,
Se recrea en el calor que le abre el cuerpo,
Revienta en un aullido de placer.
La belleza es montada por el deseo;
Resiste y cede al fin al abrazo
Del macho poderoso que la envuelve.
Semen y sudor.
Morir en el cuerpo que nos atenaza,
En el cuerpo que nos da la vida
Y nos la quita en un instante;
Morir en el acoplamiento.
Los jóvenes hermosos mueren
En la cópula de luz.