Semen en la cara. Reflexiones
Reflexiones acerca de estos microrelatos que nos acercan más a los misterios de la sexualidad humana.
No sé que opina el lector de la serie de microrelatos Semen en la cara . ¿Ocurren estas cosas en realidad? Posiblemente no en muchas ocasiones, pero todos sabemos que al menos ocurren en nuestra imaginación, cualquiera que sea el papel que desempeñemos en la situación. ¿Cuál de estos personajes entonces es el que vamos a encontrar más frecuentemente en la vida real? Probablemente, opino yo, que el del hijo, pues cuando en la adolescencia se enciende la chispa de la sexualidad, las sensaciones son confusas y el objeto de deseo es a veces difuso; si a eso sumamos la cercanía de una mujer bella y sensual, aunque se trate de tu propia madre, la mezcla puede ser explosiva.
Vayamos ahora a la madre. Imaginemos que por casualidad es una mujer desatendida en el sexo, como se dice en alguna parte de la historia, ¿creéis que el hijo puede ser una opción razonable? Yo creo que no, porque a una mujer guapa no le ha de costar mucho hallar a quien la satisfaga. Otra cosa es que ya sea una mujer muy morbosa. Una cosa si me pregunto: ¿qué sentirá una madre cuando sorprenda a su hijo masturbándose? Porque eso, evidentemente, ocurrirá a menudo, ¿no?
¿Y el padre? Puede la morbosidad llevar a alguien a recrearse con el pensamiento de que su propio hijo se cepilla a la madre. Aquí, estoy seguro de que encontraremos de todo.
Espero vuestros comentarios de expertos. Hasta la próxima reflexión.