Semana fértil y a pelo
Absorbía mi clítoris al mismo tiempo que me penetraba con uno de sus dedos... aaahhh, ignoro en qué momento pose mis manos sobre su nuca a modo de evitar que se apartara
Semana fértil y a pelo
Voy a colgar esta nueva confesión... nueva por el hecho que voy a publicarla pues hace años que me ocurrió, os confesare antes de nada que por culpa de esta confesión tengo los dedos pringados de mis propios fluidos, no me he podido contener de hacerme un dedo a medida que lo he estado corrigiéndolo... mmm (joder, ya sabéis un acento, una frase, una palabra, etc.). Os confesare que siento la imperiosa necesidad de dirigir mi mano hacia mi entre pierna y notar la humedad de mis braguitas... mmm, solo con el leve gesto de posar las yemas de mis dedos sobre mi pubis me estremezco... ooohhh. Sabiendo perfectamente que este lo debo de colgar hoy mismo y no quedarse como tantos dentro de la carpeta “Mis Documentos”, pero lo peor es cuando me levanto y siento mis braguitas mojadas pegarse sobre mi ingle y despegarse acto seguido... ooohhh, me estremezco nuevamente y el placer va en aumento... aaahhh.
Hace escasamente un par de años de estos hechos... mirad estaba en casa de mis padres como tantos fines de semanas cuando voy a visitarlos, pero ese fin de semana fue diferente pues cuando llegue mi madre se encontraba realmente mal y ante las insistencia hacia mi padre de su cuidado, este solo me hizo saber que mi madre fingía para que la tomaran en cuenta. Por lo que por mucho que me pesara no me quedo otra que quedarme a cuidarla... claro esta podría haber contratado a una enfermera, pero el cerdo de mi padre no dejaba de decir que no le pasaba nada y que solo fingía, cosa que para nada era cierto a no ser que lo marcado en el termómetro (39º grados) fuera un truco y muy bueno, mi padre pasaba de cuidarla... claro esta sentí la obligación de hacerlo yo.
Aun recuerdo cuando llame a un medico amigo mío para que pudiera auscultarla y de paso mandarle el medicamento necesario, este le diagnostico unos síntomas que debía de verle un especialista pues su edad era para tomárselo en serio, como os he dicho previamente conocía al médico le pedí que le tomara la fiebre no solo por las axilas, sino que le tomara la fiebre tanto vaginalmente como anal... cosa que mi amigo el médico, no solo se negó inicialmente sino que me informo de lo que podría producirle si le descubren o le denunciaran, claro está que hice saber a este que tal cosa no pasaría... ofreciéndome como moneda de cambio por tal favor y de paso, ser la “conejilla” para sus fantasías a la hora de practicar lavativas... mmm. Claro está que adivine que mi amigo acepto... más aun cuando una de sus manos se aferro a mis nalgas... mmm, aun me viene a la cabeza la última vez que me introdujo el irradiador... ooohhh.
Bueno continuo que me voy por los cerros de Úbeda (que me pierdo) y ya no se por donde iba... ji ji ji. Me gusto ver como mi amigo el médico colocaba a mi madre un termómetro anal por su orificio vaginal y tras unos minutos donde pude apreciar el rostro de mi madre primero molestias y en escasos minutos de satisfacción (joder, con la calentorra), continúo por tomarle la temperatura analmente aunque le hizo saber que no conocía tal práctica. Siendo yo misma quien convenció a mi madre de tal practica haciéndole saber que es la más efectiva, tras ponérsela el médico con ayuda de vaselina... yo misma fue quien sustituyo este objeto por un juguete de mayor tamaño y grosor de los míos... mmm (coño, claro que no dijo nada y si, os admito que fue por venganza). Pudimos escuchar ambos los quejidos de mi madre que más que quejidos eran gemidos, para tras no más de quince minutos quedarse plácidamente dormida una vez que le sacamos el objeto de su orificio anal, claro está que este lo tire a la basura.
Durante el día mi padre estaba “misin” (desaparecido) hasta el anochecer el cual me pidió cenar, asistí primero a mi madre a la cual le di los medicamentos que le tocaba, continúe por darme una ducha... no sin antes haber cerrado el pestillo y tras ponerme algo mas cómodo, baje a preparar algo de comer. Después de cenar me dirigí hacia la cocina a recogerla... no soy de las que dejan los cacharos por ahí, por lo que comencé a meterlos al menos en el interior del lavavajillas, escuchaba la televisión y pensé que mi padre estaba viéndola por lo que ni sentí cuando el muy cabronazo entro en la cocina.
Estaba claramente inclinada hacia delante introduciendo los platos y cacerolas en la parte inferior... cuando sentí el roce en mis nalgas de algo, como un resorte me levante y con rapidez mi padre paso al tiempo que se disculpaba no solo por el roce sino por haberme asustado. Su manera de hablar delata que pretendía algo y así se lo hice saber... como es natural, no solo negó tales acusaciones sino que solo quería conversar conmigo... como él decía “una charla entre hija y padre”, comenzó primero por felicitarme por mis logros laborales, continuo por mantener una relación sin que el entorno o lo que hubiera pasado en el pasado le afecte, siguió por elogiarme por lo hermosa y guapa que me había echo... por no decir la envidia que siente de no tener la mitad de edad y no ser mi padre (coño, ya comenzaba a calentar motores).
Como deseaba acostarme pronto y claro está mi idea era precisamente sola... sin que el moscón de mi padre me moleste y aun menos me atosigue como es costumbre en él, no tuve más remedio que inclinarme a modo de colocar los cubiertos y demás objetos en el interior del lavavajillas, sabiendo perfectamente que este aprovecharía por ver mi ropa interior. Mi padre continuaba hablando y por el rabillo del ojo vi como se levantaba, acto seguido note su pelvis rozar mis nalgas primero para continuar por presionar... mmm (joder, claro que me gustaba sentir un trozo de carne tan dura pero no por eso se lo iba a decir), puso ambas manos a cada lado de mi cintura y con sus dedos me acariciaba muy lentamente... mientras yo ya me había incorporado. Sentí un escalofrió al notar la respiración de mi padre en mi cuello... ooohhh, no os niego que en aquellos momentos notaba como se le endurecía por momentos... mientras me hablaba de algo que ya ni siquiera atendía.
Volví a inclinarme sin avisarle de ello... uuuaaauuufff, creo que ambos lo sentimos... pues al inclinarme hacia abajo note como su duro miembro se restregaba por entre mis glúteos... ooohhh y acto seguido volví a enderezarme, volviendo a sentir esa verga entre mis nalgas al tiempo que mi padre emitía un pequeño y ahogado quejido. Comenzó a deslizar una de sus manos desde mi cintura hasta mis senos... acariciándomelo con suavidad, no penséis que estaba tan sumisa y de paso “calientapollas”... pues no deje de mencionarle que debía de recordar que era su hija y que ya había dejado de ser aquella chiquilla inocente, cosa que con un gesto de cabeza me hacia entender que lo sabía y continúe por advertirle que no pasaría nada mas al estar yo con la regla... o sea en mi semana más fértil, palabra que mi padre dio un significado más a su forma de parecer... “fértil... o sea que es cuando más salida estas y ganas de follar tienes” (ostias... hombres).
Me hizo estremecer cuando su mano dejo de acariciar mi pecho para continuar con mi sensible pezón... ooohhh, no pude evitar delatarme... más aun cuando esas caricias las notaba mas ante la ausencia de sostén, obviamente le aparte y tuve que hacerlo de malas maneras ya que a las buenas no atendía razones... tras apartarle la mano, le recordé nuevamente quien coño era y que mi madre dormía aun arriba, cosa que este mencionaba que no le molestaba y que tiene una “medicina” que ambas podrían tomar y ser follada sin notar nada (cabron).
Me confesó que me veía muy sexy con la faldita que me había puesto y que pensó que cuando saliera del aseo... me pondría un camisón, levantaba una vez tras otra mi falda hacia arriba pues deseaba ver el color de mis braguitas... siempre y cuando me las hubiere puesto. Claro esta que le hice ver que si las llevaba pero que no estaba dispuesta a enseñárselas, hasta que de malas maneras consiguió levantármelas y ver el color celeste de estas... soltó un gesto de satisfacción al tiempo que me hacia recordar las buenas experiencias que habíamos tenido.
Aun recuerdo cuando las campanadas del reloj del salón me hizo saber que eran las 0:00 horas de la noche, hora en que debía de preparar a mi madre la medicina y dársela por lo que me dirigí hacia el mueble donde tenemos las medicinas, tras cogerla y delante del fregadero alce nuevamente la mano a coger un vaso. Otra vez mi padre detrás y sus manos nuevamente en mi cintura... por no decir su pelvis contra mis nalgas, le dije que me dejara más aun cuando sentí sus manos descender hasta mis muslos y volver ascender hasta mis nalgas pero en está ocasión por debajo de mi falda. Claro está que me revolví pero parecía que sus manos se multiplicaban por no mencionar que tiene más fuerza que yo, obviamente pensé en hacerle frente a mi padre pero si me echara de casa quien perdería sería mi madre y por mucho odio que le tenga... es m madre.
Sus maneras delataba a mi padre más aun cuando sus manos se hicieron con mis pechos... ambos por debajo de mi blusa, perdiéndome aunque intentaba evitarlo por culpa de esos labios en mi cuello... ooohhh. Masajeaban mis pechos pero para nada con violencia... quizás eso fuera lo que más me perdía, una de sus manos bajaba de vez en cuando hasta mi ingle para presionar por minutos mi... ooouuufff, “Padre por favor...” le decía pero cada vez con menos fuerza de palabra. Llego mi padre a tomar una de mis manos e introducírsela en su entre pierna a modo de que pudiera palpar el tamaño de su miembro... al tiempo que me decía “mira como me has puesto”, mientras su mano acariciaba mi vulva... ooohhh.
Por mi cabeza pensé que debía de coger las riendas antes de que desboque aun más la situación... por lo que rechace a mi padre, haciéndole en esta ocasión frente al tiempo que le di una bofetada... cosa que a este no le hizo gracia pues no solo me la devolvió, sino que de un tirón me arranco la camisa y tras cogerme en el aire me puso sobre la encimera de uno de los muebles de cocina. Una segunda y hasta tercera bofetada recibí... mientras me hacía saber que todo dependía de mi, su boca se hacía con mis pechos y sobre todo mis pezones que en esta ocasión dejo los modales y aunque me cueste admitirlo me estremecí... sintiendo mis braguitas humedecerse... aaammm.
Separo mis muslos con fuerza con tanta con la cual minutos antes arranco mis braguitas, se agacho y dirigió su cabeza hasta mi entre pierna... comenzando a lamer mis labios vaginales... ooohhh, no pude evitar entre sollozos emitir algún que otro gesto de placer... uuummm. Absorbía mi clítoris al mismo tiempo que me penetraba con uno de sus dedos... aaahhh, ignoro cómo y en qué momento pose una de mis manos sobre su nuca a modo de evitar que se apartara, mientras que su mano subía para magrear mis pechos... ooohhh.
Me hizo lograr no solo un orgasmo sino hasta dos... con esa manera que tiene de hacerme el sexo oral... que tanto odia pero al mismo tiempo tanto disfruta (ostias, sé que es difícil comprenderlo pues siempre dice de palabra que es lo mas asqueroso... pero al mismo tiempo el primero que lo solicita) o quizás fuera que estaba mas fértil y sensiblera... uuummm, apartándose me hizo saber que ahora me tocaba a mí y tras apartarme de la encimera se apoyo él, me hizo arrodillarme con esa manera tan peculiar que tiene, coger mi mano y doblármela hasta obligarme a estar a sus pies.
Tuve que tomar su miembro entre mis manos y comenzar primero pajearsela pero sus bruscas maneras me hizo comprender que no deseaba una “pajilla”, por lo que el mismo me tomo por la cabeza y me hizo tragármela... estaba asquerosa pues no solo olía a orín sino que hasta sabia, sentí arcadas pero tuve que comerme su grande... ooohhh. Mi padre gemía por como se lo hacía y al mismo tiempo el alargaba su mano hasta magrear mis nalgas, sacaba su grande de mi boca para lamer su tronco desde la base de sus genitales hasta su prepucio y nuevamente tragármelo, limpie su polla de restos de semen reseco... mientras me recordaba las esplendidas noches de sexo que pasábamos. La presión de sus manos sobre mi cabeza me hizo presagiar su primera descarga y aunque intentaba luchar por evitar tragármela mis actos fueron inútiles, comenzó a soltar chorros de leches viscosas y calientes en el interior de mi boca... pasando por mi garganta hasta el fondo de mi estomago, llore pero no le enternecí sino más bien lo contrario mas por lo rapidez que se endureció.
Nuevamente me hizo levantar y tras subirme otra vez sobre la encimera... coloco su grande en mi orificio vaginal, suplique a mi padre ya no por ser mi padre sino porque se pusiera un preservativo, pues no deseaba quedarme embarazada sabiendo bien que mi padre son de los que descarga dentro, ya que como recordáis estoy con la regla. Tras las primeras embestidas no pude evitar gemir de placer... ooohhh por cada una de sus penetraciones, me la introdujo hasta el fondo de mi ser sintiéndola muy dentro y siendo yo misma quien me agarre como pude a algo mientras me movía de adentro hacia afuera... ooohhh, hasta no más de veinte minutos o quizás veinte cinco minutos mientras con los dedos de una de sus manos perforaban mi orificio anal y de esta manera evitaba que la sacará su miembro de mi... con la otra magreaba mis pechos, mientras su boca señalaba y ponía en evidencia tanto mi cuello como mis labios... mmm.
Sentí lo inevitable... como entre convulsiones y exclamaciones descargaba en mi interior, como mi fértil útero mezclaba mis fluidos de un lamentable orgasmo con los suyos, ya no era malo sentirse humillada sino la horrorosa sensación de volver a ser violada, pero lo peor la culpabilidad hacia mí. Llore porque estaba asqueada... sentía sus fluidos emanar en mi interior y lo peor era que estaba en esa semana mas fértil... en esa semana en que estamos ovulando y por mucho que le previne, no me hizo caso y mas pareció que lo hizo agrede por la manera de hacerlo. Mi padre se levanto y tras limpiar su verga con mis braguitas, cogió su móvil haciéndome saber que llamaría a un amigo que solventaría mi problema... o eso o habría boda antes de lo previsto. En no más de veinte minutos sonó el timbre de la puerta... pensé que “coño sería a estas horas”, mi padre fue a abrir al tiempo que me hacía saber que no me moviera y tras escuchar la puerta cerrarse, apareció entrar junto a mi padre un hombre con los mismos rasgos físicos, quizás años e igual mal carácter, tras explicarle mi padre lo sucedido me llamo y me pidió tenderme sobre la mesa pues deseaba explorarme, claro está que me negué mas por aludir que “como sabía yo que era medico”, este solo me hizo saber que si en serio me había quedado embarazada hasta los nueves veríamos si es niño o niña.
Aun recuerdo que acabe por ceder y me tumbe sobre la mesa, mi padre se coloco en la cabecera mirando como su amigo me ocultaba... separaba mis piernas no antes sin haberme bajado las braguitas, comenzó a hurgar... mmm mientras me preguntaba por mi vida sexual, obviamente omití que tenía relaciones sexuales con mi padre... algo que mi padre hizo saber a este, me sentía humillada por tal revelador dato. Sentía asqueada esos dedos tocar... profundizar en mi cuerpo, tras coger unos restos lo introdujo en un tubo y tras unos minutos me hizo saber que no estaba embarazada, pero que debía de introducirme un aparato para cerciorarse y de paso evitar futuros embarazos. Tras colocar unas sillas junto a la mesa me hizo colocar mis piernas sobre el respaldar de estas, claro está me las separo aun más y colocarse entre estas... hizo que mi padre me sujetara por mis muñecas, pues me aviso que no solo me molestaría sino que podría incluso a dolerme... cosa que mi padre hizo.
Me ofreció colocar una especie de pantalla a modo de evitar ver lo que sucedía... cosa que acepte, observe como colocaba unas varillas para sujetar a esta mediante belcro una blanca tela y de esta manera no pude ver nada de cintura hacia abajo. Uuummm... sentí como me introducía algo dentro de mí y aunque comencé a disfrutar, no dejaba de pensar en no volverá repetirlo con mi padre, emití varios quejidos a modo de gemidos y aunque de forma sospechosa lo veía moverse, no dejaba de explicarme que era debido al objeto que me estaba introduciendo... ya que era una especie de “jeringuilla”. Cuando en uno de esos movimientos se cayó la mampara... pude ver sorprendida como estaba siendo penetrada por esta persona... aaammm, quise apartarme cosa que no pude no solo por estar maniatada por mí padre... sino por mi misma por el placer que estaba sintiendo.
Pero la mayor culpable fui yo misma... como si no hubiera aprendido de todos estos años de las humillaciones o vejaciones por parte de mi padre, tantos años siendo sometida y lo peor de todo, fue que en pleno éxtasis no tuve el valor de pedirle que se detuviera sino todo lo contrario le rogué que no dejaran de penetrarme. Palabras que al ser oída por mi padre... sintió la necesidad de unirse a su amigo, tras bajarse la cremallera... saco de su interior su miembro y me lo introdujo en la boca... ooohhh. Os admito que no me falto tiempo para cogerla una vez soltó mis manos... mmm, me convertí una vez más en lo “zorra de mí padre” que soy... en esa ninfómana sedienta de sexo, penetrada por el médico amigo de mi padre al tiempo que yo misma practicaba a mi propio padre una mamada... ooohhh.
Los muy cabrones me usaron a su placer... me hizo girar y ser penetrada analmente, trague la corrida de mi padre en su totalidad y como colofón final, me penetraron ambos al mismo tiempo por ambos orificios... haciéndome saber la mala suerte de no haber otro que penetrara mi boca. Tras una serie de brutales embestidas nuevamente me hizo la pena de haber coincidido con su homologo del anterior día, pues podrían haber practicado juntos esa nueva forma de tomar la temperatura... pensé como coño supo este eso. Este me hizo saber que mi propio padre fue testigo ocasionalmente del trato que habíamos dado tanto su homologo como yo a mi madre, donde no solo se sintió mal... sino que acabo por masturbarse ante tal escena, llegando a hacerme saber que pensó que tal ofenda hacia mi madre debía de ser castigada con el mismo o igual daño emocional.
Esto me hace recordar el mal trago que tuve a los 17 años cuando mi padre entro en mi dormitorio... aprovecho la ausencia de mi madre y de mi hermano durante unos días, tras tomarme a la fuerza... pero creo que mejor os lo cuento en otra ocasión. Por cierto las relaciones que he tenido con algún pariente o familiar para nada son ficticias... como mucho me quedo para mi algunas cosas, os debo confesar que no me siento afortunada de ser la persona que siempre me ocurre esta clase de cosas, tampoco creo que las buscaba o las busco... aunque si soy participe para hacerlas realidad, no me gusta que puedan hacer conmigo lo que le plazca... pero me excita enormemente y me produce un morbosa sensación... difícil de explicar, pero creo que ningún hombre o mujer llegado el momento se negaría. Bueno mejor os dejo, vale hasta pronto.
Antes de despedirme os debo de agradecer que hayáis compartido parte de vuestro tiempo conmigo, confió que no os haya molestado mi forma de ver la vida y de paso disfrutarla, pues soy de esas que opino que la vida es corta y merecemos vivirla plenamente con todas sus desgracias y satisfacciones. Bueno queridos lectores… lo dicho, si alguno desea expresaros dejad vuestros comentarios os invito a que lo hagáis y porque no, haber si alguno desea calentarme... ya sabéis mi dirección: susanabix@hotmail.com , yo os responderé lo más rápido que pueda.
Bueno me presentare... soy una ardiente Sevillana de cabellos castaños, ojos marrones y complexión delgada, mido 1.75 cm. de altura y peso... bueno eso mejor me lo guardo, perdón me llamo Susana. Si queréis saber más... como por ejemplo mis medidas (90/59/88) o preferencias sexuales (bisexual), os diré que me da igual tener en la cama un hombre (muy maduros) como una mujer... pero como de hombres solos estoy servida, mis preferencias son parejas, chicas y muchos hombres siempre y cuando sea en plena orgia... mmm. Por cierto sí deseáis saber de mi físico o cuerpo... cuando eso es lo de menos, os invito a pasaros por mi blogs personal: http://susanabix-misconfidencias.blogspot.com.es/ , no quiero extenderme aun más, espero ver vuestros email en mi correo... besitos muy húmedos donde preferías.