Segunda experiencia con Dos Hermanas
Es una experiencia que todos desean y pocos tenemos, es una experiencia para sentir envidia.
SEGUNDO ENCUENTRO CON DOS HERMANAS.
Esta es una historia, de esas que todos van a sufrir envidia.
Recuerdan a la mujer que me vendió un AUTO??, bueno, en estaos me presento a su hermanita, una chica de 20 añitos, con un cuerpo como hecho por un artesano del cuerpo humano.
De seguro Verónica, quien me vendió el auto, le contó lo que habíamos hecho ese día, pues ella estaba dispuesta a pasarla muy bien desde el primer momento.
Ese día del encuentro yo andaba en supermercado, estaba algo despistado, estaba en la sección de helados comprando mis helados favoritos (crema y chocolate con chips), cuando sentí unos brazos que me rodearon mi cintura y sorpresa!! era Verónica con su hermana, ¡hola, como estas te he extrañado en el lote de autos!, me dijo con una sonrisa maliciosa, mientras su mirada se clavaba en medio de mis piernas, por el bulto que mi sexo hacia en mis pantalones vaqueros, por los gratos recuerdos que me vinieron a la mente, mientras yo me deleitaba viendo su cuerpazo, el cual estaba atrapado por un pantalón de tela muy transparente más parecía una malla de esas que se usan en los gimnasios y una mini seta que marcaba muy deliciosamente sus pechos y dejaba ver con claridad asesina sus pezones, habían pasados unos minutos, cuando me percate que no venia sola, pregunte ¡Y quien es esta cosa tan rica? Se vieron y reventaron a reír, "ella es mi hermanita" me dijo " tu hermanita" respondí yo todo inocente, "me llamo Luciana García para servirte en todo lo que se te ofresca" me dijo y seguí diciéndole "que bella familia la de ustedes" pues al verla casi se me sale del pantalón todo lo que les tenia preparado, mas cuando ya la pude denotar mas, llevaba una pantalonetita de la misma tela de la malla de Verónica y una mini seta que hacia juego, ella se me acercó y me dijo mucho gusto y me dio un enorme beso en la boca, fue estilo francés con lengua cruzada y todo, les juro que casi me riego ahí mismo y hubiera sido fatal pues ese día no andaba calzoncillos, en se momento presentía que iba a disfrutar mi helado de otra manera, jajaja, mmmmmm.
"Bueno las dejo" les dejo esperando que me retuvieran, ellas me tomaron del brazo y me dijeron que si no las quería llevar a su casa pues llevaban muchas cosas pesadas pues estaban solas en su casa y no havia nadie que las ayudara a bajar las cosas pues estaban pensando azar carne, en frente de su piscina ese día, y que habían venido en taxi y no quería irse con un desconocido.
Ok, les dije, nos fuimos los tres y pagamos, cuando nos dirigíamos al estacionamiento Verónica se adelanto a mi Jeep, lo que aprovechó Luciana ara hacerme conversación, ella era muy agresiva, toda una putita muy caliente, me tomo del brazo y luego me metió su mano en mi bolsillo trasero y me apretaba mis nalgas, parecía que estaba la fruta en el mercado. Cuando llegamos al auto Vero ya estaba acomodada en asiento trasero y Luciana se sentó adelante a mi lado, Una vez en ruta comenzó a tocarme con disimulo, primero mis piernas comenzando por mi rodilla y subiendo a placer, por momentos pretendía cambiar las estaciones del radio y solo era para tentar mi pene que estaba deseando entrara en acción, yo ya no aguantaba la presión y cuando miro Vero por retrovisor solo me sonrió y subió sus hombros, ese gesto de aprobación me alentó para destaparme en serio y le dije a Luciana que mejor me la sacara he hiciera algo mejor, delo que Vero me había hecho en el auto aquel día, miro a Vero y esta dijo que me demostrara de lo que estaban hechas, abrió mi cremallera me saco el pene con una delicadeza asombrosa y comenzó a utilizar primero sus manos las cuales escurrían ya mi lubricante ella estaba asombrada de ver a alguien que mojara tanto y me dijo que hoja siguiera así, lo seco un poco, abrió su deliciosa boca y me la mordió, luego comenzó a utilizar su inquieta lengua, para ese momento Verónica ya estaba encima mío mordiendo mi cuello y dándome besos y metiendo su lengua en toda mi boca, yo solo aceleraba aquel aparato para llegar lo antes posible pues me moría de ganas de meterla dentro de Luciana pues podía sentir si pantaloneta muy mojada y sus pechos muy duros. Me imagino que Verónica estaba igual que yo pues ya estaba gimiendo sola, pues cuando la logre mirar de reojo estaba con su mando dentro de su malla masturbándose, eso me encendió a tal punto, que le dio mas velocidad al jeep para poder llegar lo antes que pudiera.
Cuando llegamos nos salimos los tres los más rápido que pudimos, yo me estaba casi cogiendo a Luciana, a la vez que caminábamos a la parte de la piscina
Y Vero nos estaba desnudando a ambos al mismo tiempo, cuando estuvimos desnudos nos recostamos en el pasto, yo me fui directo a su panochita que estaba mojadas al punto que escurría a demás de lo caliente que estaba al punto que paresia que palpitaba como lo hacia mi miembro que me dolía de erecto y duro que estaba, solo pensaba en mamar ese mico tan rico mi lengua solo provocaba que Luciana, gritara gimiera y se retorciera, vero por su parte se abrió de piernas para que su propia hermanada le chupara su conchita que estaba muy hinchada, Luciana al verla de frente reprendió de ella como si fuera la cosa mas deliciosa, Vero comenzó a gritar también, eran un perras en celo y eran solo para mi. Cuando vi los gestos de y la cara de excitación de Verónica decidí ir y penetrarla primero, dejé a Luciana y empuje a vero a un lado, la coloque de cuatro patitas y me acomode, levante una de sus piernas pase mi pene por toda su vagina y la metí sin mas ni más y gemido que dio solo me provoco sacarla y meterla de nuevo pero con más fuerza no havia comenzado a moverme en serio cuando Vero se vino y pude ver como ella clavaba sus uñas en pasto y agarraba los puños de este con una fuerza yo por mi parte seguía dándole, busque a Luciana para ver donde estaba y ella estaba saciándose con as manguera de agua, estaba bregando tan fuerte, que pensé se iba a lastimar pero era una putita muy experta en ese arte, y cuando se iba a venir pensé en que sería mejor si lo hacia con mi lengua, y me fui directo a meter de nuevo en medio de sus piernas, metí mi lengua lo más profundo que pude dentro de su rajita caliente y húmeda, y así se pudo venir, pues paresia que me quería arrancar los cabellos a puños, del placer y gran excitación que le había proporcionado
Cuando aviamos terminado nos fuimos los tres ala piscina, pero ni el agua fría nos pudo calmar la excitación que aun teníamos, comencé a besar y acariciar a Luciana, pero cuando Verónica que entro al agua, y pude ver su cuerpo mojado y erizo, me fui directo a ella, la apoye en el filo de la piscina y comencé a mamarle su rajita aunque para ello tenia que meterme dentro del agua y mantener la respiración para no ahogarme luengo le di la vuelta y levante su culo con carne de gallina por el frió, cuando lo giré frente a mi abrí sus nalgas.
Puse mi pene en su hoyito y lo metí seguido pero despacio. Mire el gusto que le tomo por la cara que hizo, entonces lo saque y lo volví a meter de un solo y formas más violenta, comencé a moverme cada vez más rápido y fuerte ella solo me decía cojéeme y yo solo le decía así te gusta eres toda un puta, y ella me respondía que si lo era, mientras yo me cogía a Vero, Luciana estaba tratando de meterse en medio del muro de la piscina y las tetas de ella, para poder chuparlas, entonces la volví a colocar de frente a mi y como en el agua el cuerpo no pesa se abrí de piernas de una forma increíble, y así la pude penetrar mientras la sostenía de sus nalgotas y metía mi dedo en su culo delicioso que estaba tan caliente que creía que el agua iba a hervir, así Luciana podía comerse las tetas de su hermanita y podía besarla, era todo un espectáculo el poder ver ese par de mujerones besándose con una pasión inigualable, de un momento a otro sentí que Vero ya quería venirse pues comenzó a brinca en el agua muy acelerada y entonces baje sus piernas y la lleve contra la pared y comencé a darle lo mas duro que podía, quería que sintiera mi verga entrando y saliendo de ella, en eso ella tiro su cabeza hacía atrás y levanto su pelvis y luego hacia el frente ya deshecha, en ese mismo momento, pudimos ver una sombra en la puerta de vidrio que da a la terraza, sorpresa era su marido que no había perdido de talle de lo que hacia ella, yo y su cuñada, pero no nos importo mas bien, atraje a Luciana era el turno de que sintiera lo rica que estaba mi verga pues no me podía venir, así que la senté en las gradas de la piscina y comencé a meterse la a ella también pero o quería ver a ese tipo, así que cambie de posición y me senté yo en la grada y la subí encima mío, uyyyy que rico sentí cuando le abrí su blanco culo, a la hora que la senté abrí tanto las piernas que paresia una realizar un split de danza, para sentir como entraba toda mi verga en su vagina ardiente esa chica era toda un candil del sexo una maquina insaciable como lo era también Vero, por algo eran hermanas, mientras ella se mecía encima mío, yo le tenia mi pulgar hasta lo más profundo de su culo que comenzaba de nuevo a tirar líquidos, luego cambie de mi pulgar a usar mi índice y corazón al mismo tiempo, pero cuando introduje tres dedos ella simplemente no soporto mas y se corrió, o fue también que Vero se estaba llenado su boca con los pezones y tetas de ella, o pudo ser también la excitación de ver a aquel pobre infeliz viéndonos y viendo como disfrutábamos a su esposa y a su cuñada, que a lo mejor el pensó cogerse y ella no quiso y como yo era mi segunda vez según él que me cogía a su señora, eso me encantaba, después de que Luciana grito como una loca maniática desquiciada, que rogaba por que se la metiera mas tiempo y luchaba para no regarse, pero que va esos tres dedos dentro de su trasero habían podido más y sus contracciones la delataron, yo por mi parte aun seguía con mis huevos súper hinchados de semen que deseaba salir y la verdad sentía que no aguantaba mas ese delicioso dolor. Así que agarré a Verónica y a Luciana y las saque de la piscina y nos acostamos en el planche de cemento de la piscina para que pudieran masajeármela y ordeñarme por completo, fue riquísimo el ver ese par de perras chapándomela y tratando de sacarme mi leche y cuando al fin salí como me seguían prendidas de mi pene y como se lamían las labios la una a la otra para aprovechar cada gota de lechita expulsada por mi y como se pasaban algunos rastros por sus pechos.
Después de ese día cada vez que nos vemos hacemos cosa nuevas o ellas me están llamando para realizar juegos sexuales y fantasías o me llaman separadas para seguir cogiendo.
En otra ocasión les contare alguna de esas aventurillas y locuras, chao....
Alexander Delgado Sáenz, C.R.
Dedicado a: Verónica García. Arg.
Y a Luciana García. Arg.
Si te gustan mis historias házmelo saber escribiendo a: alex71delgado@costarricense.cr