Seduciendo al repartidor de agua
Empecé a vivir sola y comencé a pensar en formas para no aburrirme.
Hoy les voy a contar como me divertía seduciendo al señor que repartía el agua en el condominio.
Inicie a vivir sola por que iba a realizar mi servicio social durante un año y la casa de mis padres quedaba lejos de mi sede. Lo único que había en esa casa era una mesa grande, unas sillas de plástico, la casa era de 2 pisos.
Busque números de teléfono en Internet de repartidores de agua y empecé a llamar y así fue como llegó don Andrés.
-buenas tardes (toco la puerta)
Yo baje enseguida con un short dominuto que dejaba ver mis nalgas, una blusa de lucra blanca sin sostén para que se notarán mis pecho. Abrí la puerta y miré a un señor humilde como de unos 45 o 50 años, Moreno claro, bajito y algo pasado de peso.
-adelante. Gracias por venir! Acabo de llegar a vivir aquí y busque su numero en Internet, espero no le moleste.
-Claro que no señorita! Al contrario es un placer. Le dejo el agua en la mesa?!
-por favor señor! Deje le pago
Entonces me voltee me agache un poquito parando el cuño para contar las monedas una por una.
Vi como se tocó la verga para acomodarsela por que se la estaba poniendo dura y empecé a sacudir mi culo en frente de él lo voltee a ver y sonreí.
-va a seguir viniendo usted a dejarme el agua?!
-Claro señorita, si usted quiere con todo gusto.
-no le molesta si le digo un secreto?!
-digame
-me está poniendo bien mojadita aquí (me sobe la panochita) y veo que ya se le paró a usted.
-es que verla así señorita me pone nervioso, nunca me había pasado algo así donde voy a repartir.
Me acerque y le puse mi culo sobre su verga y empecé a sacudir lo para sobarle la verga.
-eso quiere señorita?! Quiere que le falte al respeto? Usted es muy jovencita para mi, yo ya soy muy adulto
Empecé a bajarme lentamente el short, no llevaba calzón. Me subí a la mesa abriendo mis piernas, mostrándole mi verija depilada
-esta re bonita señorita! Nunca había visto una así de bonita
-me la puedes besar?!
Se acercó y con toda su lengua me lamio toda la verijita y yo me masturbaba, el también se empezó a masturbar ambos terminamos y el salió corriendo, yo me quedé tumbada en la mesa.