Secuencias de un matrimonio (6) Final

Desenlace de la historia.

El viernes era el último día de trabajo antes de navidad, porque el sábado ya era nochebuena  y el domingo navidad. El día 26 lunes tampoco trabajábamos. Hasta el martes ya nada. Serían días de soledad, casita y ver películas del plus, pues todas mis “ligues” estaban casadas y tenían compromisos, aunque la menos comprometida parecía ser Alexa, sería que al no tener hijos todo cambiaba. Hasta Sandra tenia uno de 3 años.  A Sandra no me la había follado porque la veía más como a una hermana. El domingo, Navidad, tenía una comida en casa de mis padres con mi hermana y mi cuñado y mis dos sobrinos. Pero le dije a mi madre que no iría, ella se lo tomó muy mal.

No sé, estaba en un estado en el que todo me daba igual, pues aunque tenía mis motivos para separarme de ella, era un fracaso, todo divorcio lo es. Pensé que me iba a afectar menos pero estaba jodido. Pensé en la fiesta de esa noche y estuve a punto de decirle a Pedro que no iría, pero algo me frenó. Al estar Laura allí, el verla actuar, comportarse, me ayudaría a no sentirme como me sentía. Después pensaba que no verla, aislarme de ella, sería lo mejor. Decidí dejarlo todo como estaba. Total en la fiesta seriamos 10 personas, 5 hombres y 5 mujeres. Hice el recuento: Hombres Pedro-yo-Rodrigo y dos amigos de Pedro. Mujeres Laura, Sandra, Alexa y dos amigas de Rodrigo. Con estos pensamientos y otros más fue transcurriendo la jornada laboral del viernes. Al llegar casa a medio día estaba Laura.

-Tengo que decirte algo –me dijo – yo ya me he buscado abogado –Pensé que Pedro la habría ayudado con eso –y a partir de hoy ya no viviré aquí.

  • Dónde vas a vivir?

  • En el piso de Pedro. Si no te importa las cosas me las iré llevando poco a poco, hasta que la separación sea definitiva. Te parece?

  • Me parece, siempre y cuando me avises cuando vengas a recoger cosas. De acuerdo?

-De acuerdo. Si quieres comer he preparado algo.

  • Gracias, pero me bajo al bar a comer.

Desde el bar, le envié un mensaje a Rebe: “Nos divorciamos.” “Ya lo suponía” “Cómo está tu hijo?” “Bien, de vacaciones. Y tu como estas?” “Jodido, a pesar de todo” “Joder, siento no poder dedicarte más tiempo en estos días” “no te preocupes son días de familia” “ya nos vengaremos” “un beso Rebe”

Después le envié  otro mensaje a Ana: “Como está mi chica preferida?”  “hola Paco, bien gracias y tú?” “Estoy separándome” “Joder, en la fiesta ya me dio la impresión de que no estabais bien.” “Efectivamente” “Siento no poder quedar contigo, pero estos días son de mucho compromiso y tengo a los crios en casa” “lo entiendo, sólo quería desearte una feliz navidad” “Feliz navidad cariño, ya nos vemos”

Al acabar de comer, volví a subir a casa. Laura ya no estaba. Eché un vistazo al armario y se había llevado ya gran cantidad de ropa. Me tiré en la cama y me quedé dormido una media hora.

Por la tarde no pasó nada destacable en el trabajo. Llegué a casa y me volví a acostar, hasta las 8:30 pm. Me duché y me cambié de ropa. Cené en el mismo bar donde había comido. Eran las 9:30 y me encaminé a casa de Alexa. Había quedado en pasar a por ella, de hecho me lo había pedido ella. Había tiempo de sobra, pero tenía que pasar por la gasolinera. Fui conduciendo lentamente a través de la ciudad hasta llegar a su calle. Aparqué en doble fila frente a su casa. Le envié un mensaje pues no me había dicho el piso que era. “bajo en 5 minutos” Al verla salir de su bloque, me pareció ver una diosa saliendo del olimpo. Había ido a la peluquería le habían hecho un moño arriba y por los lados caía el resto de su melena negra. Llevaba un vestido negro con medias negras y zapatos de tacón alto y por encima un abrigo negro. Llevaba un color de labios parecido al color del vestido, el cual le llegaba por encima de la rodilla. Entró al coche.

  • Estás impresionante, Alexa.

-Es que no sabía cómo cojones se va a una orgía.  –Jajajajjaja  -Oye, hablando de orgías, quieres que nos quedemos aquí los dos? Y pasamos de más gente?

-Es tentador, pero ya sabes que eso nos puede cambiar las vidas.

  • Yo quiero cambiar mi vida. No puedo seguir así con mi marido. Sabes? Yo no soy así, no voy de orgía en orgía ni voy tirándome al primer viejo con dinero que se me cruza. Si lo hago es porque no estoy enamorada. Bueno eso sí podría estarlo de alguien que he conocido hace poco.

-Eres una tía genial, se nota que has estudiado y tus metas y tus ilusiones igual no coinciden con las de tu marido. Por cierto, esa persona que has conocido recientemente está cerca de ti ahora?

  • Muy, muy cerca. –Paré el coche en doble fila. Y la besé largamente. Cuando paramos de besarnos eran sobre las 10:20 pm. Cogió su teléfono y llamó a Pedro.

-Pon el sin manos –le pedí. –Así podemos oír los dos.

-Alexa ya estaba preocupado por ti, ya están todos aquí solo faltáis Paco y tú.

-Por eso te llamaba Pedro, no nos esperes a nosotros que no vamos a poder ir. Es más jefe, yo ya no estoy dispuesta a seguir con tus juegos en tu despacho, quiero ser una trabajadora que va a eso, a trabajar y a cumplir y luego se va a casa.

-A casa,  pero si tu marido…

-No estoy hablando de mi marido actual. Sino de la persona con la que quiero compartir mi vida.

-Qué estas con Paco? Pero si Paco no es fértil no te va a poder dar hijos.

-Y no has pensado que igual yo no quiero hijos? Mira Pedro, después de esto si quieres nos despides, a los dos, si quieres dímelo y el martes ya no voy a trabajar.

-No mujer los dos sois buenos trabajadores. Simplemente cambia nuestra relación, sólo eso.

-Venga pásatelo bien.

-Vosotros igual.    –cortó la comunicación.

-Jajajajaj -Reía ella.- Empate, él te ha quitado a tu mujer, que, perdona que te lo diga, pero no valía mucho la pena, y tú le has quitado a su juguete preferido. Que salvando las distancias, yo estoy mucho más buena que tu ex. Porque hay que empezar llamándola así, tu ex.

-Mi ex y mi mujer actual. Suena bien eso. Alexa,  a mí me enamoraron tus ojos el primer día que te vi.

-Te enamoraste tanto q te corriste dentro de mí. –Jajajajja  - Estaba yo en mi época loca. Pero esta tarde cuando estaba esperando que pasaras a por mí, me he dado cuenta de que la época loca ya se había acabado, ahora quería centrarme. Y si puede ser, ser feliz.

-Vamos japonesita loca. –Jajajjajaaj reíamos los dos. –Así te llamábamos el primer día cuando aún no sabía tu nombre. Nos vamos a un hotel.

-Y eso?

  • Porque Lau… mi ex, tiene las llaves del piso, y no me fio.

-De que se vinieran allí a hacer la orgía? Para fastidiar? No sé, no creo. Yo también tengo un regalo para ti si me llevas al hotel… mi culito, quiero que seas tú el primero y el último que me lo rompa.

-mmmmmmmm q buen regalo. Lo disfrutaré aquí.

-Este es el hotel?

  • Es un 4 estrellas muy moderno, todo acristalado.

Entramos a la habitación y efectivamente la cama era de matrimonio como habíamos pedido. Nos echamos en la cama riendo los dos, vestidos.

-Por cierto cariño, yo me lo he dicho todo antes, pero, qué opinas tú? Quien está más buena tu ex o yo?

  • Se cambia para mejorar, no?  -Jajajjajaja -reíamos los dos. En el minibar nos pusimos un par de copas y brindamos. Apuramos la copa y nos desnudamos el uno al otro. A ella la dejé sólo con las medias. Y así se la metí en el coñito que estaba muy mojado. Eso me lubricó la polla, la puse boca abajo, con el culo en pompa y una almohada en su vientre. Me ensalive dos dedos y le metí uno en su culito, no protestó. Le metí el segundo dedo. Luego baje de la cama y le puse mi polla cerca de su boca para que me la llenara de saliva. Empecé a metérsela. Ella mordía la colcha de la cama para no gritar. Solo se le oía:

-mmmmmmmmmm  mmmmmmmm mmmmmmm m la efta metendooooo mmmmmmmmm

-Si te la estoy metiendo putita, ya tienes más de la mitad dentro.

-mmmmmmmrrrrrrrrrr

-Ya la tienes toda dentro Alexa, ahora te voy a follar ese culito de vicio que tienes.

-fóllame el culito, mmmmmmm , pero no te corras quiero te corras en mi boca.

  • Bien preciosa. –Cuando se la saqué estaba sucia de sangre. –Fui al aseo a lavarme, ella se había quitado la almohada y se había estirado en la cama, boca abajo con la cabeza a los pies.

-Ufffff como duele –me decía- pero creo que ha valido la pena. Gracias cielo, has sido muy cuidadoso y has tenido mucho tacto. Ahora acuéstate, quiero saber a qué sabe tu esperma. –Me acosté boca arriba y ella hizo el resto jugó, chupó, lamió hasta que recibió toda mi corrida en su boquita, y se la tragó. Entonces yo la subí y le besé en la boca con un gusto conocido.

-Ahhhh y no me volverás a follar en el trabajo. Follaremos en casa.

-En nuestra casa. Suena bien Alexa.

-Oye en serio no puedes tener hijos?

-Sí es cierto. Tú quieres tener hijos? Yo tengo dos sobrinos de mi hermana.

  • Yo tengo 3 sobrinos. Dos chicas y un chico. Oye, qué vas a hacer estos días?

-En casa, mi madre me había invitado mañana a cenar, pero le he dicho que no iré.

-Menudo disgusto le habrás dado. Iremos los dos, -me soltó de golpe.

-No te guasees tía.

-No es guasa cariño, mañana llamaré a mi mari… a mi ex y le diré que me voy a separar. El piso lo tenemos alquilado, así que él que haga lo que quiera. Y tu mañana le llamarás a tu madre y le dirás que vas con una amiga a cenar con ellos.

-Y yo te puedo hacer lo que quiera?

  • Tú me puedes hacer de todo cielo, de todo…

Echamos dos polvos más durante esa noche, y dormimos muy a gusto, como ya hacía tiempo.

Yo me separé y Alexa se separó, seguimos trabajando allí por una temporada. Luego Alexa encontró un trabajo en una inmobiliaria. Porque estaba molesta con Pedro que frecuentemente  la llamaba a su despacho intentándolo con ella, le ofrecía dinero… Y se cansó. Yo me cansé igual de trabajar con ese cerdo y me fui a la Renault con Arturo. Me puso a trabajar de administrativo, y a los pocos meses me ascendió a supervisor de ventas. Cobraba un poco menos que en la VW, pero la tranquilidad con la que se trabajaba allí lo compensaba. No tuvimos hijos, nos conformamos compartiendo a nuestros sobrinos. Yo me despedí de Ana y de Rebe  y me olvidé de ellas.

Vivíamos juntos en mi piso, en una buena zona de la ciudad y bien comunicada. Ella iba a trabajar en metro, yo con el coche. Con el tiempo nos fuimos conociendo mejor y nos enamoramos cada vez más el uno del otro.