Secretos

Secretos.

Victoria siempre había sido una niña muy precoz, muy abierta a su sexualidad, su primer beso fue con una niña de la secundaria, el cual le desagradó por completo y se dedicó a besar a los chicos que a ella le gustaban, tan precoz resultó que su primer orgasmo lo tuvo a los 15 años, curiosamente el día de su fiesta y estando sus invitados esperándola en el salón de la celebración.

A sus 19 años Vicky, como le dicen sus amigos es una chica muy atractiva, de gran belleza física y corporal, quizá por ello piensa lanzarse como candidata a un concurso de belleza, de verdad todos creen que ganará el certamen.

Pero tal belleza siempre tiene pretendientes, a los cuales rechaza porque se encuentra muy feliz con sus novio, el un chico que al igual que ella se dedica al modelaje, 1.90 de estatura, musculoso, bronceado, ojos verdes, cabello ondulado castaño, y una verga que vuelve loca a Vicky, 21 cm. gruesos, no muy velludos, con dos grandes bolas colgando y que lubrican tal y como le gusta saborear a vicky.

¿Recuerdan que tuvo una experiencia homosexual?, el que le haya desagradado no quiere decir que su maligna cabecita no desease actuar como voyeurista, así es la niña desea ver a dos hombres apuestos fornicando apasionadamente frente a sus ojos; pero no se trata de dos hombres cualquiera, uno de ellos tiene que ser Miguel, su novio.

Miguel al igual que Vicky tiene un hambre sexual difícil de saciar, quizá por ello se llevan tan bien y ya van a cumplir 1 año de noviazgo.

Un día caminando por el centro comercial se encuentran con Marco, un joven de 20 años de edad, apuesto, delgado, de piel morena, ojos cafés, cabello negro, 1.70 de estatura, sonrisa pícara, cuando Vicky lo ve, no duda ni un segundo que ése es el chico que quiero para su novio, pero ese es un secreto, el cual si sale a la luz puede acabar con su relación con Miguel, y adiós 21 cm. de verga dura.

Pero está tan decidida que se juega el todo por el todo, sabe que ésa es su única oportunidad, y amenazando con dejar a Miguel, lo compromete a aceptar el hecho de dejarse admirar cogiendo con el chico por Vicky, aunque la idea de estar con el chico no le desagradaba, desde la preparatoria no estaba con uno, y sabía que tan apasionado podía ser un hombre, le gustaba, pero era un secreto del cual nadie podía enterarse.

Marco, de inmediato vio a la pareja, como no mirarlos, si el chico era terriblemente apuesto, justo el tipo que le gustaban los hombres, de facciones tiernas y cuerpo rudo, bien trabajado, de esos que gritan ¡Tómame!

Estaba tan entretenido admirando al chico, que se olvidó por completo que iba caminando con Ana, su novia, así es, esa preciosura de hombre tenía novia, pero se consideraba homosexual, le gustaban los hombres, deseaba con toda el hombre probar una verga con su boca o sentirla dentro de él, ése era un secreto, el cual mantenía aun a pesar de que llevaba una vida homosexual muy activa.

El jalón de Ana lo regresó a su falso mundo heterosexual, tratando de seguir su vista, erróneamente creyó que él estaba admiranda a.... ¿Victoria?, no podía ser, era Victoria, la chica a la que le había plantado un beso en la secundaria, la chica de la cual había estado viviendo enamorada y en secreto, la cual huyó pues le faltaban los cm. de carne que tanto le gustaban a Vicky, ¿dije un beso? Jeje, olvidadizo de mí, fueron muchos, durante un mes, dos mujeres apasionadas ¿Cuántos podrían darse?

El corazón de Ana dio un vuelco, cuando sus ojos se cruzaron con los de Vicky, por su parte Vicky dio saltos de emoción cuando notó que la chica que acompañaba al muchacho que cumpliría su fantasía era su "intima" amiga Ana.

Se acercaron, se abrazaron, se dijeron lo mucho que se alegraban de verse, Miguel saboreo de arriba abajo el cuerpo de Marco, el cual se veía espectacular bajo la camiseta sin mangas que llevaba puesta, los jeans que dibujaban un par de nalgas exquisitas.

Marco estaba más que nervioso, notaba la mirada hinoptizante de Miguel, sentía como recorría su cuerpo, pero el se cohibía, no podía ni siquiera voltear a verlo.

Acto seguido de la festividad de reencuentro de las mujeres todos fueron presentados, caminaron por el centro comercial hasta llegar a una cafetería, donde se sentaron a conversar las mujeres, y los chicos a tratar de hacer lo mismo.

Pero el hecho de la mano de Miguel rozara la rodilla de Marco, no permitía que el joven emitiera sonido alguno, trataba de levantarse para calmarse, pero su tremenda erección no le permitía hacerlo, y es que no es fácil ocultar 18 cm. de verga que si bien no son extraordinarios, el grosor le resultaba incomodo, y bueno, aun así parecía carpa de circo ambulante.

Las chicas se levantaron al tocador, con una mirada Vicky le dijo a Miguel: ATACA.

Poco tenían que decirle, Miguel deseaba probar al chico, y lo haría, así que con su mirada inquietante, sonrisa de modelo de portada y voz cachonda le dijo: - quítate los lentes, quiero ver si lo ojos son igual de bellos que lo que siento aquí -, todo eso mientras le agarraba la entrepierna, que con el apretón estuvo a punto de eyacular.

Las chicas regresaron, no tuvieron el suficiente tiempo, siguieron la charla, se comentaron los planes de Vicky de participar en el certamen de belleza, las experiencias vividas y demás cosas sin tanta importancia.

Se ofrecieron a llevar a Marco y Ana a donde ello se dirigían, durante el trayecto, Marco sentía la mirada de Miguel por el espejo retrovisor, no podía creerlo, el tipo se le estaba lanzando y el no podía hacerlo, no había como iba con Ana.

Pero no los llevaron a su lugar, fueron al departamento de Miguel, uno ubicado en una zona muy acomodada, bien decorado, de ambiente fashionista muy sofisticado.

¡Que tonto! A Miguel se le había olvidado comprar hielos, le pidió a Marco le acompañase a comprarlos, el chico aceptó encantado.

No bien habían cerrado la puerta del departamento, y apenas llegando a las escaleras, Miguel arrinconó de sorpresa a Marco, y con cierta brusquedad provocada por la lujuria que recorría sus venas, besó a marco, apasionadamente, como si con ese beso se le fuese el alma, apretó sus firmes y redondas nalgas, besó su cuello, y agarró la verga de su chico, porque estaba seguro que ése chico seria suyo, Marco estaba conmocionado, se comportaba como primerizo y el estaba conciente que no lo era, la no muy gran cantidad de vergas que habían pasado por su boca y su culo, lo sabían.

Casi todo el camino estuvo callado, casi no hablaba, y Miguel disfrutaba su pequeña victoria.

Al abrir la puerta cual seria la sorpresa al encontrarse a Vicky y Ana en un ardiente beso, Marco quedó boquiabierto, aún más cuando sin esperarlo lo besó, lo tomó de la mano y lo dirigió a su recamara, el corazón de ambos latía casi con pintas de paro cardiaco, pero era pasión, una pasión arrebatadora que se pudo notar cuando Miguel besó los labios de Marco.

Le besó los labios, el cuello, le quitó la ceñida camiseta que él usaba y se perdió un rato chupando sus tetillas, sus pectorales eran firmes musculosos, enloquecían a Miguel, y el no podía dejar de chuparlos, se arrodillo para contemplar desde abajo a su hombre, y pudo ver como de su pantalón sobresalía la marca de su erecto pene, el cual no tardó en salir para ser chupado por Miguel, "Sabe a Gloria" pensó Miguel, y es que de verdad le estaba gustando todo lo que ese hombre tenia.

Le bajó los pantalones, y empezó a chupar delicadamente los testículos, subía y bajaba por la base de la gran verga de Marco, chupaba la cabecita, la dejaba brillosa con su saliva, se le hacia agua la boca; le dio la vuelta torpemente, lamió y besó las nalgas firmes de Marco, redondas, firmes, sin vellos, ¿acaso se trataba de un Dios hecho humano pensó nuevamente Miguel.

Se levantó para seguir besando al chico, se quitó la camiseta que el portaba, bajó sus pantalones y quitó su ropa interior, Marco quedó impactado al ver la grandeza y grosor de la verga de Miguel, nunca había visto algo parecido, sólo en películas pornográficas, pero aun así no dejaba de ser impresionante, se agachó y besó con pasión, se olvido de la delicadeza y chupó como endemoniado esa verga que tanto deseaba, era tan larga que no entró en toda su boca, y era tan gruesa que le impedía respirar bien, pero aun así la disfrutó como loco, chupó y chupó sin descansar.

No supo como, pero ellos ya estaban en la cama besándose y acariciando sus cuerpos jóvenes, firmes, y bellos.

Marco estaba sobre Miguel besándolo, en un momento Marco quedó entre las piernas de Miguel y empezó a ejercer presión sobre su culo, Miguel entendió que era lo que Marco quería hacer así que se estiró un poco y tomó un condón y un poco de crema lubricante, se los colocó a Marco con delicadeza mientras le besaba.

Cuando el condón y el lubricante estuvieron rodeando la verga de Marco, Miguel lo empujó para sentarse sobre él, empezó a sentarse sobre la verga de Marco, le dolía un poco, pero lo estaba disfrutando, empezó a hacer movimientos circulares, para ir deslizándose poco a poco, hasta que la sintió adentro de él, empezó a darse sentones y poco a poco la verga de Marco entró por completo dentro de Miguel.

No podian creer el placer que ambos estaban sintiendo, era realmente indescriptible, una combinación de pasión desenfrenada con entrega cariñosa, nunca habían sentido sensación parecida.

Miguel disfrutaba la carne durísima de Marco, la probó en las posiciones quiso, pero la que de verdad le encantó fue la de perrito, podía sentirla por completo, sentía como le entraba y salía, además el espectáculo podía observarse a través de un espejo, el cual se encontraba estratégicamente puesto para esos encuentros sexuales que a Miguel le encantaba tener.

Tardaron mas de media hora cogiendo, marco sentía como el culo de Miguel le apretaba casi como si se tratara de una boca con poderosa mordida, cuando sintió que iba a terminar se lo hizo saber a Miguel, el cual se sacó la verga de su culo, tenía mejores ideas, y una de ellas, que quería cogerse a su chico.

El tomó un condón, se lo colocó, y con un poco de crema, estuvo sobando el ya dilatado ano de Marco, quien estaba dispuesto y ansioso de sentir una verga en su culo, primero le metió un dedo, sintió como se estremecía ante tan delicada sensación, después le metió otro, y estuvo con un suave vaivén masajeándole el culo a Marco.

Pero era tanto su deseo de entrar en él que no aguanto un minuto más y se la metió de golpe y hasta el fondo, Marco lanzó un pequeño gemido de dolor al cual le siguió uno de placer, tenia casi toda la verga en su culo, y aún quería sentir más, así que le agarró las nalgas a Miguel para empujarlo hacia él y que de ésta manera todo ese tronco entrara dentro de él.

Lo tuvo por completo adentro, ese imprevisto movimiento por poco hace que Miguel termine, pero se contuvo y estuvo bombeando el culo de Marco por un buen rato, éste por su parte estaba que no se aguantaba las ganas de venirse, con cada embestida, sentía que el alma se le iba y que el cuerpo disfrutaba una sensación como nunca antes.

Cuando estuvo a punto de terminar, no tuvo que comunicárselo a Miguel, éste lo sintió por los espasmos que apretaron su verga, la cual, también dio señales de terminar, así que se saco el condón y puso su verga en la boca de Marco, salió un chorro de leche que Marco se comió por completo, mientras lo hacía el también empezó terminar sobre su abdomen, Miguel se comió los chorros que quedaron esparcidos en el vientre de su amante, lo disfruto como si tratara de las ultimas gotas de agua sobre la faz de la tierra.

Después de comerse mutuamente su semen, se dieron un apasionado beso, estaban sudorosos, cansados y muy satisfechos, de repente, voltearon hacia la puerta, y vieron a Vicky y Ana, quienes observaron todo el espectáculo, ellas ya habían tenido el propio, el cual no duró tanto.

Ahora los 4 individuos compartían un secreto, el cual se llevarán a sus tumbas, la repitieron tanto como pudieron, pues Vicky tuvo que mudarse para continuar su preparación para reina de belleza, Miguel ganó la beca para estudiar modelaje en Milán, Ana regreso a su ciudad a continuar con su vida normal.

¿Marco? Sigue con su carrera, extrañando muchísimo el gran pedazo de carne, después de terminar de escribir, tomará un vuelo a Milán, le esperan muchas sorpresas que su amor le tiene preparadas. Pero, shhhhhhh, ¡que ese es nuestro secreto!