Se follaron a mi mujer

Mi mujer Sylvia siempre habia sido muy recatada, pero salio la puta que llevaba dentro para convertirse en la mas caliente de las zorras.

Se follaron a mi mujer

e-mail: fg999@hotmail.com

Voy a usar nombres simulados. Mellamo Francisco y llevo cinco años casado con mi mujer a quien llamaremos Sylvia. Ella es morena y delgada, de piernas largas, sonrisa cautivadora, culito prieto y respingon, tetitas pequeñas pero firmes y tersas. Le gusta vestir bastante recatada aunque de vez en cuando luce sus incomparables piernas y los hombres se vuelven a mirarla cuando lleva minifalda. En el sexo eramos bastante tradicionales, follabamos una vez a la semana como mucho ya que llegábamos cansados del trabajo y lo haciamos de forma rutinaria, ella de espaldas a mi, con su culito levantado y yo entrándole desde atrás en la tipica postura del misionero. Yo la sujetaba por su cadera y terminaba corriéndome fuera en un pañuelo ya que no queriamos tener niños tan pronto. Asi durante cinco años, ya que Sylvia llego virgen al matrimonio y no me habia dejado ni comerle el coño ni follarmela, ni quiso chuparmela nunca ni siquiera después de casados ya que le parecia una guarrada y ya ni me atrevia a proponérselo y eso que por mi la hubiera sodomizado a diario y le hubiera bañado con mi esperma que es lo que mas nos gusta alos tios.

Sin embargo eso cambio. Un dia vino del trabajo diciendo que habian llegado dos chicos nuevos a la oficina y que desde el principio la habian estado haciendo insinuaciones diciéndole que era muy guapa, que tenia un culito lindo y cosas asi, que en principio la ruborizaron y luego la habian ofendido y pensaba hablar con su directora de departamento. Me puso cachondo solo de oirla hablar, ya que es como muy mimosa, muy niña de papa, muy niña pija y le dije que no se preocupara que si yo tuviera una compaera tan guapa y excitante estaria pajiandome todo el tiempo; luego la eche un polvo de campeonato, ... , si, no la hice el amor, me la folle y por primera vez me la tire variando la postura en medio de la follada. A ella le gusto y creo que se corrio ya que el hablar de esos dos chicos la habia calentado.

Al poco tiempo me dijo que iba a haber una fiesta de la empresa pero que ella no queria ir ya que estos dos iban a estar dándole la plasta como en las ultimas semanas. Le dije que fuera y la lleve a comprar ropa, ... , quise ponerla provocativa y le compre una minifalda diminuta con una abertura en el lateral, le puse un bra de esos que levantan las tetas, para que parecieran mas grandes, la compre un tanga fino de hilo dental que se dicen y una camiseta ajustada de tirantitos , ... , partecia un puton y no me la folle en el salon de casa de puro milagro.

Yo me quede fuera sin que ella lo supiera, pero podia ver desde la valla lo que pasaba en el restaurante. Vi como los tios se le acercaban y le echaban lindezas, vi a dos chicos altos que no se apartaban de ella y que en la mesa se colocaron uno a cada lado de ella. Ella sonreia complacida con su cara de niña bien y mimosona, no parecia la misma recatada que en casa, ... , la muy pendon estaba flirteando con los dos chicos, poniéndoles calientes, sonriéndoles como una putita cachonda. Mi mujer me estaba poniendo a cien mientras la veia poner cachondos a esos dos.

Sylvia estaba rodeada y ellos intentaban rozarse con ella, acariciarla y hablarla al oido hasta el punto de que en un par de ocasiones le metieron mano por debajo de la mesa (supongo que tratando de sobarle el coño que no tenia depilado) y vi como ella, despacio, las sacaba las manos sonriendo como diciendo "no seais chicos malos" pero sin estar ofendida. Se la notaba caliente.

Al final de la cena, se la llevaron a un lado de la pista que estaba mas oscuro. Seguia rodeada, uno por delante y otro por detrás haciendo que bailaba mientras la acariciaba la cintura, las tetas desde atrás, el culo por encima de la minifalda, los muslos por la cara interiror, cerca del chocho, incluso llegaron a subirle la minifalda hasta la cintura y sobarle los dos cachetes del culo que se veian sin impedimento puesto que el tanga era solo la fina tira que tenia metida en el culo. Llegaron incluso a sacarle la tira de la raja del culo mientras la sobaban el coño y ella se volvia a bajar la minifalda lentamente, siguiendo el ritmo, y sin colocarse de nuevo en su sitio la tira del tanga. Sylvia parecia medio ofendida, medio cachonda y no protestaba demasiado. La cogieron de la mano tras morrearle la boca y cogerle las tetitas y se la llevaron a un coche.

Arrancaron y les segui de cerca. Llegaron a un descampado, salieron del coche y vi como Sylvia estaba sin tanga y con la minifalda levantada por lo que se veia como uno de ellos le metia los dedos en su coño mojado y en su culo perfecto. La camiseta y el bra habian desaparecido por lo que Sylvuia tenia sus tetas fuera. Parecia una zorra y oi como ellos se decian: oye, donde nos follamos a esta guarra, aquí en el suelo le respondia el otro. Ya te decia que era muy facil tirarse a Sylvia la putona, es tan zorra que no lo puede evitar, mira que cara de vicio tiene la muy guarra, ... , y realmente tenia una pinta de pendon desorejado que me saque la polla y me pajee. Lo cierto es que siempre he pensado que no conozco una tia que tenga una cara tan de puta como Sylvia, mi mujer, en serio, tiene una cara que dices: Vaya putón!!!

La pusieron a cuatro patas y se la follaron por todos los agujeros, por el coño, la boca, el culo, de uno en uno y los dos a la vez. Cambiaron en varias ocasiones pero siempre tenia algun agujero lleno, de polla o de dedos ya que cuando se corrian en vez de dejarla tranquila la seguían manoseando y pajeando su coño o su culito metiendole un par de dedos, la dieron bien por su culito en forma de corazon y a Sylvia la encanto ser follada de esa forma. Las corridas iban siempre a su cara y la muy zorra que nunca me dejo hacerlo a mi se relamia de gusto con los chorros de esperma caliente que le soltaban.

La dejaron toda pringada de lefa, con goterones tremendos que caian por su pelo negro como si fuera campo, los ojos y las mejillas llenos de lechada pringosa y pegajosa, con largos goterones que bailoteaban en su barbilla, restos de lechada caliente en sus labios finos hechos para mamar pollas y al abrir la boca se la veia leche que aun no habia tragado y eso que esa noche trago cuajada caliente como la mas zorra de las putas; si, a Sylvia la dejaron bien regada y yo me corri como unas cuatro veces viendo como se follaron a mi mujer.