Se empieza con una paja y se acaba...(II)
Segunda parte del relato Se empieza con una paja entre amigos y se acaba...
Jaime había conseguido su propósito, se había follado a Sam hasta reventar. Se miró en el espejo y pudo distinguir las manchas del semen de Sam en su torso desnudo antes de meterse en la ducha. Había sido un día perfecto y Jaime estaba deseoso de que llegase mañana para volver a follarse a Sam, tanto que sin darse cuenta su polla fue aumentando de tamaño hasta golpearle el pecho. Sin pensarlo embadurno su cuerpo de jabón y fue poco a poco excitándose cada vez más e imaginándose lo que haría mañana. Se pellizcaba sus pezones y se apoyaba a la pared para sentir como si alguien estuviese detrás del apunto de penetrarle. Se empezó a masturbar suave dejando al aire el capullo de su verga, morado por el esfuerzo, se majaseaba los huevos con la otra mano libre e incluso empezó a tontear con su ano. Introdujo un dedo muy despacio, mientras se pajeaba suave para evitar el dolor de la primera vez. Pero no tuvo suficiente con eso. Lleno toda su mano con gel de ducha y se introdujo dos dedos de golpe, el dolor fue intenso pero mayor era el placer de hacerlo mientras se masturbaba. No podía parar cada vez se masturbaba más rápido e introducía a más velocidad sus dedos. Hasta que de pronto un escalofrío recorrió todo su cuerpo y cinco enormes chorros de lefa se quedaron pegados en la mampara de la ducha. Sin pensarlos dos veces se puso de rodillas y empezó a limpiar la mampara a lametazos y se tragó todo el semen. Acalorado por el esfuerzo puso el agua a temperatura fría y acabó de ducharse. Salió de la ducha y se secó su torso y cuerpo trabajado en el gimnasio. Se pesó y pudo comprobar que el esfuerzo estaba dando resultados. Cogió su crema hidratante y empezó a echársela por el cuerpo. Cogió un poco con los dedos y se la echó en el culo para aliviar el escozor. Se puso sus bóxers y se fue a la cama donde soñó toda la noche con Sam.
Domingo 9 de la Mañana:
Jaime se despertó sudoroso y empalmado. Fue al cuarto de baño , meó, se lavó la cara y se vistió. Fue al comedor a desayunar y su madre le estaba esperando con el condón que usó ayer con su aventura con Sam.
Madre: Jaime, ¡¿Qué es esto?!
Jaime: Pero a ti que mas te da. Tengo 22 años y voy a hacer lo que me la gana.
Madre: ¡Deberías estar estudiando derecho en vez de estar follando como un loco con tus amiguitas del campus!
Jaime: ¡Que me da igual lo que digas! Me voy a casa de Sam.
Madre: ¡Vete ya de una vez!, a ver si no vuelves y me quito un peso de encima.
Jaime pega un portazo y se va corriendo a casa de Sam a si de paso calentaba para todo el esfuerzo que iba a hacer con Sam. Jaime llamó a la puerta y se encontró con Sam que le estaba esperando con una toalla enredada en su cintura. Co su torso recién depilado y sus abdominales marcados. Su piel morena y llena de aceite para el sol excitaba a Jaime que poco a poco se iba excitando hasta notar su polla duro a punto de reventarle y el bóxer y el pantalón.
Sam: Te estaba esperando.
Jaime: No sabes cuantas ganas tenía de verte
Sam: Demuéstramelo.
Sam se quito la toalla y la tiró al suelo dejando al desnudo su cuerpo y su polla erecta palpitante.
Jaime no lo pensó ni un segundo más, cogió a Sam por el cuello y le empezó a besar, juntando su lengua con la suya y acariciando su torso y sintiendo el sol dándole en la nuca. Sam le fue desnudando poco a poco, le quito la camiseta y beso sus pezones y su ombligo, le bajo los pantalones y beso su pubis depilado en forma de triángulo. Le bajó los pantalones y pudo ver su polla erecta desplazada a la derecha a punto de reventar el bóxer. Se pudo de rodillas le bajó los calzoncillos y empezó a comerle los huevos poco a poco.
Jaime: Hummm… si sabes lo que me gusta perra.
Sam: Esto es solo el principio.
Sam empezó a subir y se metió toda la polla venosa de Jaime en la boca. Empezó a chuparla muy poco a poco llenando toda su polla de saliva. La iba mordiendo y disfrutándola.
Jaime: Ahhhh… siii… me encanta
Sam: Ven, ¿no querías hacerlo en la piscina?
Sam llevó a Sam al borde de la piscina, se agachó y continuo con la mamada. Empezó a pajearle poquito a poco mientras le pegada cachetadas a su nalga. Jaime lo levanto y le comió la boca, mordía sus labios mientras lo pajeaba lenta y suavemente. Jaime puso a Sam a cuatro patas y comenzó a lamerle las pelotas mientras acariciaba todo su ano con su dedo corazón. Subió la lengua hasta llegar a su ojete y empezó a lamérselo.
Sam: Ahhhh… mmmm… Siiii…
Jaime: ¿Te gusta? Pues ahora viene lo mejor
Jaime chupó su dedo corazón y lo introdujo de un golpe en el culo. Sam empezó a pajearse más rápido, mientras se pellizcaba los huevos.
Sam: No pares, quiero más.
Jaime empezó a meter y sacar el dedo a mayor velocidad mientras con la otra mano se pajeaba tan fuertemente que sus huevos chocaban con sus manos produciendo ese sonido que tanto nos gusta.
“CLOCK, CLOCK, CLOCK,CLOCK”
Jaime: Ahhh ¿Dónde tienes los condones?
Sam: Mmmm, No tengo. Ahhhh sigue, sigue mmmm…
Jaime: Da igual
Jaime escupe en el culo de Sam, se embadurna su polla con saliva y la mete de un golpe en el culo de Sam.
Sam: Ahhh siii. Duele, duele. No pares, dame más fuerte.
Jaime: Síii te gusta he perra. Te voy a reventar.
Jaime me su polla palpitante y venosa cada vez más fuerte en el culo de Sam disfrutando de cada segundo de placer. Escuchaba el ruido de sus huevos chocando con el culo de Sam y los gemidos de placer que los dos emitían y que escuchaban por todo el vecindario. Pero no les importaban, Sam se levanto y se llevó a Jaime a la ducha de la piscina. Lo apontocó contra el pollo de la ducha y saltó a sus brazos para seguir follando. Jaime saltaba para hacer llegar su polla hasta lo más profundo del culo de Sam. Sam gritaba de placer y Jaime todavía más. Los vecinos se asomaban para ver si podía ver algo, pero que va. Sam ya había bajado antes el toldo para que nadie pudiera ahogarles la fiesta. Sam empezó pajearse más y más fuerte, incluso haciéndose dañó pero no le importaba. Era más el placer que sentía que el dolor. Jaime se tumbó en el suelo y Sam empezó a botar encima a una velocidad brutal. Sam gritaba y gritaba del placer que sentir y su mano no se veía de la velocidad con la se masturbaba, cada dos por tres escupía en su mano para seguir masturbándose y alguna vez le dijo a Jaime que le escupiera el en la mano. Eso le ponía todavía más.
Jaime: HAAAAAA, SIIIIIIIIIII MMMMMMMM ¡¡¡NO PUEDO MÁS!!!
Jaime se corrió en el culo de Sam se levantó. Jaime se puso de rodillas y Sam se continuó masturbándose hasta correrse en la boca de Jaime.
Sam: ¡¡¡HAAAAAAAAAAAAA!!! ¡DIOS, ME VOII!! ¡¡¡JODERRRRRRRR!!!
Sam besó la boca de Jaime y los dos se tragaron la mitad de la corrida.
Jaime: ¡Te quiero!
Sam: Yo también te quiero.
Sam: Vamos corre tenemos el tiempo justo para limpiar esto antes de que vengas mis padres.
Jaime: Vale.
Domingo 12:30 de la mañana
Madre de Sam: Hola chicos. ¿Cómo lo habéis pasado? Bien ¿no?...
Jaime: No lo sabe usted bien
Madre de Sam: Espero que hayáis estudiado un poco por lo menos para los exámenes finales de derecho.
Sam: Sí mamá. Jaime me ha ayudado mucho a despejarme.
Madre de Sam: Me alegro hijo.
Jaime: Bueno nos vemos.
Sam: Hasta luego…
Madre de Sam: Vuelve cuando quieras.
Si quieres ver la tercera parte de este relato comenta y sígueme.
Fdo. Alexsolo.