Se convirtió en un vicio para ella

Se convirtió en un vicio para ella

Todo comenzó hace ya varios años, cuando yo recién tenía 13 años. Era de altura normal pelo negro ojos marrones, etc. Vivía en una casa pequeña, común y corriente.

Daniel era un amigo de colegio, éramos muy amigos y un día el me invitó a su casa a quedarme a dormir, porque eran vacaciones. El fin de semana fui a su casa, muy normal, él tenía una hermana menor que se llamaba Adriana tenía 10 años, de hermosos ojos verdes, cabello negro flaquita y con piel blanca. Nos divertimos en la casa de mi amigo, nos fuimos a varias partes, en fin. En la tarde a eso de las 5:00 nos metimos a la piscina con Adriana también. Estuvimos nadando largo rato y conversando hasta que fue Daniel el que dijo:

• Me voy al baño que ya no aguanto más.

• Hubieras ido antes pues- le dije.

Cuando se fue tardo un poco, mientras tanto yo hablaba con Adriana. Estuvimos charlando y nos habíamos salido de la piscina y estábamos sentados al borde con los pies en el agua y entonces ella me confeso algo.

Sabes que… Me gustas Franco (así me llamo yo). Desde hace tiempo no dejo de pensar en ti.

Que? - le dije. ( Me quedé con la boca abierta de apenas oírla decir eso)

Ella me deseaba y fue cuando entonces me dio un largo beso en la boca, fue algo muy rico sentir sus suaves labios rozando por mi boca que a mí me gustó y yo también accedí, nos echamos y nos besamos largo rato hasta que ella dijo:

No, no puedo, tú no me has dicho que si yo te gusto.

Casi le salen lágrimas de sus hermosos ojos verdes. A mí me destrozó el corazón y no se porque le dije: "tu también me gustas". Pero creo que le dije para no hacerla sufrir. Se le notó una gran sonrisa en su rostro y me abrazó, sentía su caliente cuerpo, yo también la abrase y de pura casualidad toque su culito y como ella no decía nada comencé a tocarle las piernas y fue cuando sentí que la verga se me paraba de excitación pero felizmente ella no lo notó.

Nos metimos a la piscina y le dije que no le dijera a nadie sobre esto y todo siguió normal. Daniel vino justo cuando ya estábamos metidos en la piscina. El me dijo que se había demorado porque convenció a mi madre para que yo me quedara hasta el Miércoles (estábamos Sábado). Yo le dije gracias y miré a Adriana que tenía un gran rostro de felicidad.

Pasó el fin de semana y cada vez que Daniel se iba por un rato, yo y Adriana aprovechábamos la ocasión para sentir sus dulces labios y esta ves nos besábamos con todo y lengua. Ese mismo lunes a las 4:00p.m. la madre de Daniel se acuerda de que tenía que llevar al doctor a Daniel para que lo examinaran, Daniel pesadamente accedió. Nos despedimos de su madre y me dijo que tenía confianza en mí y que cuidara bien de Adriana. También le dijo a Adriana que cualquier cosa me atendiera y después se fueron.

Era lo mejor Daniel no estaba, su madre tampoco y su padre estaba en el trabajo que era hasta las 9:00. Así que aprovechamos sabiendo que tardarían hasta las 5:30. No se que me sucedió que le propuse a Adriana algo que le pareció extraño:

Adriana, tu sabes que yo te amo y tu también, así que, que tal si lo hacemos – dije tímidamente.

Hacer que? – Me pregunto con extrañeza.

Su inocencia era grande, que se esperaba de una niña de 10 años. Le dije que se desnudara y ella lo hizo pero dijo que lo hacia porque me amaba. Entonces empezó a desnudarse, se me paró bastante la verga cuando se quitaba las bragas y pude ver su precioso coñito sin ningún pelo y su rajita en el medio luego se sonrojó y se lo tapo, yo le dije que no tenía por que tener vergüenza si a mí me gustaba, entonces continuó y se quitó la parte de arriba dejando al aire sus rosaditos pezones.

Sin demorarme me desvestí rápidamente hasta que ella vio mi verga erecta, ella dijo que se la había visto a su hermano a escondidas cuando estaba orinando pero que nunca la había visto así de grande. Le dije que a los hombres se les ponía así cuando veían y una mujer desnuda. Ella me miró con extrañeza y me dijo que para que servía. "Sirve para esto" le dije.

Y la agarre y le dije que me la mamara. Ella hizo mueca de asco pero le dije que lo hiciera por mí, ella accedió rápidamente, me la mamaba tan rico, con sus dulces labios, lo hacia con tanto cariño, comenzó a juguetear con su lengua y luego a pajearme con su boca, Que rico se sentía !!!! era lo mejor. Después de un rato me vine en chorros y la agarre de la cabeza para que no sacara su boca de mi verga, le dije que no era orina que era leche que botábamos cuando nos excitábamos. Luego le dije que se pusiera en la cama y abierta de piernas y le comencé a mamar su coñito entonces me excite al máximo cuando comenzó a lanzar unos gemidos muy tiernos de su boca. Le lamí su clítoris y después comencé a meterle mi lengua por su orificio cada ves mas rápido y ella jadeaba de placer. Su coño estaba lubricado por jugos vaginales. Luego le lamí los pezones.

AHH, AHHH , AHHHHH…- jadeaba sin parar.

Te gusta?

Sí muchísimo, ahhhh

Lo que te voy a hacer te va a doler un poco pero después se va a sentir rico.

No, no quiero nada que me duela – dijo ella.

Vas a ver que se va a sentir rico

Llegó el momento la pare encima mío, yo estaba echado y puse la cabeza de mi verga por su coñito y baje suavemente. Ella dio un grito de dolor.

Me duele mucho – me dijo entre lagrimas.

Yo seguí así varias veces, la controlaba para que no se salga ella. Hasta que esos dolores se convirtieron en jadeos de placer. Metía y sacaba, metía y sacaba hasta que sentí que me corría y lo hice dentro de ella, llené de leche todo su coño y ella se venía en un orgasmo, su primer orgasmo. "AHHHHHHHHHHH…" jadeó ella. Y así lo hicimos varias veces hasta que terminamos mojados de sudor y nos metimos los dos a la ducha. Y lo hicimos otra ves, le hice la postura del "Arco" y mis penetraciones se hacían mas rápidas. Ella me decía "Sigue Franco sigue !!!!, AHHHHHH…AHHHH…AHHHHH." Mientras el agua nos caía, era una fantasía echa realidad. Terminamos de bañarnos y vi la hora, eran las 5:25!!!, habíamos terminado justo a tiempo y para cuando bajamos acababan de regresar.

Esta experiencia fue mi primera y la mejor, después se repitieron otras por n tiempo mas hasta un día lo llame a Daniel pero contestaron otra familia diciendo que se habían mudado, me quedé atónito, ni siquiera se despidieron de mí, se habían ido para siempre, me quedé destrozado por semanas hasta que me acostumbre, ya no iba a tener a la hermosa Adriana pero al menos me quedé con un fantástico recuerdo

Espero que les haya gustado… jeje.