Saw

Quiero proponerte un juego.

Ramón era un profesor que se había divorciado hacia dos años, no se lo tomó muy bien, su mujer se llevó todo lo que podía con el divorcio y su vida sexual era un autentico desastre.

Las alumnas de su universidad le excitaban mucho, a escondidas espiaba a aquellas jóvenes para ver como se cambiaban de ropa, pero en los últimos días, notaba que le fotografiaban.

Ayer, desaparecieron cuatro chicas, todos empezaban a sospechar de el, pero ayer estaba de viaje, por lo que el quedó descartado de las desapariciones.

Al llegar a casa se encontró con un paquete, le extrañó, lo desenvolvió y se encontró con una extraña marioneta, al verla detenidamente, esta abrió la boca y le echó un gas, Ramón se tambaleaba mareado, antes de que perdiese la consciencia, vio una sombra que se le acercaba.

Al abrir los ojos, se encontró desnudo y con una buena erección en una habitación lugrube, llena de telarañas, con una bombilla encendida, en cuanto su mente se despejó más, vio a una de las alumnas desaparecidas, inconciente, desnuda y atada de pies y manos, se puso alerta al oír un sonido, el de un triciclo, con un grito retrocedió hasta a la cama donde estaba la joven, era el muñeco del paquete, el cual le dijo.

-hola señor Ramón, espero que haya tenido un buen despertar, esta usted aquí para jugar a un juego muy divertido, usted siempre quiso poseer a esas jóvenes pero siempre se contuvo, pero ¿ahora seguirá su moral? ¿O saciará sus perversos deseos? Antes de proseguir, mire su pene.

Ramón se miró su órgano sexual, había un pequeño collarín que rodeaba la base del tallo.

-ese regalo tienen una pequeña cantidad de explosivo, un explosivo que detonará dentro de seis horas, no es suficiente para matarlo, pero si para castrarle, al ser un órgano con mucha sangre, se desangrará en medio de la agonía por haber sufrido esa amputación, su única esperanza es penetrar a las cuatro chicas que hay, dentro de sus vaginas, hay un chip que reconocerá el sistema de su pene, en cuanto haya conseguido poseer a las cuatro, la bomba se desactivará y quedará libre, no se preocupe por su erección, le inyecté un excitante para caballos, vivir o morir, esa es su elección.

Ramón se quedó pálido, pensaba que era parte de una broma cruel, pero el clic que se produjo en el collar que envolvía su verga indicaba que se había producido una cuenta regresiva, no quería morir de esa manera, dirigió su mirada a la chica que estaba atada.

Ella la miraba con horror, su cuerpo inmaculado tenía unos pequeños pero hermosos senos, estaba afeitada y tenía el tatuaje de una rosa donde tendría que tener vello pubico.

Se puso sobre la chica y la penetró, bombeaba con fuerza, con la esperanza de encontrar ese chip para reconociese el sistema, en ese momento los ojos de la joven se abrieron, al entender que pasaba, gritó con fuerza, le suplicó que parase, pero Ramón seguía bombeando notando la suave y juvenil piel de la alumna, la chica pidió ayuda, una ayuda que nunca seria concedida, Ramón aceleraba sus embestidas, la joven intentaba rechazar al profesor, pero todo fue inútil.

El profesor eyaculó dentro de la chica.

Ramón notó una vibración en su miembro, pensaba que la bomba estaba activada, pero el títere volvió a aparecer diciendo.

-felicidades señor Ramón, está a un paso de la libertad, ya solo le quedan tres chicas, pero estas no serán tan fáciles como la que acaba de coger, ¿seria divertido si fuese tan fácil?

Antes de que el títere prosiguiera, Ramón cogió una piedra y se la arrojó al muñeco, pero fallando en el objetivo, entonces una explosión sonó en una de las paredes, muy cerca de el.

-señor Ramón, puede que piense que puede escapar por otro medio, pero créame, no hay otro medio, si no quiere jugar, simplificare el tiempo detonando la bomba, así de sencillo, pero si sigue y gana, solo le faltará quitarse el collarín, no habrá peligro de explosión, se lo garantizo, buena suerte.

El títere se fue pedaleando el triciclo, Ramón entendió que no podía escapar, o jugaba o moría, abrió la puerta y fue a por otra chica.

Una chica rubia de pelo corto y ondulado, de cintura marcada y pequeños senos empezó a despertarse, estaba dentro de una bañera, en un cuarto de baño bastante sucio, su mirada verde miró cada rincón, pero solo encontró una carta, todavía débil, consiguió cogerla y leerla.

-hola pequeña, supongo que ahora te preguntarás como has llegado hasta aquí, tu muestras tu cuerpo a los empollones a cambio de que te soplen las preguntas, un trato de mirar, pero no tocar, bien, ahora un hombre viene no solo para mirar, sino para tocar y gozar, tienes hasta las 6:00 de la mañana para evitar que te posean ¿o acaso disfrutaras de tu profesor? Eso lo dejo a tu elección.

La joven tenía un reloj de pulsera que miró con atención, ahora eran las 1:15 ¿cuándo vendría esa persona? ¿Debería mantenerse oculta o huir arriesgándose a que ese hombre la encuentre, lentamente se acercó a la puerta, pero se abrió con rapidez mostrando a un hombre desnudo con una enorme erección.

La joven de los ojos verdes retrocedía adoptando una actitud defensiva, pero Ramón avanzaba con crueles intenciones, la joven se le enfrentó e intentó arañarle, pero recibió una bofetada que la derribó, la joven adolorida veía como Ramón se acercaba para poseerla, pero un puñetazo en los genitales lo paralizaron del dolor, la joven se levantó para escapar, pero Ramón reaccionó con rapidez, ignorando el dolor, agarró los cabellos de la joven que gritaba de dolor, entonces la lanzó de cabeza contra el urinario.

La cabeza de la chica se estrelló contra el vater con fuerza, dejándola inmóvil y con una herida abierta, el cuerpo estaba de rodillas mientras que la cabeza estaba dentro del inodoro, Ramón no sabia si ella estaba muerta o inconciente, pero se puso detrás de ella, acomodó su miembro y la penetró con fuerza, pero algo lo turbaba, ¿la había matado? Eso le distraía en su objetivo, pero siguió bombeando con fuerza, parecía un cuerpo decapitado con la cabeza metida en el vater, los continuos vaivenes lo satisfacían, pero el ambiente, la bomba, la posible muerte, le atormentaban.

Al final dejó de pensar, empezó a acelerar las embestidas, notó la vibración, pero el seguía y seguía hasta eyacular dentro de la chica, vio con horror su obra, intentó auxiliar a la joven de los ojos verdes, estaba inconciente, con una herida en la cabeza, pero estaba viva.

-felicidades señor Ramón, ya ha recorrido medio camino para su libertad, en solo dos horas y media, pero el tiempo es despiadado, imparable, en su lugar, dejaría de perder el tiempo con ella e ir a por las otras dos ¿o acaso quiere abandonar ahora que ha llegado tan lejos?.

Ramón acomodó a la joven inconciente y fue a por su siguiente victima mientras el muñeco se reía diabólicamente.

Una joven de piel morena y labios carnosos se levantó, sus ojos marrones miraban la estancia, una cocina mugrienta y sucia, vio que estaba desnuda, sus senos eran grandes con unos pezones extensos, tenia el culo muy respingón y unas caderas extensas, cuando se dio la vuelta, emitió un grito desgarrador, había un cadáver con el cuello seccionado por un cuchillo aun clavado en el, delante de el había una carta, la joven morena la recogió y leyó su contenido.

-hola preciosa, supongo que la imagen de tu compañero de estancia te habrá hecho pensar si estabas muerta en el infierno, pues no, no estas muerta, pero pronto sufrirás un infierno, dentro de poco un hombre pasará por esa puerta y te violará, te gozara sin importar lo que sientas, créeme, ya se ha corrido dentro de dos de tus amiguitas ¿serás la tercera o tendrás el coraje de enfrentarte? Te he dejado algo que puede ayudarte, esta en el cuello de tu compañero, úsalo bien.

La joven morena miraba con asco el cuerpo en avanzado estado de descomposición del cadáver, no se atrevía a tocarlo, pero la imagen de un hombre golpeándola y penetrándola de forma cruel la animó a coger el cuchillo, pero una cucaracha saliendo de la boca del cadáver la hizo retroceder, comprendía que no podía hacerlo, de modo que se echó a llorar, en ese momento Ramón apareció. La morena intentó esgrimir el cuchillo, pero tras ser derribada por una patada lo comprendió, el la iba a gozar durante mucho tiempo, la morena intentó arañarle, pero la bofetada que Ramón le dio la dejó sumisa, cuando fue penetrada con violencia sintió un tremendo dolor, luchaba para quitárselo de encima, pero Ramón era más fuerte que ella y si se resistía, recibía una bofetada, otra vez la bomba volvió a vibrar, pero aun no eyaculó, las lagrimas de la morena le excitaban de sobremanera, terminando de descargar su carga genética dentro de ella, al desacoplarse, la miró, era virgen, la sangre y el semen se habían mezclado en una concha perteneciente a una chica que temblaba de dolor y de tristeza, una chica con los ojos brillantes por las lagrimas.

-veo que disfruta del espectáculo tanto como yo, solo queda una y solo una hora con quince minutos, tempus fugit.

No necesitaba ver al que dijo esas palabras para saber que era esa marioneta, ¿todo esto era un sueño? ¿Estaba muerto? ¿O simplemente había caído en la locura? Sea como sea, tenia que seguir, tenia que acabar con ese juego macabro.

Una chica pelirroja de ojos azules se despierta, estaba en un invernadero, al ver su desnudez, antiguos terrores empezaron a manifestarse dentro de ella, se tocó sus labios vaginales, no había nada, salvo algo metálico que si se lo tocaba le dolía, al alzar la vista, vio una carta, se levantó dejando al descubierto un hermoso cuerpo que atraía el deseo de muchos hombres, empezó a leer la carta.

-hola pequeña, seguro que tu primer pensamiento fue si te han violado, no me extrañaría, tu padre, tu hermano, el novio de tu amiga, tu novio y sus amigos han abusado de ti y tu nunca lo denunciaste, piensas que solo sirves para abrirte de piernas y dejar que gocen de ti, pues hoy es tu día de suerte, hoy puedes decir ¡basta!, dentro de poco un hombre intentará violarte, pero te he dejado un regalito, una pistola, es tu decisión ser, un trozo de carne que solo sirve para dar placer o un ser humano que no se deja pisotear, dejo esa decisión en tus manos.

La pelirroja rompió la carta en mil pedazos y buscó desesperada la pistola, en cada hierba, en cada tronco, encontró el arma en el hueco del tronco de un árbol, en ese momento Ramón apareció, la pelirroja le apuntó, en ese momento Ramón intentó parlamentar con ella.

-oye, tranquila, no voy a hacerte daño.

-¡fuera! ¡No te me acerques! – gritaba la pelirroja histérica.

-si no lo hago, moriré – decía Ramón sabiendo que le faltaba tiempo.

-¡morirá si da un paso más! – decía la pelirroja.

Solo quedaba media hora para que el explosivo detonase, tenia que poseerla ahora, se fue directo tras ella.

-¡atrás! ¡Atrás! – decía la pelirroja presa del terror mientras disparaba.

Uno de los disparos alcanzó al hombro de Ramón, el dolor que sintió era muy agudo, presa de la rabia, fue a por aquella chica.

La pelirroja intentó disparar de nuevo, pero esta vez la pistola se encasquilló, decidió huir, pero la mano de Ramón tiró de sus cabellos tirándola al suelo, la pelirroja forcejeaba con su agresor y en uno de sus forcejeos, metió uno de sus dedos dentro de la herida, haciendo que Ramón se retuerza de dolor, permitiendo a la pelirroja escapar, pero Ramón la persiguió, acorralándola en una esquina, la pelirroja sabia que ya no podía hacer nada, será otra vez la puta de alguien, un trozo de carne a gozar.

-¡bien puta! ¡Abre las piernas! – gritaba Ramón.

-n-no – balbuceaba la pelirroja.

Ramón fue a por ella y le agarró por los pies, ella lloraba y pataleaba, pero no pudo evitar que se las separasen, Ramón estaba preparado para introducirla cuando de pronto

Bum

El cuerpo de la pelirroja se tornó rojo por la sangre que bañó su cuerpo, Ramón se puso de rodillas llorando de dolor, notando como la sangre salía en grandes cantidades, la pelirroja, lejos de ayudarle, se alejó de el, en pocos momentos, apareció la marioneta de nuevo.

-bueno señor Ramón, ha sido muy lento y la lentitud se paga, como podrá comprobar, pero mire por el lado bueno, al menos pudo disfrutar de tres de sus alumnas, que tenga un buen viaje en el infierno.

La marioneta se fue dejando al profesor adolorido, notando como la sangre, al igual que la vida se escapaban de su cuerpo.

-bueno lectores, espero que les haya gustado mi show tanto como a mi, si hay alguno que quiera participar en mis juegos que me lo comunique, ¿mi nombre? Bueno, todos me llaman jigsaw