Sasnti 6
Como ya sabéis hay tambien sexo con maduras y un algode sadomaso
Aunque era invierno llegué a casa, ya la consideraba mía, como todas sus posesiones y pronto pensaría igual con las de mi madre, sudado como un cerdo.
- Cariño que sudado que nos vienes, anda desnúdate
- Si mama
- Y vamos a prepararte un baño para que te relajes._ Dijo Ángela
Dicho y hecho las tres se levantaron y en pocos minutos tenía el baño preparado y a mis chicas dispuestas. Los baños de nuestros pisos son circulares y grandes caben dos personas acostadas, y como fue el caso una acostada y tres sentadas. Pos supuesto el que estaba acostado era yo. Mi madre con gran parsimonia se colocó detrás de mi colocó mi cabeza entre sus tetas y empezó a lavarme el pelo masajeando lentamente mi cabeza, un auténtico placer. Carmen se sentó a mi lado y con una esponja natural me limpiaba el cuerpo bajo el agua. Ángela dijo en ese momento.
- Chicas nuestro hombre esta empalmado yo estoy muerta, alguna queréis follar?
- No por favor que no podemos más._ Dijeron las otras dos.
- Pues voy a hacerte la mejor paja que te hayan hecho jamás.
Y cogiendo mi polla con una mano y mis huevos con la otra empezó a hacerme una paja digna de un rey.
- Dinos señor y amo que pasa con nuestras finanzas._ Dijo Carmen.
- Veréis, vuestro anterior administrados no se murió de un ataque al corazón se suicidó a base de pastillas.
- Madre del amor hermoso, porque?.- Dijo Carmen.
- Veréis invirtió gran parte del capital de sus clientes en nueva rumasa sin su permiso, por lo que al quebrar han perdido casi todo su dinero.
- Quieres decir que estamos en la ruina’._ Dijo Ángela
- Pues tu no, porque parece ser que tu difunto marido no se fiaba de el ni un pelo y sólo le dio para administrar algo más de cien mil euros, pero en cambio tu Carmen lo has perdido todo, ya que el manejaba todo tu capital.
- Y ahora que haré._ Dijo Carmen.
- Tienes un problema grave, pues con tu pensión no puedes mantener los gastos de la casa y de la finca que heredaste de tu marido.
- Tienes una finca Carmen?._ Preguntó mi madre.
- Ha sido siempre de la familia de mi marido pasando de padres a hijos, es una preciosidad, cerca de las pistas de esquí y de los grandes lagos. Además de estar cerca de una ciudad monumental.
- Pero tienes unos gastos considerables, has de pagar a la gente que cuida de ella y los gastos que acarrea de por si una propiedad tan grande.
- Entonces que hago la vendo?._ Dijo Carmen.
- Eso o hacerla rentable.
- A que se refiere señor?
- Pues lo he estado pensando y que tal si convertimos la finca en un hotel rural o una casa rural, según los planos tiene muchas habitaciones cada una con su baño, un gran comedor, una sala de estar, piscina y terrenos adyacentes.
- Y como es que tienes un cuarto de aseo en cada baño?._ Preguntó mi madre
- Cosas de la abuela de mi difunto marido. Parece ser que ella y una vecina siempre tuvieron una gran envidia la una de la otra. Entonces un día llegó la vecina pavoneándose de que en su finca tenía un cuarto de baño por piso. Así que ni corta ni perezosa hizo instalar un baño en cada cuarto. Casi se arruinan por el caprichito de la buena mujer, pero mira la vecina al enterarse le dio tal soponcio que murió de un ataque pocos días después.
- Además tiene aire acondicionado para el verano y calefacción para el invierno._ Dijo Angela .
- Pero hermana así y todo habrá que hacer una gran inversión inicial y mover muchos papeles, contratar a alguien de confianza para que lo lleve.
- De los papeles no te preocupes que yo lo tramitaré todo, desde ahora y para siempre nos ayudaremos los cuatro siempre._ Dijo mi madre mientras nos besaba a todos.
- Además yo soy vuestro administrador, calcularemos lo que hace falta para ponerla en marcha y usaremos parte del capital de Angela para ponerla en marcha. Por cierto Angela mi amor me voy a correr.
Ángela se metió mi rabo en la boca y se bebió toda mi lefa sin dejar caer ni una sola gota.
- Lo siento es que soy adicta a su leche.
- Ángela toda tuya, a mi me sabe mal hijo pero es que el sabor áspero que tienen pues no me gusta mucho.
- Y yo me desmayo antes de que el se corra._ Dijo Ángela.
- Bueno así y todo queda el problema de contratar a alguien de confianza para que dirija el hotel.
- Mama que te parece si se lo proponemos a Noemí, a fin de cuentas ha estudiado turismo y ha hecho infinidad de máster sobre economía y sabe 5 idiomas.
- No se hace meses que no veo a mi hija, pero puedo que le parezca poco un hotel rural para lo que ha estudiado._ Dijo mi madre.
- Ero podemos planteárselo como un reto, empezar con un pequeño hotel y si la cosa va bien ampliarlo después, ofrecer más servicios.
- Santi, puedes encargarte tu de eso, sabes que a mí no me tiene mucha estima, y me lo merezco por ser una madre horrible.
- No creas que a mí me tiene mucha más estima, siempre me consideró un vago por estudiar una carrera sin salida.
- Comamos descansemos y mañana empezaremos a poner el plan en marcha.
Esa tarde fue tranquila, la pasamos todos juntos en casa de las dos hermanas, contándonos confidencias, chascarrillos y cosas intrascendentes. Nunca viene mal una tarde tranquila.
Mi madre salió pronto a hacer gestiones la mañana siguiente y yo llamé a mi hermana.
- Hola Noemí como estas?
- Hombre Santiago te has acordado de que tienes una hermana que hoy cumple años.
- Por supuesto feliz cumpleaños.
La leche lo había olvidado por completo y mi madre también.
- Mama me ha dicho que te felicite de su parte, tiene miedo de que acabéis peleándoos como siempre.
- Bueno, eso era antes.
Que blanda está algo le pasa.
- Noemí te encuentras bien? Te noto rara.
- No tranquilo Santiago, no me pasa nada.
- Pues si no te pasa nada llámame Santi a partir de ahora, me gusta más.
- Vale Santi.
- También quiero a provechar para comentarte una cosa. Estoy trabajando como administrador.
- Enhorabuena me alegro de que tengas trabajo, en los días que corren.
- Pues verás mis clientas principales son nuestras vecinas del quinto. Una de ellas tiene una gran finca situada en el parque natural de XXXX, la tiene cerrada por lo que está deteriorándose y acumulando polvo. Yo le he propuesto que la convierta en un hotel rural.
- A si?
- Si verás de momento solo tiene 15 habitaciones, pero todas ellas cuentan con baño propio, también tiene calefacción en toda la casa, al igual que aire acondicionado. Cuenta con una gran piscina y grandes extensiones de terreno.
- Que casa tan bonita y porque me cuentas todo esto?
- Pues verás yo no entiendo nada de hoteles, no sabría cómo hacerlo prosperar, por eso pensé en ti. Querrías dirigirlo tú?
- Si
- Que rápido has aceptado, tenia una retahíla de razones para convencerte.
- Pues ya sabes que no hace falta, cojo hoy el avión y a las 7 estoy allí.
- Mujer no hace falta tanta urgencia, arregla, todos los papeles, pon las cosas en orden y ven cuando lo hayas hecho.
- No me hace falta, vendrás por mi al aeropuerto, tengo muchas ganas de verte.
- Por supuesto allí estaré, no te quepa duda.
Que fácil había sido, pensaba que estaría una hora al teléfono y no había estado más que diez minutos. Saldré a comprarle un gran regalo de cumpleaños. Pero antes recargaría energías visitando a mis chicas.
- Amores queréis ración de rabo para desayunar?
Dije a las hermanas nada más entrar.
- Por supuesto._ Dijeron las dos.
Se levantaron como resortes del sofá donde estaban sentadas y mientras Ángela y yo nos besábamos como adolescentes apasionados, Carmen me comía el rabo con una gran maestría.
Las cogí cada una en un hombro y las llevé de esa guisa al dormitorio. Las tiré allí sin compasión, cargándome la cama de paso, entre risas me tiré encima de ellas y empecé a morderlas lamerlas acariciarlas. Y a Carmen darle palmadas donde sabía que más le gustaba que le pegase. Fui fallándomelas alternativamente, cuando una estaba a punto de correrse se la sacaba y se la metía a la otra, cinco veces se lo hice a cada una. La pasión animal se abría paso rápidamente en mi cabeza y en un momento dado le grité a Carmen.
- Tengo el rabo a mil puta.
Y le solté un bofetada más sonora que dolorosa, y ella con una cara de lujuria rayando en la locura, me contestó.
- Mi señor, mi rey, mi dios soy vuestro felpudo en esta y en la otra vida. Quiero ser puta más puta que las cortesanas, seré tu puta siempre.
Y como no se desmayó tras un orgasmo bestial. Angela algo sorprendida por nuestro ataque de locura, no reaccionó hasta que no le metí la polla hasta lo más hondo y nos corrimos a la vez.
- No me has dado mi leche malvado dijo Ángela._ Poniendo morritos.
- Un deseo tuyo es una orden para mi._ Dije en tono irónico.
Así que con la lengua fui cogiendo toda la leche y su corrida y metiéndosela en su boca, no paré hasta que no salió nada.
- Eres un guarro adorable._ Dijo mientras me besaba.
- No te podias quedar sin probar nunca una corrida conjunta.
- Ha sido algo delicioso, lo repetiremos alguna otra vez.
En ese momento despertó Carmen de la brutal sesión de sexo.
- Chicas he de ir a comprarle algo a mi hermana es su cumpleaños algún consejo?
- Cómprale algo de corazón, que note que en vuestra casa algo ha cambiado y que el amor fluye por cada rincón de la casa.
- Pues me voy que quiero hacerle un regalo que no olvide.
Nada más salir por la puerta me encontré a mi madre y le conté la conversación con Noemí, pidiéndole consejo.
- A las mujeres de nuestra familia, nos han vuelto locas los abalorios, igual daba que fuese bisutería o joyas, mientras acertasen en nuestro gusto.
- Han abierto una joyería en la esquina voy a ver si encuentro algo que se ajuste a mi presupuesto.
- Tu presupuesto es muy grande.
- No pienso coger dinero de las chicas para hacer un regalo tan personal.
- No me estaba refiriendo a eso. He ido al banco he transferido todos mis fondos a una cuenta conjunta a la que tienes completo acceso, aquí tienes la tarjeta de crédito y el saldo._ Me dijo mientras me daba una carpeta de pequeñas dimensiones.
- Madre mia, mama de donde has sacado tantísimo dinero._ Dije mientras veía las cifras de más de seis ceros de mi madre
- Verás el ser abogada de empresas te hace poseedora de información privilegiada por lo que inviertes en una vendes acciones de la otra y al final acabas con ese dinero en las cuentas.
- Bueno mamá pues nos vemos a la hora de comer, espero tener ya el regalo.
- Te espero en casa._ Mientras se despedía de mí con un beso nada maternal.
Fui a la nueva joyería, estaba bastante llena por lo que hice cola un buen rato. Mientras tanto, me fijé en la cara de la dueña, me sonaba de algo, pero las cicatrices que tenía en la cara, el brazo derecho con un tatuaje tribal, y esa melena rojiza me descolocaban, no conseguía ubicar a esta chica. Cuando me tocó el turno, la dueña me dijo.
- Hola Santi que quieres?
Al escuchar la voz la conocí al momento, era Esperanza, compañera mía en el instituto, marchó a estudiar al extranjero y hacia diez años que no la veía.
- Chica te voy a ser sincero no te había reconocido, como has cambiado.
- Me eh hecho más mayor, soy más alta estas se han hecho más grandes._ Dijo mientras señalaba sus pechos.
- No es solo por eso, tonta._ Dije entre risas.
- Hace un par de años tuve un grave accidente de moto, salvé la vida porque llevaba el casco. Así y todo me quedaron secuelas evidentes, como las cicatrices en la cara y el brazo derecho.
- Por eso lo del tatuaje.
- Si para disimularlo, al igual que esta melena tan larga, para los del cuello y el principio de la espalda.
- Bueno, pero ahora estás recuperada y tienes una joyería con mucha clientela, para estos tiempos de crisis.
- Si pero tú me estás sido gafe, tras de ti no ha entrado nadie._ Dijo entre risas.
- Mírala, veo que tu sentido del humor no ha menguado nada.
Estuvimos así diez minutos poniéndonos al día, Esperanza se había casado y tenía una niña, ya sabéis cosas insustanciales.
- Bueno y a que has entrado a mi establecimiento.
- Pues es el cumpleaños de mi hermana y me gustaría regalarle algo de corazón.
- Eso está muy bien, siendo tu hermana yo me decantaría por un colgante.
Fue sacando una serie de colgantes de muy bonita factura y cuando pensaba que no me llevaría nada me sacó uno que me llamó poderosamente la atención. Era uno con un delfín de zafiro, de un intenso azul, engarzado en un colgante de oro, labrado en los extremos estaban los símbolos de alfa y omega griegos. Principio y fin.
- Me quedo este, mi hermana siempre ha tenido un peluche en forma de delfín al que adora, aun hoy lo tiene en su cuarto. Además demuestra el principio de y el fin de……. Bueno eso son cosas mías.
- Has elegido una pieza cara.
- Tranquila eso no será un problema.
- Muy bien pues ahora te lo envuelvo.
Siempre me ha gustado ver a las mujeres trabajar con las manos, demuestran una sensualidad poco común y sobre todo si hacen las cosas con cariño como era el caso de Esperanza; cuidando hasta el último de los detalles, para que el regalo emocione desde el primer vistazo que le das.
Y que conste que no soy machista, pero no es lo mismo las finas manos de una mujer, que las de un hombre.
Fui a comer le conté quien era la dueña de la joyería a mi madre y el regalo que le habíamos hecho entre los dos.
A las 5 salí hacia el aeropuerto, no quería que un atasco me hiciese llegar tarde .Aunque parezca increíble el avión llegó con una puntualidad meridiana. Sería porque venía de Suiza?. Un chiste de tanto en tanto no va mal, aunque sea tan malo. Reconocí a mi hermana enseguida y el bombo que lucia también, que les pasaba a mis hermanas, que hasta Belén lesbiana de por si, se había quedado preñada aunque lo perdiese. Tenía que tratar esta situación con delicadeza, no quería que mi hermana se disgustase, ya traía una cara de perrito degollado que rompía el alma. Así que cuando se me puso delante con una gran sonrisa le dije.
- Hermana estas preciosa, el embarazo te ha embellecido de una manera asombrosa.
Acerté de pleno, sonrió iluminándosele la cara y se lanzó a mis brazos dándome un fuerte abrazo.
- Noemí que no me dejas respirar.
- Perdona Santiago, no sabía cómo reaccionarias ante mi embarazo, pero sabía que eras el más tolerante de nuestra familia, por eso te pedí que vinieses tu a por mí.
- Y de cuanto estás?
- Pues de cuatro meses y medio.
- Con lo delgada que estabas es normal que se te note tan pronto tu estado. Vamos a por tu equipaje?
- Si claro, no quieres saber quien es el padre?
- Solo si tu quieres decírmelo
Me volvió a abrazar y esta vez alguna lágrima le salió.
- Que pasa mujer? Me estas preocupando.
- Pues verás su padre es un cerdo cabrón, me amenazó con matarme si no abortaba. Pero yo quiero tener a este nene.
- Por eso la urgencia por volver?
- Si._ Dijo ya llorando a lágrima viva.
- Porque no me pediste ayuda antes?
- No sabía cómo reaccionarias, y si papá y mamá se enteraban?
- Pues que sepas primero que tienes mi apoyo incondicional y segundo que en casa han cambiado algunas cosas.
- Gracias Santiago.
- Llámame Santi por favor lo prefiero.
- Vale y que cosas han cambiado?
- Te lo cuento después de coger tu maleta.
Su maleta resultaron ser tres, pero bueno para eso están los carros portaequipajes. Menos mal que había cogido el coche de mama, porque en el deportivo no cabían ni de coña.
- Bueno Noemí nuestro gilipollas padre sigue igual
- Ostras empezamos bien._ Dijo Noemí con una sonrisa.
Como había cambiado mi hermana no me lo podía creer, esta chica tan simpática, era la sabionda insoportable que se había ido al extranjero a estudiar?
- Y nuestra madre a cambiado radicalmente.
- En que sentido ha cambiado?
Le conté todo lo acontecido, bueno todo lo que se podía contar y ella misma llegó a una conclusión.
- Nuestro padre es un mal bicho. Y de esos conozco a uno
- Así es.
Llegamos a casa justo cuando decíamos esto, ya que me había llevado los 40 minutos de recorrido contarle todo lo que había pasado, incluso lo de Belén. Mi madre se encontraba en medio del salón tensa, expectante. Entonces Noemí se acercó a ella y se dieron un abrazo, mientras las dos lloraban desconsoladamente. Minutos después les dije.
- Chicas que os parece si cenamos y nos relajamos un poco?
- Es una buena idea cariño. Noemí ven conmigo a la cocina.
- Si mama.
En ese momento llegó Belén, con los ojos rojos y achinados, es decir colocada hasta las cejas.
- Que tal porrera?
- Te quiero Santi y a ti también mama y a ti Noemí. Os quiero a todos y a todas.
Y empezó a reírse como una tonta unos diez minutos. Mi madre y Noemí entraron a la cocina y dejaron a Belén tirada en el sofá, donde se durmió.
Cuando acabamos de cenar le sacamos a Noemí una tarta, le cantamos el cumpleaños feliz y le dimos su regalo.
- Es precioso, gracias Santi, gracias mama.
- Esto es el principio y el fin de una era. Se acabó ser la familia que éramos hasta ahora, seremos una familia que se apoya al 100% sin fisuras, que se quiere por encima de todo y sobre todas las cosas.
- Si Santi cariño esto es el fin del desastre de familia que éramos, nunca más voy a permitirme el no querer a mis hijos como se merecen y odiar a vuestro padre más que a nada.
- Bueno eso será solo temporal, hasta que lo saquemos de nuestras vidas, después lo olvidaremos para siempre.
- Bueno y que hacemos con la drogadicta de mi hermana?
- Es hora de hablar seriamente con ella.
La zarandee un poco hasta conseguir que se despertase, al llevar más de una hora dormida se le había pasado bastante el colocón por lo que ya se podía hablar con ella.
- Mira Belén quedamos contigo que te dejaríamos en la hacienda del abuelo para que hicieses allí lo que quisieses. Pero hemos cambiado de opinión.
- Que quieres decir con eso Santi?
- Belén no nos fiamos de ti, tu adicción es demasiado nociva para ti, no eres como los fumetas que de tanto en tanto se fuman un porro. Tu fumas hasta perder el conocimiento y luego olvidas lo que has hecho mientras te ha durado el colocón.
- Además como familia nos preocupamos los unos por los otros y dejarte así sería como abandonarte.
- Mamá y que quieres que haga no puedo dejarlo.
- Pues es hora de buscar ayuda. Estarías dispuesta a ir a una clínica de rehabilitación?
- Como una drogadicta?
- Belén hermana eres una drogadicta y me duele verte en este estado.
- Bueno si insistís lo haré.
Mi madre preguntó a su sicólogo cual era la mejor clínica y dos días después partía para seguir su programa de rehabilitación.
Nos fuimos a dormir ese día y mi madre entró ya desnuda en mi cuarto.
- Santi cariño estoy muy orgullosa de ti.
Dijo mientras se empalaba con mi polla. Ya sabéis que mi madre adoraba hablar conmigo con mi polla bien clavada en su coño.
- Si mama?
- Si estás ocupando rápidamente el puesto del hombre de la casa, puesto que realmente nunca existió en esta familia.
- Si?
- Si, tu hermana Noemí, está tan feliz por como la trataste en el aeropuerto que no para de sonreír. Ya te quiere más de lo que te quería antes. Y más de lo que jamás quiso al gilipollas.
- Solo hice lo que cualquier hermano haría.
- Si pero hasta ahora, no os comportabais como tales, claro que la culpa fue mía y del gilipollas.
- Mama que te quede una cosa clara, lo que he dicho antes era cierto, el pasado está olvidado, encaremos el futuro con nuevo optimismo, pues nos lo merecemos.
- Si mi amor.
En ese momento mi madre se levantó y empezó a cabalgar de forma pausada, mientras yo le acariciaba dulcemente sus sensibles pezones. Sus suspiros no tardaron en llegar. Al cabo de unos minutos cogió mis manos con las suyas y se apretujó las tetas tras lo cual me miró a los ojos y se tumbó en la cama.
- Tómame como a mi hombre, pues eso es lo que eres, el único que merece ser llamado así, ahora y siempre.
Yo me tumbé encima de ella la volví a ensartar y cogiendo sus manos, las llevé por encima de su cabeza hasta apoyarlas en la almohada, lo cual hizo que apoyase por completo mi cuerpo sobre el suyo, y empecé a fallármela. La presión que le produjo el peso de mi cuerpo hizo que notase lo cerca que estábamos y se corrió en pocos minutos, tras lo cual me alcé y con media docena de fuertes sacudidas me corrí yo. Menos mal pues no creo que mi madre hubiese aguantado mucho más ese peso sobre ella.
A la mañana siguiente desayunamos todos juntos, entre risas con un ambiente que nunca antes habíamos tenido al reunirnos. En ese momento sonó el móvil de Noemí. A medida que hablaba, se ponía blanca y cuando colgó nos dijo
- Viene el cabrón que me dejó preñada.