Sasha, el Ko y Yo
Luego de la historia que les conté en "Sasha se Desata", algo había quedado pendiente... nuestro primer trío del Ko y yo con ella. (Trío).
Sasha, el Ko y Yo
Buenos días, antes de comenzar quiero agradecerles por todo el apoyo que le han dado a mis relatos. Voy a iniciar presentándome de nuevo para los que no me conocen: mi nombre es Ricardo y soy un joven guatemalteco que lleva una doble y complicada vida, por no mencionar que también es secreta y prohibida: soy amante de mi madre. Hacer tiempo, justo antes que mis padres se separaran, iniciamos una relación incestuosa que ninguno buscó pero que no pudimos detener, pasados los años seguimos juntos. Obviamente esto es algo que deja una marca profunda e indeleble en la vida de una persona, mi mente se abrió mucho y mi vida tomó un rumbo complicado que a veces, ni yo mismo, puedo creer.
Para muestra un botón: mi mejor amigo. Carlos Ko es hijo de padre coreano y madre guatemalteca, un muy buen amigo a su manera, pues es un tipo parrandero, patán y mujeriego, todo en mayúsculas. Junto a él me embarqué en mi siguiente locura sexual: un juego de voyerismo/exhibicionismo. Mi pervertido amigo descubrió que le gustaba tener público a la hora de coger, ¿y quién mejor que su mejor amigo, su alero para todo, para ocupar ese papel? No me voy a extender mucho aquí, igual pueden leer estos relatos en mi serie titulada "Mi Amigo el Ko" .
Con el tiempo, como era de esperarse, todas esas veces haciendo de mirón me llevaron a participar en sus degeneres, estrenándome en los tríos al lado de una de sus mujeres. Todo siguió por el estilo hasta que conocí a un nuevo personaje que se haría muy importante en mi vida: Sasha. Esta era una de las tantas amigovias del Ko y con la que me llegué a involucrar más y que descubrió mi vida secreta con mi madre por un estúpido error de los 2. Pues bien, este relato es precisamente sobre ella.
Como recordarán, los que leyeron mi serie titulada "Sasha se desata" , al final, luego del tórrido trío que sostuvo ella conmigo y con mi mamá, quedó en el aire que nos habíamos convertido en algo más que solo conocidos, pero días después del suceso yo aun no estaba seguro de qué. El Ko, por su parte, estaba extasiado, no podría creer que de verdad me había cogido a su novia y estaba excitadísimo con la posibilidad de cogérnosla entre los 2 (ya saben como es de pervertido). Sin embargo, sus esperanzas sufrieron un fuerte revés, la muchacha nos citó a los 2 en su casa pues tenía algo muy importante que decirnos. Y como lo dijo con tanta seriedad lo primero que pensamos fue que nos mandaría a la mierda algo que, sinceramente, nos los merecíamos (sobre todo él).
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Mmmm qué deahuevo ponelo el Ko se acercó al moderno radio de su sala con el CD totalmente nuevo con la misma desgana con la que yo le contesté.
Sentados en la sala de su casa, con cara de idiotas, nos dispusimos a escuchar al reguetonero ese sin demasiado interés de hecho solo lo pusimos para romper el feo y desesperante silencio que había. Me sentía como un niño al que pescaron en una travesura grave en el colegio y que está esperando el regaño y posterior castigo de la directora.
Voy a aprovechar para describirnos antes de continuar, Ko era un joven de 18 (como yo) de familia acomodada y acostumbrado al lujo. Era de piel morena clara, alto y corpulento, con un cuerpo marcado y potente. Era de ojos rasgados y pequeños, nariz ancha y mandíbula maciza, con un marcado aire primitivo. Por mi parte era un joven delgado y de cuerpo atlético por los deportes, tenía la piel morena, el cabello negro y rizado, ojos cafés y un rostro varonil heredado de mi padre. Era un poco más bajo y delgado que mi amigo, pero fibroso y más marcado. Considero que estaba bien. En esas estábamos cuando sonó el timbre del intercomunicador de la casa, "ding, dong". El Ko atendió al instante:
¿Si? Ahorita amor es Sasha abrile mano me gritó.
Rápidamente le abrí, estaba muy nervioso porque no sabía qué esperar, qué era lo que Sasha quería hablar con nosotros. ¿Querría mandarnos a la mierda de verdad? Mmmm bueno, por un lado me sentía aliviado, sabía que ese juego en el que estaba metido al lado de mi amigo era adictivo y que más de algo podía pasarnos si no teníamos cuidado. Además me sentía mal por ella, sentía que la habíamos utilizado y sabía todas las cosas que ella había perdido por culpa de mi amigo: su novio y su mejor amiga. Por el otro lado me lamentaría mucho si ella nos mandaba a freír espárragos, realmente esa chava me había caído bien y sabía que, en otras circunstancias, habríamos podido ser grandes amigos.
Sasha entró a la casa rápidamente, parecía cohibida, pero igual yo no le puse mucha atención a eso, no pude evitar poner mi usual cara de idiota cuando la vi. Llevaba un pantalón pescador de lona, blanco, de cintura baja y muy ceñido a su redondo y enorme trasero. Arriba una blusa verde menta tipo corsé, de tirantes y hasta las costillas, así que dejaba descubierto su ombligo y su abdomen plano. La blusa le marcaba y levantaba el busto, por lo que pese a no tener demasiado, sus senos casi amenazaban con salirse y formaban un vistoso escote.
Para terminar, la chava iba bastante maquillada, que sin ser excesivo le daba un aire muy sensual que casi rozaba lo vulgar. Sasha iba vestida para matar y hasta podía pasar por puta de lujo dirigiéndose a una cita. Incluso puedo decir que no tuve problemas para darme cuenta que traía erectos los pezones.
Hola Sasha la saludé un poco tímidamente.
Hola Ricky me contestó muy melosa y me plantó un profundo beso en los labios, de lengua y todo. Luego entró y saludó al Ko que también puso cara de idiota cuando la vio entrar Hola amor lo besó con fuerza, igual que a mi, al mismo tiempo que se sentaba sobre sus piernas. Segundos después de deslizó y quedó sentada a su lado, roja como un tomate y algo nerviosa.
Inmediatamente el Ko y yo respiramos profundo, nos había quedado claro que ella no venía con la espada desenvainada más bien parecía que quería que nosotros le envaináramos nuestras espadas. Aunque igual no lográbamos quitarnos nuestros gestos de incredulidad e idiotez. No nos imaginábamos lo que ella tenía planeado y estábamos esperando.
Un tenso silencio invadió la habitación, se veía nerviosa e indecisa, como si quisiera decirnos algo que no se atrevía. Por nuestras partes tampoco hablamos ni rompimos el silencio. Primero porque no sabíamos qué decir, segundo porque no nos atrevíamos. Pero al final fue ella la que rompió el hielo. No dijo nada (de hecho nadie había dicho nada desde que nos saludó), solo se puso de pié y dejó que su cuerpo siguiera el ritmo pegajoso y repetitivo de la canción que estaba sonando en el radio.
Voy a describírselas: Sasha Marroquín era su nombre, y era una muchacha de nuestra misma edad, bajita y de complexión delgada, pero firme y bien construida; morena de pelo lacio, carita preciosa, ojos oscuros, nariz redonda y pequeña y boca delgada y también pequeña, parecería que no mata ni una mosca. Abdomen plano y liso, con un ombliguito muy lindo y una cintura bastante estrecha; senos pequeños pero redondos y frontales, con un par de oscuros pezones puntiagudos y pequeños en medio de unas aureolas anchas; culito grande, redondo, duro y bien parado. Poseía un par perfecto de piernas, largas y torneadas, con los muslos gruesos, perfectas. Como verán se estaba cayendo de buena.
Sus caderas comenzaron a mecerse suavemente, despacio, sin prisas, pero libres. Su rostro dibujó una sonrisa lujuriosa que nos dedicó junto con una mirada matadora llena de calor y feromonas, estaba ardiendo y nos lo dejó claro. Nosotros la veíamos aun más confundidos, no lográbamos salir de nuestro asombro, pero de algo ya estábamos seguros, ella no iba buscando pelea venía buscando otra cosa. Y como si leyéramos sus pensamientos, pronto nos pusimos de pié y la acompañamos en el centro.
Sasha, amor ¿estás caliente? le preguntó el Ko y a mi me pareció una mulada. Sin embargo lo que él quería era oírlo de sus labios, pero ella solo le dedicó la mirada más enfebrecida que pudo a modo de respuesta Ricky, preparate, me dijo que hoy le vamos a dar duro a esta perra
Bueno, no había nada más qué decir, sus intenciones estaban muy claras. Terminamos bailando perreo los 3 de una forma muy sensual y erótica, con ella en medio, el Ko por delante y yo por detrás. Nos provocaba descaradamente, moviendo las caderas para rozar su culo con mi bulto, agarrándole al Ko el suyo y dejándose manosear entera. Estaba hiperexcitada, ardiendo, y nosotros lo sabíamos, ya teníamos las vergas rígidas y casi estábamos echando espuma de solo pensar en la tarde que pasarían juntos.
El Ko no quiso perder más tiempo y empezó a besarla suavemente, bajando a su cuello poco a poco. Yo, por mi parte, la tomé de la cintura y, despacio, empecé a acariciarle la espalda, lentamente fui bajando hasta sus nalgas, grandes, duras y firmes, y se las acaricié y apreté. Luego busqué el cierre de su pescador y con mucha delicadeza lo bajé, este cayó al suelo y ella ni se inmutó, estaba muy ocupada dejándose devorar por mi amigo.
Su enorme y hermoso trasero, de suave y tersa piel morena, quedó expuesto, apenas cubierto por su brasilera blanca cuyo hilo se perdía entre los cachetes de su culo. Al mismo tiempo el Ko le quitó la blusa, dejándola con las tetas al aire, y atrapó sus oscuros y erectos pezones con sus gruesos labios y comenzó a succionarlos. Sasha comenzó a jadear y a gemir suavemente, se veía enloquecía y ansiosa.
¡AAAAHHHHH, Carlos si, seguí así!
Te voy a comer entera Sasha Ricky y yo vamos a partirte por la mitad, perra
Mientras tanto yo le besaba las nalgas y los muslos, se los lamía y acariciaba con una lentitud desesperante. Estiré una mano y me encontré con su sexo depilado y no tardé mucho en bajarle la tanguita, dejándola ahora como Dios la trajo al mundo, caliente y desnuda, con su sexo emanando una cantidad de fluido impresionante y dispuesta a ser poseída por dos machos calientes.
El Ko la acostó sobre un sofá mientras yo me desnudaba, vi a Sasha lamerse los labios, como saboreándose, contemplándome embelesada. Obviamente mi ego se infló mucho, pero había que admitir (sin querer sonar presumido) que desnudo soy muy "llamativo": poseo una virilidad de 23 cm de carne en barra, dura y palpitante y bastante gruesa, con un glande ancho y con forma de hongo y circuncidado. Por debajo tengo 2 redondos y abultados testículos repletos de semen.
Al mismo tiempo el Ko le abrió las piernas y comenzó a lamerle la raja depilada y colorada. Su lengua iba y venía por cada recoveco de su sexo mojado, tragándose sus jugos. Con sus dientes rozaba delicadamente su sensibilísimo clítoris al mismo tiempo que se iba desnudando sin soltarla. El Ko poseía una verga impresionante también, era de 20 cm, surcada de venas y más gruesa que la mía, con un glande pequeño y estrecho, cubierto por el prepucio y con el tronco que se engrosaba en la mitad.
¡¡¡AAAAAHHHHH, CAAAAARLOOOOSSSS!!! exclamó ella extasiada, oyendo los chapoteos que la lengua de mi amigo causaba al entrar en contacto con su sexo encharcado.
Entonces me incliné sobre ella y la besé apasionadamente, nuestras bocas se devoraban mutuamente como si fuese el último beso de nuestras vidas. La tomé del pelo, me separé de ella y comencé a ponerme de pié al mismo tiempo que "la obligaba" a lamerme la piel de mi duro y firme torso, hasta dejarla frente a mi gran verga. Vi cómo eso la calentaba más y recordé que le encantaba que la dominaran de esa forma. Ella tampoco quiso perder tiempo e inició a lamérmela como a un helado, luego se la tragó hasta el fondo gimiendo del placer, mostrando sin reparos lo mucho que le gustaba hacerlo. Sin embargo no pudo hacerlo por mucho tiempo, pues el Ko nos interrumpió.
Esperate mano, probemos una nueva posición con esta perra mi amigo se levantó llevándosela con él, sujetándola con fuerza de las caderas y dejándola colgada de cabeza Vaya pues cogétela por la boca mientras yo le sigo chupando la cuca. dicho y hecho, sosteniéndola con fuerza hundió la cara entre su sexo mientras yo le ensartaba la verga hasta la garganta.
Je, je, realmente no sabía porqué me sorprendía, sabía de sobra que ese cerote era un pervertido, pero lo cierto es que jamás me hubiese imaginado que esa posición fuera posible. La teníamos colgando en el aire, de un lado él la sostenía firmemente de las caderas a la altura de su cuello, así podía hundir su cara entre los pliegues de su sexo y continuar con el delicioso cunilingus que le estaba dando. Del otro lado yo la sostenía de la nuca y los hombros y le ensartaba sin piedad mi gran palo hasta el fondo.
La que si me sorprendió fue Sasha, pues se dejaba hacer mansamente, sin protesta ni oposición alguna. Incluso me ayudaba sosteniéndose ella misma de mis brazos, dejándome libres así las manos para que la pudiera seguir irrumando sin problemas, hundiéndole mi gran tranca hasta las amígdalas. Literalmente la estábamos tratando como a una muñeca de trapo, la teníamos totalmente a nuestra merced y eso aumentaba el libido de los 3.
La tuvimos así por un buen rato, el Ko la estaba matando poco a poco de placer, su lengua y labios le daban un goce increíble, se conocía de memoria cada parte de su feminidad. Pero, paradójicamente, no la escuché ni sentí acabar ni una vez, intuí que algo debía estar haciendo mi amigo para cortarle los orgasmos a la muchacha, que cada vez parecía más caliente y ansiosa. De pronto el Ko la bajó y me indicó con una seña que tomara asiento. Lo hice y él giró a su amigovia y la dejó de frente a mi tremenda verga parada y tiesa desde el sofá.
Bueno amor enseñame que tan buena jinete sos con mi amigo. le dijo al oído, lo suficientemente audible como para que yo la pudiera escuchar.
Inmediatamente Sasha se subió sobre mí, separó las piernas y se fue sentando despacio sobre mi enardecido miembro viril, sintiendo embriagada como la iba dilatando y mojando más y más. Pronto quedó totalmente ensartada y comenzó a moverse, primero lento y suave. Yo podía sentir la calidez y estrechez de su interior y lo empapada que estaba por dentro.
¡¡OH, DIOS!! exclamó ella.
¿Te gusta mi amor, te gusta que mi mejor amigo te coja? le preguntó el Ko, susurrándole al oído al mismo tiempo que le lamía los lóbulos de las orejas. Solo la estaba retando.
¡¡SSSSIIIIIIHHHHH la tiene tan larga y dura aaaahhhhh!! los movimientos de mi amiga se hacían más intensos y botaba con más fuerza sobre mi.
¿Y te gusta que tu novio vea lo puta que te has vuelto?
¡¡Ssssiiiiiiiihhhhhh me encantaaaaagggghhhh!! ¡¡Tu me volviste así Carlos, aaahhh!!
No Sasha, tu SIEMPRE fuiste así solo que no lo sabías le dijo lamiéndole el cuello.
Por mi parte la dejaba hacer sin moverme, gozando intensamente, amasándole las tetas y pellizcándole los pezones. Ella sola se horadaba y se volvía loca del placer. Aquella era la tercera vez que le clavaba la verga entre sus entrañas y tenía claro que no sería la última. Sentía que la cabeza de mi pene topaba directamente contra la boca de su útero y ella se lo gozaba como una loca y descontrolada demente.
Obviamente mi amigo no iba a quedarse sentado solo viendo, por sorpresa la empujó sobre mí sin que ella dejara de rebotar cada vez con más violencia sobre mi verga. La dejó inclinada frente a mi rostro de su amigo y expuso su redondo y enorme trasero. Le lamió despacio toda la espalda, desde la nuca hasta el culo, y comenzó a chupárselo para lubricarlo con saliva y dilatarlo al mismo tiempo. Inmediatamente tanto Sasha como yo supimos lo que quería. Estuvo haciéndolo por varios minutos, tiempo que ella aprovechó para estallar en su primer orgasmo.
¡¡¡¡RICARDO, RICAAAAARRRRDOOOOUUUUUGGGGGHHHHH AAAHHH, AAAAHHH!!!! el cuerpo moreno y mojado de la muchacha se estremeció mientras continuaba moviéndose enloquecidamente. Sentí algo tibio sobre mi vientre y dude si se orinó o no.
Ja, ja, ja, ja Sasha, amor, puedo sentir la cabeza de hongo de la verga del Ricky le dijo unos minutos después de su clímax y ella se puso roja, ese cerote ya le estaba metiendo los dedos entre el culo. Sasha no le respondió, no pudo, el placer solo la dejaba gemir.
Entonces el Ko me guiñó un ojo y yo vi como se ensalivaba la cabeza de su pene. Lo colocó en posición sobre el esfínter y se lo dejó ir con un sólido empujón. Sasha cerró los ojos con fuerza y pegó un fuerte alarido de dolor y placer, pero no intentó liberarse de esas 2 vergas a pesar que la estaban partiendo por la mitad. Igual eso la enloquecían de placer.
¡¡¡¡OOOOOUUUUUGGGGGGGGG POR DIOOOOOSSSGGGHHHHHH!!!! rugió.
¡¡¡Gozá perra, te vamos a partir por la mitad!!! le respondió mi amigo y comenzó a cogerla.
Automáticamente Ko y yo nos acoplamos y coordinamos, cuando uno sacaba el otro metía. No era porque tuviéramos una gran experiencia en trío, pues el único que habíamos tenido completo fue con Hilda. Nos acoplamos tan bien porque nos dejamos llevar por nuestros instintos. Ella empezó a estallar en orgasmos violentos que la hacían berrear y gritar, tensar todo su cuerpo. Ella gritaba pidiéndonos más, a lo que le respondíamos aumentando la fuerza y potencia de nuestras embestidas.
¡¡¡¡AAAAAAHHHHHHH, OOOOOGGGGHHHHHH!!!! ¡¡¡¡ME ESTÁN MATANDO, ME ESTÁN MAAAATAAAANNNNDOOOOUUUGGGGHHHHH AAAHHH, AAAHHH!!!! literalmente la estábamos partiendo por la mitad, la potencia de nuestras embestidas la sacudían bruscamente y nuestros ciclópeos falos la abrían con fuerza, a mi me pareció que podía perder el conocimiento en cualquier momento.
¡¿Querés más Sasha?! ¡¿Te damos más?! le pregunté, hablando por primera vez desde que empezamos a cogérnosla.
¡Claro que quiere más esta perra nunca tiene suficiente siempre quiere más! dijo el Ko.
¡¡¡¡SSSIIIIIIIIIHHHHHH QUIERO MÁS, MÁS!!!! nos respondió ella entrecortadamente y a gritos, se estaba volviendo loca ¡¡¡¡PÁRTANME EN 2, PERROS PERVERTIDOS, AAAAHHH, AAAHHH, AAAHHH!!!! y seguía encadenando orgasmos.
Vamos a cambiarla otra vez Ricky
El Ko la jaló y la levantó, haciendo que mi pene se le saliera de adentro. Mi amigo se sentó en un sofá de una plaza sin sacarle la verga del culo y le abrió los muslos para dejármela completamente abierta. Y yo, ni corto ni perezoso, la penetré de nuevo y empecé a embestirla con nuevos brillos mientras él se limitaba a mantenerla con las piernas abiertas.
¡¡¡¡AAAAAAGGGGHHHH SSSSIIIIIIHHHHH RICARDO, DAME DURRROOOOO!!!!
¡Aprovechá y cogete a esta perra Ricky, sacale la verga por la boca.
Me la cogí con furia, mis embestidas contra su humanidad sonaban como aplausos y mi gran verga se le incrustaba hasta el fondo, forzando sin piedad la elasticidad de su vagina. Ella estaba en las nubes extasiada, enloquecida de tanto placer, totalmente ajena a cualquier cosa fuera de ella y del sexo. Se me reveló como una gran perra multirogásmica, capaz de encadenar los picos de cada clímax que tenía, me dejó muy impresionado. Nosotros también estábamos fuera de nosotros mismos, el Ko estaba cumpliendo uno de sus sueños dorados. Por mi parte Ricky, aunque eso de coger en grupo era más cosa de él que mía, también estaba gozando como un energúmeno.
Sasha dejó que la tomáramos como se nos dio la gana, en todas las posiciones que quisimos y con la potencia que se nos dio la gana. Practicamos con ella dobles penetraciones, la cogimos en la pose de perra, turnándonos para darle por el culo y por la vagina por igual. La hicimos chuparnos las vergas varias veces y limpiárnoslas de sus propios jugos. La hicimos gritar hasta que quedó ronca, realmente fue el encuentro más fuerte que ella había tenido en su vida y yo también. Yo no sabía de verdad como ella podía aguantarlo todo sin desmayarse.
Pónganse frente a mi se las voy a mamar nos dijo pasado un buen rato de cogida, con vos grave y áspera.
Se tiró de rodillas y nosotros nos se colocamos a ambos lados de su cuerpo y comenzó a mamárnoslas por turnos. Pero al mismo tiempo nos pasó sus manos por en medio de las piernas y se apoderó de nuestros testículos. Así, mientras le embutíamos las vergas hasta la garganta, sujetándola con fuerza del pelo, ella nos acariciaba suavemente los huevos mientras iba avanzando a su objetivo final. No me costó mucho averiguar de qué se trataba, de hecho ya me lo imaginaba pero no creí que pondría en práctica allí algo que aprendió de mi madre.
La muchacha lo hizo despacio, cautelosamente, sabía que era por el Ko, no lo quería asustar. Usó su propia saliva (babeaba abundantemente mientras se la cogían por la boca) para lubricarse los dedos y así logró meternos un dedo a cada uno entre el culo. Los 2 pegamos un intenso respingo pero no la detuvimos, obviamente yo no lo iba a hacer, a mi esa caricia me gustaba mucho, pero tenía dudas sobre el Ko. Aunque pensándolo bien era ilógico que no le fuera a gustar a ese degenerado mierda.
Los 2 comenzamos a respirar aceleradamente, gruesos goterones de sudor rodaban por nuestras frentes mientras los dedos traviesos y diestros de nuestra amante iban y venían en nuestro interior, aumentando así, de forma exponencial, el intenso placer que estábamos experimentando. Hasta que, finalmente, acabamos en medio de gritos y rugidos triunfales.
¡¡¡SASHA, SASHA, PUTA MADRE SAAAAAASSSSHHHHHHGGGGGGG!!! yo fui el primero ¡¡¡¡¡UUUUAAAAAAGGGGGHHHHHH, AAAAARRRRGGGGGHHHHHH!!!!! Sasha recibió mis chorros de semen caliente en la cara y en la boca, principalmente del lado derecho. Mis rugidos inundaron toda la casa y alimentaron su ego de hembra.
¡¡¡¡POR DIOS AMOR, ¿DÓNDE A APRENDISSSTEEEEEGGGGHHHHH!!!! el Ko no tardó mucho más, le regó el lado izquierdo de la cara por completo y terminó de llenarle la boca mientras lanzaba un largo y poderoso aullido que retumbo por las paredes ¡¡¡¡¡AAAGGGHHH OOOOOOOAAAAAAAGGGGGGHHHHHHH!!!!!
Quedamos de pié, tambaleándonos y con los ojos vidriosos, me parece que al Ko también se le nubló la vista igual que a mi. Aquel fue el final de ese encuentro, el primer trío con 2 hombres de ella y el segundo mío al lado de mi mejor amigo. Y fue increíble, nunca había gozado tanto. Pero no pudimos seguir a pesar que pudimos recuperarnos rápido, ella ya estaba destrozada, la vagina le ardía terriblemente, la tenía muy roja e inflamada y hasta le sangró un poco.
Perdón perdón ya no puedo más, me destrozaron ya no aguanto "obvio", pensé, después de todo pasó cogiendo como loca todo ese fin de semana ¡y hasta con una mujer!
¿Te sentís bien amor? le pregunto mi amigo, mostrando una inusual preocupación en él.
No me arde mucho la vagina y la vulva amor ¿me dejan descansar? la verdad es que había sido demasiado para ella, nos lo pidió casi como una súplica y haciendo pucheros, hasta parecía que iba a llorar (y yo creo que le faltó poco para desmoronarse).
Nos quedamos tirados en los sillones por un rato, luego mi amigo subió a su habitación con ella rendida entre sus brazos, mientras yo me retiraba para dejarles privacidad. Aquel fue el inicio de una nueva y duradera amistad, a partir de ese día Sasha se convertiría en mi mejor amiga y yo en su amante oficial, pues el Ko contaba como su novio. Un nuevo mundo de posibilidades se me abrieron, pues además ella le seguiría guardando el secreto de mi vida incestuosa al lado de mi madre y hasta se haría parte de ella.
Por su parte, el pervertido del Ko no podía pedirle mas a la vida: tenía una novia que no lo celaría, con la que podría hacer cualquier cosa y hasta al lado de su mejor amigo, que ya era el mejor amigo de ella también si, no podía pedirle más a la vida.
Garganta de Cuero
Pueden mandarme sus comentarios y sugerencias a mi correo electrónico, besos y abrazos.