Sangre mezclada

"SANGRE MEZCALDA"

Esta es una historia ficticia (¿?) y espero la disfruten, pues la envío a forma de despedida, ya que por tiempo y ocupaciones, talvez no me sea posible continuar con esto.

Como ya saben, por relatos anteriores, Bárbara es una lesbiana Dominante, de clase alta, familia acomodada y de renombre en la localidad. Esto, aunado a su belleza, estudios y extraordinaria personalidad, la han hecho salir inmune, airosa, de las criticas comunes a las que son sujetas las personas con tendencias sexuales "diferentes" en lugares pequeños; donde sus habitantes tienen de igual proporción el criterio. Como es un refrán conocido, "pueblo chico, infierno grande".

En alguna ocasión, nos encontramos en un centro comercial, y al ser inevitable el contacto, seguimos el estricto protocolo de trato Amo-Amo. Detrás de ella, cargando las compras, con la mirada hacia el suelo y sin que se le permitirá decir palabra, estaba aquella chica con la que algunas semanas atrás había tenido una deliciosa sesión en el baño de aquella fiesta.

Nos despedimos con reserva y respeto mutuo, y antes de salir de aquella tienda, alguien me habló.

Disculpa que no te saludé, tú sabes que no se me permite –me dijo la chica-

Si, lo sé; no te preocupes –contesté-

Pero eso no quiere decir que no recuerdo todavía nuestra estancia en el baño, la recuerdas tú también –interrogó sonriente, picara y sumisa-

Claro, fue algo muy agradable....en fin, que se te ofrece? Porque tu ama no debe estar lejos –pregunté cortante-

No, nada....solo mientras ella paga, me escapé para pedirte un favor, necesito que revises unos contratos, de la venta de mi apartamento, ya que mi ama, quiere invertir ese capital. Ya sabes que es negocio, y te pagaré por tu tiempo...puedes? –interrogó-

Yo desconfié, una ama como Bárbara no permitiría que su sumisa se dirigiera así a nadie, menos cuando ese alguien la había usado; y en cuestión de negocios, un amo es quien ve los detalles.

Creo, pudo mas la curiosidad...o el recuerdo de aquel encuentro en el baño....por lo que accedí.

Nos vemos a las 6 de la tarde en tu apartamento –dije-

Gracias!!!...bueno, me tengo que ir...ya sabes, mi ama se da cuenta y seré castigada.

Así dejamos las cosas, hasta que llegó la tarde y tomé camino hacia el apartamento de esta chica, situado en un fraccionamiento de clase media, callado y con algunas casas no habitadas.

Toqué la puerta y de inmediato ella abrió.

Pasa, gracias por venir –me dijo-

Al entrar, no pude evitar el ver su apartamento. Al parecer estaba arreglado para una sesión especial, con velas aromáticas, vino en la mesa y algunos de los "juguetes" que de inmediato, supe, eran de su ama, Bárbara.

Esperas visita –pregunté-

No, no...contestó un poco nerviosa, al tiempo que se quitaba la bata y dejaba ver un exquisito conjunto de satín azul que no hacia mas que reasaltar lo hermoso de su piel y sus delicadas curvas.

Me ofreció una copa de vino, al tiempo que se disculpó, argumentando que iría a la habitación por los documentos. La note un poco ansiosa, pero no le di importancia. Creo fue un poco tarde cuando me di cuenta que era una "encerrona" , pues empecé a sentir los efectos narcóticos del vino, mas bien de alguna droga puesto en él.

Me sentía aletargado, y los músculos apenas respondían; cuando vi salir a Bárbara de la habitación vestida de cuero negro. Era realmente hermosa, alta, espigada, de pechos redondos, firmes, y piel como seda. Al verme drogado, fingí de mas el efecto, para no arriesgarme a otra dosis involuntaria. Por lo que no me moví, aun débil, pero sentía que tenia la capacidad, al menos de ponerme en pie.

Muy bien, muy bien...dijo Bárbara, al tiempo que azotaba contra la palma de su mano un pequeño fuete.

El amo esta indefenso, ahora...PAGARAS!!!!!....usaste a mi perra y me dejaste en mal frente a todo el mundo. –amenazó-

Ves esa cámara de video –apuntó con el fuete a lo alto de una repisa-

Pues todos sabrán como se somete a un amo, como me divertí contigo.

Su plan estaba muy bien repasado, pues ya tenían la soga; con la que su sumisa me amarraba los pies y manos. Por un momento sentí desesperación, sabia lo que tramaba... pero mi fuerza y capacidad estaban muy débiles, así que traté de disimular y fingirme totalmente indefenso, al tiempo que me concentraba por recuperar las fuerzas.

Ellas empezaron su juego acostumbrado. Bárbara azotando a su sumisa y diciéndole lo puerca que era. Y ella, gimiendo en el suelo como una perra en celo, repitiendo...."Si ama, Si ama"....."castígueme, que lo merezco".

Cuando Bárbara fijó su atención en mi, sentí un escalofrío al ver el consolador de plástico flexible color negro que traía en una mano.

Esto será para ti, no hay necesidad de decírtelo verdad?----talvez después de esto, me lo agradezcas y pases de amo a perro sumiso. –dijo al tiempo que se carcajeaba-

Me azotó un par de veces, al tiempo que su sumisa le lamía los pies con desesperación. Me di cuenta que estaba sujeto por los pies a una fuerte pata del sofá. Y por las manos, a la base de una mesa de centro, que a diferencia, no era muy pesada.

Bárbara tomó una vela, y dejó caer cera en mi pecho, lo cual realmente me lastimó la piel.

Chilla perro!!! –me gritaba al tiempo que azotaba mis piernas con el pequeño flagelador-

Yo solo sabia que si algo no hacia, en pocos minutos seria sodomizado. Bárbara me dio mas tiempo, al ir a amarrar a su "perra".

Aquí te quedas perra!!!!... voy a convertir en mujercita a este pendejo –le grito al tiempo que le daba un violento fuetazo en las nalgas-

El cuadro era por demás desesperante y grotesco (para mi) una sumisa amarrada (encadenada con candado a la sólida puerta de hierro de la entrada) una mujer bellísima que sería mi demonio destructor como Amo y una angustia, que para sinceros, no sentía desde hace muchos años.

Ahora sí, te voy a "entrenar" –dijo al tiempo que puso música, talvez para que nadie escuchara mis posibles gritos-

Yo estaba acostado, en la fina alfombra color melón, cuando ella paro encima mío. Puso sus rodillas a mi alrededor, al tiempo que hacia un recorrido por todo mi cuerpo con aquel consolador, con la intención (sin duda) de aterrarme lo mas posible.

Reuní todas mis fuerzas y di un jalón tan fuerte a la mesa de centro, que me desaté, volando los pedazos de cristal por toda la sala. Ella se desconcertó, y alcanzó a darme un fuetazo en pleno rostro (me cortó abajo del labio inferior de la boca) lo que hizo que empezara a sangrar. En ese momento, me sentí poseído por una furia como nunca antes la había sentido, de golpe, talvez por la adrenalina y la ira, el efecto del narcótico desapareció por completo (talvez por que ella estaba acostumbrada a usar una dosis en sus "victimas" de aprox. 50 kilos, y yo, pesaba casi el doble).

La tomé con mi mano ensangrentada por los cristales y la soga por el cuello, con toda mi fuerza, tal que al instante comenzó a ponerse morada por la asfixia.

No me di cuenta ni como me paré, ni como, a pesar de mi fuerza, pude levantarla al mismo tiempo con una sola mano.

Este es el día de tu juicio final perra maldita –grite enloquecido de rabia- al tiempo que su sumisa estaba en shock, al ver aquello. Tanto, que empezó a orinarse sobre la alfombra al tiempo que se pegaba a la pared.

Bárbara estaba casi inconsciente ya, por lo que al mismo tiempo de soltarla, y estar ella en el aire cayendo al suelo, le di una bofetada con todas mis fuerzas; lo que de inmediato hizo explotarle la boca en sangre.

Me vi, ensangrentado de manos y boca, y con el pecho quemado por la cera de aquella vela; al tiempo que Bárbara tosía, tratando de recuperar el oxigeno.

La tomé como si fuera una muñeca de trapo, despojándola brutalmente de su ropa.

Que haces hijo de puta??????---gritaba entre el sofoco que tenia-

Tú me querías dar un consolador, yo te daré una de verdad, perra mal nacida, le grité al tiempo que le daba un par de cachetadas mas.

Noooooo...maldito!!! te juro que te mataré....pagaré lo necesario, haré lo que sea, pero te mataré –decía al tiempo que le separaba las piernas-

De un solo golpe le introduje todo mi pene. Ella gritó de una forma bestial; al tiempo que sangraba (no imaginé que fuera virgen). En ese momento se desmayó.

Le dejé mi pene en su interior, había sido doloroso para mi también, el penetrar una vagina no lubricada y que nunca había recibido un trozo de carne.

Tome el consolador, lo escupí y de un solo golpe también, se lo metí por el culo. Despertó de su desmayo con un gemido tan profundo, como si le estuvieran arrancando el alma.

Me golpeó cuanto pudo, me araño, hasta que pude amarrarle las manos con la misma soga que ella lo había hecho conmigo.

Lloraba de rabia e impotencia, de verse con un consolador enterrado en el culo (que también sangró) y estar con las piernas abiertas en la posición de misionero, con un macho dentro suyo.

Cuado sintió que mis envestidas arreciaban, sospechó el final.

Noooooo...eso no....te doy lo que quieras...pero no lo hagas.

Tú me querías hacer una "perra sumisa" no? Le grité al tiempo que le di una bofetada-

Yo solo te estoy haciendo mujer –al decir eso sentí como un gran chorro de semen salía de mi pene y se incrustaba en lo mas profundo de su ser.

Al sentir eso, dejo de luchar y quedó callada, llorando y gimiendo.

Al pararme, vi como ella sangraba tanto como yo; no solo se juntaron nuestros jugos íntimos, sino también nuestra sangre. Pues en la alfombra se veían manchas de sangre, semen, excremento y jugos vaginales.

Tomé la cinta de la videograbadora y salí de ahí. Han pasado ya 3 años de eso, yo tuve una cortada de 3 puntos y me quedo una cicatriz permanente abajo del labio inferior de la boca. También estuve con una muñeca vendada por un par de meses.

Ella...ella se quedó con una preciosa niña que se llama Rocío, a la que adora.

A todos les dice que se inseminó "artificialmente" y por mi parte, no tengo intención de desmentir esa versión. En mas de una ocasión tuve que eludir autos misteriosos que me seguían, y tuve que cambiar mi domicilio tras una noche que unas "balas perdidas" dieron contra la ventana de mi dormitorio.

Después de eso, le envié una copia de aquella cinta, con una nota...."Si algo me pasa, tus padres sabrán el apellido del padre de tu hija y todas tus sumisas, también sabrán que eres mas mujer que cualquiera de ellas". Esas copias serian el escándalo, pues no solo dejarían ver lo evidente y conocido, por todos (que era lesbiana) si no que dejaría por tierra su reputación de ama de hierro; sin contar con el problema familiar.

No la he vuelto a ver..... y aunque fue algo sumamente violento, sé que eso es parte de su naturaleza y de la mía también.

Leviatán