Sandra, detective privado (01)

Una detective privada espía por orden de un cliente a la esposa de esté y lo que descubre la pone tan cachonda, que no puede evitar masturbarse.

Me llamo Sandra, tengo 27 años, soy de metro setenta y tres, morena ,de ojos pardos, tengo unos pechos bastantes hermosos, firmes y redonditos y un culito respingon del cual me siento orgullosa. Por circustancias de la vida después de la selectividad, me dio por estudiar para convertirme en detective privado, ya que siempre he sido muy aventurera y fantasiosa, claro que yo no sabia que esta profesión solo vale para descubrir infidelidades y algún que otro asunto de estafas y hurtos menores. Así que durante varios años mi vida fue poco emocionante en todos los aspectos, incluso en el sexual ya que con el tiempo que te lleva las vigilancias y los horarios dispares no tuve muchas oportunidades.

Mi vida cambio a partir que me asocie con otra empresa que se dedicaba a captar clientes con peticiones mas extravagantes y casos mas emocionantes. El primer caso que me pasaron fue el de la Laura. La petición venia de manos de su marido que sospechaba que su mujer Laura le era infiel y quería expresamente que fuera una mujer quien la vigilara y quien obtuviera tanto fotos como cintas de video o cualquier prueba que lo demostrara, por eso me encargaron el caso a mi, el cual acepte.

Era martes, 10:34 de la mañana, mes de julio, hacia calor y estaba en mi oficina ojeando el expediente que me habían pasado del caso. Laura (sin apellidos por razones obvias) , 30 años, sin hijos, casada con un rico empresario que apenas paraba en casa, su foto mostraba una mujer imponente, con un físico espectacular, rubia, metro setenta cinco, ojos verdes, pelo largo y lacio, me pareció una mujer realmente hermosa, no me extrañaba que su marido sospechara...

Empecé por aparcar mi coche frente a su chalet y esperar movimientos, los primeros fueron habituales, salir de compras a tiendas de ropa cara, peluquería, tiendas de arte etc..yo la seguía siempre sin que se percatara y sacando fotos de todos sus movimientos y así durante unos tres días hasta que...una noche, sabado, en que su marido estaba de viaje, salió alrededor de las doce y cuarto, llevaba un vestido gris de tirantes muy ajustado cuya falda llegaba a la mitad de sus muslos, a través de él se le insinuaban unas braguitas pequeñas y juraría que no llevaba sostén. Estaba realmente sexy. Así que supuse que se iba a encontrar con su amante.

Cogió su coche, un deportivo rojo y enfilo hacia las afueras de la ciudad, después de una media hora de carretera entro en una zona residencial y aparco el coche frente a un chalet ,en el se veía luz así que era de suponer que había alguien esperando. Laura aparco y entro con su propia llave. Era mi turno!, cogí la cámara de video y estudie la situación.

Podría subir escalando por un árbol hasta una ventana del piso de arriba e intentar buscar un sitio donde espiar, ya que habían echado las persianas en todas las ventanas de abajo. Escale y me metí justo en la habitación principal, en ella había una cama grande, con las sabanas invitando a subir en ella, supuse que los amantes acabarían ahí, así que me escondí en el armario que era enorme, tenía varias puertas y escogí la zona de los zapatos pues por experiencia es la que menos se usa en estos casos, deje las puertas lo suficiente entreabiertas para poder ver la cama y que mi cámara pudiera captar el asunto.

Se oían voces abajo, pero no pude escuchar bien lo que decían, luego escuche las escaleras y finalmente la puerta de la habitación, ya estaban aquí!,escuche una voz femenina que decía-voy a devorarte, amor, he estado esperando este momento toda la semana!-pensé que Laura era muy ardiente pero de repente escuche otra voz de mujer- si, mi cielo, soy tuya, bésame-me asome por la abertura y vi a Laura y a otra mujer bésandose apasionadamente, de pie junto a la cama,¡ahora entendía porque el marido quería que fuera una mujer quien vigilara a Laura!.Seguramente sospecharía que su mujer tenia tendencias lésbicas. La otra mujer era morena, con una figura que parecía de revista de modelo, llevaba un top blanco, dejaba entrever su barriguita y un hermoso ombligo que servia de ubicación a un piercing, y luego unos pantalones cortos ajustados en el cual se apreciaba claramente su raja marcada y excitada por el momento.

Cuando vi a esas dos pedazos mujeres bésandose y con sus cuerpos tan proximos, sentí un escalofrío por todo el cuerpo, era emocionante, jamás me había pasado una cosa igual y me dispuse a disfrutar del momento. Laura bajo sus manos por la espalda de la morena mientras la besaba apasionadamente, para acariciar sus nalgas y apretarlas hacia ella como si quisiera que no se escapara mientras Eva(así se llamaba la morena),le bajaba los tirantes del vestido dejando que este cayera por su propio peso y descubriera el cuerpazo de Laura, que como yo supuse no llevaba sostén y sus braguitas eran tan pequeñas que apenas tapaban su culito.

Eva empujo a Laura sobre la cama y se quito el top dejando ver unos senos prominentes cuyos pezones estaban duros y moraditos, se agacho sobre Laura y empezó a lamerle sus tetas mientras esta gemía de placer, agarrandolas con sus manos y masejeandolas como si quisiera exprimirlas. Para entonces yo ya me había desabrochado la bragueta de mi pantalón y busque mi coño que se estaba empezando a mojar y que me ardía de excitación.

Eva le lamía las tetas a Laura sin pausa, recorría con su lengua toda su aureola para después morder sus pezones haciendo que esta se revolviera de placer y gimiera sin descanso. a continuación bajo una de sus manos para introducirla despacio en las braguitas de Laura y busco su coño para empezar a masturbarla. A través de las braguitas se veía unos dedos expertos que sabían como trabajar unos labios empapados en flujos vaginales y que hacia que Laura gritara sin control: -sigue, sigue, mas, maaas, te amo Eva, eres fabulosa-.La mano de Eva subía y bajaba a través de las bragas de Laura, de vez en cuando la sacaba y le ponía los dedos a Laura en la boca para que esta los chupara y los limpiara de los jugos recién extraídos.

Eva despojo a Laura de la lencería y dejo ver uno de los coños mas hermosos que jamás haya visto, perfectamente depilado y con unos labios rosaditos que invitaban a besar. Resta decir que yo me estaba introduciendo mi dedo anular todo lo que mi postura dentro del armario me permitía.

La morenaza seguía trabajándole el clítoris a Laura con sus dedos a la vez que la comía la lengua, los labios, el cuello y las orejas. Laura estaba abandonada a lo que parecía el placer mas intenso que jamás haya experimentado. Mi cámara no paraba de grabar a la vez que yo no paraba de masturbarme, mientras notaba como chorreaba por mis piernas los jugos originados por mi autosatisfacción. De repente Laura quiso llevar la iniciativa y tumbando a Eva en la cama, la arrebato sus bragas y sin apenas darle tiempo a esta a reaccionar comenzó a recorrer con su lengua la hinchada raja de Eva que abrió bien sus piernas y se arqueo para así disfrutar de toda aquella atacada.

Desde mi ángulo veía el culito de laura y su rajita palpitante que con un vaiven sensual se adivinaban las acometidas a las que estaba sometiendo a su amante. Yo no podía mas, no paraba de masturbarme con mi mano derecha mientras que con la izquierda filmaba. Eva gritaba como una loca-ahhhhh!!!,siiiiiii!!!!!sigue!!!!,mientras Laura le recorría con la lengua la raja de arriba abajo y se la introducía todo lo que podía. Cuando Eva inevitablemente se corrió, Laura se puso encima de ella, juntaron sus tetas mientras le comía la lengua, Eva abrió sus piernas y Laura empezó a follarsela como si fuera un juego de rol en que Laura fuera el hombre y estuviera metiendosela.

Eva la ayudaba agarrandola de las nalgas y apretando fuerte hacia si misma para que los embistes fueran mas intensos. Sus pezones se rozaban en cada atacada y sus gemidos eran realmente de placer sin limites. Cambiaron de postura, esta vez si juntaron sus coños, metiendo las piernas de una sobre la otra y quedando cada una a un lado de la cama, se oía como los labios húmedos chocaban unos contra otros, como se pegaban y se despegaban. -ohhhhhh, esto si me gusta!!!!-decía Eva-me voy a correr otra vez cielo!!!!.

Por un lado estaba deseando que acabaran, estaba agotada de la postura incomoda dentro del armario, pero por otro estaba gozando con el espectáculo como jamás imagine.

Después de follarse la una a la otra, se sometieron a una sesión de besos tiernos y abrazos, así como cariñitos que quedaron registrados en mi cámara de video, a continuación se fueron al baño juntas para ducharse, ocasión que aproveche para salir del armario, salir por la puerta escalera abajo y montar en mi coche en dirección a mi casa. Nada mas llegar, me desnude completamente y me duche, estaba sudada, mojada y excitada por lo que había visto-¡por fin esta profesión me daba una experiencia nueva e interesante!.Después con una café con leche calentito visione la cinta dos veces, pensaba que al marido de Laura le bastaria esto para pedir el divorcio, pero por otro lado me daba pena fastidiar a Laura y Eva, ya que les había cogido cariño. Estuve toda la noche pensando y se me ocurrió una idea de la cual podía salir beneficiada mucho mejor que con los honorarios que el marido de Laura me pagaría.¿Os gustaría saber que es lo que hice?.Estar atentos al siguiente capitulo de Sandra, detective privado.

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