Saliendo de mi trabajo

Narro como fui violada una noche saliendo de mi trabajo.

Hola, me llamo Jessica, soy de México, D.F. y trabajo como programadora en una empresa de consultoría que nos envia a diferentes empresas dentro del D.F. y área metropolitana para realizar proyectos.

Lo que voy a contarles me pasó en diciembre del 2005, cuando por esas fechas me habian enviado a realizar un proyecto hasta la zona industrial de cuautitlan izcalli (no me se los nombres de las calles, pero para quienes conozcan, hay camiones que entran por la calle donde está la Koblenz, pasando una estación de bomberos y antes de pasar un rio de aguas negras).

Ya llevaba casi dos semanas trabajando allá, estaba en un proyecto con dos amigas mas, por lo general saliamos a las 7 de la noche y acostumbrabamos pedir un taxi para que nos llevara de donde estabamos hasta la autopista para tomar el camión que va al D.F.

En mi segundo viernes por algunas peticiones urgentes que me hicieron, tuve que quedarme mas tarde de lo normal, mientras que mis amigas como siempre se fueron a las 7 de la noche; como ese día habiamos salido a comer fuera, yo habia gastado mucho más de la cuenta y no había tenido la precaución de guardar dinero extra, quedandome tan solo un boleto para el metro y unos 15 pesos; lo malo fue que me di cuenta de mi falta de dinero cuando ya no habia nadie más a quien pedirle prestado.

El reloj avanzaba y yo no veía para cuando terminar mis pendientes, pasaban los minutos y veía como se iba tambien el resto del personal, hasta que casi a las 10 de la noche pasó el policía para decirme que solo quedaba yo, y me preguntaba si me quedaría mas tiempo. Como vi que los pendientes todavia eran muchos, decidí mejor irme y regresar al día siguiente a terminar, así que tomé mis cosas y salí del trabajo.

Ya estando fuera me disponía a llamar al taxi pero fue cuando me dí cuenta que no me alcanzaba el dinero. Me quedé pensando y no supe que hacer, regresé a la caseta de vigilancia para ver si el policía me prestaba dinero pero no estaba en su caseta, lo esperé un rato, unos 25 minutos y no llegó, vi que ya eran las 10:30 de la noche y como me sentia ya desesperada tomé la decisión de caminar hasta la avenida donde pasan los camiones y ver si me era posible pedir un "ray" hasta la autopista o alcanzar el último camión que pasaba a las 11:00 de la noche cerca del rio de aguas negras.

Cuando salí a la calle me dieron ganas de regresarme a la oficina pues todo estaba desierto, sin gente y para mi mala suerte no funcionaban las lamparas en la calle, todo estaba muy oscuro, solo había algunos trailers estacionados, tomando valor comencé a caminar hacia la avenida donde pasan los camiones (por donde pasa el río), únicamente se oían mis tacones, por dentro me sentía muy nerviosa y sinceramente con mucho miedo, pues tenía que caminar hasta la esquina y después dar vuelta a la izquierda para caminar 4 calles para esperar el camión.

En la esquina había varios puestos donde en el día vendían comida, obviamente a la hora en que estaba pasando todos estaban cerrados, o por lo menos eso pensaba, porque cuando iba pasando por en frente de los puestos sentí como me jalaban fuertemente de mi brazo derecho y casi inmediatamente me ponian un trapo en mi boca evitando así que se escucharan mis gritos de miedo.

No sabia bien cuantas personas eran, pero entre dos me cargaron y me subieron a la parte trasera de un auto, cuando escuché que cerraron la puerta el auto arrancó, los hombres que me tenian atrás me amarraron las manos por la espalda y me taparon los ojos con el mismo trapo con el que me habian tapado la boca, mientras me amarraban sentia como sus manos acariciaban mis piernas, mis nalgas y mis senos, quise gritar pero uno de ellos se acercó a mi oido y me dijo que si gritaba o no cooperaba me mataban, despues de decirme esto me pasó algo como un cuchillo por mi garganta, asi que preferí quedarme callada y no moverme.

Despues de un rato el auto se detuvo y me sacaron para meterme a otro lugar frio, y que olía a bebidas alcoholicas, me tiraron sobre unos cartones que estaban en el piso y sentí como me quitaban la falda de un jalón quedando con mis medias y mi bikini. Uno de ellos me tomó por las piernas y me comenzó a acariciar mientras que otro me desataba las manos y me arrancaba la blusa, empezó a manosear mis pechos y me quitó tambien mi brasier dejando al descubierto mis pechos; luego sentí mas manos que manoseaban mis piernas, mis nalgas y mis pechos, sentia sus bocas y sus lenguas sobre mi piel y no podia hacer nada.

Uno de ellos se acercó a mi oido y me dijo que no pusiera resistencia, que iba a gozar como nunca y que no gritara para que no me pasara nada, después de decirme eso me quitó mi bikini dejandome solo con mis medias, también me quitó el trapo de los ojos y por fin pude ver que eran cinco hombres los que estaban en ese cuarto, se quitaron la ropa quedando todos desnudos y se acercaron a mi, mientras uno de ellos se ponia atras de mi y me agarraba de los brazos, otros dos me agarraban las piernas y los otros dos me acercaban sus penes a la boca para que se los chupara.

Mientras me obligaban a chuparles el pene, uno de ellos se acomodó entre mis piernas y me penetró tan rápidamente que el dolor fue intenso, quise cerrar las piernas pero no pude porque me estaban agarrando. Me recostaron en el piso y mientras los otros cuatro me agarraban de las piernas y los brazos, el otro encima de mi me penetraba fuertemente, apretaba mis pechos y mordía mis pezones, cuando sintió que estaba por venirse sentí que me penetraba mucho mas fuerte todavía y al momento de venirse me agarró de mis caderas y sentí como su semen llenaba mi vagina.

Una vez que terminó, pasó otro también para penetrarme y terminar eyaculando dentro de mi, yo ya no me movía, simplemente cerraba mis ojos esperando a que todo terminara; así pasó otro mas que también eyaculó dentro de mi.

Aún faltaban dos mas, pero abrí los ojos totalmente asustada cuando escuché que ellos ya no querían penetrarme por la vagina, si no que querían penetrarme por el ano. Yo jamás había tenido relaciones anales y la única vez que lo habia intentado decidí mejor no hacerlo pues me había dolido mucho. Mis súplicas y mis llantos para que no me penetraran asi no importaron y lo único que gané fueron unas cachetadas; me pusieron en cuatro y uno de los que faltaban se acomodó detrás de mi, sentí como acomodaba su pene en la entrada de mi ano y empujó fuertemente, grité mientras se me escapaban lágrimas por el dolor que sentía, y nuevamente volvio a empujar. Ellos reían mientras decían que me habia entrado todo y que era una perra en celo, que aunque llorara, sabian que yo deseaba eso y que lo disfrutaba.

Comenzó a moverse primero despacio y después cada vez mas rapido, me dolía bastante pero de nada servia que suplicara, cuando menos lo esperé sentí cuando eyaculó dentro de mi ano. El otro que faltaba se apresuró a colocarse detrás de mi y tambien me penetró hasta que también eyaculó en mi ano.

Después de que terminaron me dejaron sola en ese cuarto y escuché cuando se marcharon en el auto, yo me quedé tirada en los cartones sollozando, sentía como me escurría el semen que salía de mi ano y de mi vagina, me sentia adolorida y humillada, y asi me quedé dormida hasta el dia siguiente.