Sagitarius - 7

Sagitarius - 7

Según salió por la puerta Susan, Sheila se quedó mirándome socarrona con los brazos cruzados…

-        Vaya, parece que has hecho buenas migas con la nueva, ¿no? -me guiño un ojo riéndose-.

-        Si, parece simpática y bastante agradable de trato…

-        Claro… simpática y agradable… "de trato"… -repitió con recochineo, añadiendo maliciosa señalándose el escote- pero algo cortita de botones...

-        La verdad es que me cae bien… -repliqué, no entrando al trapo-.

-        Si, ya me di cuenta cuando entré, que estaba apuntito de caerte bien… encima…

-        Ehhh, como te dije deje el mismo viernes tu carta en correos, a estas horas ya estará en camino -cambié de tema-.

-        Bien -se puso seria-, sabes, sigo pensando que ya te he visto antes de que vinieses al pueblo, pero sigo sin recordar donde ha sido, es bastante frustrante. Quería preguntarte una cosa sobre Askella, una estrella Banco-azulada, la estrella más brillante de Sagitario…

-         Askella es una binaria Blanca, pero no es la más brillante, esa es Kaus Australis, que si es blanco-Azulada… -repliqué antes de pensarlo siquiera-.

-        Si, Kaus Australis es Blanco-azulada, y la más brillante de todas las estrellas de la Constelación de Sagitario… Veo que tu conocimiento del cielo es bueno…

-        Bueno no se si… -me interrumpió-.

-        Lo es, de hecho, haciendo memoria de todas las veces que hemos hablado, me he dado cuenta de que tu "especial" conocimiento de Sagitarius, es bastante impresionante, por no decir… "casi milagroso"… -hizo con los dedos indicie y corazón el signo de las comillas-. ¿Me lo vas a contar?, porque de algún sitio has tenido que sacar todo eso.

-        Está bien, aunque no me vas a creer…

-        Prueba… -me miro muy seria cruzando los brazos bajo su pecho-.

-        Vale, pero primero no me vas a creer, y segundo te vas a reír… -le dije serio y me encogí de hombros-.

-        Tu cuéntamelo, no me voy a reír…

-        Está bien, lo último que recuerdo en Inglaterra, es una intensa luz blanca que me cegó, luego llegó la oscuridad y lo siguiente fue despertar en el hospital sin saber que había ocurrido... Allí fue donde me enteré de que había estado flotando en el Canal de la Mancha y que aparecí inconsciente en una playa…

-        Si, lo último lo sabía… ¿pero no recuerdas nada de nada… aparte de eso?

-        Bueno, hay un lapsus de bastante tiempo entre esa luz y el que me encontrasen… He tenido algún flash de estar en algún sitio ovalado, cerrado, metálico y con elementos… digamos que extraños… pero no se… -titubeé un poco al ver su sonrisa y las ganas en sus ojos de soltar la carcajada…-.

-        Sigue… -alzó la mano con expresión de estar cada vez más divertida-, prometo no reírme, aunque te hayan abducido…

-        Bueno, tengo mi teoría… sabes que tenemos una gran capacidad de memoria... por explicarlo de alguna manera, digamos que mucha de la cual esta desaprovechada con información anticuada que realmente no nos sirve para nada…

-        Si, muchos recuerdos que tenemos no es que sean precisamente útiles… -admitió-.

-        Bien, como te he dicho, tengo Flashes… me veo en el interior de una especie de objeto ovalado… creo que de algún modo estaba averiado y para repararse me grabo en esa parte mi memoria la cartografía galáctica eliminando todos mis recuerdos anteriores a ese instante, bloqueándolos de algún modo para que no lo recuerde tampoco… Pienso que mi mente algunas veces es capaz de acceder a esa información, que se filtra, y es por lo que se todo eso que supuestamente no debería de conocer…

-        En serio Eddy… ¿Me tomas por tonta?... "El vuelo del Navegante…", ¿de verdad…? -su gesto cambio, desapareciendo todo rastro de diversión-.

-        Ohhh… -me rasqué la nuca riéndome-, ¿has visto la película?

-        Si Eddy, la he visto, igual que otras muchas o series, como Contact, 2001, Alíen, ET, expediente X… de modo que ahórratelo. Estoy hablando en serio, no estoy bromeando y desde luego, no es gracioso… -su gesto era muy serio-.

-        ¿Qué quieres Sheila…? -pregunté directamente-.

-        Que me expliques de que la conoces tan bien…

Antes de que pudiese pensar en algún modo de escurrir el bulto para no contestar, entró Amy de uniforme, saludando con gesto alegre. Afortunadamente para mí primero no capto lo que hablábamos, y segundo, tras decirme que por favor le diese un vistazo a su coche patrulla porque sonaba "raro", se incluyó en la conversación que teníamos su prima y yo…

-        ¿A quién conoce bien Eddy? -preguntó Amy a su prima sonriéndonos-.

-        A la nueva del centro, a Susan Neubauer… cuando he entrado estaba bastante encima de Eddy… -le mintió-. Que, por cierto, parecía mas interesado en mirarla a ella que a nosotras el viernes… -le dijo en tono socarrón a su prima, evitando explicar que era la verdadera pregunta-.

-        ¿A nosotras el viernes? -le preguntó a su prima en lo que pareció un tono preocupado, mirándome de reojo-.

-        Si, me pareció verle de refilón cuando se marcha mientras estábamos divirtiéndonos con aquellos chicos. No estaba segura del todo si era él o no, así que como tenia que verle por una carta que le di el viernes, he aprovechado para preguntarle si era él…

-        Y… ¿era?... -inquirió Amy un tanto nerviosa-.

-        Si, era yo -contesté para tratar de controlar la conversación, que estaba marchando en una dirección que tampoco me convenia-. Tenía sed y entre a tomar algo después de salir de cine. Me iba cuando debió de verme Sheila, no os dije nada porque estaba cansado y quería irme pronto a casa, además, os estabais divirtiendo y no quise molestaros… Bueno… dejemos esto a un lado, que se me hace tarde, y vamos a ver tu coche -repliqué, cortando la conversación y poniéndome en marcha en dirección al patrulla-.

Sheila estuvo hablando con Amy durante todo el rato que estuve comprobando el coche, después de unos quince minutos di con el problema, algo bastante simple de solucionar, aunque tendría que subir el coche al elevador, que en ese momento estaba ocupado con otro vehículo. Le dije a Sheila que acercase a su prima a la oficina del Sheriff, que luego cuando terminase con el coche yo mismo se lo acercaría… Cuando las dos se marcharon respire aliviado, no tenia las menores ganas ni de hablar con Sheila sobre lo que me pregunto, ni con Amy sobre ese viernes por la noche… Lo de Sheila me preocupo, mientras trabajaba trataba recordar todas las veces que había hablado con ella y lo que pudiese haberle dicho, sorprendentemente había estado soltando pequeños datos inconexos cuando hablábamos, y dado que parecía estar normalmente trabajando hacia Sagitario, casi todo lo que dije era en esa referencia. Por si solos, en ese momento no tenían mayor importancia, eran meros comentarios sin conexión o sentido, por lo que no suponían el menor problema. Sin embargo, tras lo ocurrido con el asteroide y los datos que le di sobre el sistema de la estrella HD 172051, Sheila debió de ponerse a pensar, reuniéndolos, y ahora se veían muy diferentes. Por separado no eran nada, pero juntándolos y poniéndolos en perspectiva, parecían indicar ciertas particularidades "desconocidas". Aunque por suerte para mí, algunas de ellas difícilmente podrían ser verificadas con la actual tecnología disponible, el problema podía venirme por el resto, que si eran comprobables si eras lo suficientemente inteligente como llenar los huecos entre esos datos, sabiendo luego como, cuando y donde mirar… Y no tenia muchas dudas de la capacidad de Sheila para ello… Como ya comenzaba a ser costumbre, sabia positivamente que es exactamente lo que se encontraría Sheila sí miraba, pero no el porque tenia esos conocimientos…

Cuando terminé de trabajar, llevé el coche patrulla de Amy a la oficina del Sheriff, entregándole las llaves del mismo a la secretaria. Luego me fui directo donde Johnny con la intención de cenar algo rápido, un filete, patatas y huevos, para después largarme a mi casa a la carrera. Tenían un montón de gente últimamente a la que no tenia la menor ganas de ver. Estaba a mitad de la cena cuando entró Susan, sentándose a mi mesa tras pedir la suya en la barra… Durante la misma estuvimos hablando y riéndonos, atrayendo mi acompañante las miradas de todos los hombres presentes de forma mas o menos disimulada desde el momento en que entró. Estaba realmente espectacular, la ropa que llevaba difícilmente podría estarle más ajustada, de hecho, algo que procuraba evitar mirar a toda costa era como sus pechos parecían estar impacientes por romper los botones de su blusa…

Estábamos terminando de cenar cuando entró Amy, se acerco a la barra, hablo un minuto con Johnny para luego marcharse. Su gesto cambio cuando nos vio a Susan y a mi sentados juntos cenando, frunció el ceño, no dejando de observarnos de reojo mientras hablaba con Johnny. Cuando se marchaba me saludo con un gesto de cabeza… Tras cenar Susan y yo nos marchamos juntos, ya que su casa estaba de camino a la mía. Al llegar a su puerta me ofreció entrar invitándome a tomar un café o una copa, lo que prefiriese… Rechace la oferta, siendo plenamente consciente de lo que significaría el hecho de entrar y como terminaríamos ambos, pude ver su desilusión cuando lo hice, aunque se repuso rápido y se despidió de mi dándome un suave beso en la mejilla. Seguí hasta mi casa, donde me abrí una cerveza para tomármela tranquilo antes de acostarme… pensando en todo lo que había ocurrido ese día, y especialmente en el problema con Sheila… Cuando mas tranquilo estaba, llamaron a la puerta, era Amy, con una cara bastante… extraña… para ser ella… Me aparté para que entrase, luego sin decir nada le ofrecí una cerveza fría… Luego nos fuimos al salón, sentándonos en el sofá a bebérnoslas…

-        Esta noche has desperdiciado una buena oportunidad con esa nueva del centro… -dijo Amy mientras daba un trago con sus ojos fijos en mi-.

-        No te he visto… -la mire sorprendido-. Pero bueno, sinceramente, yo creo que no he desperdiciado nada, ya que no me interesaba lo que me ofrecía…

-        Es muy guapa… -empezó a rodar nerviosa su cerveza en las manos-.

-        Si, es preciosa, además si quieres también te admitiré que tiene muy buen cuerpo y sabe perfectamente lo que quiere…, pero no me interesa… aunque no te negare tampoco que al revés quizá no sea igual -vi como Amy torcía el gesto-.

-        El viernes no pasó nada con el tío con el que me viste bailando… -cambio de tema-.

-        No te he preguntado nada…

-        No, pero quiero explicarme. Tuve una discusión con Nick, nos encontramos con el en otro local, no sé porque ese gilipollas se pensó que me interesaría lo que hacia allí con una pelirroja con más tetas que cerebro. Incluso el imbécil se me insinuó para que volviésemos… si no llega a ser por Sheila le parto la cara allí mismo…

-        Para haberlo visto por un agujerito… -solté la carcajada, haciéndola sonreír, aunque cuando comenzó a hablar volvió a su gesto serio-.

-        Cuando al local donde nos viste iba cabreada. Cuando esos cuatro se nos acercaron no me pareció mala idea el divertirme un poco… -su vista estaba fija en la cerveza-. Se que no tenemos nada serio, pero no debí de hacer aquello…

-        Muy bien, si, sé que no tenemos nada serio entre los dos y por ello te repito que no te he preguntado nada, ni tienes porque darme explicaciones…

-        Y yo te reitero una vez más, que quiero explicarme y disculparme contigo por lo que pasó. Reconozco que se me fue la mano con ese chico, no paso nada mas que unos besos y alguna caricia, cuando trato de pasar a mayores le corté y me fui de allí.

-        Muy bien, disculpas aceptadas, aunque no tengas porque dármelas… Nos gustemos, estemos acostándonos o no, lo cierto es que no tenemos nada… y eres libre de hacer lo que quieras…

-        Lo sé, pero considero que, si nos estamos acostando los dos, y hasta este momento ambos teníamos la intención de seguir con ello, lo que hice como mínimo es una falta de respeto…

-        Amy, nos conocemos hace bastante, lo suficiente como para saber que has venido por algo más… ¿Qué es lo que quieres realmente?

-        Esto…

Dejo su cerveza sobre la mesa y se sentó sobre mí, mirándome a los ojos mientras se desabotonaba la camisa. Luego paso a desabrocharme los pantalones… Cuando fui a decir algo simplemente me hizo callar poniéndome un dedo sobre los labios y pidiéndome que tan solo me dejase llevar. Se quito la camisa dejando sus pechos al aire, sujetándome luego la cabeza, acercándomela a ellos para que se los besase y lamiese… Con movimientos de contorsionista por parte de ambos, Amy consiguió que me desembarazase de mis pantalones y el bóxer quedando ambos enredados en mis botas. Mi polla quedo completamente tiesa a su disposición. Tardo menos de un minuto después de eso en comenzar una felación mientras me miraba con ojos de loba y se quitaba a su vez el resto de su ropa hasta quedar completamente desnuda.

Cuando sintió que me iba a correr, Amy me apretó de los huevos cortándome el orgasmo de raíz. Después de ello se incorporó, sentándose sobre mí, guiando con su mano mi polla dentro de su encharcado sexo, introduciéndoselo lentamente mientras gemía. Estaba cabalgándome mientras que nos besábamos con sus manos sobre mis hombros, por mi parte me turnaba acariciándole la espalda, el culito y masajeaba sus pechos. Tardo poco en alcanzar el orgasmo, tras el cual acelero sus movimientos, apretando mi polla con sus músculos vaginales para obligarme a alcanzar el mío. Me vacié dentro de ella… fue cuando me di cuenta que en esta ocasión, ambos habíamos cometido un error, no habíamos usado protección… Se lo hice notar y me tranquilizo asegurando que ella sí que tomaba sus precauciones… Después de eso nos fuimos a la cama, besándonos y acariciándonos por el camino, follando los dos durante gran parte de la noche, al final terminamos abrazados, con su cabeza sobre mi pecho…

-        Quiero más… -me dijo repentinamente, levantando su cabeza para mirarme-.

-        Amy, quizá pienses que soy una especie de Superman, pero te aseguro que ya no puedo ni con mi alma… -la mire sonriéndole-.

-        Jajajaja, no tonto -me dio un beso de tornillo que me dejo sin aliento-. Me refiero a esto que tenemos… Quiero que seamos algo más que amigos que se divierten juntos…

-        En otras palabras, ¿quieres comenzar una relación seria? -le dije mirándola, vi como su gesto se tornaba dudoso-.

-        Joder… que complicado… -replico, enterrando luego su cara en mi pecho-.

-        ¿Complicado…? -la verdad que es no entendí el comentario-.

-        Si, bueno, había pensado en avanzar un paso más, ir quedando en público, ir viendo como nos va, dar un pasito más allá, seguir siendo discretos, no ir muy rápido y… -la interrumpí-.

-        Oye para, para… que no te estoy proponiendo matrimonio, solo me refería a empezar a quedar los dos ante todos y desde luego no a dedicarnos a ir follando por las esquinas delante de todo el mundo…

-        Bueno… esa ultima parte lo mismo quizá no me importe… -su mano comenzó a acariciarme la polla-.

-        Amy, en serio que no pued… -me beso evitando que hablase-.

-        Pues esta parece opinar lo contrario -replico comenzando a masturbarme-, ya está en pie de guerra…

Ni que decir tiene que hice el esfuerzo, aunque reconozco que casi todo el peso del polvo lo llevo ella. Se monto sobre mi comenzando nuevamente a cabalgarme mientras nos besábamos, durmiéndonos poco después de alcanzar ambos un nuevo orgasmo, en mi caso, incluso algo doloroso… Por la mañana cuando desperté, Amy no estaba ya en la cama, pero para mi sorpresa me la encontré en la cocina, completamente desnuda preparando el desayuno para ambos. Se fue a trabajar desde mi casa, solo que en lugar de salir como siempre por la parte de atrás, lo hizo por la delantera, de modo que, seguro que alguien la tuvo que ver, lo que suponía que en poco tiempo la noticia de que habíamos pasado la noche juntos, se habría extendido por todo el pueblo. La confirmación la tuve por la tarde cuando regresé al taller después de hacer el reparto del correo que recogí en la ciudad. El Sr. Tollison primero estuvo pinchándome un rato y pasándoselo bien a mi costa, luego me felicito, para posteriormente ponerse serio cuando me dijo que Nick había estado en el taller buscándome y me advirtió que tuviese cuidado… No hacía falta ser muy listo para saber porque quería verme…

Y si, efectivamente Nick quería hablar conmigo sobre Amy, me pillo cerrando el taller por la noche para ir a cenar algo donde Johnny. La verdad es que la conversación fue bastante desagradable, porque Nick no parecía aceptar el hecho de que Amy no quería volver a saber nada mas de él, y viendo que no aceptaba renunciar a comenzar nada con ella, paso a las amenazas. Por suerte, Dave, otro de los ayudantes del Sheriff acertó a pasar por allí y corto la discusión de raíz, obligando a Nick a marcharse, no sin que este antes de largarse me hiciese un claro gesto de amenaza… Lo cierto es que no me preocupaba mucho Nick por si mismo, sabia que nunca se atrevería por si solo a ir más allá de comportarse como un gallito, pero con sus "amigos" a su lado, la cosa podía ser bastante más complicada, ya que un par de ellos eran bastante camorristas. Y este fue solo el primero de los problemas que repentinamente tenía… En las dos siguientes semanas la vida se me complicó bastante…

No creo que haga falta decir que Amy tardo un día en enterarse y montar en colera contra su ex, y no sé porque, en lugar de ir a por Nick, pareció centrar toda su atención que mi para, según ella, asegurarse que no me pasase nada… De repente mi flamante… digamos que novia, pasaba a buscarme cuando salía de trabajar, y parecía librar justo cuando tenía que hacer mis recorridos con el correo, por lo que también me acompañaba, según ella, para avanzar con lo nuestro. Para terminar de arreglarlo, prácticamente parecía que se hubiese mudado a mi casa, casi todas las noches las pasaba allí conmigo. El problema con esto vino por mis constantes pesadillas, antes de ello podía quitarles importancia, pero con ella a mi lado cuando me asaltaban, despertándome… comenzó a preocuparla, y mucho… Si algo tenía Amy, es que era excesivamente protectora con los que quería, y yo había entrado en ese rango… ahora imaginad el resto con esa situación…

Otra que me cayó encima fue Sheila en cuanto se enteró que su prima y yo estábamos empezando a salir. Creo que le alegro bastante la noticia, especialmente porque de este modo parecía pensar que me tenía mucho más a mano, lo que me preocupaba, por su afán por hablar conmigo sobre mis conocimientos, algo que no dejaba de ser un problema, porque no sabía que contestarle, ya que no tenía respuestas. El siguiente problema resulto ser uno inesperado, Susan, la nueva científica del centro. Con ella pensé que tras conocerse que estaba saliendo con Amy, dejaría de ser tan "indirecta" con sus intenciones para liarse conmigo, craso error, resulto justo todo lo contrario. Si bien ya no iba tan a degüello como antes y ahora era mucho más comedida, sin embargo, siguió con sus intentos de liarse conmigo. Aunque de modo mucho mas sutil, ni a Sheila, y lo que era aun peor, a Amy, les pasaron desapercibidos.

CONTINUARA