Romance Parroquial 3 (amor puro e interferencias)

-Finalmente tengo un hombre y le voy a dar todo el placer que él me da a mí, relájate amor.

Chupó con ganas y pajeaba mi mástil con entusiasmo, me volvió tan loco ver ese objeto de deseo con mi verga en su boquita, jamás podría haber imaginado que sucediera esta noche, no pude aguantar mucho.

-Voy a acabar amor, salte por favor

-Dame todo, es mìo—y se aferrò fuerte al tronco y succionò desesperada

Acabè de una forma como hacìa tiempo no lo hacìa, me ponìa terriblemente que ella solita se hubiera prendido a mi sexo con tanta pasión y el esfuerzo que hacìa para poder meterla en su boquita. Le llenè la boca, lo paladeò, lo tragò todo, se pasò un dedo por los goterones del labio inferior, lo mirò y también lo chupò.

-Podría llegar a hacerme adicta a esto—mirándome satisfecha y orgullosa, -ahora te siento más mío, como pude ser tan tonta y haberme perdido todo esto, has cambiado mi vida y mi visión de varias cosas en pocas horas, realmente vivía en la luna de Valencia como decía mi madre. Como caí con ese desgraciado infeliz, he sido una ingenua total.

-No sè si buscarlo para agradecerle hermosa Emi, gracias a eso tengo una dulce belleza con mucho para descubrir con 27 añitos y que se està transformando en una amante insaciable, todo un hallazgo!!……………Ayyy!!!  No me pegues brujita jaja

-Deja de decir tonterìas y ven conmigo a la cama que supongo te he dejado bien relajadito

-Si amor—me fuì con ella, no daba más de felicidad, me había raspado un poco con los dientes pero le había puesto unas ganas que no la cambiarìa por nadie. Y succionó de tal forma que creì que me sacaba los huevos por la punta de la polla.

A la mañana siguiente me desperté y cuando vì esa bella durmiente destapada tomè conciencia donde y con quien estaba se me puso el nabo como el obelisco, esas tetitas rosadas, redondas y suaves, casi no se distinguían los pezones del resto,  esa braguita infantil con ese monte de venus que me volvìa loco, reprimì mi oscura intención y me levanté con una erección dolorosa, me tuve que distraer con otra cosa hasta que se me bajara y pudiera orinar, busquè mis boxers secos y me duchè, me vestì tomé las llaves de Emi y me fui a la panaderìa a comprar facturas, volvì y Emi semidesnuda como la dejè con el cepillo de dientes en la boca, puso una sonrisa espumosa al verme entrar, que bonita, hablaba gangosa, fue a escupir y ya venìa hablando desde el baño –Que susto me has dado!!! Pensè que ya me habìas abandonado --decía fingiendo puchero y me abrazó fuerte, nos dimos un besaso, y la apreté entusiasmado tomàndola de la cola……

-Para, para, aprovechador, ya me estas atacando de nuevo con ese cacharro que te gastas?

Dejame adaptar amor, ayer me descalabraste, acaso viste el tamaño de mi chochito y lo que tu tienes? Me encanta pero debo adaptarme, incluso mi boca, anoche besando tu cosita casi me desencajo la mandíbula, vamos, que te tengo que durar un poco mas no? Solo tengo 27 cielo.

-Perdoname dulzura pero espero te adaptes rápidamente porque te veo y pierdo la razón, nunca me sucedió esta atracción, pienso acosarte tesoro.

-Lo dicho, eres un sátiro, ahora voy a ducharme y voy a poner llave en el baño abusòn!!

Y salió corriendo y riéndose al baño, en serio me había enamorado de esa chica, con todo lo que me dolió la traición de Teresita, estaba agradecido que todo resultara asì, ahora me doy cuenta de la diferencia de estar entusiasmado y enamorado

-Quieres que te enjabone amor??!!!

-Fueraaa!!! O llamo a la policía degenerado!!!

Se asomó bajo el dintel de la puerta del baño para ver donde estaba yo, la tomè del costado, la levantè en el aire y le dije eres mìa, nadie va a salvarte, ella gritaba divertida y pataleaba, la llevè a la cocina y la sentè en la silla.

-Te tuve que traer a la fuerza para que me hagas el café que me prometiste anoche, no cumples con tus ofrecimientos

-Mira eh? Voy a llamar a mi hermana para recriminarle por haberte enviado sin haber investigado a fondo tus antecedentes criminales, seguro eres un abusador registrado, el café te lo haces tù y también me lo haces a mì, compraste masitas con crema pastelera? Son las que a mí más me gustan

-Comprè solo para mì, vos querìas algo?

-Mira Don Juan, si pretendes volver a disfrutar este cuerpito me daràs las facturas de crema pastelera que escondas en esa bolsa, asì que tu evalúa que te conviene

-La bolsa es tuya cariño y ya te preparo el café mi dueña

Mientras desayunábamos felices llamò su hermana, como tenía los dedos con dulce presionò con el meñique el manos libres

-Holaaa hermanita del alma, no me has llamado, tuviste noticias de tu príncipe salvador?

-SSShhhhh!!!! Cállate Manuuu por favor!!

-Porqué, no me digas que no lo hizo, prometió llamarte.

-Síiiii, hizo todo y más, ya hablaremos de eso, ahora no puedo.

-Hola Manuela, te mando un beso, mil gracias por enviarme a distraer a tu hermana, he hecho lo mejor que pude!!!!

-Cállate bribón!!! Manu, a quien me has enviado?, es un caradura aprovechador

-Bueno, bueno, bueno, ahora entiendo picaruela, tan temprano y están juntos? Ya veo, no han perdido el tiempo, al fin voy a verte sonreir después de tanto tiempo, espero que sepas agradecerme y vengan ambos en un rato a almorzar a casa, necesito explicaciones y aclaraciones detalle por detalle, soy tu hermana mayor y debes obedecerme, los quiero aquí a la una, Edi, trae vino y postre, es lo mínimo si pretendes entrar en esta familia.

-Manuelaaaa!!!!

-Los espero hermanita- y cortò

Colorada colorada estaba Emily, y parecía que le habían salido mas pecas

-No me gastes que va incluido en el uso del cuerpito eh?, y no te alíes con mi hermana para molestarme, no querrás verme enojada.

-Que postre le gusta a Manuela tesoro? Llevo vino tinto y blanco o solo tinto? Como se llama tu cuñado? Tienen chicos?

-Mira, no me distraigas que saludaste a mi hermana a propósito para divertirte a costa mìa maldito novio.

-Asì es, quería ponerte en evidencia, no vaya a ser que me tengas como un amante oculto para no formalizar conmigo el dìa de mañana abusàndote de mi ingenuidad.

-Eres un atorrante pero te voy a perdonar porque te amo.

Así las cosas, la relación se fue afianzando, su familia era realmente la gente donde uno desearía pasar las fiestas siempre, cálidos, buenos, divertidos, yo también les caí bien y me querían con Emily y hasta comenzaron a jugar con nuestros nombres como los de Hollywood Bennifer por Ben y Jennifer, Bradgelina por Brad y Angelina y nosotros Emidi, la pasaba bárbaro con ellos y mi cuñado era un gordito afectuoso e inteligente.

A Emi también le encantó mi familia, hacían causa común con mi madre y me molestaban todo lo que podían.

Emi se mudó a vivir a mi ático, era mas amplio y tenía mejor vista que su piso, ella estaba tan feliz con esa terraza y las plantas que iba recortando horas a su presencia en la academia de baile para disfrutar mas de su hogar, yo extasiado con tenerla. Alquiló su piso porque era suyo propio de antes de casarse con  el imbécil. Ella joven como era, había amasado una pequeña fortuna con sus actuaciones solistas antes de su lesión y luego la academia era una fuente incesante de ingresos, no me necesitaba a mí salvo que cambió de contador y mi estudio llevaba sus cuentas ahora, una cliente pésima porque no pagaba jaja.

Vino a conocer mi estudio, le presenté a mi gente, entre ellas a las contadoras que eran dos bonitas morochas, cuando pasamos a la privacidad de mi despacho me pellizcó y me advirtió –Ojo, con tus contadoras galán porque tu vida no valdrá nada si te pesco, no se si he sido clara.

–calma Otella, ya sabes el viejo refrán amor “donde se come no se ……………..”, las tengo hace un par de años colaborando, son hiper eficientes, en algún momento me abandonarán para abrir su propio estudio o quizás en ese momento las asocie para que no me dejen, nunca les he dado lugar ni lo he buscado, he limitado la relación al ámbito laboral, solo tú eres lo que me importa en la vida.

En otra oportunidad, fui a buscarla a su academia y conocer a su gente y el lugar, me encantó con esos espejos gigantes de pared a pared, esos barrales de roble lustrado, esos pisos de pinotea hermosos y cálidos, todo hacía juego con ella tan éterea, fina y elegante en sus modales y su aspecto.

Me presentó a sus compañeras profesoras, mayores que ella, a un par de profesores que parecían otras chicas mas y por último me presentó a un tipo Pierre, que había pasado a visitarla hacía un rato, no me cayó bien ni yo a él tampoco cuando me presentó como su novio.

-Mucho gusto, soy Pierre, de modo que tu eres su novio? Emi, tu no estabas casada con otro tipo?

-Ya me divorcié, eso no funcionó

-Me hubieras avisado, yo estaba en la fila

-Nunca estuviste en la fila Pierre, búscate otra bailarina jaja

-Mucho gusto, soy Eduardo y recuerda Pierre, nunca estuviste en la fila y ya no hay fila.

-Adios Pierre, ya nos veremos en otra oportunidad, me voy con Edi

Tomé posesivamente a mi novia, le dí un piquito y nos fuimos saludando con la mano a los demás.

-No me gusta

-No te gusta mi academia?

-No me gusta ese tipo Pierre, te desea y tiene una mirada oscura.

Emi se puso nerviosa –Mi amor, mas tarde te cuento, no me importa absolutamente nadie, para mí tu eres mi hombre, nunca me sentí de nadie pero ahora sí tuya de tal modo que no le des importancia.

-Amor, no temo por ti, temo por él y sus intenciones, no estaba feliz con nuestro noviazgo, te quiere para él.

-Mas tarde hablamos, ahora me voy a la depiladora, a ultima hora nos vemos en casa.

-Tengo buenos dientes pimpollo, yo podría depilarte.

-Vete puerco!!!!!

Nos vimos a la noche, le preparé una rica cena y comenzamos a conversar de varias cosas pero veía que ella estaba inquieta y no muy atenta, finalmente, le dije

-Emi, deja de dar vueltas y habla!!!

-Mira, ese hombre Pierre, siempre estuvo detrás mío pero nunca lo acepté, si bien tiene un porte de modelo con sus músculos y su postura, nunca me convenció su forma de ser.

Me cuesta decirte esto pero él fue con quien perdí la virginidad, sabes que el quería continuar algo conmigo que para mi no era nada porque yo ni sabía como fue la pérdida de mi virtud como te conté.

Luego él, se fue durante 5 años contratado por un cuerpo de ballet alemán, cada tanto me escribía como para estar presente y que supiera que él iba a volver por mí. Nunca le dí importancia porque no me interesó nunca. Ël fue un accidente.

Volvió y yo volví a rechazarlo, inmediatamente después me puse de novia con Miguel, él no vino a la fiesta, estaba ofendido, ahora volvió a aparecer, aunque se haga el tonto sé que él debe haberse enterado que me separé, lo que lo debe haber sorprendido de mala manera es que yo volviese a estar ocupada. Eso es todo amor, ya puedes quedarte tranquilo.

-Tu crées? Bueno, espero que se mantenga a una distancia prudencial, tu esposo ya conoció como me gusta practicar judo, puedo muy bien ensayarlo con el bailarín.

-Ven mi bestia indómita, haz un poquito de judo conmigo y ponme de espaldas.

-Tú lo pediste.

Esa situación me puso especialmente caliente, quería reafirmar inconscientemente que ella era solo mía.

Esa noche comencé con una lamida de tetillas, continuando el menú con una lamida de clítoris, elle comenzó su serie de orgasmos y en ese momento enterré mi dedo medio en un frasquito de vaselina que tenía en la mesita de luz e inmediatamente en medio de sus temblores se lo enterré en el culito, ella tragó aire y abrió los ojos, comencé a meterlo y sacarlo, al mismo tiempo dos dedos de la otra mano se enterraron en su hermoso y empapado coñito, comencé a fregarle su aspero punto G, retiré el dedo de su anito, enterré dos en el frasco de vaselina y volví a enterrarselos en su orificio, ella con dedos adelante y dos atrás acababa una y otra vez en forma desatada, no podía con su vida y yo ardía de deseo, ese día sería enteramente mía, había tenido mucha mesura pero ese Pierre me había alterado malamente.

Mi Emi no daba mas de los orgasmos que había tenido, en ese momento penetré su almejita hasta lo mas profundo.

-Hijo de putaaaaa, me vas a matarrr, sátiro, violador, aprovechadooooorrr!!!!, ---Mientras la bombeaba sin descanso le metí 3 dedos en el culo y comencé a moverlos, ella deliraba y a mi me volvía loco, cuando tuvo su último estertor, la dí vuelta, le dí un cachetazo en su marmórea nalga, le abrí los cantos y bañando mi trabuco en vaselina le deslicé por su ojetito virgen la cabeza y un poco más, ella dobló sus brazos, tironeó las sábanas y aplastó su cara contra el colchón mientras gruñía, en ese momento, retiré casi del todo mi glande y volví a empujar hasta el final.

-Me vas a partir en dooooosss animal, brutoooo, saaaalteee ¡!!!

-Tranquila mi amor, ya te enterré todo lo que tengo en el culo, relájate, he soñado con este culito y ya nada podrá detenerme porque es mío y voy a destrozarlo amor.

-No te muevas delincuente, me arde y siento que me va a explotar el conducto, no puedo creer me me hayas perforado el culo, nunca creí que te animarías, no voy a poder sentarme por un mes.

-Ahora voy a comenzar a moverme muy despacio tesoro mío y vos vas a marcar la velocidad si te gusta

En ese instante comencé a acariciarle su botoncito de adelante, ella gimió, continué y ella ya continuó gimiendo mas fuerte y comenzó a moverse, yo quieto y ella culo para adelante, culo para atrás, mientras yo continuaba pajeándola con vigor……….

-Síiiiii, me gustaaa, dame fuerteeee cabrón desgraciado, rómpeme el culooooooo, máasss rápido síiii

Yo le daba como para romperla y al mismo tiempo le daba unos suaves chirlos en las nalgas, percibía una sensación de poder inmensa, ahí la sentí totalmente mía, como amaba a esa mujercita, podía dar la vida por ella sin pensarlo un segundo.

Cuando creía que no se podía sentir más, llegó esto, ella tenía mi polla prensada por ese culito virgen que parecía que me la iba a desintegrar y me vino un orgasmo tan fuerte que sentía que se me iba la vida con cada chorro de esperma que le echaba, la rebalsé realmente y ella tuvo un último orgasmo tan impresionante que prácticamente se desmayó planchada sobre la cama, yo caí fusilado a su lado diciéndole al oído, -nunca sentí esto mi amor, mi vida es tuya, gracias- ella continuaba cuasi desmayada, con un hilo de baba deslizándose por la comisura de sus labios y sus ojos laxos mirándome agotada, rendida.

En otro lugar, un ahora profesor de danza, acodado en la barra, tomaba su tercer aguardiente cubano y mascullaba “putilla, yo te hice mujer, volverás a ser mía perra”