Rockeando al Destino Capítulo 20

!ÚLTIMOS CAPÍTULOS! Un fin de semana de amor para nuestros protagonistas, pero deberan regresar y enfrentar a la realidad, su felicidad se verá truncada...

CAPÍTULO 20

AMOR Y ENVIDIA.

Sebastián y Cristian se encontraban abrazados en la cama, desnudos envueltos entre las sabanas, dormidos, curiosamente soñaban lo mismo, estaban en una playa, a la luz del atardecer, ambos vestidos de blanco, descalzos, mirando ocultarse el sol, junto a ellos Becker y un pequeño niño que corría entre las olas del mar, ambos se besaban y abrazaban solo eran ellos, la arena, el atardecer hermoso, el mar, su ruido y ese pequeño niño, ese sueño era muy realista, muy cálido, muy pacifico, cuando su sueño se fue interrumpido por una llamada; Cristian y Sebas se despertaron, miraron el reloj y eran casi las 9 de la mañana, Cristian desnudo se levantó de la cama para contestar el celular, Sebastián lo miraba con deseo y ansias, pues aun no podía creer que haya entregado por primera vez a Cris, que lo valoraba como persona tanto física y sentimentalmente, Cris contestaba y decía.

– Hola, ¿Qué sucede?

– Su mamá al teléfono le decía. – Buen día hijo, supongo pasaron la noche juntos, solo quería avisarte que el desayuno se está sirviendo, les guardamos pastel, y en unas horas tu hermana se va de luna de miel, así que espero estén aquí.

– Cristian mirando a Sebas en la cama decía. – Ahí vamos mamá, gracias por avisarnos, buen día.

– Cristian colgó y le dijo. – Amor, tenemos que ir a desayunar.

– Sebastián sonriéndole muy feliz le dijo. – Quiero desayunar algo muy rico.

– Cristian se colocó sobre él y besándolo le quito lentamente la sabana, Sebas con sus piernas abrazó la cintura de Cristian diciéndole. – Desayunemos.

– Cristian con una suave mordida de labio le dijo. – Tenemos tiempo para un rato juntos tú y yo.

– Él tomo a Sebas por la espalda y lo jalo hacia adelante, quedando ambos pecho a pecho besándose, mordiéndose ligeramente los hombros, tocándose apasionadamente, ambos podían sentir nuevamente sus erecciones, Cris le pregunto. - ¿Quiero que lo volvamos hacer?

– Sebastián besándole el cuello le respondió. – Si quiero, pero tú mamá se va a enojar, no quiero que piense mal de mí.

– Cristian besándole el hombro y dándole ligeras mordidas contesto. – Te preocupas por mí mamá, pero tengo una mejor idea.

– Sebas suspirando por esa leve mordida pregunto. - ¿Cuál idea?

– Él agarro a Sebas de la espalda y de sus piernas, se empezó a mover a la orilla de la cama, se levantó y lo cargo hasta el baño, los dos desnudos empezaron a besarse dentro, mientras Cris abría la llave del agua caliente, besándose y tocándose empezaron a bañarse, el agua recorría y mojaba sus cuerpos hundidos en una pasión, Cristian se tocaba su pene mientras Sebastián lo besaba de cuello a pecho, sus cuerpos estaban derrochando mucha intensidad, se notaba la llama del amor encendida, entre beso y beso se excitaban cada vez más y más, las paredes del baño se vieron humedecidas y opacadas por el vapor, la ventila del baño estaba cerrada, entre vapor, excitación y muchos besos, ambos se estaban masturbando, se agarraban mutuamente sus nalgas, se tocaban y suspiraban, Sebastián mordio el pecho de Cristian, haciendolo gritar, Sebastian lo sentía disfrutar.

A lo que Cristian, casi sofocado dijo. - ¡Ya no puedo más!

– Sebastián lo besaba y le dijo suspirando - ¡Ya, hazlo ya!

– Cristian con un leve quejido eyaculó sobre el abdomen de Sebastián, quien él de la excitación también eyaculó, ambos salpicados de un gran chorro de semen, se miraron amorosamente, se besaron y soltaron una sonrisa frágil, se abrazaron nuevamente y se dijeron al oído. – Te amo, eres todo para mí.

– Ambos dejaron que el agua les cayera durante unos minutos, una vez pasando ese lapso de tiempo, ambos se empezaron a bañar, uno enjabonaba al otro, se besaban y hacían caricias, después de unos minutos ambos ya estaban casi listos para ir a la hacienda y desayunar.

Al estar ya en la hacienda, notaban que la fiesta había estado bastante buena, ya que había arreglos incompletos, unos arreglos tirados al piso, manteles desalineados, todo un caos, pero muy a gusto debieron estar los novios.

Regina saludo muy afectuosamente a Sebas preguntándole. - Buenos días, vaya que sonrisa la de ambos, estan contentos, ¿Cómo te la pasaste en la fiesta Sebastián?

  • Sebastián le respondió. - Buenos días señora, gracias, me la pase de maravilla.

  • Regina contenta le dijo. - No me digas señora, dime Regina o Suegra, debo acostumbrarme a que me digan asi, ¿Tuviste buen trato? ¿Te agrado la hacienda? ¿Durmieron bien?.

  • Sebastián un tanto aturdido por muchas preguntas le contesto. - Gracias suegra, si estuvo de maravilla, el trato muy bien, su hacienda esta hermosa y excelente, y claro, dormimos muy bien, ¿Verdad Cristian?

  • Cristian se sonrojo un poco y le contesto. - Si, dormimos muy bien, a gusto y relajados, gracias mamá por preguntar, buenos días.

  • Regina feliz les dió un calido abrazo y se fue a ver como iban las cosas en la cocina.

Mientras Cristian le servía a Sebastián jugo de naranja y café con su respectiva gran rebanada de pastel, los novios bajaron de su habitación con maletas listas para irse de luna de miel, con un poco de prisa se despidieron de sus respectivas familias y subieron equipajes a la camioneta.

  • Regina la novia, al despedirse de Sebastián le dijo. - Cuñadito, mil gracias de haber estado presente en mi boda, fue maravilloso, espero y la siguiente boda sea la de ustedes.

  • Sebastián sonrojado le dijo. - No agradezcas, fue una petición tuya, como regalo de bodas, debía cumplír como cuñado y como testigo, que tengan bonita luna de miel y que todo vaya súper bien.

  • Regina abrazando a Sebastián le dijo. - Eres un sol, en verdad gracias por aparecer en la vida de mi hermano, eres un ser valioso, nos vemos regresando de la luna de miel, cuida mucho a mi hermano.

  • Sebastián le dijo. - Lo cuidare siempre.

Regina se despidio de sus papás y una vez despido de todos los familiares, arribaron a la camioneta para irse a su destino, diciendo adios los ahora esposos muy emocionados y agradecidos salián de la hermosa hacienda.

Los demás invitados y familiares también se encontraban haciendo maletas y acomodaban cosas para regresar a la ciudad, todos estaban un poco desvelados y cansados, pero eso no impedía que debían regresar a la ciudad.

Sebas y cris se lanzaban miradas coquetas y se reían de lo acordado la noche anterior, después de desayunar ambos antes de regresar a la ciudad, Cristian decidió darle un recorrido rápido a Sebastián por la inmensa hacienda.

En lo que daban su recorrido, las familias empezaron a arribar sus cosas para regresar a sus respectivas casas, estaban saliendo los carros, uno por uno, los señores Regina y Roberto como anfitriones, despedían a todos los invitados, al cabo de 2 horas, los unicos que quedaban en la hacienda eran ellos con su hija Alexa, Cristian y Sebastián, junto con Roberto y Alejandrina y sus gemelos.

Sebastián y Cristian caminaban, él le mostraba lo inmensa que era la hacienda, le enseñaba los caballos, las vacas y toros, también le mostraba su caballo que desde que tenía quince años, Cristian lo montaba, le dijo. - Este es mi caballo, se llama kurt.

  • Sebastián lo acaricio y le dijo. - !Que hermoso caballo!

  • Cristian le pregunto. - ¿Quieres dar un paseo?

  • Sebastián nervioso le respondió. - Nunca he montado un caballo, aparte esta muy alto, no me vaya a caer.

  • Cristian le sonrió y le dijo. - Iremos juntos, no te dejare caer, aparte a Kurt le caíste bien, verdad Kurt.

  • El caballo hizo un relincho en señal de que le agradó Sebastián, Cristian agarro al caballo, lo saco de su establo y lo preparó para montarlo, un tanto nervioso, Sebastián se subió, y atras de él Cristian; Kurt caminaba despacio Cristian le hablaba y acariciaba al caballo, pues él es muy afectuoso a los animales, asi que juntos hicieron un recorrido por el resto de la hacienda, veian los campos y los pastizales, unos jardines hermosos con abundantes flores, unos arboles de manzanas, guayabas, naranjas y duraznos, Cristian cortaba unas manzanas y le daba una a Kurt, una a Sebas y una para él, así fue durante el trayecto por los arboles de frutas, un recorrido hermoso, se respiraba aire puro y se sentia una fresca tranquilidad, Sebastian recostaba su cabeza en el pecho de Cristian y admiraban los campos.

Después de unas 2 horas de recorrido, regresaron a la hacienda, ya estaban listos para irse a casa, solo que esperaban a Alexa y los papás de Cris pues se regresarían con ellos, ya que el carro donde se vinieron ellos se lo prestaron a los esposos para irse a su luna de miel, al cabo de un rato, ya estaban tomando carretera, en el trayecto iban comentado sobre la boda, lo que estuvo bien y lo que no les pareció, sobre lo mucho que admiraban la hacienda y sus cuidados, así como lo bien que estuvo el servicio de banquetes, durante casi 4 horas de camino a la ciudad, iban charlando y conversando, dando sus opiniones, hasta que finalmente llegaron a casa de Cris, donde se bajaron cosas y los regalos y algunos recuerdos, así después de eso, Cristian fue a dejar a Sebastián a su casa no sin antes de despedirse de sus suegros y su cuñada, agradeciendoles lo bien que disfruto estar en compañia de ellos.

Cristian y Sebastián se fueron directo a su casa, dejándolo en la puerta de su hogar y entregándoselo a su mamá, Sebas se despidio de su novio y le empezo a platicar a sus hermanos y su mamá de lo bien que estuvo la boda y que se había divertido, tenía cara de cansancio y lo único que hizo antes de acostarse fue enviarle un mensaje de texto a Miren de que ya estaba en casa y que lo único que pedía era dormir como bebé; Cristian al llegar a casa se quitó la ropa, quedando únicamente en bóxer, pensando en Sebastián y la noche que tuvieron juntos se quedó dormido, los dos nuevamente tuvieron ese sueño, una playa, el atardecer, un niño caminar entre las olas y Becker al lado. ¿Tendrá un significado ese sueño?

A la mañana siguiente en la escuela, durante el receso, Sebastián y Miren platicaban sobre como estuvo la boda y los detalles sobre los vestidos de la novia, él confiándole, le dijo en voz baja que habían tenido relaciones con su novio, no le había platicado con detalles, pero si tuvo precaución de que no les oyeran, ella estaba contenta, porque ese encuentro había consolidado su relación con Cristian, Sebastián le mostro el anillo de su mano izquierda, ella muy contenta lo abrazo felicitándolo; al cabo de un rato el receso finalizó, los muchachos se regresaban a sus salones, los jovenes estaban a unos días de los concursos deportivos, en el salón se preparaban para recibir los resultados del examen de orientación vocacional, el profesor que los entregaría, venía acompañado de la psicóloga de la escuela y algunos directivos de unas universidades, al cabo de unos minutos, el profesor entro al salón, causando un silencio en todo el grupo, saludo como debía y empezó a dar resultados, uno a uno fue escuchando lo que había salido en su examen, llego primero el turno de Miren, quien escucho su resultado que le indicaba que tenía dotes para ser una diseñadora de modas o de interiores, llegó el turno de Ileana que ella impaciente ponía mucha atención a lo que le decían, ella poseía dotes para ser una excelente modelo, actriz o conductora, Ileana contenta se levantó de su asiento y notaron que ya no usaba bastón, y mirando con odio a Sebastián paso al frente, él no le dio mucha importancia y espero escuchar su nombre; llegó su turno, Sebas que escucho sus resultados que indicaban que tenía vocación y dotes para ser psicólogo o psiquiatra, escritor, abogado; satisfecho con los resultados paso a recogerlos.

La psicóloga le sonrió y le dijo. – Vaya, serás buen psicólogo si eliges esa carrera.

– Él le devolvió la sonrisa y contesto. – Muchas gracias.

– Ileana al escuchar eso dijo en voz alta. – ¡Así es, será buen psicólogo, digo para que logre entender por qué salió puto!

– Soltando una carcajada, el salón entero se le quedo mirando de mala manera, Sebas sin impórtale seguía en lo suyo haciendo menos el comentario de ella.

  • Ileana se búrlaba cruelmente de Sebastián, que nuevamente en su asiento la miraba con pena y lástima, pues al parecer no le había quedado en claro el accidente que ella sufrío para que se vólviera un poco más consiente y noble.

  • Miren le decia a Sebastián. - Ya ni le hagas caso a la loca esa, solo lo hace para hacerte sentir mal, ya mejor dejala, que seguro al rato pegará el grito en el cielo, cuando se entere que no podra ír a los eventos deportivos, su lesión al parecer si fue grave y eso le impide que participe.

  • Sebastián indiferente le dijo. - Pues que pena por Ileana, de nada le sirvió haber estado a punto de morír, sigue igual de odiosa y caprichosa.

  • Ileana se paro de su asiento y les dijo. - !Si van hablar mal de mí haganlo de frente! !Idiotas!

  • Ella se salío del salón sin permiso alguno, los alumnos la miraban y murmuraban la mala actitud que estaba tomando ella, siguieron dando resultados, Miren y Sebastián hicieron menos a lo dicho por Ileana, continuaron prestando atención a los resultados de los otros alumnos.

Después de que todos obtuvieron sus resultados del examen vocacional, dejaron que se retiraran los alumnos a sus respectivas casas, Miren y Sebastián se quedarían a entrenar, así que ambos caminaron al campo, en el trayecto hacía alla, Sebastián recibía un mensaje de texto en su celular que decía.

Lamento lo sucedido con tu papá, apenas pude mandarte mis condolencias, discúlpame por no haber estado ahí, pero tuve que salir a arreglar unos asuntos personales, te estimo mucho, espero seas muy feliz con tu novio, no dejaré de luchar por tu amor, un abrazo. Atentamente Donato .

- Sebastián le comento a Miren el contenido del mensaje, ella le aconsejo que se lo respondiera, Sebastián únicamente le escribió.

- Muchas gracias, todo va bien, espero tus asuntos se solucionen pronto, ya hablamos que lo nuestro no puede ser, perdiste tu oportunidad, un abrazo, con cariño Sebastián.

Después de enviarle el mensaje, continuaron hablando sobre la boda y la sorpresa que Cristian le había dado esa noche; ambos amigos llegando al campo, y observabaron que Ileana estaba discutiendo con el entrenador, ella furiosa le dijo.

  • ¿Cómo es posible que no me dejen ir a competir?

– El entrenador apenado le dijo. – Lo siento mucho, pero no puedes competir.

– Ileana agarrándose el cabello dijo. - ¡Pero porque! ¡Ya no uso bastón, estoy sana!

– Miren y Sebastián se acercaban lentamente, estando cerca escucharon decir al entrenador. – Tu lesión fue muy grave, incluso se te permitió venir a la escuela solo porque estamos por finalizar el curso escolar, pero tu deberías guardar reposo, sino podrías quedar paralitica de por vida.

– Ileana enojada le dijo. – ¡Es usted un estúpido!

– Dándose media vuelta al ver a Miren y Sebastián les dijo. - ¡Ustedes me las van a pagar! ¡Lo juro!

– Sebastián mirándola le dijo. - Me das tanta lastima Ileana, nosotros no tenemos la culpa de lo sucedido, por algo pasaron las cosas, mejor cuídate y trata de recuperarte al 100%.

– Ileana enojada intento golpear a Sebastián, pero él logro detener su mano en el aire y le dijo. – !Ni un golpe más Ileana, ni uno, no me dejare humillar por alguien y mucho menos por una tipa como tú!

– Miren empujando a Ileana le dijo. - Tal vez Sebastián por pena no quiera darte lo que mereces pero yo sí.

– Ileana le escupió a Miren sobre su cara y le dijo. - ¡Deja que tu maldito maricon amigo se defienda! ¡Maldita mala amiga, debiste ayudarme a mí y no al imbécil ese!

– Miren muy enojada le dio una cachetada a ella y le dijo. - ¡Ya me hartaste! !Además de loca, obsesionada, eres una cochina!

– Ileana incorporándose, le volvió a escupir, Miren enojada le dio otra bofetada diciéndole. - ¡Cerda estúpida!

– Ileana se empezó a reír como desquiciada y Miren le dio otra cachetada tumbándola al piso, Ileana siendo observada por el entrenador dijo. - !Usted que me ve! !Que me ven imbeciles! !Juro por mi vida que me las pagaran! !Y más ese maricon de mierda que nació por error!

  • Sebastian enojado le dijo. - Creo que la que nació por error fuiste tu, tu mamá no tomo suficiente ácido fólico para prevenirte el retraso.

  • Ileana en el piso lanzó un escupitajo, lo que provocó que  Miren estaviera por encimársele para golpearla, pero Sebastián la logro agarrar y la jalo, dejando a Ileana en el piso riéndose como loca.

Miren siendo casi cargada por Sebastián le decía. – ¡Ya suéltame Sebastián! ¡Ya suéltame, ya!

– Sebastián le dijo. – Te suelto pero ya cálmate, pareces gata

– Miren se empezó a reír de lo que dijo Sebastián de ella y le dijo. – Cierto, parezco gata, discúlpame amigo, pero no me podía aguantar las ganas, esa naca me escupió en la cara y lo que dijo de ti me hizo enojar más, déjame lavarme y nos ponemos a calentar para entrenar.

  • Sebastián le sonrió y le dijo. - No le hagas caso, en todo sentido, el que debió ponerse como gata debí ser yo y no tú, pero bueno, lavate bien la cara, te espero.

En lo que ellos estaban en el baño, Ileana se levantó del suelo y dijo mirándolos.

– Ahora si, esta fue la gota que derramo el vaso, ustedes dos, me las van a pagar, matare tres pájaros de un tiro, me vengare de Cristian, de Miren por mala amiga y de ti asqueroso homosexual, les aseguro que disfrutaré verlos súfrir, llorarán lagrímas de sangre y me pedirán perdón de rodillas. !Lo juro!

¿Qué hará Ileana? ¿Que castigo merece Ileana por ser tan rencorosa, despreciativa y humillante?

Rockenado al Destino.

!ÚLTIMOS CAPÍTULOS!