Reynaldo, el hermanito de mi mejor amiga_II
Reynaldo continúa confesandome su aprendizaje con ese amigo mayor, suyo, un tal Esteban. Esta vez parece ser que lo ha desvirgado de verdad. Ha tenido su primera penetración, activa y pasiva...............Y está feliz, se siente realizado de verdad.
Hola adorables lectores. Hoy continuaré con la segunda parte de la confesión de Reynaldo. (espero que recordéis lo que em contó y transcribí en el relato anterior: Reynaldo el hermano menor de mi mejor amiga)
pues resulta que el sábado por la mañana me llamó Reunaldo para pedirme que fuera a su casa, que me queria contar algo importante, y aprovechando que no estaba nadie de su flia, ya que habían ido a pasar el día a casa de su abuela en un pueblo cercano, pero él con la excusa de estudiar se había quedado en casa.
Pues, imaginando de que se trataba, y el morbo que eso me daba, me fui para allá, pensando que, tal vez, me pudiera dar otro gustito....
Allá que me presento en la casa, y me abre la puerta Reynaldo en pantaloncitos cortos, torso desnudo luciendo "fisiquillo", lo que me causó bastante gracia, aunque reprimí mi intención de tomarle el pelo.
Aquí su relato: hola Lisa, quería contarte, tal como quedamos, como siguió mi relación con Esteban. Pues resulta que el finde pasado, nos encontramos en mi club de ajedrez, y dado que ninguno de los dos tenía partida propgramada, me invitó a su acsa para aprovechar la piscina, charlar y, de paso, continuar "enseñándome" cosillas..................
Total que pasamos al jardin de su casa, que tiene, como ya te conté paredes altas, y no se ve nada desde ningún lado. Allí me invitó a quitarme la ropa, al tiempo que el se desnudaba totalmente y se tendía a tomar el sol. yo no puide evitar mirar su hermoso y viril cuerpo, con sus músculos marcados, su culo respingón, pese a su edad, y aquella delicia que colgaba en su entrepierna, a media erección, lo que me hizo agua la boca y provocó una inmediata erección en mi.
Yo, Lisa, mientras escuchaba, me imagionaba al tío ese en pelotas, y ya empezaba a mojarme otra vez y a moverme en la silla, y apretar mis piernas, lo que por suerte, pasó desapercibido para Reynaldo, entusiasmado en seguir contándome como fueeron pasando las cosas.
Cuando volví a la realidad, Reynaldo seguía con su relato: ...así que me tendí junto a ël, boca abajo, para que no se notara mi excitación, pero él inmediatamente pasó sus mano por mi espalda hasta llegar a mis glúteos, en una caricia muy dulce que no quería que se acabara nunca. Me puse de cara a ël y acerqué mi cara a la suya, uniéndonos en un morreo muy rico, donde nos comimos la boca mutuamente. mientras nos besábamos y yo lo abrazaba del cuello, el bajo sus manos y empezó a acariciarme, mis cojones y menearme la polla..................para enseguida bajar besanso mis pecho, lamiendo mi tripa hasta llegar a mi pubis, donde se regocijó lamiendome la polla, frotándome con la lengua la puntita, como si buscara mis gotitas de líquido preseminal, y enseguida se la metió toda en la boca. Yo me puse de espaldas a la tumbona y solo miraba, su accionar mientras le acariciaba la cabeza.
ël no paraba de chupármela acompasando sus movimientos con los de su mano derecha me pajeaba y la izquierda buscaba mi agujero posterior, acariciándolo primero y luego introduciendo suavemente un dedo, embadurnado en lubricante. Y poco a poco lo metió hasta tenerlo totalmente dentro de mi culo, y luego meterlo y sacarlo, para seguidamante meter otro, y así hasta tener tres de sus dedos abriendo mi culo, aún virgen, logrando que entre la mamada que me hacía y sus caricias a mi ano, me corriera estrepitosamente, inundando su boca de mi semen que enseguida degustó tragó.
Cuando pasó mi agitación, le pregunté: ¿que me haces Esteban? Y el respondió, lo que parece, estoy preparando tu culito para estrenarlo. Que, qque dices?, pues eso cielo, hoy quiero penetrarte por primera vez, o es que no te apetece probarlo? Sí, claro que quiero, pero no venía preparado para ello, no sé, es que no me lo esperaba. Pues si no quieres, lo dejamos acá y ya, total tenemos todo el tiempo del mundo. No, Esteban, no, quiero sentirte dentro de mi, quiero saber lo que se siente, en ser penetrado por tu hombre!!
De verdad lo dices, Reynaldo? Claro, dije yo, es más necesito sentirlo!!. so ya lo sé, me dijo Esteban, pero no me refiero a eso, sino a que si de verdad me consideras como tu hombre. Pues sí, eres el unico que me ha entendido hasta ahora, que me estás iniciando en esto y no solo me has tratado como con cariño, sino que me has hecho sentir cosas que jamás imaginé posibles. Y te confesaré que eres el primer chico/hombre, con el cual me siento tan bien. No se si te lo había contado, pero si bien he tenido varias experiencias con otros de nuestro mismo sexo, con ninguno disfruté tanto, y de hecho jamás había permitido que se corrieran en mi boca hasta que estuve contigo la otra vez. Por eso, hoy no solo quiero estrenar tu culito, sino que me apetece muchísimo que tu estrenes el mío, ya que tampoco jamás me penetraron, pero es que necesito sentirlo y que tu, y solo tú me lo hagas.
Mientras decía esto, me fue volteando hasta dejarme boca abajo, flexionar y separar mis piernas en un solo movimiento e inmediatam,ente comenzó a acariciarme, mordisquearme los glúteos, para finalmente lamerme mi agujero, lo que me hizo temblar de placer y emoción, y ponerme la picha durísima otra vez. Estuvo un ratito hurgando con su lengua mi culo, hasta lograr meter la puntita. Luego volvió a la carga con sus dedos, para suavemente lubricarlo y dilatarlo, dándome un inmenso placer. De rerpente dejó de hacerlo, entonces girá mi cabez para ver que pasaba que había dejado de darme placer, pero entonces ví que estaba llenando de lubricante su polla, ya muy erecta y salchichona y se inclinaba hacia mí, levantó mi cadera y me puso un almohadón bajo la misma, dej´ñandome con el culo en pompa. Entonces apoyó la punta de su polla en mi ano, y mientras decía que le avisara si me hacía daño, pero que iría con cuidado y paciencia, empezó a presionar sobre mi ano. Una vez, y se retiraba, otra vez, y ya la presión era mayor, y me hacía un poco de daño. Se lo dije, y volvió a retirase para después volver al ataque. Así estuvo un ratito, durante el cual, si bien gozaba con el calor y la dureza de su polla, estaba muy nervioso, tenía miedo del posible dolor. Al final en un último empujoncito, y con algo de dolor, pero perfectamente tolerable, noté como su polla, o bueno su glande, atravesaba mi esfínter anal, lo cual me provocó un alivio de la presión que sentía con sus empujes, pero pasó a convertirse en una presión constante sobre mi esfínter que abrazaba su pollota, lo cual sumado a las contracciones de mi culo, me provocaba una serie de sensaciones hasta entonces desconocidas para mi, mezcla de placer y ligero dolor, pero un dolor suave, agradable ya que se acompañaba de una sensación de calorcito en todo mi cuerpo. Solo le pedí que se detuviera y me dejara gozar de ese momento con su polla dentro de mí, pero quieta, y me siguiera acariciando. Así lo hizo, haciéndome saber que le encantaba la dureza de mi culo y la sensación deliciosa del masaje que le propinaba mi esfínter a su polla, lo que lo estaba poniendo a mil por hora. Y también me dijo que le avisara en cuanto estuviera listo y dispuesto a que continuara penetrandome. Disfruté de esa sensación tan rica durante unos minutos, durante los cuales también mi polla palpitaba, contra la tumbona. Finalmente le pedí que continuara y el suavemente, al principio siguió metiendo poco a poco su polla dentro de mi culo. Me metía un poquito y sacab otro poquititoi, hasta que me dijo, ahora respira hondo cielo, y mientras lo hacía sentí como su ardiente y dura polla se metía dentro de mí hasta que sus huevos hicieron contacto con mis muslos. Me parecía que la polla de Esteban llegaba hasta mi corazón, y mi culo se abría como una flor, pero lo curioso es que no me dolía. Oh, Esteban que rico, dije girando la cabeza y ofreciéndole mis labios, entonces el se recostó cubriendo todo mi cuerpo con el suyo, y mientras me morreaba, metía y sacaba su polla deliciosamente de mi culo, sin sacarla nunca del todo. Te juro Lisa, que fue hermoso. No se si alguna vez lo has probado, me imagino que no, pero es algo increíblemente delcioso, toso, no solo sentir su polla entrar y repartir ese calor y ese masaje en todo tu intestino sino además el calor de su cuerpo sobre el tuyo, es algo difícil de explicar. Creo que en ese momento eché de menos no tenet vagina, ya que imaginop que la sensación de tener un pene inmenso gordo y caliente masajear por dentro tu vagina debe ser igual de hermoso.
Pero es que después de un rato de darme placer y provocarme otra corrida deliciosa, aunque desperdiciada sobre la tumbona, retiró su polla, haciéndome sentir un inmenso vacío, me dio la vuelta y al ver mi cara de, entre satisfacción y desilusión, me dijo dulcemente, no te preocupes que ya voy de nuevo. Y dicho esto, cogió mis piernas y poniéndolas sobre sus hombros, separó mis glúteos y volvió a penetrame, esta vez de un solo empuje, y sin que sintiera dolor, sino solo placer, un pacer inmenso y exquisito, me la metió hasta hacer tope con su pubis. Tenía toda su polla enterrada en mi recien estrenado culo, que aún palpitante lo recibía gozozo..................y entre mete y saca de su polla, tomo la mía con sus manos y me pajeaba suavemente, hasta que ambos nos corrimos, primero él, que con su corrida que casi me quemaba el intestino, me dio tanto placer sentir el chorro contra mis paredes intestinales que la mía fue interminable, llenándome todo la tripa, de mi semen formando un laguito en mi ombligo, que el, luego de sacarme la polla del culo, se inclinó, bebió con fruición y luego se dedico a expimir mi polla del resto de corrida. Entonces se recostó a mi lado y empujando suavemente mi cabeza, me sugirió que se la chupara, lo que hice con muchísimo placer sacándole también las últimas gotas de su polla, exprimiéndola con mis labios.
Nos quedam,os los dos tendidos boca arriba mirando el cielo azul sin decir nada por un rato. Solo se eschchaba el ritmo de nuestra respiración, que poco a poco fue relajándose hasta tornarse normal y poder volver a hablar. En ese momento nos miramos a los ojos y ambos reímos de felicidad.
Luego nos echamos en la piscina para refrescar nuestro cuerpo y nuestras mentes..................Volvimos a las tumbonas y nos quedamos dormidos un ratito.
Desperté sintiendo una deliciosa mamada que me estaba dando esteban, habiendo logrado ya una erección en toda regla de mi polla. Entonse cogió lubricante, se llenó la boca y volvió a chuparmela, dejándola bien lubricada. Entonces me pasó el frasco y se puso boca abajo separando y flexionando las piernas. Abuen entendedor pocas palabras, así que recordando su accionar al comienzo del día, me puse a dilatar y lubricar su culo. Cuando el me dijo que creía que ya estaba al tiempo que se ponía arrodillado en cuatro patas, me aproximé a él y con la misma suavidad que él había utilizado conmigo, lo fui penetrando despacito hasta que se la metí entera, notando mi pubis contra sus glúteos y mis cojones entre sus muslos. Sus suspiros de placer me recordaron a los míos, así que comencé a meter y sacarle la polla de su culo hasta que me corrí en su interior, claro que por el entusiasmo, fui muy rápido y no le di tiempo a él a llegar a su orgasmo, pese a que disfrutó muchísimo, segun me di cuenta y el mismo me confesó luego, pero es que no tuvo tiempo. Sin embargo al darse la vuelta ví su polla enorme y palpitante por la excitación que le había provocado, y sin necesidad de que me dijera nada me incliné sobre él y se la chupé hasta que noté sus palpitacioones en el tronco de su polla que me avisaban de su inminente orgasmo, y continué con la mamada hasta que sentí un chorro caliente y espeso impactar contra mi paladar y llenarme la boca de su exquisito néctar que degusté y tragué hasta la última gota............................
Continuación
Ufffff, Reynaldo, me has dejado loca, que bárbaro, o sea que te ha ido genial. Y de verdad no te dolió nadfa? Bueno, me dijo, algo, pero perfectamente tolerable, y mezclado con el placer realmente gana el inmenso placer que sientes.
Pufff, me has puesto a mil. Sabes?, yo nunca lo he hecho por "ahí", porque me da pánico y además vergüenza de hacerlo con mis ex novios, y mucho menos con un ligue, no sea que me consideren una viciosa y se corra la voz en todo el insti, antes y ahora en la facul; ya sabes como son los chicos.
YA, me dijo Reynaldo, pero .............................si quieres............................ Ehh, no te querrás aprovechar de la amiga de tu hermana verdad? Y en ese momento se turbó mucho, me dio pena y además ví su bultazo en el pantaloncito, bajé los ojos con algo de vergüenza, y en ese momento noté una mancha oscura en mi entrepierna. (llevaba unas pantaletas de licra). El siguió mi mirada y se percató entonces de mi estado y me miró fijo a los ojos, en ese entonces creo que con mi mirada le imploré que hiciéramos algo, y sin esperar respuesta me eché sobre él, lo morreé y metiendo mi mano bajo su pantaloncito, palpé su intensa erección. Se la meneé un ratillo, para luego, practicamente arrancarle el único elemento de ropa que llevaba puesto, dejándolo en plena desnudez y exhibición de su polla erecta, que me dediqué no solo a menear sino también a chupar. Mmmmmmm, sabía deliciosa, caliente, morcillona, me llenaba la boca, me la saqué, le chupé todo el tronco y seguí con sus cojones, que lamí con dedicación, incluso los absrobía, de a uno, hacia el interior de mi boca, volvía a mamarlo y finalmente, en plena calentura y excitación sexual, me quite de un solo movimiento mi pantaleta y el tanga y me monté sobre Reynaldo que alucinaba con lo que veía y empezaba a sentir.
Tomé su polla y la dirigí a mi coñito, y mientras lo morreaba, fui bajkando lentamente, sintiendo como su miembro me iba llenando lenta pero completamente la vagina, incendiaba mis paredes vaginales, provocaba múltiples contracciones de las mismas, hacía que de mis labios brotara mi flujo a mares, lo cual facilitaba aún más la entrada y salida de su pollota en mi vagina, que yo aceleraba y ralentizaba con mis movimientos de cabalgata. Tan pronto la sentía fuera de mí como metida en lo más profundo de mi ser, brindándome una sensación deliciosa de calor en todo mi cuerpo. Creo que lo estuve cabalgando durante al menos 5 o 6 minutos hasta que sentí que brotaba de lo más profundo de mi alma un poderoso orgasmo, y en ese momento le grité que se viniera conmigo, y creo que eso lo excitó tanto que realmente se corrió al mismo tiempo, llenándome de su semen, en talcantidad que sentía como se hinchaba mi interior de ese fuego líquido, y finalmente grité como una loca en un orgasmo increíble y prolongado, que me dejó agotada y caí sobre su pecho, apretando mis tetas contra él, sin permitir que su polla abandonara mi nido, continuando con mis movimientos de pelvis hacia adelante y atrás para exprimirlo al completo. Cuando noté que su erección empezaba a decaer, me quité de encima suyo, pero aún inmersa en una excitación sin precedentes en mis relaciones, me lancé a chupársela hasta que no le quedó una sola gota, pero habiendo retomado la plenitud de su erección. Salí de allí disparada hacia el cuarto de mi amiga, donde conozco el escondite en el que guarda un bote de lubricante, que se que usa para darse placer sola con su juguete. Volví corriendo al sofá donde Reynaldo me esperaba aun alucinado, continué chupándole su polla hasta que otra vez estuvo dura y gordota, lo embadurné con el lubricante y me giré ofreciéndole mi culo. Era mi oportunidad de dar rienda suelta a mi morbo, ya que todo entre nosotros era total confianza y confidencialidad. Me miró y me dijo, que haces Lisa? Easperar que me la metas por atrás.......no es evidente?
Ya, me dijo, pero tu no lo has hecho nunca, de verdad quieres que sea yo quien te lo estrene? Eres el único con quien me atrevería,dadas las circunstancias. Porfa, no me hagas rogar que ya me siento bastante mal por esto.............
Solo una cosa, Reynaldo, ve con mucho cuidado. No soporto el dolor. Tranquila, seré cuidadoso tal como fueron conmigo. Y dicho esto, se agachó y comenzó a darme un intensisimo placer chupando mi culete e introduciendo sus dedos embadurnados en lubricante, dilatándome lenta y delicadamente el esfínter, lo cual ya de por sí me provocaba múltiples sensaciones de placer infinito. Cuando noté que retitó sus dedos, giré mi cabeza y vi que se echaba un trago de lubricante y se agachaba hacia mi abierto agujerito donde con su lengua lo fue introduciendo para lubricarme tambien por dentro. Cuando acabó con eso, me puse tensa porque ya sabía, obviamente lo que seguía. Me tranquilicé cuando noté la cabeza de su polla en contacto con mi culo ejerciendo una suave presión que no me dolió en ningún momento, entones me preguntó: lista? Ycuando le contesté adelante, sentí que preionó mi esfinter lo justo para que su glande lo atravesara sin dificultas, y muy poco dolor. Una vez adentro, la noté tan caliente y palpitante, que me encendí aún más y en un golpe de mi cadera hice que me la metiera hasta más de la mitad, eso si dolió, pero fue mi culpa no del pobre santo de Reynaldo.
Joderrr, exclamé, y el chaval hizo amago de sacármela, pero rapidamente le cogí de los muslos y no lo dejé retirarse. No tranquilo, continúa pero más lento, ha sido cuilpa mía. Esto es delicioso Rey, sigue porfa, lentamente mete y sacamela, pero no del toso, no quiero que salgas de mí. Y así continuó un rato hasta que tuve necesidad de que acelere sus movimientos, estaba frenética, calentísima, fuera de mí, entonces le grité: fóllame,párteme Rey hazme totalmente tuya, quiero tenerte totalmente adentro, hazme gritar de placer, AAAAaaahhhhhhhhhhhhhhh, así, más adentro, más fuerte, dame con todo, mássssssssssssssssss, me vengo Reynaldo, sigue, no pares, llénameeeeeeeee. Y en ese momento noté que el chaval se corría inundando mi culo con su leche hirviendo haceindo que mi orgasmo brotara con una intensidad maravillosa. y echando mi culo hacia atrás lograr una penetración total que mantuve hasta que ya no quedaron fuerza y caí hacia adelante desmadejada, y notando inmediatamente el vacío que dejo en mi culo la salida de su polla, y al mismo tiempo como se mezclaban en la entrada de mi coño, su semen que corría desde mi culo abierto hasta juntarse con mi flujo vaginal, que caía en catarata desde mi coño, y chorreaban juntos por mis muslos.
Joo, Rey, esto ha sido increíble , dije en cuanto recuperé el resuello. Has estado maravilloso. Nunca ninguno de mis compañeros sexuales me dio tanto placer. Me parece que tu y yo, lo haremos con cierta frecuencia, porque desde luego que mi culo solo será para tí. Y a cambio yo seré toda oídos para que tu puedas desahogarte siempre que lo necesites. Te quiero cielo.
Yo también te quiero, eres mi confesora y ahora también mi pareja sexual, y te prometo, como obviamente imaginarás que serás la única mujer en mi vida con la que tenga sexo............................
Espero que les haya agradado esta lectura de mi historia con Reynaldo, el hermanito de mi mejor amiga. Solo queda decirles que mi culito recien estrenado este día, volvió a ser beneficiado por Reynaldo montones de veces. No estoy orgullosa de esto, pero la verdad es que mereció la pena.
Lisa.