Revelaciones: Solo no caeré (2/2)

Esteban nos demuestra lo que es capaz de hacer... sin embargo, hay cosas que se escapan de sus manos.

Miré a los lados buscando alguna salida, pero no tenía ningún pasillo hacia donde correr, me habían bloqueado ambas salidas.

Saqué mi teléfono del bolsillo y traté de marcar el número de mi papá, los tres chicos estaban cada vez más cerca… y no me gustaba gritar pero…

-Aaauxi- traté de gritar cuando vi que habían contestado la llamada, pero una mano con un guante blanco trancó mi boca. Mordí uno de los dedos lo más fuerte que pude y lancé una patada hacia atrás dándole en una pierna haciéndolo retroceder, dándome vuelta y poniéndome en posición de combate, pero un empujón  fuerte me tiró contra el piso, iba gritar de nuevo pero antes de hacerlo noté como uno de ellos sacaba una navaja multiuso del bolsillo y se la colocaba en los labios de la máscara, preferí quedarme callado, mientras los tres me tomaron tan rápido como pudieron los brazos y piernas y me cargaron hasta el baño, entrando y pasando llave a la puerta tras de sí…

¿En qué clase de lío estaba metido?

...

Uno de ellos me tomó por ambas manos pegándolas mi espalda mientras que otro me tomaba por las piernas, una vez así, el tercero sacó de su bolsillo unos cuantos tirrajes, colocándolos en mis pies y manos, inmovilizándome, una vez que lo hicieron los tres se apartaron quedando alrededor de mí.

-Esteban José Marcano León…- dijo uno, el de la navaja, al mismo tiempo que comenzó a dar vueltas a mí alrededor -Debe ser muy chévere para ti haber engañado a tantas personas y no sentir remordimiento de conciencia alguno…

-¿Gabriel?-no pude evitar decir, una mano pasó entre mis piernas y sentí como apretaban fuertemente mis testículos, haciéndome gritar de dolor, cayendo involuntariamente al piso.

-No hables si no te he dicho que lo hagas-

-¿Y quién te crees que… AAAAAh- volví a gritar sintiendo como el chico que estaba atrás de mí volvía a apretarme las bolas.

-Shhh- se colocó la navaja en la boca.

Esta vez no volví a decir más nada, una lágrima escapó de mis ojos al ver cómo me encontraba… Me sentía como no me había llegado a sentir en mucho tiempo, indefenso…

-Hacerles creer a tantos que eres de una manera… cuando la verdad que no estás ni cerca de ser como dices…

Iba a decir que yo no mentía respecto a mi vida, pero preferí quedarme callado, sin embargo, el chico que estaba apretando mis testículos, había comenzado a hacer movimientos circulares en ellos con el pulgar, yo llevaba mono deportivo por haber hecho educación física, y se le hacía fácil manosearme…

-Pero… eres muy predecible querido amigo… además de obvio- empezó a dar vueltas en otro sentido… O crees que nadie se ha dado cuenta cuando tú y Henry se echan esas miraditas en plenas clases…

Espera… ellos saben que soy gay…

-¡Qué asco!- dijo uno levantándose la máscara y escupiéndome…

-Por favor… son tonterías, será ustedes que se imaginan esas…- un nuevo apretón en las bolas volvió a silenciarme.

-Más que nada… deberías tener cuidado con esos toqueteos que se dan en plenas clases sentados al final del salón…-escuchaba sus zapatos de suela sonar a cada pisada en el suelo del baño – ¿O es que no sabías que en cada salón hay cámaras?

El corazón se me aceleró… no podía ser… no…

-Sabemos todo de ti… Esteban… O debería decir… ¿William?- el chico que estaba detrás de mí dejó de tocarme las bolas y en cambio fue sacando lentamente su mano y pasándola por mí nalga apretándola. Otro de los tipos me levantó del suelo tomándome por los hombros, para luego recostarme contra los lavabos.

-Bájenle el mono- ordenó el que había estado hablándome… Coño… coño…

Uno de los chicos tiró del mono, seguido del bóxer…

-Ufff- escuché un resoplido detrás de mí y enseguida sentí como algo húmedo se colocaba en mi culo, traté de mirar que era, pero la poca luz que había en el baño no me permitía ver.

-¿Puedo?- preguntó uno de los chicos.

-Es mío, dijo el que había estado hablándome, colocándose tras de mí y desabrochándose el cinturón rápidamente.

-Nada más miren ese culo- se mojó un dedo en saliva y lo comenzó a meter –más recorrido que buseta vieja no jodas jajaja- los tres se echaron a reir.

-Les dije que era una pasiva, ya páguenme- dijo el más alto y delgado de los tres.

Me giré como pude, mirándolos incrédulos.

-jajaja, yo supe cuando lo pusimos de culo y se quedó tranquilo esperando jajaja-

-Te apuesto a que se muere porque te lo cojas ahora mismo jajajaja-

-Ya… ¿Qué mierda está pasando?

-Tranquilo wey… nadie te va a coger… a menos que tú quieras- dijo esto último más bajito.

El que me había hablado se quitó la máscara que tenía y luego los otros dos hicieron lo mismo.

-Mucho gusto, soy Alexander… Aunque quizás me recuerdes por… “ChicoGayCCS”- sonrió, de los tres era el que más me había hablado explicándome mi “situación”, pude verlo gracias a que alguno se tomó la molestia de encender la luz.

-No jodas…- me pasé una mano por la frente, más de una vez los había visto juntos en el receso… -No te la creo… no sabes el susto que me diste… y con el susto que me tuviste las demás semanas… ¿¡que mierda!?-

Mientras decía esto “Alexander” cortó el tirraje que retenía mis manos con la navaja con que me había amenazado antes.

-Este es una mente- dijo otro, el más alto, lo más llamativo fueron sus ojos, que no distinguí si eran lentes de contacto, o de verdad, pero el color  pardo que tenían, era hermoso. –Yael- extendió su mano.

-Sólo le gusta joder con la gente, no mataría ni una mosca, Mauricio, por cierto, pero puedes decirme Mau- Alexander sonrió mirándome divertido.

-¡Que regalada!- le dijo Yael.

-¡Bueno, si el chamo está lindo pues!-

-Mau, tranquilo, mira que tiene novio- le dijo Alexander.

-Cierto, cierto…

-Y tú tranquilo- me miró -que tu secreto está a salvo- me dedico una sonrisa.

Todavía no acababa de creer toda la situación.

-ya va… ¿Qué?

-Ay coño- habló Alexander- siempre habíamos sospechado que eras gay.

-¿¡Ah!?-

-Si marico… o sea, se te nota- dijo Yael.

-¿En serio?-

-Nah, solo sospechábamos- continuó Alexander, por eso cuando vi tu foto en msn ya lo confirmamos y empezamos a planear como hacerte una broma jaja.

-Fuiste tú el de la idea, nosotros no tuvimos nada que ver- Dijo Mauricio.

Alexander sonrió –en fin… comenzamos a observarte un poco, que sueles hacer… y eso, para saber cómo atraparte, y pues…- se quedó callado y continuó hablando Mauricio.

-Nos dimos cuenta que todos los miércoles, luego de educación física, te dan ganas de orinar durante la hora de castellano.

-Y ahí nos aprovechamos.

-No jodas… ¿Es en serio?

-A ver si cambias tu rutina un poco niño… así cualquiera te secuestra- dijo sacando las llaves del baño y abriendo la puerta para salir – y te dejamos porque tenemos clases… además… hace tiempo pasaron los cinco minutos…

Cinco minutos… cinco minutos… cinco minutos… Que mierda, el profesor me había dado cinco minutos para ir al baño, miré la hora en el celular, 6 llamadas perdidas y un mensaje de mi papá preguntándome que había pasado, lo llamé mientras corría hacia el salón, le dije que se me había disparado una llamada y al llegar a la clase no me quedo otra que decirle al profesor que había ido a una cosa y salió la otra también, teniendo complicaciones, el profesor se río un poco y me dejó pasar… Ya una vez en la clase me puse a pensar… ¿Cómo sabían todo eso?...

Por supuesto, aparte de haber seguido todo lo que había hecho durante unas  semanas de modo que podían “predecir” lo que haría, también eran un grupo de chicos bastante populares, tenían conocidos en mi salón y todo. Aunque nadie sabía que los tres eran gay, de modo que eran como una especie de sociedad secreta gay en el liceo, era algo... raro, más que nada. Sin embargo eran buenos chicos, aunque algo locos, tenían buenas intenciones…

-¿En serio no son novios?

-No

-Con esas miraditas que se echan a cada rato, pareciera que si.- dijo Alexander.

-Pero en serio, no somos nada.- respondí.

-Pero seguro que si han hecho “cositas” jaajja- dijo Yael, haciendo comillas con los dedos.

-bueno...-

-Chamooo, que perra! Jajaja- río.

-¿Qué pasó con eso de llegar casto y puro al matrimonio?

-Yo te lo he dicho Mau, está suciedad va en picada

-Ay ya no jodan ustedes dos- les dijo Alexander -¿y por qué no se enserian?

-Ehm… Buena pregunta… No sé-

-Deberían- respondió Mau.

-Al menos así puedes tener algo más de seguridad de que no sé irá con algún otro.

-Si es que es fiel- dijo Alexander.

-Ave María, ya supéralo ale- le decía Yael mientras tomaba mi celular de la mesa de centro…

Alexander miró a Mauricio torciéndole los ojos.

-El eterno guayabo (despecho)...- dijo Yael explicándome que al parecer alguien había traicionado la confianza de Alex.

-Ya pues, en lo que estamos- dijo para cambiar el tema -empátate con el-  agregó Alexander.

-Eh... ¿Y por qué quieres que lo haga?

Se encogió de hombros -no seas un marico más de esos que tira con cualquiera sólo por pasar el rato y matar las ganas... Teniendo la oportunidad de tener una relación. Estoy seguro que él aceptará... Por cómo te mira y eso… se ve que te quiere.

Era raro… hasta el momento no lo había pensado… ¿Qué estaba sintiendo...? ¿Qué era lo que quería? ¿Por fin lo había encontrado? De un momento a otro me sentía lleno de ilusión…

-Mira esteban... Si tienes una oportunidad, no la dejes pasar, es mejor arrepentirse de lo que sé hizo que de lo que no- Dijo Yael… -Esa frase la vi en un relato erótico- sonrió.

Todos los miramos con cara de ¿En serio?...

-En lo que estábamos…- Alexander dejó de lado el comentario de Yael.

-okey... okey... Lo haré- terminé por decir.

-Así se habla- me estrechó la mano Alex.

-¿pero cómo?....

-te ayudaremos- respondió Mau.

-Lo que tienes que hacer es- comenzó a enumerar Yael.

1)      Invítalo al cine.

2)      Dile a mitad de la película que te estás haciendo pipí y se van a tirar en el baño

-No jodas Yael! Eso no coño…

-Discúlpeme usted Madre teresa de Palputa-

-En fin, solo dile para ir al cine o invítalo a algún lugar, y primero háblale de cómo te gustaría tener una relación.

-Aja…- Asentía algo incrédulo.

-Sabes qué… te ayudaremos, vamos todos al cine perritos- dijo Alexander.

-¿Qué?-

-Y mejor que te vayas a arreglar, que en 3 horas debes estar en la estación del metro- dijo Yael enseñando el último mensaje recibido en mi teléfono.

Henry: Ok, nos vemos a las 3 entonces ;)

-No me jodas ¿cómo hiciste eso?

-Andaleee… rápido- dijo Alexander dándome una nalgada, de haber estado en el Liceo me hubiera molestado… -Deja te abro.

-Epaaaa- gritaron Yael y Mauricio al mismo tiempo.

-¡La puerta coño! ¡Y ustedes dos también deberían ir a cambiarse…!

-Dale…

-Hoy nos toca de cupidos eh- dijo Mauricio frotándose las manos. Alexander río mientras nos abría la puerta de su casa.

...

Esteban: coño aún no estoy seguro de esto.

Alex: si aceptó venir contigo al cine, solos, es porque quiere que pasen más tiempo a solas juntos.

Mau: y no necesariamente para tirar.

Alex: coloca lentamente tu mano sobre la suya.

Mire su mano sobre el reposa brazos y dude por unos cuantos segundos.

Alex: hazlo de una vez coño.- Ponía en el chat grupal que habíamos creado en BBM.

Cerré los ojos y puse mi mano sobre la suya, sentí como un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, este aumentó, volviéndose algo más helado al ver cómo retiraba su mano, dejándome petrificado por unos instantes, pero grande fue mi sorpresa cuando al retirar su mano le dio la vuelta para juntar su palma con la mía, entrelazando nuestros dedos, cuando lo hizo sonrió sin dejar de ver a la pantalla, sentí como me subía la temperatura y el escalofrío parecía se convirtió repentinamente en un calentón, causándome una erección en los pantalones, pero que de cierto modo era distinta a cuando íbamos a tener sexo.

Alex: eso estuvo cerca.

Mau: fff...

Yael: ya, no lo vayas a besar a menos que el lo busque.

Yael: no todo el mundo acepta eso en público.

Me había vuelto un haz escribiendo con una sola mano, aunque el teclado qwerty ayudaba mucho, algunas veces deseaba tener pulgares más pequeños.

Y sin esperarlo, mientras leía el mensaje en el teléfono sentí su respiración cerca de mi oreja, mi respiración se detuvo y de algún modo parecía que el tiempo también lo había hecho... ¿En serio me estaba enamorando? Por qué no quería aceptar que esa era la verdad... Me gustaba Henry... Se me hacía un chico genial... Aunque en un principio mi intención era aprovecharme de él y Julián para matar las ganas, empecé a sentir como su atención hacia mi cambiaba... Y a diferencia de cómo me era con Gabriel, no me sentía con la necesidad de protegerle y de algún modo era yo quien se sentía protegido a su lado.

Dejó en mi mejilla un suave beso que tenía más significado que los muchos que nos habíamos dado al sólo tener sexo.

Que más que lujuria y deseo, expresaba cariño.

-Lo va a besar en la boca- dijo Alex.

-Yo te dije que no sé iba a aguantar... -comentó Mauricio.

-5... 4...

-¿deberíamos detenerlo?- pregunto el primero.

-3... 2...

Coloque mi mano en su cabeza girándole para buscar sus labios... Mientras escuchaba los murmullos de mis amigos de fondo en la fila de arriba, juntos con los sonidos de la película... Pero luego de juntar nuestros labios. Todo eso dejó de existir. Sólo éramos el y yo... Allí besándonos, nada más.

...

Y esa había sido la primera vez de muchas que habíamos salido juntos Henry y yo, salíamos a trotar, al parque, al cine, al Ávila... A muchos lugares... Y siempre terminábamos con una buena sesión de sexo en casa de alguno... Lo mejor es que nunca hacíamos lo mismo...

Mientras que nuestro grupo de amigos hablaba de cosas inocentes como de cómo sería tal cosa, o haciendo suposiciones, ya nosotros 2 éramos todos unos expertos en la materia, aunque claro... Los dos dábamos a creer una completa inocencia, y nuestros amigos se la creían, a pesar que conocían a Henry y sabían que siempre había sido de conocer muchas chicas y cambiar de novia a cada rato.

-¿Seguro de lo que vamos a hacer?- Preguntó Henry.

Por primera vez parecía estar inseguro de algo. Pero ya lo había decidido.

Esos chamos  me caen bien... Pero esto es otro nivel Esteban.

-Es más placer voyeur nene.

-Pero estar en una orgía...

-Nosotros no participaremos- le respondí.

-Claro, que si llego a ver que metes al menos una mano ahí… jmm... Mira que muchas cosa me he aguantado por tí.

Me di la vuelta, estábamos frente a la puerta y adentro el volumen de la música parecía estar a reventar.

-Tampoco es que sea como una orgía o algo así... Es un matiné, sólo que de ambiente.

-¿Y nadie en el liceo sabe esto?

-Tú no sabes los hilos que mueven esos tres ahí... Lo que haremos es bailar nosotros dos.

-Bueno...

Henry terminó aceptando, a lo que me decidí a tocar la puerta, al ver que no contestaban termine por llamar al cel y en unos minutos salió Yael a abrir la puerta.

-Yo sabía que no te ibas a quedar sin venir.

Me reí y tomando a Henry de la mano entramos a la casa y el ambiente no era nada parecido a lo que había visto antes...

Nada más entrar el respirar se complicaba un poco, el aire se hacía pesado y ya querías quitarte la camisa por el calor, haciendo que entendiera a los chicos que estaban así. Con el torso desnudo, con el sudor brotando y recorriendo todo su cuerpo mientras bailaban.

Habían varias pegados a la pared mientras que otros le movían el culo completamente en el güevo pude notar más de una erección y muchas eran MUY BUENAS... Sin embargo, a pesar de que las ganas de bailar con cualquiera no me faltaban... Me sentía afortunado allí, tomado de la mano con Henry...

Como pudimos caminamos entre la gente hasta llegar a donde estaba Mau... bailándole a otro chico.

-¡Quién lo diría!- dije algo duro para que pudiera escucharme.

Mauricio se río entendiendo que me burlaba de su rol... En eso se despegó del chamo y se acercó a mi oído.

-Papito...esto es lo bueno de la versatilidad-

Me rei por lo bajo y en seguida le pregunte por Alexander... En eso me señaló hacia una esquina donde pude verle la espalda, siendo recorrida por unas manos fuertes y con algo de vellos, seguramente de un chico algo mayor que él.

-¿Dónde consigo de beber?-

-Nuestro trago está bajo la cama de alex.

-Ok...

Sin soltar a Henry de la mano lo llevé a la habitación de Alex toque la puerta unas cuantas veces y al no oír una respuesta abrí.

No podía de decir que no me lo esperaba... Pero no deja de ser algo... ¿Impactante? O al menos cuando no estás acostumbrado.

-Disculpa, sólo vine a buscar está botella.

Me agache bajo la cama y saque la botella de lo que parecía ser ron.

-Coño Esteban toca para la próxima- dijo Yael acostado en la cama mientras un chico encima de él paraba de embestirlo, algo avergonzado supongo.

Ay... Ni que fuera a ver algo que no conozco.

-¡Hola!... Sigo aquí- dijo Henry al escuchar esto último. Sin embargo ya le había contado con confianza de lo que había ocurrido entre los chicos y yo... Cosa que aceptaba.

-Sí, yo sé que estás ahí.

-Coño chamo, déjame tirar en paz.

-¿Con qué me preparo el trago?- Pregunté, colmando un poco su paciencia.

-En el congelador hay coca cola... Y limón...

-dale- Henry y yo salimos del cuarto cerrando la puerta tras nuestro, dirigiéndome a la cocina para preparar la bebida.

Una vez termine salí a la sala y allí mismo pegue a Henry de una pared y pasando un brazo por sus hombros comencé a mover el culo sobre su tranca ya completamente en erección gracias al espectáculo que estábamos presenciando. Sus manos. Recorrían mi espalda y mi pecho y sus besos por el cuello no sé hicieron esperar... La oscuridad no era que dejaba ver mucho, pero pude notar a algunos chicos del liceo suponía que era algún tipo de pacto... algo arriesgado... por qué a varios no me hubiera imaginado que iban por el otro lado de la acera, pero si alguno de los que estaba allí decía algo de alguien... Todos saldrían jodidos, o tarde o temprano se enterarían quien había iniciado eso... Y al salir a la luz seguramente esas fiestas dejarían de hacerse, algo que no le convenía a nadie.

Usar celulares estaba prohibido. Por lo que de cierto modo, todo era seguro.

Deje de pensar en tantas güevonadas y me quite la franela, sintiendo como las miradas de algunos recaían sobre mí. Desabroche la camisa de Henry y recorrí su pecho pellizcando sus pezones y luego yendo hacia su boca... Para mostrarle a ese montón de perras sueltas que éramos el vivo producto del deseo... Pero ya teníamos dueño.

...

Un mes después…

...

¿Cuándo volvemos a salir? - le pregunté algo risueño mirándole directo a los ojos antes de darle un mordisco a mi bigMac...

-Ves, eso lo odio de ti... No hemos terminado una cosa y ya quieres saber cuándo haremos la próxima.

-Ah pues... Discúlpame por querer estar contigo-

-No es eso... Sino que yo creo que hay que dejar que las cosas fluyan-

-Si hubiera dejado que las cosas fluyeran contigo... No creo que estuviéramos juntos aún.

-Bueno... quizás eso sí...- se quedó un rato comiendo no me volvió a dirigir la palabra hasta que hubo terminado su hamburguesa.

-Vale... Si quieres mañana vamos al parque del este.

-jajaja perfecto- le conteste riendo sorbiendo algo de refresco.

...

Esteban: ya voy a agarrar el metro... Nos vemos allá.

Henry: vale... Ya yo voy saliendo... :*

Tomé el metro y tardé más o menos 15  minutos en llegar al una vez allí me esperé un poco antes de escribirle y me senté cerca a la concha acústica, a mi lado una señora tejía lo que parecía sería un suéter. Me entretuve mirándole un rato hasta que comencé a jugar con mi celular.

Henry a veces llegaba tarde, aunque al parecer hoy llegaría más tarde que nunca. Vi la hora y nada más 30 minutos habían pasado, tampoco era tanto... Compre un gatorade y decidí mandarle un nuevo mensaje.

Esteban: por donde vienes nene?

Espere unos cuantos minutos... Por una respuesta que nunca llegó...

Vi que lo que suponía si era un suéter, pues la señora cada vez estaba más cerca de terminarlo...

Comencé a preocuparme, así que le llamé.

-Disculpe, el suscriptor que usted ha llamado, no puede ser localizado.

Tenía un mal presentimiento... Pero no me iba a quedar tranquilo hasta saber que mi novio estaba bien. Así que llamé a su casa.

-Buenos días, hola señora fanny...

-hola... Henry no puede contestar ahorita.

El tono de fuera de línea fue lo siguiente.

Algo malo ocurría... ¿Por qué Henry no me podía atender?... mierda... Mierda.

Sin darme cuenta había comenzado a caminar en círculos. Mientras que el sudor frío comenzaba a recorrer mi frente.

Iría a su casa.

Tome mi bolso del asiento y corrí de nuevo a la estación del metro, más de una persona refunfuño cuando sin querer les tropezaba. Y por el altavoz dieron el aviso que estaba prohibido correr dentro de la estación. Una vez ya adentro, se me hizo el viaje en metro más largo de toda mi vida. En cada estación parecía tardar una eternidad... Hasta que al fin llegué a plaza sucre. Salí y corrí ente el boulevard lo más rápido que podía, evadiendo todos los tarantines... quizás exageraba, o estaba siendo algo paranoico... pero tenía ese presentimiento y esa presión en el pecho. Llegué cerca donde vivía Henry y vi la hora, ya casi las 4 de la tarde. Toque la puerta como si la vida se me fuese en ello hasta que escuche como sonaban las llaves en la cerradura.

-Henry no va a salir hoy- fue lo único que me dijo su mamá. Una señora algo mayor y algo grande también, mire hacia los lados tratando de ver dentro de la casa. Y en uno de mis intentos pude ver a Henry... Aunque sólo fue cuestión de segundos antes de que su mamá diera un portazo. Estaba ahí llorando en el mueble... No quería ni pensarlo... No podía haber pasado.

Pero si, a los días una llamada suya me lo confirmó, su mamá se había enterado de lo nuestro y él no sabía cómo... No podía aceptar que su hijo era gay, y menos que tuviera novio... Peor era el hecho de que había ido muchas veces a su casa y parecía que la señora me había agarrado algo de confianza... Le había prohibido cualquier tipo de contacto conmigo, ni siquiera le había dejado ir al liceo... Y al parecer sería transferido a otro en otra ciudad.

No pude evitar romper a llorar cuando escuche eso... ¿¡Por qué!? ¿¡Por qué tenía que pasarme esto!? Lancé mi teléfono contra él suelo cuando tuvo que cortar porque su mamá se acercaba, pude ver cómo se hacía una línea en la pantalla al quebrarse. Me pegue a la pared y llorando me deslice hasta quedar en él suelo apoyando la frente en las rodillas... Sin poder dejar de llorar.

...

Como se había enterado... Si los únicos que sabían de lo nuestro eran...

Claro...

Ellos...

Pero esto no se iba a quedar así... Esos hijos de puta... La iban a pagar.

...

Alexander era muy minucioso en lo que hacía. Por eso quizás había hecho tantas fiestas y sus padres ni enterados. Sin embargo, se idolatraba a sí mismo y cada cosa que el hacía era lo mejor, por lo que siempre grababa sus fiestas y luego las presumía con alguno que no hubiera podido ir. Tenía la carpeta bloqueada y sólo él conocía la clave. Así que sólo tenía ser que él la desbloqueara y estar un momento en su computadora a solas para poder copiarlo, en cuestión de segundos inserte mi pen drive y puse a copiar el último vídeo grabado.

-¿No tienes galletas?- le pregunté para que tardara un poco más, en la cocina.

-Deja veo que consigo.

Tardo lo suficiente para yo copiar el vídeo.

Fue sólo cuestión de enviarlo por correo desde una dirección recién creada a unos cuantos de mis contactos del liceo, sin incluirlos a ellos. Se hizo lo propio y más temprano que tarde el vídeo estaba publicado en facebook, llenándose de comentarios de todo tipo en cuestión de minutos.

Me imaginaba su reacción, y aunque se me ocurrió faltar al colegio por prevención, quería ver sus caras... Pagarían por lo que me habían hecho.

-No creas que no sabemos que fuiste tú- me dijo Yael al pasarme por un lado.

Me coloque una mano en el pecho y puse mi mejor cara de indignación para luego sonreírles.

-Eres un hijo de puta, me gritó Alexander.

Estaban reunidos sus representantes juntos con la directora, al parecer serían expulsados. Había logrado mi cometido. Además, el ver a las mamás de Mauricio y Yael llorando era todo un espectáculo, ninguna debía imaginarse que sus hijos eran mariconcitos.

La vas a pagar. Terminó por decirme Alexander...

-Ya ustedes la están pagando por lo que me hicieron-

Mauricio me miró extrañado. Mientras Alexander en su soberbia me volvió a hablar.

-Recuerda que en el vídeo normal sales tú-

Le coloque una mano en el hombro.

-Me lo muestras cuando lo encuentres. Lo siguiente que sentí fue un escupitajo estrellarse contra mi cara, pase un dedo recogiendo la saliva e hice como si la lamiera.

-Eres un maldito enfermo.

-Nos vemos... Me despedí para irme a la clase de la que me había ausentado. No sin antes pasar al baño a lavarme la cara.

-No creas que te vas a salir con la tuya

-¿ah?- deje de echarme agua en la cara y levante la mirada para ver de quien se trataba, para mí sorpresa era uno de los chicos de mi clase.

-¿De qué?

-Tú lo sabes... No creas que tanto tiempo trabajando en equipo para mantener todo oculto van a ser en vano... Ellos tres tienen mucha gente que los apoya...

-¿Más o menos? ¿Tú qué sabes?- en la fiesta a la que había ido no lo había visto, y tampoco en los vídeos... Y era bastante difícil que no lo reconociera, pues era uno de los chicos que se la tira de payaso de la clase y hace reír a todos burlándose de los demás... Si era gay, bien ocultadito que lo tenía.

-Mejor es que te cuides Esteban- colocó una mano sobre mi pecho. Yo le contrarreste colocando una sobre su hombro.

-Si piensas ofrecerte a cuidarme, tranquilo pana... Yo sé cuidarme sólo.

-Yo no dije que iba a cuidarte... Sólo te advertía... Eso hace las cosas más divertidas.

-¿Sabes que también puedo decir cualquier cosa de ti no?

-¿Y publicar mis vídeos?... Tranquilo, que no me vas a encontrar en ninguno- se dio la vuelta para salir del baño.

Cualquier otro se hubiera ido por los golpes, sin embargo... No había un motivo claro, y me imaginaba de qué iría su juego del gato y el ratón.

-Si lo que quieres es jugar... ps, juguemos Michael- dije esto haciendo que se detuviera un poco antes de llegar a la puerta.

-Pues juguemos, Esteban.

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Para el próximo capítulo…

Esteban, tal como lo suponía, se ve implicado en un juego del gato y el ratón… Pero ¿Quién terminará comiéndose a quién?

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Sres.! Necesito sus comentarios… No me ha dejado de gustar escribir, pero uno pierde un poco la motivación cuando ves que no son muchos quienes comentan. Cualquier cosa, si les gusta, no les gusta, lo que piensen… todo!... Aquí con gusto será bien recibido sea lo que sea.

Y claro, tengo que agradecer a todos los que me han escrito, que si voy a continuar, si no les gustó algo… y disculpe alguno si no le he respondido, pero igual leo todos sus mensajes! Les recuerdo que me pueden contactar, aparte de a través de mi correo.

En Facebook:

https://www.facebook.com/sideshift.tr

Y preguntarme cada rato, cuando será que vuelva a publicar!? Tal como hace alguien por allí, a quien me alegro le guste tanto la historia que siempre me escriba así jejeje.

Nos leemos en el próximo capítulo! O quizás antes…