Resurgir: capitulo 7

Giros y más giros...

Bien, bien… voy a ser padre o al menos eso me está diciendo la rubia de ojos azules que tengo en frente. Pero como voy a ser padre con veinte años, como voy a serlo si ni siquiera soy capaz de cuidar de mí mismo. No he tenido un buen referente paterno, no sé cómo ser un buen padre. Y no quiero hacerle a esa criatura lo mismo que hicieron conmigo mis padres.

Toda esta reflexión la hacía en silencio, estaba con la mirada perdida no sabía que decirla, era consciente de que tenía que decirla algo a Jovanna, pero no me salían las palabras y por primera vez en mi vida no sabía que decir o lo que es peor no sabía qué hacer. Volví a recuperar la cordura cuando me di cuenta de que Jovanna estaba a punto de irse.

Yo: Jovanna, por favor no te vayas, perdona que me haya quedado en este estado, es que no sé cómo actuar esto no es algo que yo planeaba, por lo que déjame unos días para…

-          No me dejó terminar, por su cara me imaginé que se avecinaba una bronca y de las gordas

Jovanna: Uriel esto tampoco es algo que yo planeaba, entiendo perfectamente que esperar un hijo con alguien al que no amas es algo desconcertante, y antes de que te tomes estos días para pensar o cualquier otra cosa que quieras hacer durante estos días te comunico que no estoy dispuesta a abortar el embarazo, puedes desatenderte de tu hijo  si quieres esa tu elección, yo solo te estoy comunicando que vas a ser padre y que pienso tener a este niño o niña con o sin tu ayuda.

Yo: haber antes de que esto se vuelva violento te digo que jamás te pediría que interrumpas el embarazo, pero joder entiéndeme tú a mí, solo tengo veinte años no estoy ni cerca del ecuador de mi vida y ya estoy esperando hijo, emocionalmente soy bastante inestable, lo único que hago es trabajar y ganar dinero.

Jovanna: que pasa, ahora estás intentando evadir tu parte de responsabilidad alegando que solo tienes veinte años, pero cuando me la metías no parecías un niño de veinte años, es verdad que tienes veinte años también es verdad que has conseguido con veinte años lo que muchos a los treinta y seis años.

Yo: lo mejor será que nos calmemos un poco y volvamos a reunirnos para hablar con más serenidad y cabeza fría ahora no sirve buscar culpables, que te parece que cuando vuelva de Estados Unidos quedamos aquí en mi casa y llegamos a un acuerdo.

Jovanna: ¿enserio vas a irte de viaje con la que se nos viene encima? ¿Sabes qué?, vete y por mí no vuelvas no sé qué es peor que esté embarazada o que tú seas el padre y por el sexo no te preocupes no volverás a metérmela en tu puta vida si para ti estar con una mujer mayor que tú es un problema, entonces no tenemos nada más que hablar. Criaré a mi hijo yo solo no necesito tus asquerosos millones.

-          Y encima se pone a llorar, o sea me suelta todo eso y es ella quien se pone a llorar, el que debería llorar soy yo, que al menos ella tenía claro lo que quería hacer.

Yo: Nena, no voy por placer si viajo es por trabajo. No puedo aplazarlo, este viaje está planeado desde hace mucho tiempo. No te pongas dramática que yo todavía no me he pronunciado y ya estás desvariando en ningún momento te he dicho que me vaya desentender del niño es más ni siquiera lo he insinuado así que por favor cálmate y ya hablaremos con más calma. Es más, si quieres te puedes quedar aquí durante el tiempo que esté o si lo prefieres vente conmigo.

Jovanna: yo contigo no voy ni a la vuelta de la esquina, insensible y desde luego no me pienso quedar aquí, no quiero tener un encontronazo con esas guarras a las que te tiras.

-  yo no sé si eran las hormonas, pero desde luego Jovanna estaba intratable.

Yo: Mira Jovanna si te soy sincero esto no es algo que quiero, pero tampoco puedo darte la espalda al fin y al cabo la mitad de esos genes van a ser míos, sé que te tengo que apoyar en tu decisión y lo haré, es verdad también que no estamos enamorados yo por lo menos no lo estoy solo sé que si voy a tener un hijo no me imagino una madre mejor para ese niño que tú.

-  este breve discurso mío pareció calmarla un poco, tanto que se abrazó a mí como si yo             fuese un bote salvavidas, comprendí realmente que todo este halo de seguridad que se            dibujaba a su alrededor al principio de la conversación no era más que fachada que ella              estaba igual que yo la aterraba la idea de ser madre, pero a diferencia de mí ella ya luchaba                por su hijo como una leona.

Jovanna: Uri… mi pequeño genio, de verdad piensas que no hay mejor madre para nuestro hijo que yo, a veces eres muy insensible luego están esos momentos en los que eres realmente cariñoso, ese cambio drástico que tienes es lo que más me gusta de ti.

  • esto está mejor, me ha llamado insensible, pero ahora lo ha hecho con ternura.

Yo: Ahora si me disculpas Jovanna tengo un viaje y una presentación que preparar.

  • pude sentir como se ponía tensa otra vez y pensé que la había cagado como viene siendo la    costumbre.

Jovanna: Uriel por favor ¿puedo quedarme a dormir contigo? Es que no quiero estar sola, pero no te confundas eeehh no quiero follar. Bueno, aunque contigo nunca se sabe.

  • ahí estaba la sonrisa que tanto me gustaba de esta mujer no hay mal que por bien no venga    o al menos eso dicen.

Yo: claro que sí no hay problema, es más quiero que te quedes aquí hasta mi regreso, tendrás asistencia las 24H del día y cero preocupaciones, por las revisiones al médico no te preocupes todos los gastos que genere el niño correrán por mi cuenta.

No pude dormir aquella noche, como bien sabéis las puñeteras pesadillas no me dejan tranquilo, he intentado ir al psicólogo, pero no me fío de los loqueros. Es más, me llamó una de mis directoras de marketing para decirme que la competencia quería reunirse conmigo para llegar a un acuerdo porque según ellos me estaba haciendo con todo el nicho del mercado en lo que compete a mi empresa. O sea que mi estancia en Estados Unidos se iba a prolongar más de lo debido. No se lo voy a decir a Jovanna no es por cobarde es que cuando se altera se le hincha la vena de enfrente y eso sí que da autentico miedo.

No me pude despedir de ella, no quería despertarla por lo que opté por dejarla una nota de despedida con la promesa de que volveré cuanto antes y hablaremos de todo lo que tenga que ver con la criatura que se estaba gestando en su interior.

La llegada a Estados Unidos no fue como siempre, aterrizar y directo al hotel, afortunadamente el lanzamiento de las nuevas celdas de energía no fue complicado, solo estaba puesta en venta hace unas horas y ya llegaban pedidos de todos lados al final tendré que subirles el sueldo a todos mis empleados empezando por los que se encargan de la limpieza. Los que si estaban muy pesados eran los de la competencia que no hacían más que saturarme el móvil con llamadas suyas y eso que mi asistente es la encargada de filtrar las llamadas importantes, pero estos pesados han encontrado una manera de colarse por todos lados.

Una mañana en la que me encontraba en mi oficina mirando tonterías por internet que maldita la hora en la que se me ocurrió ir a mi oficina cuando podía estar en mi habitación de hotel con alguna mujer o jugando a la Nintendo, empecé a escuchar unos gritos de alguien que quería entrar en mi despacho, pero por órdenes expresas mías mi secretaria no dejaba entrar a nadie sin previo aviso.

  • dile a tu jefe que estoy esperando aquí fuera y que exijo hablar con él, - señorita mi jefe me ha ordenado no dejar pasar a nadie, no quiere se le moleste está bastante ocupado, -pues tenemos un problema porque yo no me pienso mover de aquí sin que haya hablado con él asé que tu verás lo que haces.

Después de decir aquello a mi secretaria creo que la pobre no tuvo más remedio que preguntarme si podía dejar pasar a aquella odiosa mujer.

Al principio estuve contemplando la posibilidad de llamar a seguridad. Pero la insistencia de aquella mujer despertó mi curiosidad, total no tenía nada mejor que hacer así que decidí acceder a su petición.

  • hasta que por fin te dignas a concederle un minuto de tu tiempo al resto de los mortales- me dijo aquella voz, ni siquiera la estaba mirando cuando volvió a gritarme, - oiga señor al menos podrías mirarme cuando le estoy hablando, ahora sí que la presté atención a aquella mujer, pero seguía sin mirarla a la cara, eso manera de hablarme y ese timbre de voz solo podían ser de una persona.

Cuando nuestras miradas se encontraron fue como si el tiempo se congelara por unos instantes, después de tanto tiempo la tenía en frente de mí al final va a ser verdad eso de que el mundo es un pañuelo.

Analía: ¿Uriel? ¿qué haces tú aquí?

Yo: no hace falta ser un lince para darse cuenta de que soy el dueño y señor de todo este tinglado, yo sí que me pregunto qué haces tú aquí.

  • mira que puede llegar a ser tonta la tía eehehh

Analía: perdona es que no nos consta tu nombre como director de esta empresa aparece otro nombre y no el tuyo así que es normal que me haya confundido.

Yo: si hubieses investigando más a fondo sabrías que yo soy el dueño y fundador de Industrias Gecko, pero la investigación nunca fue tu fuerte, en eso y en algunas cosillas eres bastante floja. Ahora puedes ir directo al grano, no tengo nada que mejor que hacer, pero fingiré que sí porque la alternativa es bastante deprimente.

  • al parecer esas últimas palabras la hicieron bastante daño por su cara vi que este momento    no iba a ser uno de sus favoritos.

Analía: bueno yo la verdad es que venía a proponerte una alianza entre tu empresa y la empresa a la que represento en estos momentos y de la que soy directora.

Yo: mira hoy estas de suerte, me has pillado de buen humor así que voy a escuchar lo que tengas que decirme y te diré al instante si acepto o no la propuesta.

Lo que proponía era una absoluta gilipollez, para que me entendías ella quería que dividiéramos el mercado y nos repartiésemos los clientes de tal forma que su empresa solo se dedicaría a satisfacer a un grupo de clientes y yo a otro. La contrapartida de ésta propuesta es que mis ingresos se verían disminuidos exponencialmente y eso es algo que no podía permitir.

Yo: de verdad no sé qué te ha llevado a pensar que una persona con dos dedos de frente vaya a aceptar una propuesta tan estúpida, eso solo me perjudica a mí, lo siento, bueno no lo siento así que mi respuesta es un NO como una casa.

Jovanna: Uriel sé sensato no todo en esta vida tiene que ver con el dinero y el poder hay otras cosas más importantes, además tus ingresos no se verían tan afectados solo que se reducirían un poco, a cambio de este poco ayudarás a otra empresa a mantenerse y a su vez mantendrás un flujo de mercado constante.

Yo: desde que tengo uso de razón el dinero y el poder son los medios más eficaces de conseguir todo lo que quieres, desde los albores de la humanidad siempre ha prevalecido la ley del más fuerte, el pez grande se come al pequeño, el que tiene dientes es aquel que puede morder. En vez de perder tu tiempo intentando venderme tu idea porque no lo empleas en intentar mejorar vuestros productos y competir sanamente conmigo como se ha hecho desde siempre.

Jovanna: no seas cínico sabes perfectamente que no podemos competir contigo, no todos poseemos un cerebro extraordinario como el tuyo. Esto es lo que querías oír ¿verdad? Tal vez hayas levantado tu propio impero, pero sigues siendo el mismo egocéntrico de siempre. Hay cosas que ni el dinero ni el poder pueden cambiar.

Yo: y yo veo que sigues siendo la misma zorra fría y estúpida que siempre fuiste.

  • esta bofetada sí que la vi venir a cámara lenta, obviamente la esquivé, pero esta vez la               agarré del cuello y la estampé contra la pared nuestras                          bocas estaban muy cerca casi se    estaban rozando nuestros labios en aquel momento no tenía en frente a la zorra que me     partió el corazón en pedazos,                    tenía en frente a una mujer bella que me sacaba de mis casillas    y me moría por besarla, no lo pensé más y nos fundimos en un beso húmedo lleno de                          rabia y  lujuria.

CONTINUARÁ…