Relatos para Giuseppe Mi profesor de Ajedrez
Las fantasias eróticas de de una chica con su profesor de ajedrez se hacen realidad.
RELATOS PARA GIUSEPPE: "Mi profesor de Ajedrez"
A clases vengo hace un par de meses. Me inscribí en este curso porque necesitaba desarrollar más mi capacidad de concentración, a veces me distraigo con facilidad o tal vez me aburro rápidamente, no lo se.
El silencio reinante sólo es alterado por su voz cálida y profunda al principio sólo trataba de poner atención en sus instrucciones pero desde hace unas clases algo me inquieta me he encontrado mirándolo fijamente no se si es su silencio o su mirada sólo se que me he despertado en la noche agitada y empapada en sudor soñando con él esa forma de ser enigmático y lejano lo hace mil veces más atractivo para mí.
Ya no puedo más después de clases llego a mi casa y al acostarme él esta aquí sus ojos, sus labios, su voz, su cuerpo su imagen llena mi pieza cierro mis ojos y lo imagino, junto a mí , tocándome , recorriendo mi cuerpo acariciando mis pechos , tocando mis pezones erectos, mi respiración se acelera, bajo mis manos, toco mis muslos, subo, rozo mi clítoris , mis labios están húmedos, imagino cómo sería tenerlo junto a mí sintiendo su calor a punto de penetrarme, su cuerpo desnudo junto al mío, pensarlo me excita, me provoca un estremecimiento , sólo deseo que me toque hasta hacerme acabar realmente no puedo más
Otro día de clases, esta vez debo hablar con él, quiero que me vea me he puesto una blusa blanca con botones y una falda corta con tablas, zapatos altos Abiertos los primeros botones de la blusa ésta deja ver parte de mis pechos.
No he dejado de mirarlo mientras transcurre la clase Se acerca a mí y mira desde atrás mis movimientos haciéndome algunas correcciones, me habla cerca del oído estremeciéndome
Al fin termina la clase, debo hablarle ahora
Esta recogiendo sus cosas me acerco a él, le pregunto un par de tonterías, estoy nerviosa no hay nadie y es tarde me mira fijamente "te llevo?" me pregunta claro, respondo.
Me siento en su auto y al hacerlo se sube mi falda casi al punto de dejar ver mi ropa interior el me mira y sonríe le sonrío se acerca a mí y sin pensarlo beso su boca él continúa , siento como su lengua ardiente busca la mía su mano toca mi muslo y sube por mi entrepierna siento nuevamente cómo mi deseo por él acelera mi cuerpo pero no continúa vamos? me dice Con las mejillas ardientes y la respiración agitada sonrío asintiendo.
Se baja de su auto y abre mi puerta, al bajar mis movimientos dejan ver el escote y mis pechos que aún palpitan, mis pezones erectos se translucen por la blusa me levanta y sin darme cuenta los toma con sus labios, me abraza y acerca a su cuerpo besándome su pene esta erecto con el roza mi pelvis Lo deseo, sólo quiero tenerlo en mí.
Llegamos a mi casa. De espalda a él abro la puerta, me toma por la cintura y acerca a su cuerpo, me roza con su pene y siento su respiración en mi cuello, me besa cerca de la oreja y una contracción estremece mi vulva mojándome, abro la puerta, sin prender la luz el me abraza y sigue besando, tomo su cinturón y lo suelto busco su pene y lo siento inmenso, erecto, húmedo me arrodillo ante él y lo beso, lo meto en mi boca, lo hago muchas veces, exclama de placer me levanta , suelta mi blusa , mi sostén, busca mis pezones que erectos se agitan en su boca su mano entre mis piernas suben , corren y se desplazan desde mi clítoris a mi vagina.
Seguimos besándonos , me estremezco en sus brazos me lleva al sillón se sienta en él, toma su pene masturbándose erecto, inmenso, yo de pié él me acerca, sube mi falda , levanta una de mis piernas y con su lengua besa mi clítoris, lo lame , mientras sus dedos se introducen en mi vagina y con su otra mano sigue tocándose me excito más, siento que voy a estallar la luz tenue del lugar deja ver claramente me toma , abre mis piernas, vuelve a besarme, su pene erecto lo introduce en mi vagina lentamente, primero la cabeza , siento su forma y sus bordes gimo de deseo, de que llegue hasta el final, luego con un movimiento firme me penetra, su pene llega hasta el fondo tanto que no puedo evitar que se me escape un grito, me mueve de la cintura , me sube y baja mientras me penetra una y mil veces .muero de placer no puedo más otro movimiento y tengo un orgasmo, siento que me desvanezco en sus brazos el me besa me levanta se pone tras de mí apoyo las manos en el borde del sillón toma mis caderas y vuelve a penetrarme, fuerte y duro, gimo de placer, más! Le suplico , dame más!!!, él clava su pene mil veces , mientras mira como entra y sale de mi vagina, duro como un metal , ve mis labios hinchados con su movimiento, pero no le basta en un movimiento penetra mi ano tengo otro orgasmo, el vuelve a hacerlo una y otra vez, gime y antes de explotar me gira, me arrodilla , toma su pene , continúa masturbándose y eyacula en mí, en mi boca, en mi cara , en mis pechos , llenándome con su semen
Él es mi amor, mi maestro, mi profesor de Ajedrez.