Relato de marcos (1)
Capítulo I: Suspenso fatal.
No podía ser. Un cuatro con setenta y cinco. Toda la semana de estudio tirada a la basura. Y lo peor no era dejar para septiembre la asginatura después de tres intentos de recuperación, no: un insuficiente en alemán significaba no ir a Benalmedena, algo que a mis dieciséis años significaba el primer viaje de verano con mi grupo de amigos. Solos. Con la única compañía de Rufo, (el perro de Manu, ese chico tan especial para mí), una maleta más bien escasa de ropa y un puñado de euros para gastarlo en fines única y exclusivamente personales. Pero sin padres, eso era lo mejor de todo.
Que rabia sentí en ese momento: se me atascaron las formas verbales y dejé el vocabulario para el final, ese fue mí error. El gran error cuando ya estaba todo casi hecho. Felicidad plena por el final de curso y me llega con estas. Pero algo tendría que hacer, no podía perder el que sería el mejor verano de mi vida y yo estaba dispuesta a hacer cualquiero cosa, lo que hiciera falta...
Se me pasó por la cabeza una idea para acabar con esa frustración, al principio me pareció algo descabellada pero intenté autoconvencerme de que al fin y al cabo, al vez sería lo único que podría hacer para solucionar aquella situación. No tenía mucho tiempo para esa autoterapia, tres días después sería el día de revisión de exámenes. Sentía muchas cosas, pero no miedo: mi primera experiencia a territorio asiático con Manu me había abierto muchas puertas. Nunca imaginé que después de eso necesitaría tanto volver a repetir. Volviendo al tema, esa situación me provocaba mucho morbo...
Un profesor maduro, experto y con el añadido de que nos pudieran pillar. Las trres noches siguientes estuve pensando en aquello; en como entrar y como me dejaría llevar después. Cada vez que mi mente imaginaba eso, o tenía la necesidad de hacerme feliz a mí misma. Mis dedos eran lo único en ese momento. Incluso una fantasía llegué a tener fantasías con Henry, que así se llamaba mi profesor.
El subconsciente es el que asbe, él que te convence de lo que quieres y aún no sabes. Todo eso me empezaba a gustar.A lo mejor todo esto tendría doble recompensa...