Relato 21- Cena de amigos el sábado 23/12/17
La cena de amigos, como cada años, fue una fiesta total, con las mujeres, se desmadran, beben, bailan y todo después de un año de trabajo, tratando que el nuevo años, mejore las cosas. Me follé a Montse, la mujer de mi amigo Chema, ya veis, juro que no estaba previsto.
Cena de amigos el sábado 23.
Como cada año, varios amigos de la adolescencia, celebramos una cena de reencuentro, suele organizarlas Rafa, un tío genial muy activo que mantiene contacto con todos los compañeros. Terminamos siempre asistiendo más de 15 y menos de 20, cada año.
Como siempre el restaurante habitual, preparó un picote magnifico de entrante, unos langostinos cocidos, unas almejas a la marinera y pescado o carne a elegir. La hora las 21.00 h. como siempre Rafa se encarga desde las siete de la tarde de recordar a todos que hay que ser puntuales. En mi caso no tengo problema, mi apartamento en el pueblo está a escasos 200 metros del local. Llegué a Galicia el viernes noche, el sábado fui a desayunar a casa de mis tíos, para mi desgracia mis padres fallecieron, los echo de menos cada día, y estaba Andrea mi prima, me invitaron a celebrar la cena de Nochebuena con ellos, acepté. Me encuentro como en casa ya que las viviendas son contiguas y allí pase los primeros años de mi vida, antes de irme fuera.
Como estaba previsto sobre las 21,15 estaba la tropa saludándose, abrazándose, como demostración del cariño que se mantiene a pasar del tiempo. En total 17 personas, siete parejas, dos chicas y yo.
Una de las chicas es habitual, aunque siempre acudió en pareja, con su marido, se separaron hace año y medio, de hecho el pasado 2.016, no asistieron. Se llama Carol, pija, pija, pija, 35/36 años, está muy buena pero siempre fue empalagosa, presumida y como abogada una sabelotodo. La miré, se acercó con sus contoneos exagerados y me plantó dos besos en las mejillas, mientras me preguntaba:
¿Cómo estás? ¿Cuándo te casas?
Jajajaj, no tengo con quien, de lo demás no me quejo. Respondí.
Mientras miraba lo buena que está, pantalones de cuero muy apretados, botines tobilleros negros, una blusa blanca, que dejaba ver un sostén blanco y como siempre maquillada y peinada a la perfección. Pensé: “si no fuese tan prepotente, era buen plan”.
No duro mucho la conversación el revoloteo impedía centrar la conversación, con lo cual, pasamos a sentarnos cada uno donde consideró, pero siempre mujeres por un lado chicos por el otro, da igual quien te coincida enfrente, me tocó Montse, esposa de Chema, una chica genial, nos conocemos desde niños, su hermano Rubén y yo jugamos siempre juntos.
A su derecha, estaba Paula, una chica un poco más joven que nosotros, que también conozco desde siempre, se quedó viuda hace un par de años, su marido Dani, falleció en un accidente de moto. Paula lo pasó mal, fue un golpe para ella y para su hija que en ese momento debía tener un añito o dos. Es guapetona, está mal delgada que la última vez que la vi, y siempre tuvo un buen cuerpo. Vestía un traje chaqueta oscuro y blusa beige. Está muy bien la chica y es agradable, se le veía un poco cortada. Asistió porque es la cuñad de Rafa y se encargan de que salga y esté siempre bien, además de que su niña juega los primos y eso ayuda.
Bueno la cena como siempre, imposible mantener una conversación y cada cual interesado en un tema, todo transcurrió con normalidad, el salón del restaurante es grande y estaba ocupado por lo menos por 150 personas. Para animar el final de la cena, un trio interpretaba música de siempre, para bailar y pasarlo bien, no falto: PAQUITO EL CHOCOLATERO, os hacéis una idea.
Estuve muy tranquilo observando el bailoteo de las chicas y parejas, se acercó Rafa y me dijo:
-Jhon, entra en escena, ¿te veo apagado?
-No Rafa, estoy mirando, ya sabes sin prisas…Respondí.
-Por cierto, te comento que Loli (su suegra) quiere verte antes de que te vayas, quiere consultarte algo. Eso me dijo.
-Perfecto, pues el martes por la tarde paso a verla, ¿Qué tal tu suegro? Pregunté.
-Bueno, como un roble, pero tocado después del accidente de Dani, fue duro. Respondió.
-Lo entiendo, durísimo, además por culpa de un tío con carnet retirado y positivo en alcohol…ya ves. Dije.
-No me lo recuerdes. Mientras se iba hacia otra zona de la mesa.
Estaban disfrutando mucho de la velada, en mi caso, estuve tranquilo, hablando con las chicas y chicos, incluso alguno de otras mesas que conozco. A las dos de la madrugada, terminó el follón. Decidieron algunos irse a casa y otros al pub que hay a unos 200 metros, por la calle posterior de mi apartamento.
Fue genial, ya más agrupados, en este caso, los únicos sin pareja Carol y yo, éramos ocho, sonaba música bailable de los 80 y como comprenderéis terminamos todos animados. Incluso un par de veces Montse y Carol se abrazaron para bailar ritmo latino que metieron los Dj´s. Las copas estaban haciendo su efecto y las cinco la la madrugada llegaron pronto. La ventaja de no beber alcohol, es que mantienes una sobriedad que te ofrece oportunidades, muchas, creedme. Sobre todo si ellas desean una fiesta.
Chema estaba bastante perjudicado y Montse me dijo:
-Juan nosotros nos vamos, hemos bebido y estoy preocupada, Chema, no está para conducir y yo doy positivo fijo.
-Pues fácil, os acerco a casa. Respondí.
-Es una putada, mira Chema se queda dormido en el sofá-Dijo Montse mirando a su marido sopa apoyando la cabeza en el apoyabrazos de la esquina- Y hoy que tenía una fiesta preparada, hizo la vasectomía y hoy podíamos celebrarlo.
-Como lo siento, o sea ¿qué os quedáis con los dos niños?. Está bien. Dije.
-Si dos son suficientes, y ya está el cupo. La fiesta era para poder disfrutar tranquilos y no tener que tomar la píldora, tengo 36 años, los dos críos y ya toca disfrutar sin tener que estar tomando nada. ¿nó crees?
-Desde luego, pero bueno, si tomas la píldora podías tener relaciones igual. Dije.
-No es por eso, el médico vio otro problema en una piel que retenía su glande, le dio un cortecito y puso puntos, los sacaron ayer, pero nada importante.
-Si se lo que es, me lo hicieron a mí, hace ya muchos años, cuando tendría 19 más o menos, no molesta pero impide bajar la piel del todo. Respondí.
-Vaya conversación, increíble, jajajaja, es el efecto de las copas. Dijo Montse.
-Bueno, yo no bebí, no pasa nada por hablar de esto. Dije.
-Por cierto, porque no nos acercas a casa, igual Carol, también se viene, la dejamos a ella también, vino con nosotros.
Acordamos irnos, Montse, despertó a Chema, y entre los dos lo llevamos hasta el coche, les llevaría en el suyo. Volvería en un taxi.
-De eso nada, coges mi coche y mañana me vienes a recoger a las tarde, paso de que te gastes el dinero en taxi. Respondió Carol.
-Mañana yo trabajo, comienzo a las 14.00, puedes llevar el nuestro y vienes a comer. Dijo Montse.
-Montse, es una tontería que lo hagas madrugar, se lleva el mío y mañana después de comer lo trae y listo, yo estoy sola en casa y hasta las siete no me voy a casa de mis padres, ceno allí. La niña esta con el padre, el cabrón quiere el fin de año libre. Sentenció Carol.
-Bueno, pues te dejamos en casa y una vez meta Juan el coche en el garaje, ya pasa a buscar el tuyo, son 300 metros. Le indicó Montse a Carol.
-Vale, perfecto. Respondió Carol, mientras yo ayudaba a Chema a sentarse detrás, balbuceo y dijo.
-No debí beber, tomando pastillas…
-Pero tu estás loco, eres un inconsciente, eso te deja destrozado. Respondí.
Conducía yo, carol a mi derecha y detrás el matrimonio, seguíamos charlando y no tardamos en recorrer los 9 kmts. que nos separan de su urbanización. Viven en una línea de adosados, que compraron a buen precio al banco, fruto de la crisis.
Carol, tiene la casa cerca de la entrada, la pareja, en la parte final, después de la zona deportiva. Por supuesto, dejamos primero a Carol, era absurdo que tuviese que volver andando, la noche estaba fresca.
Montse se despidió de Carol, Chema iba grogui, no se enteraba de nada. Carol, dijo, dejo la puerta del jardín abierta y subes.
En un rato llegamos a su casa, esperamos que las puertas del jardín y garaje abriesen y bajé el coche. Ya dentro, le dije a Montse que le ayudaba a subir a su marido. Aceptó.
Nos costó más sacarlo del coche que llevarlo arriba por las escaleras, le dejamos sobre la cama de matrimonio y Montse los zapatos, el pantalón y el jersey, lo tapó, mientras observaba todo y dijo:
-Los tíos no valéis nada, bueno, si para poneros ciegos y dejar las cosas sin hacer.
-Bueno, debes disculparlo, hoy era una cena de amigos y las copas con las pastillas, ya sabes. Y creo que se porta bien contigo…Respondí.
-Bueno, ¿ya sabes que estuvimos a punto de separarnos? Dijo.
-No lo sabía…¿y eso?- Respondí.
-Pues que se fue una temporada para Asturias, a la delegación de la empresa y se enrolló con una compañera de trabajo. Lo supe todito...pero bueno, al final estoy aquí por los niños y por no disgustar a mis padres.
-Bueno, sería una caña al aire, ya sabes, cosas de chicos…Respondí.
- Si una caña de un año, es como todos un cabrón. Dijo.
-Venga ya Montse, no puedes generalizar, no es justo. Comenté.
-Bajamos, tomamos un café, ¿te apetece? Preguntó.
-Sí, pero rápido, porque está esperando Carol. Respondí.
-Tranquilo, lo arreglo en un segundo. Dijo, mientras bajábamos a la cocina.
-Pero bastante hace con dejarme el coche, no quiero molestarla tarde. Dije.
Sin respuesta a mi comentario, tomó el móvil, puso su dedo sobre mis labios y llamó:
-Hola Carol, ¿ya estás en cama? Preguntó, no podía escuchar la respuesta de Carol, era imposible.
Bueno, tranquila lo entretengo un rato y te lo mando. Hablaba Montse.
Lo estoy pensando, jajajaj, eres una zorrita, jajajaja, ¿y tú? Preguntó.
-Lo sé, lo noté toda la noche, jajajaj, pero es duro, es muy listo, jajajaj. Respondió.
-Bueno te lo paso pronto, vale. Chao. Se despidió esperando la despedida de Carol y colgó.
- La cafetera la veo. ¿Dónde tienes las cápsulas?, Pregunté.
-Aquí. Dijo.
En ese momento me fije en lo buena que estaba, al agacharse, para coger las capsulas, me dejó ver su culazo y las piernas su vestido mini dejaba ver bastante. Es una chica morena, muy morena, melena negra rizada voluminosa, su familia materna es de origen portugués y su abuelo emigrante en Angola, las mezclas suelen dar buenos físicos, sobre 1.70, buenas piernas, un pecho potente, sobre una 100, más o menos. Su cara es agradable y sobre todo es una chica muy espontánea y abierta. Cuando tenía 17 años, perdió su virginidad conmigo, en ese momento había dejado de salir con su hermana Rosa. Éramos una pandilla, nueve chicas y cinco chicos, en mi caso era el único rubio. Montse, vestía un vestido de noche, ajustado al cuerpo, medias muy tupidas y unos zapatos de tacón, todo negro, llevaba puesto un collar muy psicodélico. Está muy bien, no entiendo A Chema, no entiendo o SI, es posible que cuando llevas casi 20 años con tu chica, te casas, trabajas, centras tu vida, pasado un tiempo, te apetece probar aventuras y cerca de los 40, la cosa se agrava. Es la vida, se repite, nada nuevo.
Me entregó las capsulas en un paquete, lo abrí, encaré la cafetera y metí una, pero faltaba la taza, ella las traía. Me rozó su cuerpo con mi lateral, noté un gesto cariñoso, pero no pensé en nada especial, su esposo estaba durmiendo en la parte de arriba y no era el caso de decirle algo inconveniente. Pero ella cortó el momento:
-Sabes el otro día Carol, Loli, Rafa y yo tomamos un café, hablamos de los que habíais confirmado la asistencia, me encantó que estuvieses con nosotros.
-Gracias, para mí también es importante, por lo menos una vez al año, pasar un buen rato con los amigos. Respondí, mientras retiraba una taza.
-Pues te cuento algo, al volver a casa, Carol y yo hablamos un poco de ti, como habías dejado la relación con Sandra, era preciosa. Hablamos de lo que nos hicieron los maridos, ella fue más valiente que yo y lo mandó a la mierda. En mi caso, mis padres y los niños me hicieron recapacitar, pero se la tengo jurada. Ya le dije a Carol, a la mínima aprovecho. Dijo.
-No hagas tonterías, ya sabes que luego vienen los líos, si estáis bien pasa, es trabajador y sobre todo buen padre, ya está. Respondí.
-Jajajaj, se la devuelvo como me llamo Montse. Dijo, tomando un trago de café. Los dos estábamos de pie apoyados en la encimera de la cocina, uno al lado del otro.
-Venga ya, no hagas tonterías, distinta es Carol, ahora es libre y puede hacer lo que quiera, aunque ya sabes, su vanidad y orgullo, no le permitirán aceptar a cualquier hombre, es exigente. Dije.
-Bueno es que la verdad no hay nada que valga la pena, salir es perder el tiempo, ¿sabes? Colocados y alcohólicos, sin mayor interés que echar un polvo. Comentó.
-Bueno, habrá de todo, ya sabes, estadística. Comenté.
-¿sabes que me dijo el otro día Carol? Preguntó.
-Ni idea. Respondí.
-Pues que siempre le habías gustado, pero comenzaste a salir con Adela y luego te fuiste, fue todo muy rápido, a mí también me gustabas, lo sabes. Tenía celos de mi hermana, jajajaj.
-Jajajaj, éramos un grupo de amigos, es lógico que nos llevásemos bien y normal que tuviésemos líos entre nosotros, tantas horas juntos, en clase, en el deporte, en la piscina, en la playa, jajajaj. Normal.
-Pues te voy a confesar lo que le dije. -Comentó, se movió y me miro de frente- Le dije, que si le ponía los cuernos a Chema, quería que fueses tú mi amante. Se quedó mirándome, esperando mi respuesta.
-Sabes que te quiero mucho, que tuviste conmigo el primer sexo, ¿recuerdas?, pero el tiempo pasa y ahora estás casada con Chema. Dije.
-Ya, pero de verdad, tengo pensado montarla gorda, en febrero, estaremos en la feria en Madrid, me encantaría quedar contigo. Dijo.
-¿en la feria? Pregunté.
-Si hay una feria del sector y me encargo de todo, ya tengo contratada la instalación a Marva, espero que todo quede bien y podamos sacar fruto. Por la noche, después de las siete, me recoges y me enseñas bien Madrid. Dijo.
-Eso no es problema, tranquila, faltan un par de meses. Respondí.
Me miraba fijamente, no dejó de ver mis ojos, y dijo:
-Cabrón eres el diablo, recuerdo tu disfraz, de demonio, te iba que ni pintado, sigues siendo irresistible. Dijo.
-Los años no pasan en balde, tengo 37, ya, estoy empezando la bajada, jajajaj. Dije.
-No lo creo, me encantaría saber si sigues siendo tan potente, recuerdo que me encantaba tu olor, veníamos del mar y eso no se olvida jamás. Dijo acercando la cara.
-Montse, sabes que me encantas y ahora mismo te deseo, pero no es el momento. No me dejó terminar, me beso, con intensidad, dejo la taza sobre la encimera y se colgó de mi cuello. Uno es débil, no me resistí. Cuando llevabamos un rato besándonos, le recordé:
-Me espera Carol, se dará cuenta. Dije.
-Lo imagina, pero le quedará la duda, quiero que me hagas disfrutar, estoy desinhibida y super-caliente, mira fui a la cena sin bragas…Dijo tomando mi mano, acercándola a su entrepierna.
Mi polla dio un salto inmenso, estaba ya a punto, ella cortó:
-Espera subo y veo como está este, cierro la puerta y bajo. Se fue sin darme tiempo a decir nada.
Me quedé un poco preocupado, estaba en casa de Chema, el perjudicado y su mujer queriendo follarme, así de claro, quería follarme, prometo que no hice nada para que sucediese ni lo imagine durante la cena, es más pensé en Carol o Paula, pero nunca en ella.
Bajó, entró en la cocina, dejo la puerta entreabierta, me tomó de la mano y volvimos a besarnos, estaba como una loba encelada. Me gustó saber que había ido sin bragas a la cena, joder como arriesga esta tía, pensé.
No dejábamos de comernos a besos, me paré en su cuello, sus orejas, le hable muy suave al oído, magreaba sus tetas, ella gemía, estaba entregada, repetiríamos aquellos momentos de placer que vivimos en nuestra adolescencia.
Poco a poco, llegamos a la mesa de la cocina, la subí sobre ella, abrí sus piernas, pasé dos dedos por el coño, ummmmm, sentí su humedad y calor, a cien me puso. Mientras la seguía besando, ella gemía constantemente. Me vino a la cabeza Chema, dormido, si se despertaba y escuchaba ya podía despedirme.
Abandone el pensamiento y seguí metiendo los dedos en el coño. Montse estaba gozando, caliente, muy caliente. Decidí parar y meter mi cabeza entre sus piernas, jugué un poco con sus muslos y sus labios externos, hasta que ella apretaba mi cabeza y decía.
-Joder, que ganas, tenia, uffff, me encanta, llevo tres meses sin follar, uffff, sigue, sigue, aggg, siii.
Mientras le comía el coño, metí dos dedos dentro de su cueva caliente, jugué buscando el punto G, comencé la llamada y sabía que no tardaría en correrse, descargó como un grifo:
- Aggg, agggg, aggg, aggg, oooo, aaoooo, aoooo, siiii. Jadeaba conteniendo su tono, vibraba y descargaba corrida a tope, flujo sobre la mesa.
Esperé a que se tranquilizase, en un momento, creí que aquello terminaría ahí. Pero se levantó y me dijo:
-Espera, vuelvo enseguida. Subió a la planta alta, escuche como abría y cerraba la puerta. Bajó enseguida.
-Este hasta mañana por la tarde no es persona, puta bebida. Dijo.
-Bueno Montse, es un día especial. Dije.
-Eso quiero, quiero un polvo especial, ven. Dijo, besándome de nuevo.
Al rato, estaba apretando el cuerpo de Montse contra la encimera, seguíamos vestidos, pensé que lo mejor, era soltar mi polla y darle el primer polvazo.
-Montse, no tengo condones aquí, dije.
-Pasa, no hay problema tomo la píldora desde hace años. Respondió.
Subí su vestido, quedaron las piernotas a mi vista con las ligas de las medias oscuras, mientras nos besábamos, agarró mi capullo y lo rozó en la entrada.
-Cabrón pedazo polla, cuantas veces la eche de menos, joder. Dijo, dejando entrar un poco de capullo.
-Toda tuya, goza, eres un casooo. Dije, apretando mi polla y tirando de su culo, entró un buen trozo. A partir de ese momento, empujaba, envestía el coño de la mujer de Chema, que estaba caliente y había que atenderla. Aceleré el ritmo, fuerte, que me notase, que sintiese lleno el chocho, que se corriese como una perra.
Jadeaba, gemía, se colgaba de mi cuello, una y otra vez para clavar más la polla en su caliente y húmedo coño. La levanté sobre mi polla, ella subía y bajaba, mientras daba envestidas una y otra vez. No tardó en respirar más rápido y fuerte.
-Ahhh, me corro, dios que buenooo, me corrooo, ahhhh, siiii, siiiii, agggg, ahhhhh.
Convulsionaba y jadeaba de placer, en esa postura para mi es genial, es muy difícil que me corra y aguanto. Una vez se relajó, me dijo:
-Ven, quiero que me folles a cuatro patas, en el sofá. Salimos hacia su salón.
Me volvió a besar, quite de todo mi pantalón y su vestido, quería hacer gozar de verdad a Montse, era una oportunidad, no quería dejarla insatisfecha.
Quite los tetones de las cazuelas del sostén, duros, duros, lamí su pezones y sin más la coloque de rodillas sobre el sofá de cara hacia la pared.
Tenía ganas de follarla bien, que sintiese el poder de mi polla bien, le pegué un empujón fuerte y clavé el capullo, agarré sus tetas por debajo, mientras empujaba le hablaba:
-Como te gusta, ehhh, te gusta que te folle, te gusta la primera polla que te rompió el virgo, ehhh, te gusta, eres una putita, te estoy follando y tu marido arriba, ehhh. No dejaba de bombear el coño de Montse, me ponía a cien, está muy maciza, una MILF es la definición. Pensé estoy seguro que no tiene suficiente en casa, menuda jamona, esta para follarla duro.
Mientras empujaba una y otra vez, ella se quejaba a veces, con mis embestidas, luego saque la polla hacia afuera y solo con el capullo en la entrada me puse acelerar el ritmo, solo apretaba el capullo, cada seis o siete golpes de capullo, metía uno al fondo. No quería que terminase el momento, estaba follando a Montse en su casa, estaba llenando de nuevo el coño que desvirgue de chico. Ufff morbo a tope. Seguí con el mismo ritmo, pero dejé de apretar las tetas, para meter mis brazos debajo de su cintura para buscar su coño. No tardé en encontrar el clítoris enorme que tiene, le di dos tironcitos, gimiooooo, uffff, esta se va a correr como una perra, pensé.
Le seguí metiendo polla, y presionando el clítoris entre dos dedos, mi ritmo crecía, llevaba casi 20 minutos bombeando y mi corrida, podía estar cerca. Queria sacarle la tercera corrida y no tardó en decirlo:
-Juannn, me voy a corrrerr, no pares, sigueee, sigue.
-Córrete perra, te voy a llenar el coño de mucha leche, mucha, te voy a llenar toda, eres una puta, me encanta follarte. Dije, me salió una palabra fuerte.
-Siiii, soy tu puta, soy tu puta, no pares dame leche, dame leche, quiero ser tu putaaaaa. Siiiiiiiiiiiiiiiii, aggggggggg, ahhhhh, ahhhhh. Comentario y espasmos eran simultaneos, se estaba corriendo como una loba, seguí bombeando.
La situación me superaba, sin más dije:
.Dios, me corroooo, Montse, me corro, estas buenisimaaaa, ahhhh, agggg, ahhhh, agggg. Mi leche estaba llenando su coño, mientras seguí empujando y apretando su clítoris, sin dejar de descargar.
-Sigue, sigue, sigue, que extraño, me encanta, me corroo de nuevoooo. Ahhhh, aggg, agggg, ahhhh. Dijo, mi polla largaba los últimos chorros de leche-
Me quedé encima de ella, acababa de correrme en el coño de la mujer de Chema, así cobraba ella la ofensa. Cuidado el rencor en una mujer es demoledor.
Nos relajamos, mi polla aún seguía dentro, me separé hacia atrás y la polla al salir hizo un plofff, estaba aún potente, había hecho gozar el coño de Montse.
Fuimos al baños, nos vestimos de nuevo y cuando iba a despedirme, me dijo:
-Ven sube conmigo, quiero despertar al cornudo, que te vea, ¿sabes aun me chorrea tu leche por las piernas? No me limpie, me pone hablarle llena de tu leche, ven. Subimos al dormitorio.
Despertamos a Chema, no sabía dónde estaba, preguntó la hora y dijo:
-Joder, menudo pedal, son las seis y media no me enteré de nada, ufff, me duele el coco, oye, quédate a dormir, es muy tarde para que te vayas ahora.
-Me voy, quédate tranquilo, no bebí y voy a por el coche de Carol. Dije.
-Fóllate a esa cabrona, esta buena, buena, pero es idiota perdida. Fóllala. Comentó, sin saber que ya me había follado a su hembra y que estaba a su lado con el coño lleno de mi leche.
- Bueno descansar, me voy. Hasta mañana. Dije mientras salía del dormitorio. Me acompañó Montse hasta la puerta, me dio un beso y dijo:
-Dos cosas, quiero: primera, que seas mi amante y segunda que te quedes a dormir en casa de Carol y le des un buen polvazo, lo necesita y desea que tu des el paso, ya sabes como es. Sé que le encanta que su hombre la domine, jajajaja.
-Vaya, esto estaba previsto, sois unas golfas. Dije.
- Chuuuuu, haz lo que te digo, te llamo el martes y si te apetece el miércoles por la tarde, voy a tu apartamento, guapoooo. Dijo dándome otro beso.
-Hablamos, descansa….Salí de casa de Chema y Montse, en dirección a casa de Carol, la noche había sido genial y no sabía que me deparaba el desayuno, en casa de su amiga.
Esto sucedió el pasado sábado, quiero recomendaros a todos que folléis bien a vuestras hembras y si sois infieles que nunca sospechen, en caso contrario o te ponen como el reno de Papa Noel o la maleta en la puerta. Atenderlas…
Espero que os guste, contaré en el siguiente la mañana con Carol. Gracias por leerme.