Reinado de sangre (II)

AVISO: Esto no es una serie de relatos más. Los hechos aquí narrados pueden llegar a rozar lo inverosímil (dadlo por seguro que lo hará) y la historia es 100% inventada. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Si buscas testimonios personales me temo que no los encontrará.

-buenos días tío.

Sebastián se giró al escuchar la voz del joven príncipe, le miró valorando el hombre en el que se había convertido o mas bien en el que se estaba convirtiendo. Su sobrino era un palmo mas bajo que él, de constitución mas bien delgada aunque sus músculos eran testigo del trabajo con la espada el escudo y la lanza al que él mismo le había sometido.

Su mirada poseía el color de su madre, pero ni de lejos su astucia, el muchacho era demasiado joven, demasiado alegre y demasiado confiado, no había vivido mas de diecinueve veranos, sólo era un niño que aún no debería, no merecía ocupar el cargo de un hombre, sin embargo esa misma noche ese niño seria su nuevo rey.

-llegas tarde- contestó demasiado molesto como para mostrarse indulgente.

-Un rey no llega tarde- dijo sonriendo mientras se pasaba una mano por su oscuro cabello.

-Aún no lo eres chico, y una guerra no esperará a ningún rey, tampoco lo hará la muerte-gruñó pasándole una de las espadas de entrenamiento.

El muchacho la cogió al vuelo y notando el tono irritado de su tío intentó disculparse- Lo siento , pero fui al patio de entrenamiento y me dijeron que me esperabas aquí,en tu terraza privada, ¿puedo saber a que se debe?-.

Sebastián respiró hondo intentando calmarse y miró a su alrededor, se encontraban como bien había dicho el muchacho en su terraza privada, un lugar lo suficientemente grande para entrenar, lo suficientemente discreto para enseñarle al rey que significaba ser rey.

-kyrian hoy es un día especial, hoy dejaras de ser un príncipe para convertirte en el soberano de Tetandia, el mar será el único espectador que necesitarás, voy a enseñarte algo que no deberás olvidar. ¡En guardia!- ordenó con un poderoso rugido antes de lazar el primer tajo contra él.

El muchacho lo desvió sin mucha dificultad, lo mismo hizo con las siguientes estocadas, pero Sebastián se movía cada vez mas deprisa, era un gran guerrero forjado en innumerables batallas y la experiencia le otorgaba una ventaja que kyrian aún no había tenido oportunidad de adquirir. Pronto el acero sin filos hizo diana en el futuro rey que comenzaba a agotarse, pues contra mas fallaba mas rabia sentía y se dejaba llevar por los sentimientos en lugar de la razón. Se acercó demasiado a su tío incluso logró soltar una mano de su espada y propinarle un guantazo que hizo sangrar al poderoso guerrero, pero éste solo escupió al suelo y separó al chico de un empujón que volvió sin miramientos lanzando un revés. Su tío lo esquivó y aprovechando la cercanía del muchacho cruzó su empuñadura entre los brazos de su oponente que retorció hasta hacer que este soltara la espada. Luego con un movimiento curvo a su alrededor se colocó a su espalda presionando la espada contra el cuello de Kyrian.

-tío... - consiguió vocalizar el muchacho mientras intentaba recuperar el aliento .

-¿sabes que significa ser rey?- preguntó el vencedor apretándose mas contra la espalda de su presa.

-¿ Qu.. que?- preguntó confuso al notar los poderosos músculos del caballero envolviéndose a su alrededor.

-He dicho que si sabes lo que significa ser rey- siseó en su oreja antes de sacar una daga afilada que llevaba al cinto.

Cortó las cuerdas que aseguraban el coleto de cuero que protegía al hijo de su hermana durante los entrenamientos haciendo que ésta cayera al suelo. - piensa bien tu respuesta hijo- gruñó antes de hacer lo mismo con la fina camisa que llevaba bajo el coleto, dejando al descubierto el joven torso del muchacho .

-un rey... un rey es el que gobierna sobre todos los hombres, un rey es poderoso- contestó bastante nervioso, por los actos de su tío. Éste dejó escapar una suave carcajada que erizó el cabello del muchacho.

-No kyrian, un rey no es solo un gobernador- susurró deslizando la fría hoja por su pecho sin cortar su fina piel libre de cicatrices, hasta llegar a sus calzones.- Un rey es mucho mas que eso, un rey es un esclavo del pueblo...- rajó el cordón que aseguraba esa prenda y tiró la daga a un lado antes de introducir su mano dentro para acariciar las joyas reales mientras frotaba las propias contra el trasero del muchacho.

-¡¿TIO?!- exclamó presa de la incomprensión que le originaba el no saber porqué su tío estaba haciendo eso y porqué no le molestaba tanto como debería.

-Ya no soy tu tío – contestó frotándole con menos gentileza- ahora soy el peso que hay tras la corona, soy todos aquellos que se arrodillaran ante ti mostrándote su mejor cara, podrá ser placentero- susurró mientras el joven se inflaba cada vez más bajo su toque- pero te aseguro que habrá mucho mas detrás de todo eso, muchos querrán que caigas.- presionó sus rodillas en el hueco de las suyas y le empujó para que cayera al suelo colocándole a cuatro patas mientras seguía masajeándole. - Deberás aguantar como un hombre, salir del apuro como un hombre y cuando no puedas, deberás aceptar la derrota como un hombre, no, como un hombre no , como un rey.¿Estás dispuesto a asumir todo lo que ello conlleva?.- Tiró la espada que presionaba el cuello del chico lejos, se bajó sus propios calzones y terminó de librar al joven de los suyos, frotó su miembro contra sus nalgas para que notara su grosor, su dureza, su anhelo....

El chico tragó salíva inmóvil, intentó pensar en algo mas que su erección la de su tío y la mano que seguía trabajando en él mejor que cualquier mujer que había probado hasta el momento. Creía entender lo que él le estaba diciendo, sabía que la corona llevaba consigo una gran responsabilidad así que asintió y con voz firme contestó- si, lo estoy-.

Sebastián lleno de ira por la suficiencia de kyrian enterró su miembro en su trasero sin ningún miramiento provocando un gemido de dolor y placer en el muchacho, descargando toda la ira y frustración que sentía ,por no ser él quien portara la corona,sobre el necio que tenía delante. Poco a poco aumentó la velocidad de sus embestidas y con ella la ferocidad, pronto dejó de masajear el miembro del heredero para agarrar su pelo y su cadera y darse así mas impulso. Solo buscaba su propio placer ,aunque de fondo escuchaba los gemidos de su montura que le indicaron el momento en el que el principito había manchado el suelo con lo que habría podido ser el futuro rey de Tetandia, pero él aún no había acabado así que siguió disfrutando hasta que terminó en el interior de Kyrian. Se quedó allí un par de segundos y luego se retiró volviendo a vestirse como si nada.

-Espero querido sobrino que esto te haya servido de lección, intentaré guiarte en tu camino hacia la grandeza, pero si no dejas que te ayude caerás como lo hizo tu padre.

El muchacho asintió , no le quedaban demasiadas palabras tras haber experimentado esa mezcla de placer y dolor. - acudiré a ti siempre que haga falta-

• larga vida al rey- Dijo Sebastián antes de marcharse y dejar al muchacho en el suelo de aquella terraza.