Rehaciendo mi vida 5 - Sombras del pasado
Aparecen por sorpresa gente de mi antigua vida en mi empresa.... mi ex-cuñado.
REHACIENDO MI VIDA
- SOMBRAS DEL PASADO
El miércoles de esa misma semana llego la jefa con una cara rarísima, según entro se dirigió a mí y me pidió por favor que me quedara unos minutos a la hora de salir por la tarde para hablar con ella, algo a lo que accedí suponiendo que seria para hablar de lo del lunes con su prometido. Mis compañeras al oírlo se ofrecieron a quedarse para echarme un cable con la jefa si era necesario, porque como me insinuaron se habían dado cuenta de la relación más o menos tensa y fría que manteníamos la jefa y yo. No acepte su ayuda por considerar no necesitarla pero de todas formas se lo agradecí mucho, más que nada por demostrarme ser compañeras de verdad.
Cuando llego la hora de la salida me dirigí hacia el despacho de la jefa, le pedí a la secretaria Silvia permiso para verla y esta mientras recogía sus cosas me dijo que me estaba esperando y me deseo suerte. Supuse que Adriana, Consuelo y Marga habían comentado con las demás lo que paso con el prometido de la jefa. Toque a la puerta y me jefa me dijo que por favor pasara. Entre y le pregunte directamente y sin preámbulos que es lo que deseaba. Ella me estuvo preguntando por el trabajo, me di cuenta de que estaba haciendo tiempo hasta que todo el mundo se fuera como así efectivamente fue, una vez solos vi como endurecía el gesto y con voz cortante me paso directamente a preguntar por lo que había pasado con su prometido. Me dijo que si tenía algún problema con ella no debería de pagarlo con su prometido y tener las suficientes narices para hablarlo con ella directamente, después siguió poniéndome las cosas claras según las entendía ella por lo que le había contado su prometido, lo que más me "alegro" es que en toda esta conversación salió tres o cuatro veces a colación "mi amiguita" como denomino Ainoa a Violeta.
En ese momento me pareció lo más oportuno no defenderme o entrar con ella en discusiones que posiblemente solo me llevaran a perder cualquier oportunidad que tuviera con ella, las referencias a Violeta me sugerían mas una novia celosa que una prometida cabreada porque pusiera en su sitio a su respectivo. Cuando termino y me dijo que esperaba mi explicación me levante sin contestarla mientras veía su mirada de sorpresa por mi reacción. Me di cuenta que era como una gata esperando pelea y eso era precisamente lo que no quería con ella, así que intente no darla opciones a discutir conmigo en algo que solo me perjudicaría sin posibilidades de sacar el mas mínimo partido a mi favor. Decidí enfrentarla a la verdad de su prometido para todo el mundo, intentar quitarla la venda de los ojos, aunque pensaba que no existía tal venda en ellos y que aguantaba con el por algún motivo que desconocía, pero al menos me serviría para intentar confirmar este extremo. Cuando llegue a la puerta me volví hacia ella y le expuse mis razones para lo de su prometido:
- 1º Su prometido empezó todo al intentarse ligar descaradamente pese a que estaba claramente conmigo a mi amiga delante de mis narices, y por si no tuviera bastante con ella además tirar el anzuelo a mis compañeras, ignorándome por completo, demostrando su mala educación y la clase de persona que es.
- 2º Cuando se presento a mi lo hizo dejándome entrever que debería andarme con pies de plomo con lo que decía o contaba de él, porque es su prometido, y como tal podía influir en usted para que me despida, e imagino que algo similar ha hecho con mis compañeras para que estas le aguanten como le aguantan.
- 3º El me intento vacilar humillándome delante de mis compañeras, mi amiga y de la gente que estaba poniendo la oreja a nuestro alrededor dejándome por imbécil, el problema es que no me deje y el que quedo como un imbécil delante de todo el mundo fue el.
- 4º El me puso de mote "el Arcángel" según el por mi nombre, por donde trabajaba, con los Ángeles, y porque le dio la gana, así que yo le puse de mote "el baboso" porque lo es con todas las tías que ve incluidas mis compañeras y el día ese con mi amiga, además de porque me dio la gana también, exactamente igual que él hizo conmigo.
- 5º La verdad es que a su prometido le tengo atravesado por lo del mote, pero ahora mismo que he visto con mis propios ojos cómo es, le tengo una tirria que no le puedo ni ver, por ser lo sinvergüenza que es, y por la falta de respeto que muestra hacia usted al intentar ligar con las compañeras del trabajo de su prometida poniéndolas en una situación difícil, aprovechándose de que usted es su jefa directa.
- 6º Espero que me juzgue por mi trabajo y no por mis problemas personales con nadie fuera de aquí, incluido su prometido porque que yo sepa el no tragar a un gilipollas y pegarle media docena de cortes no es delito todavía en este país, así que si solo era eso hasta mañana, que pase una buena noche.
Abrí la puerta para salir mientras veía a Ainoa con la boca abierta por lo que le había dicho, me di cuenta que estaba intentando digerir todo lo que le había dicho de su prometido en tan poco tiempo, esto tan brusco no se lo esperaba, esperaba que me defendiera no que atacara con tanta saña. Dado su desconcierto decidí aprovechar para, como se suele decir, intentar golpear en la línea de flotación, pero eso sí, siendo absolutamente sincero con ella, algo que estaba seguro ella notaria. Me pare un momento y volviéndome hacia ella empecé a hablarle antes de que pudiera decirme algo .
- Y: Jefa me podría hacer usted un favor, ¿sí?
- A: ¿El qué?
- Y: Si ve a Ainoa, a Mi Dama de la Nieve, dígala que la añoro y la echo mucho de menos .
Salí cerrando la puerta tras de mí y me fui directo hacia el ascensor, no por temor a que Ainoa me dijera algo o a que se rompiera su momento de confusión, sino porque note que me estaba empezando a emocionar y los ojos empezaban a picarme al recordar a aquella Ainoa de la cabaña, a mi Ainoa, y si, joder ya lo sé, soy un blandengue sentimental, me emociono fácilmente, tan fácilmente como me cabreo, eso no hace falta que nadie me lo diga.
Cuando el ascensor iba por el piso de abajo me di cuenta que no me había llevado unos documentos que quería estudiar, no me eran necesarios, pero por adelantar algo de trabajo había pensado llevármelos a casa, así que aproveche que pararon el ascensor para montarse y me salí de el. Dado que el ascensor tenía que bajar y volver a subir si lo quería coger de vuelta al piso de arriba me seria más rápido subir un piso a pie y recoger esos papeles. Empecé a subir maldiciendo mi olvido, solo me faltaría ahora encontrarme con la jefa y terminar discutiendo, cuando llegue a mi oficina no llegue a entrar, por la cristalera del despacho de Ainoa pude ver como estaba llorando, además pude observar perfectamente cuando en un gesto de rabia se quito el anillo de compromiso de su dedo y lo estampo contra la puerta de su oficina, o por lo menos, para ser más exacto como salía volando en esa dirección.
Me retire antes de que pudiera verme y baje por las escaleras hasta el parking para coger el coche. Fui todo el camino pensando en qué puñetas podía estar pasando con Ainoa, me estaba dando la sensación cada vez más intensa de que yo le gustaba y que además a su prometido no lo tragaba, ese gesto del anillo lo veía con un significado muy claro lo que unido a que mis compañeras me habían comentado de que no se la veía feliz con él, como si no lo quisiera .. El problema es que tampoco veía que yo pudiera hacer algo todavía, si me adelantaba a intentar hacer algo sin saber que pasaba la podía fastidiar del todo y cada vez tenía más claro que quería a Ainoa para mí. Definitivamente lo que si tenía meridianamente claro es que me había quedado colgado de ella en unas pocas horas pasadas en la cabaña de la montaña, hay que joderse.
Al día siguiente el anillo volvía a lucir en su dedo otra vez. Llevaba ya trabajando en la empresa algo más de dos meses cuando me encontré con la noticia de que tendríamos que presentar Marga, Adriana, Consuelo y yo el proyecto ante los clientes, en ese momento me dijeron que era un proyecto que oscilaba en torno a los 2.3 Millones de Euros de beneficios para la empresa, lo que lo convertía en un proyecto importantísimo en mayúsculas muy mayúsculas. Lo que yo había aportado al proyecto de las tres en estos dos meses fue estabilidad, había sido capaz de localizar los puntos débiles del mismo y reformarlos anulándolos. Por lo que nos habían informado los proyectos presentados por la competencia eran más atractivos pero tenían numerosos puntos débiles, nuestra mayor baza era su homogeneidad, mis compañeras habían conseguido hacer un proyecto extremadamente eficaz y con eso esperábamos poder llevarnos el gato al agua como se suele decir. El miércoles por la tarde a primera hora, recién llegados de comer, nos dijeron a los cuatro que nos tomáramos el jueves libre y acto seguido nos mandaron para casa, porque nos querían frescos para presentar el proyecto el viernes a los clientes, que el nuestro era el último que verían para después decidir qué hacer. Esto del día libre fue porque habíamos estado quedándonos los cuatro hasta las tantas para revisarlo todo de arriba abajo desde hacía casi diez días y los jefes decidieron que la única forma de que descansáramos era prohibirnos ir por la oficina. Esa era una de las cosas que me gustaba de esta empresa, pensaban.
Ese miércoles invite a Violeta a mi casa, comprometiéndome a llevarla yo al trabajo al día siguiente cosa que evito pidiéndose el día libre e informándome que esa noche me preparara para jugar juntos a muchos juegos, que me debía una muy grande de la ultima vez, que según ella prácticamente me había dejado a dos velas. Esa noche después de cenar terminamos como no podía ser de otra manera en la cama.
Según nos desnudamos hicimos un 69 por petición expresa de Violeta, que por lo visto quería seguir practicando lo que antes no la gustaba, pero que según ella conmigo no la importaba demasiado. La verdad es que sentir la cálida y húmeda lengua de Violeta subiendo por el tronco de mi pene, para introducírselo en su boca después. Mientras sus dedos arañan mis testículos y su lengua se intenta enroscar en mi pene era demasiado para mí. Notando que estaba a punto de correrme en un santiamén, empecé a trabajar su clítoris, que como sabia de la vez anterior, era muy sensible, logre que se corriera en mi boca pero no por ello perdió tiempo en seguir con mi pene, solo estuvo parada lo que le duro el orgasmo para a continuación empezar a succionármelo mientras su lengua parecía enroscarse en el tronco de mi pene dentro de su boca, lo que me provoco un orgasmo intensísimo, no se la cantidad de leche que solté en su boca, pero lo que si se es que no desperdicio ni una sola gota.
Nos abrazamos y nos besamos durante un ratito mientras nos recuperamos, para de seguido colocarme yo encima suyo e iniciar una muy lenta penetración de mi pene en su coñito, mientras mi pene se iba introduciendo en su interior ella y yo nos besábamos mirándonos a los ojos, sentía en mi boca, en mi lengua, sus gemidos y jadeos al sentir mi pene introduciéndose en su interior. Por los gestos y palabras que decía entendí que Violeta esperaba que la cabalgara con rapidez y dureza buscando mi propio placer motivo por el cual hice justamente lo opuesto a lo que ella creía. Empecé a moverme en su interior, pero con delicadeza, despacio, cambiando de ritmo, sintiendo su piel, su sexo, sus contracciones, sus jadeos, sus gemidos dejándome llevar por las indicaciones de su cuerpo para a la vez alargar la consecución de su perseguido orgasmo. Retrasándoselo, dejándoselo entrever sin llegar a él, haciéndola desearlo para que justo cuando ella empieza a desesperar de lograrlo dejarlo llegar suavemente, acompañándola en el orgasmo con mis embestidas, aumentando la velocidad en esos momentos para intentar hacerla coronar por segunda vez la cima. Una vez conseguida esta segunda vez con mucho cuidado de no acompañarla yo también, permanecer abrazándola y besándola, dándola mimos y caricias, demostrándola que estoy ahí esa noche por y para ella. Consiguiendo varias veces más su placer y mi placer a lo largo de esa noche, hasta quedar los dos completamente agotados y satisfechos. Esa noche solo emplee la dulzura con Violeta, nada innovador pero todo dulce y suave, muy suave. Como ella misma me dijo a la mañana siguiente, una noche distinta a cualquiera que hubiera tenido antes, una noche de dulzura, cariño y placer, algo que la gustaría repetir en más ocasiones según sus propias palabras. Por un momento temí haberme pasado con ella y que se pudiera enamorar, por mucho que me lo negara firmemente.
Llego el viernes, y llego la presentación del proyecto. A mí me mandaron a unos asuntos a otra planta, de la exposición se encargarían mis tres compañeras, yo me incorporaría a la reunión cuando acabara, por lo que me pidieron que por favor fuese lo más rápido posible. La sala de reuniones esta en nuestra planta, y da pared con pared con el despacho de Ainoa, aunque más que pared la verdad es que comparten ventanas con persianas. Desde el despacho de Ainoa se puede ver lo que pasa en la sala de juntas y al revés, esto lo explico porque más adelante tendrá su importancia para entender la situación.
Cuando baje otra vez me salió Silvia al paso para informarme que los clientes estaban reunidos ya en la sala, eran dos los directivos que habían ido por parte del cliente, además de Ainoa y mis compañeras había varios directivos de la empresa también, aquellos que sus departamentos se verían afectados por el contrato y uno de los jefazos como soporte para cualquier decisión que hubiese que negociar a última hora con los clientes. Me indico que podía pasar dentro cuando quisiera, me deseo suerte al igual que el resto de mis compañeras, que me hicieron gestos dándome ánimos. Era mi primera vez en esta empresa y además con un contrato tan importante, estaba algo nervioso. Llame a la puerta, pedí permiso y entre.
Cuando me di la vuelta y avance hacia mi puesto en la mesa, me había dejado un sitio justo al lado de los clientes, no llegue a dar ni dos pasos antes de quedarme con la boca literalmente abierta por la sorpresa. Frente a mí, levantándose a toda prisa para abrazarme surgían dos sombras de mi pasado encarnados en nuestros clientes, Felipe que era el hermano de Sandra y Raúl, el novio de Felipe, algo que solo conocíamos una docena de personas que no incluían a ninguna de su familia y que era directivo en la empresa que tenía el padre de Felipe y Sandra con otros dos socios. No quiero ni imaginarme la cara que tuve que poner en ese momento.
Nos abrazamos y ambos empezaron a bombardearme con preguntas sobre como estaba, que hacia allí, porque había desaparecido sin dejar rastro, etc sin importarles un pimiento que todos nos estuvieran mirando alucinados o que estuviéramos en medio de una reunión. Creí que de esta me despedían, les hice ver a los dos que estábamos en medio de una reunión de negocios, que mas tarde podríamos hablar tranquilamente de "asuntos personales", ambos aceptaron.
No obstante antes de que nos "reintegráramos" a la reunión, Felipe me hizo la observación delante de todo dios de que tendría que explicarle que había pasado cuando rompí con su hermana, entre nosotros dos y su madre, porque según él, entre ambas los estaban volviendo locos a su padre y a él. Me fije como los directivos de mi empresa empezaban a impacientarse sin por ello dejar de mostrar ciertos gestos que denotaban curiosidad por la situacion, mis compañeras ponían gestos de esperanza de que continuáramos para enterarse de todo y Ainoa tenía un rostro completamente inexpresivo, pero cuando Felipe dejo caer que era mi Ex cuñado vi perfectamente como torció el gesto durante apenas un segundo para recuperarse en el acto. Entonces Felipe me sorprendió de verdad, fue como si para el no hubiera pasado nada entre su hermana y yo, algo que sinceramente no me esperaba, y muchísimo menos lo que paso después dejándome prácticamente a mí la decisión de aceptar o no nuestro proyecto .
- F: ¿Este proyecto es cosa tuya?
- Y: No, es de mis tres compañeras aquí presentes. Le indique a las tres.
- R: Nos referimos a si tu le has dado tu visto bueno Gaby.
- Y: Si, yo he colaborado y en mi opinión es un proyecto que os viene perfecto, hasta ahora no sabía para quien era pero si todo sigue como lo teníais desde luego os ira como anillo al dedo.
- F: Entonces para nosotros vale, si tu lo apruebas nos quedaremos con este proyecto tal y como se acordó en el preacuerdo. Esto dirigiéndose al directivo de mi empresa que estaba allí, que acepto en el acto.
Aun a riesgo de que me pegaran la patada en el culo según terminara la reunión, Felipe y Raúl siempre se habían portado muy bien conmigo así que creí mi obligación el llamarlos un poco a capitulo.
- Y: Felipe, Raúl ¿no deberíais primero escuchar las explicaciones que se os tienen que dar antes de decidir si os quedáis con este proyecto o no?
- F: Jajajajaja, no, de hecho si hubiéramos sabido dónde estabas te hubiéramos pedido que nos acompañaras para que nos dijeras tu cual de todos los proyectos debíamos de aceptar, o si había que hacer algunas modificaciones en el elegido, de forma que si tu directamente has trabajado en este tenemos claro que es muy bueno, y nos lo quedamos.
- R: Además te recuerdo que cuando hace un año vimos los resultados de haber implantado aquellas ideas que nos sugeriste y que nos parecieron a todos una locura te dijimos que cualquier cosa que se te ocurriera nos la dijeras para hacerla. Te recuerdo que gracias a ti aumentamos nuestra facturación un 23% reduciendo costes en más de un 11% sin joder a ningún empleado ni nada por el estilo.
- F: Sin mencionar que tu eres tan capaz de valorar como nosotros como le sentaría este proyecto a nuestra empresa, la conoces casi también como nosotros. y me guiño un ojo, echándose a reír los dos, Raúl y el.
- R: Entonces Gaby, ¿Tu te quedarías para nuestra empresa con este proyecto?
- F: Di Gaby, ¿sí o no?
En resumidas cuentas que ante mi afirmación positiva firmaron el proyecto con lo que todos los directivos presentes encantados, aunque también se les notaba a casi todos una cara de intriga de aúpa por la situación entre esos dos y yo, bueno de intriga a casi todos porque había una persona que hacía esfuerzos casi diría que sobrehumanos por evitar que se le viera las ganas que tenia de echar a esos dos a patadas de allí ahora que habían firmado y parecía que querían devolverme al redil de donde me había escapado, no creo necesario decir quién era esa persona. Dado que según parece ambos llevaban mucha prisa por volver, según ambos iban con el tiempo justo Felipe tubo el desparpajo y el santo morro de pedir al directivo de mi empresa que nos permitieran usar la sala de reuniones para hablar de nuestros asuntos personales, algo a lo que accedió de buena gana, además me sorprendió cuando al pasar por mi lado me dio una palmadita en la espalda y me susurro un "suerte". Creo que casi todos ellos habían asumido que mi cuñado me iba a pedir explicaciones de por qué había roto con su hermana y casi seguro también que todos pensaban que iba a ser algo incomodísimo para mi, aunque por el gesto de Ainoa cuando oyó la petición ella lo que se debía estar imaginando era que me iban a pedir volver con su hermana, dado que os recuerdo que si sabia el porqué de la ruptura y vi que se marchaba a toda velocidad a su despacho con cara de mala uva .. Puesto que su despacho compartía ventanas con la sala imagine que su prisa era para desde allí y de forma discreta observar lo que pasara en la sala. Si pudiera ponerla más celosa cuando nos observara por los ventanales ..
Para no hacer esto demasiado cansino intentare explicar lo que paso en esa charla. En primer lugar me di cuenta de un detalle al seguir el movimiento de Ainoa con discreción, según se sentó manipulo el interfono de su despacho, pero no hablo sino que pareció centrarse en el ordenador en vez de vigilar lo que hacíamos en la sala. Mientras mis dos conocidos hablaban yo le daba vueltas a este en mi opinión extraño comportamiento de Ainoa y mi vista se perdió en dirección a donde se había sentado en la reunión, empezando a preguntarme si todo lo que me parecía ver en Ainoa era solo producto de mi imaginación, cuando mi vista se paro en el interfono del sitio que ocupo Ainoa, tenía un Led encendido . Ese Led según me fije en el que tenía delante marcaba la comunicación encendida con un despacho, el de Ainoa . Ahora entendía porque no miraba hacia nosotros, estaba escuchando todo lo que hablábamos, joder pues si que estaba mosca con estos dos, si . No os hacéis idea de cómo me alegro esto, Ainoa estaba de un celoso de espanto, para haberla llevado a hacer esto ..
Según Felipe por lo visto su casa parecía un manicomio, de repente su madre había dejado de tratar a su hermana como su ojito derecho, cuando su padre y el intentaron apoyar un poco a su hermana diciendo que seguro que había sido culpa mía esta se había ido llorando como una magdalena a su cuarto y su madre les había metido una bronca a los dos de campeonato, y lo que más sorprendente les resulto es que me defendió a mí, al que llevaba tres años crucificando, a capa y espada. Yo había desaparecido, ellas dos me defendían de cualquier ataque, entre ellas me usaban de arma arrojadiza, pero para su asombro era para salirse mutuamente con la suya usándome a mí como pretexto, "si estuviera aquí Gaby " "El no haría eso " "Qué pensaría Gaby " ,y si alguno de los dos se atrevía a preguntar por todo esto tenían bronca asegurada, Yo había pasado para su madre de tema tabú a salvador de los afligidos o poco menos, os juro que me dejaron de piedra con esto que me contaron.
Según parece Sandra llevaba todo este tiempo intentado localizarme por todos los medios sin cejar en su empeño, pero nadie sabía nada de mí, su madre trataba de evitar que continuase intentándolo como hubiera sido normal dado su historial conmigo, salvo por el detalle de que no quería que lo hiciera porque según ella, Sandra no me merecía después de lo pasado, y claro en una de estas trifulcas entre ellas por lo visto a su padre se le ocurrió que quizá con el cabreo las pudiera sacar algo y las dos cerraron filas y casi se lo comen. Así que entre los dos me dejaron muy clarito que querían respuestas ya que era el único que podía dárselas sin que murieran en el intento. Con la mirada perdida hacia el despacho de Ainoa le dije a Felipe que no podía hacer eso, que si su madre y hermana no querían yo no era quien para me corto en seco y me dijo que o se lo decía o llamaba a Sandra le decía donde estaba para que viniera a por mí y además la pasaba conmigo para que hablar con ella en ese mismo momento . Esta amenaza me dio un alegrón porque por la ventana del despacho de Ainoa pude ver como partía en dos con la mano el bolígrafo con el que estaba escribiendo, fue una contracción de la mano puramente instintiva, justo en el momento en que Felipe me dijo lo de que Sandra viniera a por mí, además que fue una delicia ver durante medio segundo el gesto de intensa rabia en la cara de Ainoa, y digo medio segundo porque giro la cara en dirección contraria a la ventana que compartía con la sala de reuniones, no sé si fue por mirar de coger otro bolígrafo o para evitar que le pudiera ver la cara si en ese momento me daba por mirarla, dado que creo que era incapaz de recuperar su cara de siempre tan fácil como otras veces, lo que ella no sabía era que disimuladamente no la quitaba ojo de encima desde que me di cuenta que nos estaba escuchando.
Al final le resumí un poco a ambos la situación, como les pille a los dos en la cama y como en ese momento me acompañaba su madre, aunque al final se lo solté todo, estaba hasta los mismísimos de guardármelo todo para mí, además no me pareció malo que ambos lo supieran todo para entre otras cosas evitar que dijeran nada de mi localización, y decidí que Ainoa debía de saberlo todo, si quería estar con ella antes o después se lo tendría que revelar y era un momento tan bueno como otro cualquiera o quizá mejor, porque quería llegar hasta ella y esta situación me podía ayudar a conseguirlo definitivamente.
Me di cuenta también que cuando los dos me pidieron aclaración sobre lo de José con Sandra y los comentarios que hicieron de él, de quien era para mí José en el rostro de Ainoa aparecía un clarísimo gesto de consternación, creo que en la cabaña solo pensó que era un gran amigo mío y no adjudico la importancia real para mi, dada mi ausencia de familia, de quien me había traicionado con mi novia.
Evidentemente como era habitual en los gestos de Ainoa, estos solo duraban un segundo, poco a poco me iba convenciendo de que por lo que fuera se había convertido en una especialista en esconder sus sentimientos a los demás, estos solo escapaban de su control cuando la sorpresa era muy fuerte o sus sentimientos muy intensos, aunque acostumbraba a recuperarse tan rápido que solo quien supiera y estuviera pendiente de estos deslices era capaz de verlos, como era ahora mi caso. Lo que me hacia tener cada vez mas esperanza con ella dado que parecía que todo lo relacionado conmigo se escapaba por momentos cada vez más a su control, tal y como había comprobado poco antes con lo de la posible visita de Sandra. Después de más de dos horas de conversación donde yo me entere de muchas cosas y ellos de muchas más todavía, Felipe me aviso con gesto muy serio, acompañado de asentimientos de cabeza de Raúl, de que no sabía por cuanto le podría ocultar a Sandra que sabia donde estaba yo, porque le iba a contar a su padre parte de lo que le había explicado para intentar tener una convivencia normal con ellas dos sin morir en el intento, pero que antes o después Sandra se daría cuenta de que sabían las cosas y solo había cuatro personas que pudieran haberlos informado, dos de ellas no habrían sido porque ni ella ni su madre les dirían nada, José no diría nada por temor a que le partieran la boca cualquiera de los dos al enterarse de lo que había hecho con su hermana o hija dependiendo de quién hubiera preguntado. De forma que con todo esto solo quedaba una persona que pudiera habérselo dicho a alguno de los dos y dado que llevaba buscándome como loca todo este tiempo sin que nadie supiera donde estaba era obvio que alguien había hablado directamente conmigo, ese alguien sabría donde localizarme y como me dijo Felipe ya conocía a su hermana aplicando el tercer grado en un interrogatorio . Esta vez no os diré el gesto que puso Ainoa al oír esto, con deciros que me dio miedo hasta a mí.
Nos despedimos y les acompañe a la puerta, deteniéndome al llegar a ella y rogándoles que esperaran un instante. Me dirigí hacia el despacho de Ainoa, por el camino me fije en que todas mis compañeras me estaban mirando de reojo, no pude evitar un suspiro cuando me fije en las caras de Adriana, Consuelo y Marga que eran las que más confianza tenían conmigo, seguro que me bombardearían a preguntas. Cuando llegue pedí a Silvia entrar a hablar con la jefa un momento y en su cara también leí la curiosidad, era evidente que esas tres al salir de la reunión lo habían comentado con las demás. Silvia me dijo que entrara que la jefa me recibiría. Me encontré con una Ainoa como siempre inexpresiva
- A: ¿Necesita algo Gabriel?
- Y: No, solo quería decirte que ya puedes apagar el interfono, ya hemos acabado de hablar mis amigos y yo. se empezó a poner colorada pero se recupero rápido.
- A: Yo - levante la mano cortándola las disculpas.
- Y: No te molestes "Ainoa", si no hubiera querido que lo oyeras habría cortado el interfono al principio de la conversación, ya que me di cuenta enseguida que estaba encendido. Pero la próxima vez.. "Ainoa", simplemente me preguntas. Vi en su cara la comprensión por fin de que no me dirigía a mi jefa con todo esto, sino a la chica de la montaña. Esta vez vi que si perdía el control de sus gestos del todo, bajando la vista y ruborizándose, seguí hablando para no dejarla reaccionar y recuperar el control.
- Y: Voy a acompañarles a la calle para despedirlos si no tiene objeción , "Jefa". Esta vez remarque el "Jefa" para dejarla claro el cambio de persona a la que me dirigía.
Ainoa se limito a negar con la cabeza, creo que esta vez sí que se había visto superada por la situación. Me reuní con mis amigos y les acompañe hasta su coche, nos dimos un abrazo despidiéndonos, antes de irse ambos me dijeron que se mantendrían en contacto y riéndose añadieron un "tranquilo, será discreto y sin que se entere Sandra". Cuando salieron rumbo a su casa me di cuenta que me había alegrado de ver a estos dos, evidentemente había gente a la que si echaría de menos en mi nueva vida .
Ahora debía de plantearme como entrarle a Ainoa para que me explicase de una puñetera vez que narices pasaba con ella, porque a estas alturas, después de todo lo que había visto en ella tenía claro que estaba tan pillada conmigo como yo estaba pillado con ella pero por algún motivo que escapaba a mi escrutinio .. ¡¡¡JODER!!!
CONTINUARA