Reflexionando... la promiscuidad

Que de sobresaltos me da la RAE

El otro día estaba charlando con una amiga y me pidió mi opinión a cerca de la promiscuidad. Le dije un montón de cosas de las que yo pensaba y, al parecer, tenemos una opinión muy similar. Entonces, ¿por qué no?, me decidí a reflexionar en "voz" alta a cerca de este tema.

Para no variar demasiado, agarré mi diccionario de la Real Academia Española y busqué entre sus páginas la palabra promiscuidad:

  1. Mezcla, confusión.

  2. Convivencia con personas de distinto sexo.

Es extraño, pero me sorprendió la definición de promiscuidad porque pensé que ésta debía ser el acto de ser promiscuo. Y, como no podía ser de otro modo, busqué en el mismo diccionario la palabra promiscuo:

  1. Mezclado confusa o indiferentemente.

  2. Que tiene dos sentidos o se puede usar igualmente de un modo o de otro, por ser ambos equivalentes.

  3. Se dice de la persona que mantiene relaciones sexuales con otras varias, así como de su comportamiento, modo de vida, etc

Entonces llamé a mi colega y le comenté la jugada. Nuestras cabezas pensantes (a las que les faltan unos cuantos hervores, sin duda) no dudaron en ponerse manos al diccionario para tratar de entender el embrollo que nos habíamos montado con tales definiciones, por lo que buscamos en el tocho de hojas escritas la palabra "convivencia" por si tenía una definición que nosotras desconocíamos, pero esto fue lo que encontramos: convivencia: acción de convivir y convivir es vivir en compañía de otro u otros.

Ahí mismo nos quedamos muertas de confusión. Nosotras que queríamos reflexionar a cerca de lo que significa hoy por hoy ser promiscuo, nos encontramos con gran dilema gracias a los "viejitos decrépitos" de la RAE (es decir, que nuestras mentes radicalmente complejas, decidieron indagar en sus profundidades para sacar puntilla a aquello que consiguió desorientarnos).

Absortas en nuestro descubrimiento, releímos una y otra vez aquellas palabras alcanzando un nirvana mental que no conocíamos hasta entonces, llegando a la siguiente conclusión: los honorables miembros de la academia nos dicen que las familias (familia: grupo de personas emparentadas entre si que viven juntas, también según la RAE) modelo de la Iglesia Católica y Apostólica Romana son promiscuas. Y no lo decimos por decir, si no por definición.

Pero nosotras llegamos más allá si cabe: nos adentramos, por definición, en el incesto de tales familias, así como de su modo de vida y su comportamiento.

Y llegamos a tal conclusión por lo siguiente: una familia modelo consta de un padre, una madre y uno o varios hijos/hijas y la promiscuidad es la convivencia de personas de distinto sexo. Por lo tanto una familia con tales características se puede afirmar que vive en promiscuidad.

Teniendo en cuenta lo anteriormente narrado, y sabiendo de antemano que la promiscuidad es el acto de ser promiscuo, sentenciamos que los miembros de una familia que convive es un grupo de personas promiscuas.

Ahora es cuando entramos en el tema. El promiscuo es aquel que mantiene relaciones sexuales con otras varias. Por lo tanto, un promiscuo que vive en promiscuidad es una persona que convive con personas de distinto sexo y se acuesta con ellas.

Es decir, y siempre según las definiciones de la RAE, la familia modelo es un grupo de personas de distinto sexo que viven juntas y mantienen relaciones sexuales.

¿Cómo se denomina la relación sexual entre personas emparentadas en los grados en los que el matrimonio está prohibido? INCESTO (también según los académicos).

¿Qué hacemos ahora? ¿Llamamos al Vaticano y ponemos en conocimiento de ellos tal cosa? ¿Le contamos al mundo que la Real Academia Española define la familia como si de una bacanal de la antigua roma se tratara? ¿Acaso mi familia no es de esas? ¿Hemos dejado de ser familias modelo?

Entonces hemos seguido pensando y hemos llegado a otra conclusión: Las familias homoparentales no son promiscuas ya que conviven personas del mismo sexo y, según hemos visto, ese tipo de familias, no son de ese tipo. Pero no nos hemos quedado conformes con eso y hemos indagado más en el tema.

¿Qué significa eso? ¿Qué los homosexuales ya no son aquellos seres siempre siempre denominados promiscuos? ¿Qué es entonces lo más insano? ¿Formar una familia modelo incestuosa o crear ese núcleo sano y lejano a los vicios carnales interfamiliares que tiene la comunidad gay?

Creo que me duele la cabeza por tratar de analizar lo que esos señores/as han definido en su diccionario. Aunque, por otra parte he llegado a una conclusión: durante años los homosexuales hemos sido tachados de muchas cosas gratuitamente (promiscuos, fiesteros, divas, locas, camioneras, machorras y un largo etcétera de adjetivos) y hoy le hemos dado una vuelta a todo ello y hemos tratado a los que se autodenominan "normales" de seres asquerosos. Todo ello gracias a la RAE.

Así como todos los miembro de esas familias "normales y tradicionales" ahora se sentirán insultados por mi (y por mi amiga), yo (y ella) también nos hemos sentido insultadas y vejadas infinidad de veces por nuestros gustos y esos núcleos familiares homoparentales que hemos creado a nuestro alrededor.

No pienso que las familias "modelo" sean algo malo o negativo, esto solo es una ida de olla de un par de chicas aburridas, así que, ustedes tampoco deberían pensar que las "otras" familias son "insultantes y enfermizos" núcleos donde malcriar niños/as que serán infelices toda su vida por culpa de tener dos madres o dos padres.

Y termino esto diciendo dos cosas:

1º (Dirigido a la RAE) ¡A ver si tienen más cuidado con las definiciones que hacen!

2º (Dirigido a algunas familias "normales") ¡A que jode!

Firmado: Tipp y su amiga mmiau