Reencuentro
Ellos se han amado por siempre, separados algún tiempo se reencuentran en una fiesta para entender que nunca debieron separarse. Un reencuentro que descubre la pasión del verdadero amor
La fiesta estuvo genial, reencontrarse fue lo mejor que pudo haber pasado Eran ya las tres de la madrugada y ella debía llegar a su casa, sin embargo, con cada canción que bailaban subía la temperatura, era increíble como sus cuerpos se entendían tan bien. Tanto tiempo separados, y ahora, después de casi cuatro años, bailaban al compas como si lo hubieran hecho por siempre.
Llegan al apartamento de ella, subiendo las escaleras completamente oscuras, el toma su mano, ella se detiene como presintiendo lo que iba a suceder, "te he extrañado" le susurra al oído mientras rodea con sus brazos su cintura, ella, dándole la espalda con los ojos cerrados piensa en cuanto había deseado este momento, y que al verse allí se sentía en las nubes. Da la vuelta y encuentra sus ojos brillando en la oscuridad, lo mira queriéndole decir que quiere entregarle su mundo entero, él perfectamente entiende, y se acerca para besarla. Se hunden entonces en un beso profundo, lubrico, lleno de una pasión desbordante que por mucho tiempo estuvo reprimida.
La toma en sus brazos, sus cuerpos parecen uno, ella siente como su cuerpo reacciona mojándola por todas partes, su piel se eriza, esto mientras el baja delicadamente su mano por el cuello y va besando cada rincón hasta llegar a un pronunciado escote, donde el descubre dos pezones duros, producto de todas esas sensaciones que despierta en aquella mujer. Empieza a besarlos, con delicadeza pero haciéndole sentir que tiene un hombre al frente. Ella simplemente se sumerge en ese mar de placer donde solamente él puede llevarla. Se besan nuevamente y ella, con la poca voz que le queda le pide que la haga suya, que ya no puede ni quiere esperar más.
Con los cuerpos ardiendo de deseos, y sin dejar de juguetear suben la escalera y llegan a la puerta de su departamento, como puede abre, y al cerrarla se inicia la expresión más pura de amor entre dos amigos que se amaron, se odiaron, y ahora, vuelven a amarsen, esta vez para siempre. Llegan a la habitación y no entienden porque siguen con la ropa puesta, él la tumba en la cama para besarla, se toma un momento, la mira a los ojos, y con el corazón le dice "Te amo, nunca deje de hacerlo, y nunca lo dejaré de hacer", es cuestión de segundos mientras ella le quita el pantalón, y siente su miembro a punto de estallar, lo toma con sus manos y comienza a besarlo, dulcemente, antes de iniciar un recorrido con su lengua por cada parte de su pene, lo siente duro, palpitante, así como solo ella lo ponía.
Mientras ella disfruta de la felación, el roza con sus manos su vagina, está empapada, caliente, gritaba por placer, el lo entiende, por eso con sus dedos empieza a masturbarla, descubriendo que aun podía mojarse más. Se miran y saben que es hora, el la penetra, y ella ve estrellas, inicia con movimientos suaves, que van subiendo revoluciones con cada minuto, ella rodea su cintura con las piernas como queriendo tragarse todo, el sintiendo el calor del cuerpo de su amada no resiste mas y terminan juntos.
Recostados en la cama, mirando al techo, encuentran sus miradas, y se dan cuenta que no existe mejor complemento en el mundo para cada uno.