Reencuentro

Capitulo 2

Cuando entraste al laboratorio junto con el director me sorprendí como no tienes idea, el volverte a ver después de tanto años. En tu mirada y facciones de tu rostro denotaban que ya no eras esa niña a la que conocí ahora eras toda una mujer hermosa.

Ese traje sastre que llevabas te quedaba de las mil maravillas, pantalón ajustado, blusa de color rojo vino y tu saco, tu cabello castaño suelto algo que me sorprendió mucho ya que cuando te daba clases siempre ibas peinada con una trensa o coleta, tu ojos color verde que siempre me gustaron ya que denotaban tu inocencia pero ahora en tu mirada veía algo de dureza.

Después de la junta salí junto con todos los demás, me percate de que hablabas con el director sobre la materia extra que te dieron la cual aceptaste gustosa. Cuando salio el director del laboratorio me decidí en hablarte en saber que ha sido de ti en todo este tiempo.

-Hola Ana ¿Como estas?

Cuando te intercepte y te hable tu rostro era de sorpresa no sabias que decir o hacer por lo que tome la iniciativa para continuar mi acercamiento. Te tome del brazo y comencé a caminar por el pasillo para poder salir de la escuela.

-No me piensas devolver el saludo

-Hooo hola

-Aun te sigo poniendo nerviosa como cuando tenias 13

-No estoy nerviosa, a donde me llevas

-Si tu lo dices, vamos al pequeño restaurante que esta a unas calles de aquí

-Pero mi camioneta esta en el estacionamiento

-Pues vamos por tu camioneta y luego al restaurante

-Ok esta bien vamos

Fuimos por mi camioneta y después al restaurante como sugerí, durante el trayecto me di cuenta que sigo teniendo el mismo control sobre ella como cuando era adolescente, a pesar de que han pasado tantos años noto que aun me ama.


Ha pasado ya 1 mes desde que nos volvimos a reencontrar, en ese tiempo me he enterado que estudiaste una ingeniería, que tienes tu propio negocio, que vives sola ya que tus padres te corrieron de casa cuando les confesaste que te gustaban las mujeres, has trabajado en muchas cosas para poder pagar tus estudios, también me has contado sobre tus relaciones fugaces que has tenido o como tu les llamas amoríos tontos sin sentido. Cada que me contabas por todo lo que has pasado simplemente notaba en tu mirada tristeza y hasta cierto punto enojo, no se porque estarás enojada con la vida pero no lo deberías de estar ya que solo se vive una sola vez.  Durante este tiempo hemos intercambiado números de celular, al principio como me costo trabajo el poderlo conseguir, el poderte convencer que los intercambiáramos pero al final lo pude lograr que aceptaras mi petición.

No sabes como te extraño cada vez que no estoy a tu lado, tu presencia se ha vuelto como el aire que respiro día a día, cuando te veo simplemente aparece una sonrisa en mi rostro, el poder platicar  y que compartas tu vida conmigo me hace sentir especial ya que me demuestra que sigo siendo importante para ti como tu lo eres para mi.

Voy llegando a la sala de profesores con la esperanza de encontrarme contigo y en efecto tu te encuentras ahí, me acerco a ti sin que te des cuenta ya que tu estas sentada dándome la espalda, cuando llego a ti escucho que hablas por teléfono con alguien tu tono de voz se escucha algo enojado.

-Te dije que la mercancía tenia que llegar a las 7 de la noche, en estos momentos no puedo ir estoy trabajando

-Pero ya me encuentro aquí en la bodega para dejarte la mercancía

  • Si me esperas a las 5 me puedo dar una escapada para ir a recibirte

-Te espero

Cuelga la llamada soltando un suspiro, se ve tensa, acorto la distancia entre nosotras y la abrazo por la espalda dándole un beso en la mejilla.

-Esta todo bien Ana

-Si todo esta bien

-Segura, sabes que no me gusta que me mientan o que me oculten las cosas

-Lose, lo que pasa es que llego un proveedor antes de tiempo a la bodega y no hay nadie que lo pueda recibir y pues tendré que ir a la hora del descanso, pero la verdad no se porque llego antes si les había dicho que la mercancía se las iba a recibir después de las 7 de la noche precisamente para evitar que esto sucediera

-Pues no queda de otra que ir atender este problema

-Lo siento no podre comer contigo

-No te preocupes sera para la próxima

Son las 5 de la tarde y me encuentro comiendo sola, como dije antes extraño su compañía, ni si quiera habían dado las 5 cuando ella ya se había ido atender a los proveedores no pude despedirme de ella, espero poderla ver al rato.