Recuerdos...xii
, me tumbó sobre el sofá, levantándome las piernas me fue penetrando suavemente, era placentero notar su poderosa verga dentro de mí
RECUERDOS...XII
Las reformas que se estaban realizando en el Club, estaban muy adelantadas, gracias a todos nuestros amigos se habían dejado cantidades ingentes de propaganda, en diversos lugares de la capital, también gracias a Suso en diversos pueblos cercanos y Chete, había dejado en Vigo y también en El Ferrol, incluido el Cuartel de la Marina, en nuestro Cuartel también aparecieron, al igual que en el de Caballería, bares y discotecas, igual en algunos colegios.
Mientras nuestro equipo de natación del Cuartel, ya entrenábamos en la piscina de la Hípica y Javián venía cada día por la tarde a mi casa que era el centro de reunión de todos los amigos, después de presentarlos, se encontraba muy a gusto, conociendo a gente joven de la misma tendencia, pero rápidamente me percaté de la pasión que sentía por el joven Tomás y éste también le correspondía, de vez en cuando se acostaban en mi habitación, el espejo les daba morbo a ambos y parecían contentos.
Una de esas veces, mientras tenían sexo, yo me encontré con las cartas que aún no había leído y solo en el salón, comencé a abrirlas y leerlas, la primera fue la de Francisco Javier (Javier) y detallaba lo ocurrido durante todo el tiempo que no nos veíamos:
Querido Amigo Jorge:
Espero que todo te vaya bonito y lo pases bien, aunque no es fácil el Servicio Militar, te lo digo por experiencia. Cambiaste mucho nuestras vidas, la mía y de Fernando, éste volvió con su novia y me presentó a una íntima amiga de ella, empezamos a salir los cuatro, al mismo tiempo montamos el Gimnasio, como socios y va muy bien, tan bien que tuvimos que contratar a más personal, pasados unos seis meses nos casamos con las chicas, pero cuando estamos en el Gimnasio, tenemos nuestros momentos de intimidad, las chicas lo saben, pero no se oponen a nuestra doble relación, incluso hemos tenido sexo los cuatro. Todo gracias a ti, ya que antes de casarnos les contamos todo, explicando tu manera de ver la vida y ellas estuvieron de acuerdo, sentimos que no pudieras venir a la boda múltiple, ya que nos casamos el mismo día.
Los padres de Fernando, se han instalado en el chalet de la costa, dejándole el piso a él, ya que su hermano Luis está en Londres estudiando junto a mi hermano Víctor, en cuanto al piso nuestro, mi
hermano José María (Chema) me lo ha dejado a mí, él se fue a vivir a la torre con Peer y Adam, debido al accidente que sufristeis tú y el pobre Cristian (Ian), decidimos vivir siempre cada instante con intensidad, ya que nunca sabes, lo que ocurrirá mañana. Te adjunto un recorte de un periódico de Canadá, sobre Jean, creo que ha encontrado su media naranja y también lo conoces, es el joven bailarín Sergei Ivanov, forman una bonita pareja, un joven bailarín y Jean, un joven patinador de hielo, parecen muy felices, te echamos mucho de menos, siempre apareces en nuestras conversaciones y nuestras mujeres quieren conocerte, ahora me despido te enviamos muchos besos.
PD- Te adjunto el folleto de promoción con fotos del Gimnasio, cuando vuelvas, lo tienes que ver es espectacular.
Te queremos
Javier y Fernando
Cogí el recorte y lo desplegué, se veían varias fotos de un reportaje y debajo, ponía: Los amigos inseparables, el joven patinador de hielo Jean y el joven bailarín ruso, con nacionalidad canadiense Sergei Ivanov, en las fotos de una revista, se les veía muy enamorados, en alguna se miraban con adoración, me enjugué una lágrima, que se había deslizado de mis ojos, doble la carta y el recorte y los guardé dentro del sobre.
Abrí la siguiente, era de Víctor y comenzaba:
Querido maestro y amigo:
Te escribo unas cuantas líneas, para contarte todo lo ocurrido aquí en Inglaterra, los estudios nos van muy bien, tanto a mí como a Luis, pero ya no estamos juntos, él se ha echado un noviete inglés, bastante guapo y nos vemos a menudo, seguro que te lo cuenta en la carta que te adjunto, por mi parte, yo estoy saliendo con una chica inglesa de origen hindú, se llama Samara y tiene un hermano gemelo idéntico, llamado Samir, siempre estamos juntos y dentro de muy poco nos vamos a casar, ya que Samara está encinta y no queremos un escándalo, aún no sé cómo pudo pasar, pero la verdad, que no me importa, los tres somos felices, ocurrió un día de celebración, Samir va a mi clase y fuera nos esperaba su hermana, celebrábamos las notas buenas obtenidas y fuimos a un pub, tomamos bebidas y después a una discoteca, terminamos en el piso de ellos, medio ebrios y contentos, una vez allí bebimos más y comenzamos a besarnos Samara y yo, pero Samir se unió a nosotros y me sorprendió que ella no lo rechazara, empezamos a disfrutar de nuestros besos, desabroché la blusa de Samara y acaricié sus pechos, mientras Samir, me desabrochaba el pantalón, sacando mi verga y poniéndosela en la boca, el calor de la misma, me enardeció, nos fuimos desnudando los tres uno al otro y nos fuimos al dormitorio, la cama era grande y nos tumbamos en ella totalmente desnudos, entonces Samara me dijo: Samir está enamorado de ti y tú me gustas mucho, no te preocupes por mí, porque ya no soy virgen, él y yo hace tiempo que tenemos relaciones, fue el primero y único con él que he estado, nos gustaría que tú formaras parte de nuestra vida, quedándose callada. La besé agradeciendo la confianza, los dos son hermosos, con su piel aceitunada, morenos de pelo, delgados y muy bien formados, ojos color miel, ella con pelo bastante largo y él hasta los hombros, los fui besando alternativamente, mientras que nuestras manos iban acariciando los cuerpos, en un momento me encontré tumbado boca arriba, mientras Samir chupaba mi verga, su hermana lamía su culo, mis manos acariciaban el cabello del joven, que subía y bajaba la cabeza con la mamada que me estaba dando, al rato se unió Samara a la felación, yo tiré del joven Samir y poniéndose de rodillas delante de mi cara, comencé a saborear su grueso y oscuro pene, debía tener unos 20 cm. más o menos, pero era bastante grueso. La boca me dolía de abrirla tanto, pero el placer tiene sus riesgos, entonces Samara cogió mi verga y tirando de su hermano lo obligó a sentarse encima de la misma, por su expresión de cara, le dolía, pero no cejó de clavársela totalmente, mientras ella comenzó a chupar la verga de Samir, mientras éste subía y bajaba su cuerpo haciéndome gozar, los dedos de la mano del joven se metían dentro de mi boca y una mano de Samara, pellizcaba mi tetilla, mientras yo acariciaba el cuerpo delgado de Samir y la espalda de Samara, el joven aceleraba el ritmo, pero no quería terminar tan rápido y cambiamos posiciones.
Samara, se tumbó encima mío clavándose mi verga y Samir clavó su cetro en su culo, ella se quejó al principio, pero pasado un rato, los tres gemíamos de placer, nuestras vergas se frotaban dentro de su cuerpo, la cabeza de ella daba giros de lado a lado, tal era el placer que sentía, Samir le besaba la nuca y cuando alcanzaba mi boca me besaba con ganas, el cuerpo de ella estaba sobre el mío, dejándome libertad para la penetración de su vagina, mientras Samir embestía por detrás, la aceleración de nuestras embestidas la hicieron gritar y notamos su orgasmo, al oírla, fuimos presa de lujuria y nos fuimos corriendo, soltando mi semen dentro de ella y Samir en su culo, al calmarnos un poco, Samir comenzó a lamer su semen del culo de su hermana, después siguió con mi semen de la vagina y finalmente chupó mi verga, ella lamió la verga de Samir. Y descansamos, Samir fue a la cocina y trajo algo para comer y unas bebidas, mientras estaba fuera Samara, dijo: No me importa si tienes sexo con Samir, pero, sino lo quieres no le hagas sufrir, a lo que yo repliqué: Siento un amor especial por él, también por ti, creo que estoy enamorado, pero es la primera vez que me pasa y no sé, si es amor o solo un capricho, pero te juro por lo más sagrado, que no quiero haceros daño, ni a él, ni a ti, entonces sonrió ¡Tiempo al tiempo!
Comimos unas deliciosos pastelillos, que Samir dijo que los había hecho Samara y eran típicos de la India, estaban muy buenos, en las copas había champán, degustamos con avidez, al terminar nos relajamos y nos estiramos encima de la cama seguíamos totalmente desnudos, colocados de lado, yo detrás de Samara y Samir detrás mío, éste me susurró: ¡Quiero estar dentro tuyo! Al mismo tiempo su mano se posó sobre mi verga, acariciándola, ésta reaccionó rápidamente irguiéndose al instante, mientras seguía diciendo: ¡Te clavaré mi verga hasta el fondo! ¡Te partiré en dos y luego te comeré a besos! Sus palabras me ponían a cien, me hizo poner encima de su hermana, dirigiendo mi estaca dentro de ella, dejando mi espalda al descubierto, las piernas de Samara alrededor de mis caderas, entonces noté la lengua del joven Samir abriéndome el agujero del culo, su lengua hacía estragos en mi ser, me dilataba sin apenas notarlo y mi ano dilataba solo, agarró su gruesa verga y apuntándola entró de golpe hasta el fondo, logrando que soltara un pequeño grito, de dolor, de placer, de las dos a la vez, puso su manos sobre mis hombros y sus embestidas eran feroces, mientras yo seguía penetrando a su hermana, él mordía mis hombros dejando marcas, realmente me partía en dos, pero yo estaba en la gloria, al unísono fuimos acelerando el ritmo, Samara gemía, al igual que nosotros dos, cada vez con más intensidad y fuimos soltando trallazos de semen, yo dentro de Samara y Samir dentro de mi culo, nos desplomamos uno encima del otro, yo aguantaba el peso del joven, para no aplastar a Samara, después nos separamos besándonos los tres y nos dormimos. Casi cada día tenía sexo con Samir, pero de vez en cuando se unía Samara, al cabo de un año de relaciones, vino la sorpresa del embarazo de Samara. Estoy muy feliz, estoy a gusto, solo te echo de menos, Samir y Samara están celosos de ti, sin conocerte, dicen que me cambia la expresión de la cara cuando hablo de ti. Te deseo lo mejor, hasta más ver. Muchos besos.
Víctor, Samir y Samara
Enjuagué otra lágrima, pensando en lo que Víctor me contaba, solo esperaba que fuera feliz, en ése momento sonó el timbre de la puerta, abrí, era mi Comandante, venía de paisano, me miró la cara con preocupación, al tiempo que decía: ¿Pasa algo malo? Yo le contesté: ¡No, solo leía las cartas de mis amigos de Barcelona y me ha entrado nostalgia! Preguntó por Tomás, le dije que estaba en mi dormitorio y antes que pudiera decir más fue a verlo, casi al momento estaba de nuevo a mi lado, diciendo: ¡Bien, bien, me lo imaginé el otro día siguiendo sus miradas, pero ahora hay la confirmación, me alegro! Llenó mi vaso con más whisky y dio un sorbo, me lo tendió a mí, bebí y me dijo: ¿Por qué no las lees en alto y así conozco alguno de tus amigos? Abrí la breve carta de Luis y empecé a leer:
Querido boss George
Sabrás que te echamos de menos, tu fuiste nuestro jefe, maestro, amigo y consejero, al tiempo que instructor, en el arte de amar, supongo que la extensa carta de Víctor, te habrá contado su situación, está muy enamorado de los dos, pronto iremos de boda y bautizo, dice que si es niño, le pondrá tu nombre, en ingles claro George y si es niña Georgia o Georgina, aún no lo tiene claro. Por otro lado, mi situación es bastante diferente, estoy con un chaval inglés, se llama Paul, tiene 19 años, es bastante guapo y lo pasamos bien, pero no somos novios o eso creo, tenemos mucho sexo y disfrutamos juntos, pero tanto él como yo nos acostamos con otros jóvenes, pero siempre terminamos juntos, será amor o solo afán de posesión, pero cuando hacemos el amor lo disfrutamos como si fuera el último día de nuestras vidas.
Cuando me penetra, me siento liviano como una pluma, la tiene hermosa delgada, pero larga y me produce mucho placer, él también disfruta con mis embestidas, dice que parezco un salido, de los envites que le doy, realmente lo pasamos muy bien, estoy contento y en los estudios me va mejor, pero a veces te echo de menos, como cuando nos dabas clases, supongo que habrás recibido noticias de mi hermano Fernando y Javier, los muy c.p.ll.s se han casado, pero siguen con su relación íntima y han montado el Gimnasio, parece que les va muy bien, por otro lado Paul, se pone celoso, cuando le cuento nuestras clases y los desayunos que nos montabas, ahora comemos lo mismo, estamos compartiendo piso y el resto, ya te lo he contado, espero recibir noticias tuyas pronto. Te mando muchos besos.
PD- Supongo que sabes, que Cristóbal (Bal) y Christopher (Cris), estudian también aquí, nos vemos una vez al mes, salen con unas lindas chicas del país, pero, me parece que siguen haciendo de las suyas con chavales, delante de ellas no se habla de eso, nos reunimos todos incluidos Samara, Samir y nuestro amigo Víctor, te dejo, hasta pronto. Te queremos. Besossss.
Luis y Paul
Sin poder esperar abrí la otra carta, la letra claramente era de Peer y comenzaba:
Corazón mío:
Has leído bien, eres mi corazón, pusiste un soplo en el mío, el día que nos conocimos en el metro, me animaste a salir con José María (Chema), después de nuestro encuentro con él en su trabajo, me presentaste a diversidad de personas, que nos unieron, casi formando una gran familia, siento mi mal comportamiento después de la tragedia, que sufrimos, te aparté de mi lado, sin hacer caso a tu dolor, que también era inmenso, igual al mío, Chema me apoyó en todo, junto con Adam, lo fuimos superando, pero no me atrevía a decírtelo en persona, el resto delos chicos están en Inglaterra estudiando, dicen que tienen novia, pero no sé yo, creo que visitan locales de ambiente y disfrutan a su manera, espero que no se descarríen, contigo estaban seguros, pero ahora, con la pérdida de su hermano, tal vez no se hayan repuesto del todo, tengo ganas que vuelvan pronto.
Chema se trasladó aquí, vive conmigo, también está Adam, te envía besos, sale con un joven médico, parece que les va muy bien, por nuestro lado, Chema , me cuidó como si fuera mi padre y madre a la vez, me fue relatando partes del intenso periodo, que cuidabas a su hermano Víctor, junto con el vecino Luis, añadiendo al otro hermano Fco.Javier y el de Luis, Fernando, me fue contando los detalles del bailarín ruso y todo el lio formado, todo eso me daba que pensar, tú tan joven, habías vivido todo con más intensidad y valor, que yo mismo encerrándome en mi dolor, sin notar el tuyo, ahora puedo decírtelo claramente, Christian (Ian) te amaba con locura, encontré su diario y relataba lo celoso, que se ponía cuando tenías sexo con sus propios hermanos, pero nunca te lo dijo, te quería demasiado y temía herirte, pero como entraba dentro del juego con sus hermanos, disfrutaba de cada momento.
Una vez al mes organizamos una comida-fiesta, juntándonos todos, Karim, con Raúl y Carlos, siguen los tres juntos, se les ve contentos, también los bailaores de flamenco, Antonio y Pablo, Ángel, Mauricio, el poli de la secreta, Javier con Fernando e Isaac, el novio de Adam, lo pasamos muy bien, pero nos faltas tú, a veces hay diferencias, para saber quién te conoció primero y terminamos muertos de risa, porque nunca lo averiguamos del todo. Esperamos verte pronto. Muchos besos de todos.
Peer, José María, Adam e Isaac
Ahora, sí soltaba un montón de lágrimas, el Comandante Esteban me abrazó, buscando mis labios, me besó con ternura, al reponerme, le conté sobre el accidente y la muerte de Cristian, mientras me besaba me desnudando, me tumbó sobre el sofá, levantándome las piernas me fue penetrando suavemente, era placentero notar su poderosa verga dentro de mí fue, entrando y saliendo con mucha lentitud, muy laxativamente, me dejé llevar por el ritmo que daban sus embestidas, mi verga respondía sola, la penetración era gloriosa, mientras saboreábamos nuestras bocas, mientras apretaba sus nalgas para que siguiera empujando más y más, al fin soltamos toda la pasión, escapándose nuestro semen al mismo tiempo, él dentro mío y yo sobre nuestros cuerpos, sin apenas tocarme, seguimos besándonos, sacó su verga de mi culo y chupó su semen, siguió lamiendo el mío, saboreándolo, luego volvió a besarme y saboreamos nuestro semen, después nos sentamos y nos encontramos las caras sonrientes de Javián y Tomás, mirándonos mientras se abrazaban.
Nos pusimos algo de ropa y cenamos todos juntos, mientras charlábamos de todo un poco, al terminar Esteban y Javián de fueron, quedándonos Tomás y yo solos, nos acostamos en mi cama, durmiendo plácidamente, saciados de sexo y ternura...