Recuerdos de mi segundo matrimonio 15

Todos en casa estábamos muy contentos con la noticia, mis hijas y Juan esperaban que fuera un niño a mí como madre y mujer me interesaba que estuviera san@, y qué se solucionaran definitivamente nuestras diferencias.

RECUERDOS DE MI SEGUNDO MATRIMONIO 15

Todos en casa estábamos muy contentos con la noticia, mis hijas y Juan esperaban que fuera un niño a mí como madre y mujer me interesaba que estuviera san@, y qué se solucionaran definitivamente nuestras diferencias.

Continué trabajando para Felipe, mi esposo se hizo muy amigo de ellos, frecuentemente iban a jugar dominó o cartas a la casa o íbamos a la casa de Felipe y su familia.

Tenía dos hijos (niño y niña), de la misma edad de las mías, la pasábamos bien, Juan iba casi diario por mi me cuidaba y mimaba; me sentía feliz.

Cuando iba por mi platicaba con Felipe y Alfonso se hicieron muy buenos amigos al grado que cuando nació nuestro hijo le pidió a Felipe y su esposa que fueran los padrinos y así fue, Felipe escogió el nombre para el niño (Fernando Alfonso).

Estábamos muy bien en nuestra relación matrimonial, todo iba viento en popa, hasta que un día llegué a casa y Juan estaba sentado en la sala cabizbajo, le dije que tenía?

Me contestó que había recorte de personal en su trabajo y que lo liquidaron.

Le dije que no se preocupara que afortunadamente yo seguía trabajando y que de seguro encontraría él un nuevo empleo pronto; pero desgraciadamente no fue así se complico el que consiguiera un buen trabajo y empezaron nuevamente los problemas, comenzó a beber e inventarme cosas, aumentaron sus celos al estar él en casa y yo en la oficina y terminamos divorciándonos.

Nos separamos en buenos términos yo seguí viviendo en casa de mi madre y él se cambió con su tía, en lo que encontraba un buen trabajo y rehacía su vida.

A veces lo veía porque iba a visitar a Felipe, y se me quedaba mirando a veces con tristeza y otras cuando nos veía platicar a Alfonso y a mi divertidamente.

Yo tenia muy buena relación con el administrador de una empresa cliente nuestra de nombre Vegue Automotriz, y comentándole que quería buscar otro trabajo y aprender nuevas cosas, además que por mi divorcio deseaba irme de la zona porque a mis jefes los frecuentaba mi ex y si ya nos habíamos separado aunque fue en buenos términos no le veía el caso encontrármelo por ahí.

Mi relación con Alfonso se volvió más cotidiana desde que se enteró que me iba a divorciar, ya libre de Juan salía frecuentemente a divertirme con él, me llevaba a bailar, al cine incluso fuimos de día de campo dos veces y salimos de paseo a Cuernavaca un fin de semana.

Pasaron como dos meses cuando me llama Juan Carlos (el administrador de Vegue Automotriz) para decirme que me esperaba el próximo lunes en su oficina para una entrevista con el y en caso de cubrir el perfil , presentarme con quien sería mi jefe.

Hablé con Felipe sobre mi intención de cambiar de trabajo, no le agradó mucho incluso pensó que mi decisión era por culpa de ellos, pero le dije que era algo personal que quería desarrollarme y era una buena oportunidad, me dio sus parabienes y que me auguraba éxito, pero que le permitiera seguir siendo mi amigo, le dije que yo los quería mucho y que por supuesto la amistad y el compadrazgo sería nuestra principal relación.

En una ocasión que Salí a bailar con Alfonso paso por mí con un hermoso ramo de flores, muy caballeroso me ayudó a subir al auto, toda la noche estuvo muy atento, me adulaba a cada momento, bailamos hasta el amanecer, llevaba un minivestido negro de tela elástica que se adhería a mi cuerpo como una segunda piel, lo usaba siempre sin brassier, ya que la misma tela me levantaba el busto, lo combiné con una pantaleta de encaje calada y un liguero a juego con una medias claras, me veía y sentía genial, en las piezas calmadas el roce con su pecho hacia que mis pezones se pararan y pusieran muy duros, eso lo motivaba de manera que sus arrimadas a mi vulva eran más frecuentes, tenía prácticamente su glande incrustado entre mi pantaleta y el liguero, estábamos muy excitados, yo lo abrazaba del cuello, recargando mi cabeza en su hombro y él bajaba su mano hacia mis nalgas acariciándolas y apretándolas levemente, estaba en el paraíso del placer!!!!

Cuando salimos me abrazó y me cubrió con su saco ya que hacia un poco de frio, nos subimos al auto y sin decirme nada enfiló hacia su departamento todo el camino me fue acariciando las piernas y con los roces en el baile estaba ya súper excitada, puse mi mano en su entrepierna y lo que encontré me encantó, su pene estaba erecto al máximo pulsando por salir de su encierro y con sumo gusto lo liberé bajándole el cierre de su pantalón, metí mi mano en su bóxer acariciando tan fascinante miembro, estaba destilando de su glande ese liquido viscoso pre seminal, que se me quedaba entre mis dedos al acariciarlo, ponía mi palma a lo largo de su pene y con mis uñas le hacía cosquillas en su escroto.

Detuvo el auto me besó apasionadamente y bajó mi vestido de la parte de arriba y comenzó a mordisquear y besar mis pezones, yo seguía masturbándolo, me recostó en el asiento y se puso sobre mí sentado en mi vientre, poniendo su duro y erecto pene en medio de mis senos y apretándolos hacia su miembro empezó a moverse de arriba abajo masturbándose con ellos, se sentía riquísimo era una sensación nueva para mi sentir las pulsaciones y el vaivén de su pene entre mis senos y el exquisito roce de sus testículos en la base de mi pecho.

Su pene estaba tan erecto y largo que a cada movimiento golpeaba su glande en mi barbilla o en mi cuello así estuvo meciéndose entre mis senos hasta que con un sonido gutural expulso su esperma en 4 potentes disparos directamente en mi cuello, que se derramaba hacia los lados precipitándose hacia el asiento, se corrió copiosamente dejando súper mojada la tela del asiento delantero.

Cuando terminó cogí su pene aún erecto y lo puse en mi mejilla sintiendo su calor y pasándolo por mis labios se lo besaba desde el glande hasta sus testículos, estaba tan excitada que con solo besarse los tuve mi primer orgasmo.

Saque un pañuelo de mi bolso y me limpié su corrida de mi cuello y pecho y también se lo pasé por su pene para limpiárselo, provocando que se empezara a endurecer nuevamente, nos acomodamos la ropa y continuamos nuestro camino.

Llegamos a su departamento, sirvió unas copas y me empezó a decir que yo le gustaba mucho y que me fuera a vivir con él, yo le decía que era muy pronto tenía que reorganizarme primero y después ver que hacer y además seria un cambio muy brusco para mis hijos, él insistía en que me amaba y deseaba enormemente le dije que me diera tiempo y me levanté a poner música, empecé a contonearme sola al ritmo de la música; se me acercó por detrás y abrazándome de la cintura continuamos bailando, subió sus manos hacia mis pechos , yo volteé la cara para besarle, movía mi cadera para sentir su virilidad pegada a mis nalgas, estaba disfrutando sobremanera ese momento.

Cuando lo sentí duro me gire y poniendo mis manos alrededor de su cuello, seguimos bailando lentamente mientras él acariciaba mis nalgas y yo sentía su pene erecto puntear deliciosamente mi vulva, comenzó a subirme el vestido, sobando ricamente mis piernas y mis nalgas, al sentir el liguero que traía puesto se despegó de mi para observarme y diciéndome te ves divina, dejó libres mis senos y los chupaba y besaba con una pasión inusitada, me dejó el vestido enrollado en mi cintura, se quitó sus pantalones y se le veía una carpa enorme en su bóxer se volvió a pegar a mi, yo estaba muy excitada mis pantaletas humedisimas por mis jugos, me quitó el vestido y se hincó, dándome vuelta besaba mis nalgas por encima de mi pantaleta, metía su nariz en medio de ellas y con su lengua lamia mis labios vaginales, me tenia al borde de otro orgasmo y entreabrí mis piernas para darle mayor acceso a mi intimidad, él bajo mi pantaleta hasta los tobillos, me descalcé y lancé a un lado mi prenda, sintiendo excitante el frescor en mi pubis lanzando un pequeño suspiro.

Se levantó y colocó su pene totalmente erecto entre mis piernas de tal manera que asomaba su glande por el frente de mi, cerré mis piernas alrededor de tan rígido y palpitante miembro sintiendo como rozaba mis labios vaginales al moverse de atrás hacia adelante, sobando mis senos, yo sólo hacia mi cabeza hacia atrás disfrutando de tanto placer, de sus besos en mi cuello, su pene deslizándose en medio de mis labios vaginales rozando con su glande mi clítoris, y sus caricias en mis senos, hizo que tuviera mi segundo orgasmo, apretando con mis manos sus nalgas para sentirlo pegado a mi trasero.

Me dejó disfrutar plenamente de mi orgasmo, inclinándome después y abriendo mis nalgas introdujo su duro y largo pene en mi vagina desde atrás, que rico abría mis pliegues al irse deslizando hasta alcanzar mi cuello uterino, cuando lo logró apoyándose en mis senos y masajeándolos empezó un mete y saca constante y rítmico.

Nos acoplamos de tal manera y meneaba mi cadera hacia el encuentro de su pene, eran coordinados nuestros movimientos que en unos cinco minutos copulando de esa manera, puse mis manos en la alfombra para sostenerme y no perder el equilibrio al sentir como corrían mis jugos en mi tercer orgasmo acompañado de leves suspiros y gemidos de mi partes, elevaba mi cabeza cada vez que sentía su pene topar con mi matriz.

Me levantó de las piernas cargándome y pegándome a su pecho y así sin sacármelo me llevó hasta la habitación, al verme en el espejo de la sala, empalada de esa forma y como sus testículos subían y bajaban en su escroto, sentí un cosquilleo en mi vagina riquísimo.

Me depositó en la cama quedando en cuatro a la orilla de la cama y continuó con su exquisito mete y saca, lo deslizaba completamente dentro de mi vagina y lo retiraba dejando únicamente su glande dentro y así estuvo copulándome durante varios minutos hasta aumentar la velocidad de sus movimientos haciéndome sentir como se estrellaban en mi vulva sus testículos, emitiendo un peculiar sonido plop plop plop.

Al sentir como se inflaba su pene en mi vagina por su inminente corrida, me empiné mas y aventando mi cadera hacia atrás me lo introduje completamente sintiendo sus fuertes chorros estrellándose directamente en el fondo de mi útero.

Acariciando y estrujando mi cadera y nalgas terminó de correrse y recargado su pecho en mi espalda nos acostamos completamente quedando encima de mí.