Recuerdos de Juventud V

Capitulo V.

Era un lunes temprano en la mañana y ya iba de camino a la universidad, de verdad que no tenia ni ganas de ir pero debía tomar un examen. Tenia sueño, cansancio, ganas de quedarme durmiendo en mi deliciosa cama y no despertar hasta que tenga 30 años. Estoy detenida por el inmenso trafico de la ciudad a esa hora de la mañana,

escuchando a mi cantante favorito es interrumpido por el sonido de mi celular, cuando miro quien llama es la famosa Sarahí

S: Caro, la profesora no va a dar la clase, supuesta-mente su esposo esta enfermo y tuvo que acompañarlo al hospital - dice esto ahogada por el desayuno, tan mal educada.

C: Gracias por llamarme, mi amor; así aprovecho el día y puedo hacer otras cosas. Nada te hablo luego estoy manejando. - cuelgo.

Ahora estoy de camino a la cafetería, no me dio tiempo de desayunar y a donde voy hacen los mejores desayunos de la ciudad; cuando me estaciono me quedo fundida en los pensamientos de las cosas que tengo que hacer hasta que alguien muy descaradamente toca mi cristal y me asusta, soy bien nerviosa con eso. Cuando miro era la famosa Zolimar.

Z: Oye Carolina soy yo no te asustes - riéndose a toda carcajada.

C: Soy una persona nerviosa jaja pero no es tu culpa. ¿Quieres desayunar? - le pregunto por ser cortes pero simplemente quería desayunar sola.

Z: Si, vamos - joder - de paso podemos hablar y ponernos al día de cosas. - riéndose aun del susto que me dio.

C: Perfecto. - sonrío

Entramos a la cafetería y nos sentamos en una mesa distante al resto de las otras mesas, me gusta la privacidad y al parecer a Zolimar también, ella la escogió. Pedimos nuestro desayuno y esperamos a que lleguen, en eso nos pusimos hablar de lo rápido que esta pasando los años, que la vida es una y si no la sabes aprovechar se va y luego no habrá marcha atrás.

Z: Sabes, siempre eh soñado con esa mujer que llegue a mi vida, me sorprenda, me llene de esperanza de que si el amor es para mi, que aunque no sea para siempre yo pueda guardar hermosos recuerdos con ella.

C: Yo también busco algo parecido a ti, pero quiero que esta persona me comprenda, me entienda, sea fiel y este conmigo en las buenas y en las malas. - tomo un poco de jugo de manzana - pero cuando eso llegue a mi, seré la mujer mas feliz; como todo no algo perfecto pero que haya confianza, discusiones, celos y demostraciones de amor.

Z: Creo que nos podemos llevar mejor de lo que pensamos. - sonríe

C: Si, yo creo. jajaja

Terminamos nuestro desayuno, seguimos hablando en el lugar realmente tener una platica con ella es algo súper bueno, diferente, es una mujer con la que se puede platicar muy a gusto, sin nada de sarcasmo, risas y esas cosas que te hacen sentir bien.

C: ¿Quieres que te lleve hasta el edificio? - sabia que no tenia auto.

Z: Si, por favor; eres como un ángel jajaja

C: No, tampoco es para tanto - rió y nos dirigimos al auto.

Ya de camino Zolimar escoge una emisora en la radio que nos reímos por la música que salio, seguimos hablando de nuestras familias, nuestras carreras, las metas y sueños que tenemos. Ella es una diseñadora de moda, fotógrafa, entre otras cosas; una mujer preparada y que no le tiene miedo al trabajo. Cuando casi llegamos al edificio, entro al estacionamiento y nos quedamos un rato mas largo en el auto platicando, de verdad que no queríamos terminar de platicar.

Z: Tengo que decir algo pero no se como lo vayas a tomar - dice esto con algo de preocupación.

C: Dime, siente toda la confianza lo que sea lo tomare a bien. - para hacerla sentir mas tranquila pero la de verdad es que sabia que esto iba con algo que no me iba a gustar.

Z: El otro día fui a tu apartamento y toque la puerta como no me abrías, vi que la cerradura no tenia seguro y decidí abrir la puerta - en ese momento mi rostro cambio por completo - cuando estaba buscándote te vi en tu cama, con los ojos cerrados, envuelta en tus pensamientos, vi como te tocabas, como te masturbabas y no pude evitar tocarte, besar tu sexo, estar contigo; note que estabas tan excitada porque cuando te dije que no abrieras tus ojos me obedeciste. Vi como te corrías y me excito demasiado pero temía que abrieras los ojos  y cuando terminamos, decidí irme a toda prisa.

No sabia como actuar, que decir, que hacer, solo salí de mi automóvil y tome el ascensor a toda prisa, no quería verle a la cara, sentía una gran vergüenza, esta mujer fue la que estuvo conmigo, sin yo conocerla; solo repetía en mi mente "que idiota eres, porque no abriste los ojos" vi como corría hacia el ascensor pero las puertas se cerraron, marque el numero de mi piso, no la vi mas. Llego a mi apartamento y tomo el móvil y le marco a mi mejor amiga, Angélica; le cuento lo que paso y como reaccione. Estaba tan desesperada, no se ni porque solo se que estaba haciendo un drama por algo que solo paso esa vez y ya. Voy a darme una ducha, tomando la decisión de que iría hablar con Zolimar de eso que paso y pedirle disculpas por como reaccione. Luego de una hora y treinta minutos me siento lista de ir a su apartamento. Toco a su puerta y ella con la cabeza baja me abre y me invita a pasar.

Z: Carolina, yo lo siento no planeaba que eso sucediera pero es que no podía ocultarlo mas, tenia que decirlo, necesitaba que lo supieras. - llorando como si fuera una niña

C: Zolimar, solo vine a decirte que lo sentía por como reaccione hace un momento, es que esto nunca me había pasado y de verdad que me sorprendí muchísimo. No tienes que sentir vergüenza, la vergüenza la debo sentir yo por como me encontraste en ese momento, como me viste así. A todas estas ¿Como supiste el numero y el piso de mi apartamento?

Z: Le dije al guardia que era una compañera tuya, debía entregarte unos documentos de la clase y así me dijo cual era. - llorando aun

C: Oye guapa, ya no sigas llorando, fue algo que sucedió y ya. Pero gracias por decirme, porque al otro día créeme que no sabia si había sido un sueño o la realidad. Pero te agradezco muchísimo que me dijiste. - le di un beso en su mejilla

Z: Quédate conmigo esta noche, hablemos, no quiero estar sola, por favor.

C: No puedo quedarme, pero te prometo que estaré aquí hasta que tengas sueño.

Me senté en el mueble que tenia en su sala, comenzamos hablar de las cosas que hacia en su trabajo, de mis estudios, al fin me dijo su edad, tiene 23 años lo mas impresionante es que a esa edad ya ah obtenido muchas cosas. Zolimar es un poco bajita de estatura, tiene el cabello negro, un cuerpo con todo lo que necesita y una sonrisa hermosa con su dentadura perfecta, es única. Ah pasado un largo rato luego de tanta platica, llego un momento de silencio en el cual las dos nos quedamos mirando fijamente a los ojos, sin ninguna palabra ella se acerco a mi, yo coloque mis manos en su nuca y acerque mi cuerpo al de ella no había ni un centímetro de espacio entre ambos cuerpos, ese beso al comienzo fue algo salvaje, sin pasión luego la intensidad fue bajando hasta darnos un beso con amor, un beso tierno, no podía entender como es que su lengua encajaban tan perfectamente con la mía, como nuestros cuerpos podían hacer uno solo. La ropa ya estaba siendo un estorbo y nos comenzamos a desnudar hasta quedar en sostén y bragas en medio del piso de su sala. Mis manos comenzaron a explorar su cuerpo, comencé tocando sus senos, tan pequeños pero bien formados, le quite su sujetador y lleve mi boca hacia uno de ellos mientras mi lengua hacia círculos y jugaba un poco con su pezón mi mano acariciaba el otro. Su respiración comenzó alterarse, mientras jugaba con sus senos ella quito mi sujetador liberando mis seno a su favor; tomo uno de ello y comenzó a jugar con mi pezón con dos de sus dedos, me acerque un poco mas a ella y nuestros sexos chocaban un poco, hacia un movimiento para arriba y para abajo con la intensión de sentir su sexo húmedo al igual que deseaba que ella sintiera el mio, seguía jugando con mis senos pero el movimiento que tenia la estaba provocando demasiado y casi no aguantaba, dicho esto se acostó en el suelo y yo quede sobre ella, abrí sus piernas para tener un mejor acceso y comencé a moverme sentía como su clítoris se hinchaba con el mio, como sus jugos aumentaban, mis movimientos seguían mas y mas fuertes mi respiración era entrecortada como la de ella, los movimientos fueron mas y mas fuertes hasta que ambas estallamos en un delicioso orgasmo que nos rompió en mil pedazos.

Besándonos, abrazándonos, sintiéndonos nos fuimos caminando a su habitación, allí ella me recostó en su cama y bajando mi braga, comenzó a rozar su mano por mi sexo provocando que me humedeciera mas, de mi boca se salían gemidos, gemidos altos, llenos de placer; con una de sus manos recorría mi abdomen y sus labios se incorporaron con los míos, mis manos pasaron a tocarle sus senos, ella haciendo lo mismo nuestro beso seguía muy intenso y nuestras manos cada vez apretaban mas. Comenzó a besar mi cuello, morder y chupar el lóbulo de mi oreja, mientras sus manos bajaban por mis caderas hasta mis nalgas. Las dos quedamos sentadas en la cama ella frente a mi y sus labios me besaban hasta llegar a mis senos con los que chupaba una y otra vez; el momento solo estaba para nosotras dos, solo eramos ella y yo. Acostándome en la cama ella se sentó encima de mi abriendo mis piernas acomodo su sexo junto al mio y comenzó a moverse unas veces mas rápidos que otras nuestras respiraciones se alteraban cada vez mas, hasta que con una mano me penetro don sus dedos, los entraba y los sacaba comenzaba suave, los sacaba deprisa, tenia un ritmo que me volvía loca; comencé hacerle lo mismo, ambas nos penetrábamos al mismo ritmo, a la misma velocidad, a la misma vez, ya no podíamos mas, nuestros cuerpos reaccionaron de una manera única y diferente. Las dos llegamos a la vez, lo culminamos con beso suave lleno de complicidad, amor y un momento único.

Gracias por sus comentarios!! :) Besos!