Recomendaciones heterosexuales para una buena prác
Hace tiempo que escribí un relato sobre el placer anal en el hombre heterosexual y fueron múltiples las consultas que recibí y que he ido contestando, e incluso los amigos y amigas que he llegado a hacer. Todo ello me ha llevado a escribir este segundo artículo, aclarando algunas dudas acerca de lo que se me ha ido consultando.
RECOMENDACIONES HETEROSEXUALES PARA UNA BUENA PRÁCTICA ANAL.
Nuevamente presentarme, a los que ya me conozcan y a toda la gente: tengo 35 años y soy heterosexual de la cabeza a los pies, además siempre me he definido como liberado y liberal. Para que nadie se llame a engaños he de decir que mido 1,76, peso 66 kilos, soy castaño, atractivo y con un cuerpo fibroso y musculado consecuencia del deporte ,amén de ser extrovertido, y gusto a las mujeres pues según ellas mismas \"sé cómo hablarle a una mujer\"; he tenido varias novias y estoy casado con una mujer de bandera a la que todos los hombres se dan la vuelta cuando la rebasan para mirarla de nuevo (a ella y su culo 10) ¿POR qué os cuento todo esto?, bueno para que no vayáis a pensar que soy el típico bicho raro, tímido y horroroso del que pasan todas las mujeres.
Hace tiempo que escribí un relato sobre el placer anal en el hombre heterosexual y fueron múltiples las consultas que recibí y que he ido contestando, e incluso los amigos y amigas que he llegado a hacer. Todo ello me ha llevado a escribir este segundo artículo, aclarando algunas dudas acerca de lo que se me ha ido consultando.
A modo de ejemplo reproduzco uno de los comentarios:
Leí tu nota en el foro de sexología y te doy toda la razón. Yo estuve cohibido durante mucho tiempo de explorar ese aspecto de mi sexualidad que con mucho detalle has explicado, por el tabú de la homosexualidad, y como tú ,sólo me siento atraído por las mujeres (hay que ver cómo de bellas y provocativas son). Ahora practico los que los americanos llaman \"bend over boyfriend\" también conocido como \"pegging\". Yo prefiero llamarlo \"que te dé tu novia\", en este caso, mi esposa me coge con un \"strap on\" y me hace ver estrellas para luego cojerla yo y me corro de una manera explosiva. Hasta ella lo ha notado y eso nos hace felices a los dos porque la manera en que la cojo ha mejorado por la excitación previa que ella tiene, visible en el oceano de jugos lubricado por su vagina. Ella no se anima a practicar el sexo anal por el miedo al dolor (es muy cobarde y cómoda)y eso es lo que me gustaría cambiar… Nada más que decirte ,que felicitarte por postear sobre estos temas.
Dos son las cuestiones que más se han ido repitiendo en todas las consultas recibidas y que a continuación reproduzco.
1) Quiero masturbarme analmente, ¿cuál es la mejor manera para no hacerme daño?
2) Quiero practicarle sexo anal a mi novio, a mi marido y tengo miedo a hacerle daño
Lo primero que hemos de tener en cuenta es que la masturbación anal es como cualquier otra forma de placer. Seguro que ninguna mujer se metería nada sin más en su vagina, sin haberse excitado previamente, sin saber que ha comenzado a humedecerse pensando en los orgasmos que han de llegar; del mismo modo pasa con el ano: si no estamos preparados no obtendremos ningún placer
Lo más interesante del sexo anal es estar preparado para practicarlo, principalmente psicológicamente, pues si lo estamos deseando, el propio ano de manera natural se dilata, o facilita que usemos cualquier lubricante y recibe gustoso, lo que queramos ofrecerle.
¿Cómo llegar a esa excitación?
Lo primero que hemos de hacer es asociar el sexo anal a algo bueno, limpio, como cualquier otra práctica sexual.¿Cuál es un lugar limpio y que suele excitarnos especialmente?¡¡el baño!!
Siempre he recomendado seguir el siguiente ritual. Lo ideal es tomar un baño de espuma. Llenad una bañera de agua caliente, verted abundante gel. Mientras la bañera se llena, vosotros ya debéis ir dejando volar vuestra imaginación. Asomaos furtivamente a la ventana, dejad que vuestra ropa se caiga al suelo descuidadamente frente al cristal…o mejor aún, haced lo mismo, pero llevad sólo atada una toalla y que se caiga descuidadamente, con el peligro de ser descubierto por alguna vecina los chicos, o algún vecino las chicas, o simplemente pensad en lo excitante de mirar a través de la ventana, a la gente paseando sin que os vean y por un momento, imaginad que vosotros camináis y hay otra gente asomada…o pensad en algo que os caliente, que os excite, ya sea persona, o situación ya vivida; tomad conciencia de vuestra propia piel desnuda. Los hombres que vayan sintiendo un hormigueo en su pene, ese inicio de empalmarse, las mujeres que sientan el calor en su entrepierna, que se muerdan un labio, que junten sus muslos, hasta sentir calidez y humedad entre sus piernas…¡¡cuidado, que se desborda el agua de la bañera!!!
Ha llegado el momento, de deslizarse dentro del agua. Si os habéis excitado previamente, ya simplemente entrar en el agua debería incrementar esa sensación. Notad como entra vuestra pierna en el agua a la rodilla, bajando los muslos: los hombre sintiendo el calor en nuestros testículos y aquí bajamos lentos y hemos de notar las nalgas y el ano en el agua, y las chicas sus labios , sus nalgas su ano…así nos metemos hasta la garganta. Aquí cada uno ha de tener su propia vivencia en el agua, como cualquier masturbación que hayáis tenido, lo que pasa que es cuando os notéis realmente calientes y excitados cuando empezaremos con la masturbación anal
A estas alturas, en el caso de los hombres su pene rojo, erecto, ha de sobresalir del agua, notar el contraste del frío del aire y el calor del agua, de meterlo en el agua caliente y sacarlo al frío del aire, como si entrase y saliese de la calidez de una vagina femenina, y al tiempo con una mano masajearse los testículos, y con la otra tocarse tras el escroto, y el ano, apretar sus nalgas. A veces tenemos miedo de tocar nuestro propio culo,¿acaso tenemos algún problema cuando nos lo estruja nuestra mujer?. Las mujeres del mismo modo, pueden jugar al contraste del frío-calor, agua-aire, con sus senos, notar como se os erizan los pezones, notar la espuma en vuestra aureola. Os animo a probar distintas posturas dentro de la bañera, poneos a cuatro patas, y que empiece a entrar en juego el gel. Los hombres que empiecen a masturbar su poya, las mujeres a tocar su clítoris, a meter sus dedos en sus cálidos coños jugosos, empapados a estas alturas (y no por el agua de la bañera)…ahora coged la botella de gel, llenad los dedos con el, acercad el índice a vuestra puerta trasera, acariciadlo, haced círculos sintiendo la frialdad del gel, su suavidad, más gel, repetid la operación...antes de que os deis cuenta la punta de vuestro dedo habrá entrado, a otros toda una falange, a algunos-as les entrará todo el dedo de golpe. Una vez dentro, notad esta parte de vuestro cuerpo. Los hombres pensad que es vuestra poya dentro de vuestra mujer, novia, amiga, estáis en su interior, pero su interior, es el vuestro, es lo que ellas pueden sentir…si os fijáis, relajados, la mera introducción de un dedo, el pasar la puerta del ano ya es placentera. Quienes lleguen más allá, se tocarán la próstata, despertando casi incluso ganas de correrse inmediatamente (aviso a quienes se corran que notarán que les dura más el orgasmo, y su leche será más espesa; pero no nos adelantemos).
Jugad con un dedo, haced círculos, notad la textura de vuestra piel interior, probad posturas del dedo, algunas más placenteras, otras incómodas…pensad que estáis dentro del culo de ellas, y que eso es lo que ellas sienten. Conocer vuestro culo, os ayudará a practicarles un mejor anal a vuestras mujeres, y si sois mujeres las que estáis siguiendo estas instrucciones, conoceréis mejor las posturas que os darán placer. Es como el vaginal, hay posturas más cómodas, y otras menos.
Sacad el dedo, metedlo más veces. Usad gel tanto como queráis (mejor si es gel lubricante que uno corporal, pero para la excitación también vale). Ahora que sean dos dedos, notaréis más grosor dentro vuestro. Abridlos en V, meted sacad, meted sacad, tanto hombres como mujeres. Las mujeres usad una mano para el culo, y con la otra estrujad vuestros pezones, excitaos, masturbaos a la par vaginal y analmente, los hombres masturbaos la poya. Ahora no os hará daño entrar y salir, estáis dilatados, limpios dentro del agua. Seguid hasta correos.
Como en todo no hay trucos. Probad más días, con más dedos, animaos con algún juguete, o con algún objeto.
Una buena manera de practicar anal los dos juntos, especialmente las mujeres que quieran sorprender a sus maridos, novios, o ligues, es la misma. Ambos en el baño. Probad a rasurarles, ya que para cualquier forma de sexo, es más placentero “lamer y comer” sin pelo que con pelo. La excusa de depilarles el ano, ya les excitará, los vais untando bien en espuma, en gel, incluso limpitos como tienen el ano, podéis deleitarnos dando lengüetazos en el ano, y bajando a los huevos como quien no quiere la cosa. Besadlos, que os laman a vosotras, os muerdan las tetas en la ducha, calentadlos como vosotras sabéis, y estimuladlos analmente como hemos dicho.
Perdido el miedo, ya será fácil probar incluso con un vibrador. Que la mujer compre uno, que lo lubrique bien, y que os encule; eso sí, que os compense luego entregándoos ella su culo en todo su esplendor. Habrá disfrutado tanto de poseer a su hombre, que gustosamente os dará tanto placer como para abriros la puerta del paraíso
El resumen es que los hombres también pueden ser estimulados analmente y son plenamente heteros. Que la gente pierda el miedo al placer anal: la cuestión no es con quién se tiene, sino con quién se desea hacerlo. ¿Verdad que cuando besamos a una mujer, uno no piensa en empezar a besar a hombres?, pues del mismo modo, el que una mujer te de placer anal, no quiere decir que te lo tenga que dar un hombre. Hombres y mujeres tenemos una puerta de placer que añadir a nuestros juegos, quienes no lo hayan hecho que amplíen sus juegos sexuales, y sigan quienes ya la hayan cruzado y disfrutado.
Bueno, hasta aquí por el momento. Como siempre queda abierta la redacción a vuestras consultas, confesiones, y experiencias. luisscj@hotmail.es