Recibiendo mi bien merecido castigo

Esta es la historia que continua a EN EL HOSPITAL CUIDANDO A MI AMO (se debería leer este relato antes), donde ejecuta su castigo y me folla de una manera salvaje, humillándome y destrozándome…..

Las horas en el hospital ya pasaron, volvimos a casa, todo había salido bien, en lo medico claro, porque no todo había salido como había pensado y llevaba encima un castigo que cumplir, para mí era injusto, había estado preocupada, no había pensado en otra cosa que no fuera la salud de mi amo, pero él siempre quiere las cosas como él quiere y nunca olvida los castigos.

Entramos en casa, él estaba perfectamente, yo algo cansada, pero que importaba, nada mas cerrar la puerta me puso contra la pared, a ver perrita ¿Cómo te atreviste a no estar como yo quería siempre que estas en mi presencia? Pues ya te….. No tienes nada que decir más que pedir perdón, no me interesa si estabas preocupada o no, solo me interesa que obedezcas y eso tú lo sabes, si amo, lo sé, el caso es que no estabas mojada cuando sabias que deberías estarlo, así que esto lleva consigo un castigo, ya has pagado la mitad no corriéndote en todo el tiempo en el hospital y ahora pagaras la otra mitad corriéndote como te dije, yo estaba acorralada contra la pared y mi amo se abalanzo a mis labios, me beso y yo le correspondí devorándonos los dos con nuestra lenguas moviéndose como locas, una alrededor de la otra, entonces me cogió del brazo, me arrastro hasta el cuarto me empujó hasta ponerme de rodillas y él se sentó en la cama

¿Estas arrepentida? Si amo ¿tendrás que pagarlo? Yo me quede callada ¿no contestas? Sigo en silencio, ya veo que no tienes nada que decir, a ver si ahora oigo el mismo silencio, me levantó y me puso en sus rodillas, levantó mi falda, dejó mi culito en pompa y empezó a azotarlo, ZAS, ZAS, ZAS, ZAS, ZAS  ahora vas a tener que mojarte y mojar bien ese coño porque no dejare de azotarlo hasta que no te corras, te vas a correr con mis azotes perra y vas a demostrar lo que eres, una perra salida, que lo único que quieres es la polla de tu amo y la conseguirás como sea, perra, vamos empieza a mojarte, ZAS, ZAS, ZAS, ZAS, te voy a destrozar ese puto culo zorra, ayyyy, ayyyy, no te quejes y córrete, vamos zorra, perra, vamos córrete, ZAS, ZAS, ZAS, ZAS, córrete y podrás disfrutar de la polla de tu amo, vamos perra, esclava viciosa, si, si, si, me vuelves loca, me vuelves loca, dame, dame mas, destrózame el culo amo, me corro, me corro, me corroooooooooo. Con el culo destrozado, después de no sé cuantos azotes, me corrí y mis flujos caían resbalando por mis mulos, cuando mi amo se dio cuenta se tumbo en la cama y cogiéndome del pelo me coloco encima de él y metió de un empujón su polla en mi coño y me ordeno cabalgar sobre él, yo cabalgaba como si fuera la última vez, y gemía y gritaba de placer, entonces se dio la vuelta y yo quede debajo de su cuerpo, levanto mis piernas y las puso en sus hombros, saco su polla de mi coño y de otro empujo la metió en mi agujero trasero, lo que hizo que gritara de dolor aunque a él le dio igual y se puso a un mete-saca enloquecido hasta que volvió sacarla de mi culo se arrodillo en la cama, con cada una de sus rodillas a un lado de mi cuerpo, a la altura de mi cara, abre la boca perra y traga, traga toda la leche que tu amo te va a dar y se masturbo unos segundos para lanzar un buen chorro de leche en mi boca y después otro en la cara y en las tetas, ahora perrita recoge todo mi semen de tu cara y tetas y comételo todo, no desperdicies nada, es un manjar que no debes despreciar, yo recogí con la lengua y mis dedos todo el semen de mi amo y lo metí en la boca mientras él ataba mis tobillos juntos y a los pies de la cama y después cogió mis muñecas y las ato a la cabecera de la cama en forma de cruz y me dijo, ahora ahí quietecita, bien pegajosa de lefa, mientras yo descanso, se tumbo en la cama, cerro los ojos y yo me quede ahí inmóvil y con mas deseos de corrérseme de nuevo, pegajosa de su semen en la cara y tetas y pegajosa de mis flujos en mis muslos.