Rebelde: Miguel y Nico (2)
Miguel y Nico siguen disfrutando sin límites de sus cuerpos, Giovanni les tiene una sorpresa.
1
Miguel despertó primero. Estaba acostado en la cama de Nico, ambos estaban desnudos y su amigo estaba abrazado a él, apoyando la cabeza en su pecho. Estaba profundamente dormido. Miguel lo besó en la frente y distraídamente acarició su pelo mientras pensaba en lo que había pasado. Todavía tenía en la boca el sabor al semen de Nico, lo acomodó del otro lado de la cama para levantarse al baño. Caminó desnudo por el cuarto, su verga comenzó a ponerse dura mientras los recuerdos venían a su cabeza. Abrió la regadera y se metió bajo el chorro de agua caliente. Dejo que el agua cayera libremente por su cuerpo, cerro los ojos y se concentró en la energía que sentía salir de sí. En eso sintió una exquisita sensación de calidez un su pene. Abrió los ojos, Nico estaba ahí, haciéndole una deliciosa mamada. La vista era espectacular, el agua cayendo sobre el pelo chino de Nico, mientras su pene era succionado y acariciado por los labios carnosos. Miguel sintió que la mano de Nico acariciaba sus nalgas en busca de su ano, abrió las piernas para facilitar la exploración. Nico encontró el ano de Miguel, lo acarició mientras seguía tragándose su verga.
Con la otra mano tomó el jabón, lo puso entre las nalgas de Miguel empujándolo hacia su culo. Miguel estaba en la gloria, Nico le estaba haciendo la mejor mamada de su vida y sentía como su ano comenzaba a ser lubricado por el jabón, después sintió otra vez el dedo de Nico, esta vez empujando para entrar en él. Miguel se relajó, era una sensación un poco dolorosa, pero al recordar a Nico loco de placer con su verga adentro de él, decidió dar una oportunidad. El dedo de Nico fue abriéndose paso poco a poco, pacientemente en el ano de Miguel. Estaba muy estrecho y no quería lastimarlo. Su verga chorreaba lubricante en su boca y sentía como Miguel se retorcía de placer bajo el chorro de agua.
Al fin entro su dedo índice, con él, exploró el interior de Miguel; descubrió como volverlo loco acariciando suave pero firmemente esa pequeña bolita en su interior llamada próstata, cada vez que lo hacia, tenia que sostener el cuerpo de Miguel pues el placer casi lo hacia desfallecer. Introdujo otro dedo y siguió el masaje, jamás se había sentido tan excitado, quería penetrarlo, hacerlo suyo... casi estaba listo. Al poco rato se incorporó, los ojos de Miguel estaban en blanco, lo abrazó y lo beso con pasión, incluso un poco de agresividad, quería poseer ese cuerpo, que fuera suyo. Puso a Miguel reclinado contra la pared, bajo el chorro de agua caliente, Miguel jamás había estado en una situación similar, se sentía como un muñeco en los brazos de Nico, que eran cariñosos pero inflexibles, sentía su lengua recorrer su cuello, meterse en su oreja, mientras sus manos acariciaban su pecho lampiño y marcado en su culo, el pene se abrió paso dentro de él, le dolía pero al recordar lo maravilloso que sintió cuando lo penetro con sus dedos, se relajó para darle entrada.
Mételo Nico, quiero sentirte en mi culo.
Si papi, despacio para que no te duela.
Nico esto es la gloria, nunca me imagine que el sexo entre cabrones fuera tan delicioso
Ni yo güey, ya esta entrando flaco ¡Siente mi verga!
Si métela, métemela!!!
Nico empujó sus 18 cms de carne dentro de Miguel, él sintió que se partía en dos pero el tener a Nico en lo mas profundo, sintiéndose en sus brazos hizo que el dolor pasara pronto. Nico seguía besando sus orejas, su cuello...
Que rico culito, estas súper apretadito nene, dime cuando estés listo para empezar a cogerte.
Miguel empezó a mover las nalgas lentamente, sintiendo un placer que no imaginaba, con cada movimiento, la verga de Nico tocaba puntos que él ni sospechaba que existieran, haciéndolo sentir un placer hasta ahora desconocido.
Ahhh! Mike que rico, muévete flaquito, así cabroncito así, pinche putito
Cógeme Nico, quiero ser tuyo
Ya eres mío cabrón, siente mi verga puto, siéntela
Minutos después Miguel alcanzó el orgasmo mas intenso de su vida sin siquiera tener que tocarse, con cada estocada del pene de Nico, duro como piedra, su verga escupía semen como fuente. Nico estiró la mano para recibirlo mientras seguía cogiendoselo por el culo, acercó la mano a la boca de Miguel, el sacó la lengua para comérselo.
No seas golosito papá déjame algo
Luego llevó su mano a su boca y se comió los restos de la leche de Miguel, era deliciosa.
Miguel sintió como la verga de Nico se ponía aun mas dura preparándose para llenarlo de leche.
Ahh! Me voy a venir güey
Vente cabrón, lléname el culo de leche...
Después de un intensísimo orgasmo, Nico sacó la verga del culo de Miguel, el semen comenzó a gotear. Se agacho y metió en su ano la lengua para comerse la leche.
Quiero probar tu leche Nico, dame.
Nico se incorporo y beso a Miguel, él metió su lengua en su boca buscando el semen de Nico, estuvieron un buen rato así, besándose y abrazándose bajo el chorro del agua, hasta que sus penes recobraron su tamaño y ellos el aliento.
Se bañaron el uno al otro, luego se secaron con toda tranquilidad y volvieron a la cama, a descansar.
Se quedaron dormidos casi instantáneamente. El sexo en el agua caliente siempre resulta agotador. En 5 minutos no se escuchó otra cosa que las respiraciones acompasadas de ambos. La puerta del closet se abrió lentamente, Giovanni salió sin hacer ruido. Observó a la pareja de hombres desnudos y abrazados que estaba en la cama y después salió del cuarto.
2
Giovanni caminó lentamente por el corredor, se sentía como un autómata, lo que había empezado como un plan para hacer a Miguel una broma pesada, en venganza por haberle "bajado" a Mia, terminó como algo que él sabía, cambiaría su vida para siempre.
Los putos eran algo que todos conocían, él mismo conocía a 2 o 3 chavos gay, pero de ahí, a presenciar algo como lo que acababa de ver en el baño de Mike y Nico, era muy diferente. Entró apresuradamente a su cuarto, necesitaba masturbarse. Fue directamente al baño y cerró la puerta mientras con la otra mano desabrochaba el botón de sus jeans. Cuando bajo el resorte de sus calzones una verga de casi 20 cms, circuncidada y con poco vello salió disparada estrellándose contra el abdomen de su dueño. Giovanni escupió saliva en su mano derecha y la untó en su verga para lubricarla. Mientras se hacia una deliciosa chaqueta, recordó lo que acababa de ver, la verga de Nico partiéndole el culo en dos a Miguel, y él retorciéndose como puta de placer... Su mano derecha subía y bajaba lentamente por su descomunal verga, masajeándola, mientras se acercaba el orgasmo, Giovanni aceleró el movimiento de su muñeca apretando mas su mano, imaginando que era el culo de Miguel. Eyaculó abundantemente en la tasa del baño, sosteniéndose con una mano en la pared y con la otra sacudiéndose de la verga los mecos que aun colgaban.
Sin querer se había enterado de algo que era una bomba, los dos cabrones mas cotizados del colegio eran amantes... esta era una venganza aun mejor que la planeada, necesitaría pruebas pero con ese par de calientes sería fácil conseguirlas. Se quedó mirando al otro extremo de la recamara, ahí había una cámara de video, montada sobre un tripié, sería una venganza muy divertida, solo de imaginar la cara de la estúpida de Mía cuando viera el video...
3
Esta vez Nico fue el primero en despertarse, estaba acostado de lado, con los brazos de Miguel alrededor de su cuerpo. Sentía su respiración en la nuca y su pene acomodado entre sus nalgas. Se volteo para quedar cara a cara.
Despierta Mike Lo besó en los labios mientras le acariciaba el pelo, lo tenía tan corto que ni siquiera podía sostenerlo entre sus dedos. Miguel abrió sus enormes ojos negros y sonrió al ver ahí a Nico.
Hola... ¿cómo estas?
No tengo ni puta idea güey, me siento super raro.
Yo también... no se que pensar. Abrazó fuertemente a Nico, el correspondió estrechándolo contra su pecho velludo, su cara quedo entre las dos enormes tetillas morenas.
¿Qué vamos a hacer Nico?
No se... ¿novios?
No pendejo, a hacer, no a ser...
Ah! Pues creo que ya nos sobra una cama en esta recamara no?
Miguel se rió, le fascinaba ver así a Nico, con esa cara de niño travieso, sonriéndole feliz, porque él también se sentía feliz.
Tenemos que tener mucho cuidado, nadie se debe enterar Nico.
Si... ¿Nos pueden expulsar?
No se... pero de cualquier forma, por favor que nadie, absolutamente nadie se entere...
Te prometo que no. Nico lo beso en los labios, largamente, los cuerpos desnudos volvieron a enroscarse. Sus penes quedaron uno sobre otro, las erecciones no se hicieron esperar.
¿Oye Nico?
Que güey
¿Si vamos a ser novios?
4
Había pasado ya 6 días desde que Giovanni descubrió a Nico y a Miguel cogiendo en el baño. La idea de esconderse en su habitación y tomar un video que luego se encargaría de mostrar a todo el Colegio era muy tentadora, pero cada noche se proyectaba en su mente lo que vio aquel día, y se excitaba como ese día, y acababa jalándose la verga pensando en como se follaba Nico a Miguel. Poco a poco fue aceptado la idea de que quería ser él es dueño de ese cuerpo, al pasar de los días, el odio que creía sentir por Miguel se fue transformando en un sentimiento que no podía explicar. Otro sentimiento crecía dentro de Giovanni, aun contra su voluntad, los celos... no toleraba que fuera Nico. No podía ser él, Miguel tenía que ser suyo.
Otro plan fue tomando forma en la mente de Giovanni, tenía que encontrar la manera de quedarse con Miguel, esa si que sería una gran sorpresa para Mía.
Continuara...