Reanimación y segundo asalto (IV - capítulo)
Tendida sobre la alfombra, solo deseaba que me dejasen descansar, necesitaba un respiro para no morir de placer y agotamiento. Kurt le dio instrucciones a la chica que se interesaba por mi, y le dijo lo que tenía que hacer para volver a ponerme en forma, con un método que no imaginaba
Como os contaba en el capítulo anterior, aquellos tres cabrones, habían acabado conmigo, especialmente Denzel, a quien no iba a olvidar fácilmente.
Tendida sobre la alfombra, solo deseaba que me dejasen descansar, necesitaba un respiro para no morir de placer y agotamiento.
De mis amigas Alice y Sonja, ya ni me acordaba, porque en mi cabeza todo estaba confuso. La chica que me había sujetado, le hizo una seña de mi cansancio a Kurt y este le dijo algo.
Vino de nuevo a mi lado, mientras los invitados se divertían y otros me observaban derrotaba sobre el suelo y llena de semen, y me dijo- “Venga cariño levanta” “ven conmigo arriba” y las dos subimos al piso superior, donde ella me dijo que me desnudase y me diese una ducha bien fría, y sacó de un refrigerador dos botellas de agua, que yo empecé a beber para hidratarme.
Me quité el collar y las pocas cosas que llevaba y me metí bajo la ducha de hidromasaje con agua fría, porque tenía el cuerpo dolorido y muy caliente. Así estuve no menos de 10 minutos, gozando de la fría agua sobre mi cara y mi cuerpo y limpiando mi pegajosa piel, del semen depositado.
Ensimismada por el placer del agua fría, la chica abriendo la mampara, me ofreció un gran vaso de agua helada y me dio dos pastillas diciéndome – “tomate esta de éxtasis y esta Molly y bebe mucho agua ahora” “ en unos minutos estarás como nueva, confía en mi.
Yo nunca tomaba Extasis ni ninguna otra droga, pero en estos momentos, o me las tomaba o me iba para casa, así que dudando un poco, me las tomé y seguidamente me bebí casi toda el agua fría que ella me había acercado, seguí bajo la ducha un poco más y entre la ducha fría y las pastillas, a los 15 minutos me encontraba de nuevo perfecta y con renovadas ganas de sexo de nuevamente.
La chica me tranquilizó diciéndome – “No te preocupes por haberlas tomado, solo dan problemas si consumes habitualmente y tu solo las has tomado ahora” “Son para casos de apuro como tu bajón de ahora, pero como remedio de emergencia para no tener que abandonar, son una maravilla”
Gracias le respondí yo añadiendo “es la primera vez que tomo MDMA” y ella respondió – “Por eso no debes preocuparte, es solo una toma ocasional, notarás el subidón fuerte en 15 minutos y después seguirás enchufada y llena de energía, durante 4 o 5 horas más como poco, así que vamos a buscarte un nuevo look para hacer tu reentrada en la fiesta”
“Todos se van a alegrar mucho de verte de nuevo allí abajo” “has sido hasta ahora una de las mejores zorras de toda la fiesta”
Así que empezó a rebuscar en los armarios, algo en concreto para bajar de nuevo a la Sala.
No le costó mucho elegir otro conjunto para mi, porque solo deseaba que me pusiese, unos zapatos te tacón muy alto, unas pulseras y un collar, y para no bajar totalmente desnuda, una falda abierta que se sujetaba a mi cintura con un lazo y que era muy rápida de quitar, ya que solo con desatar el lazo trasero, la falda caería a mis pies.
“Estas muy seductora Becka – me dijo la chica mirando como me quedaba el conjunto – “Ya te veo en forma nuevamente” me dijo, a lo que le respondí que me encontraba como nueva. “Si es así baja de nuevo a la Sala y hay una entrada sensual” –añadiendo- “te recomiendo que al llegar abajo, dejes caer tu falda, para que vean todo tu cuerpo perfumado, limpio y seductor” “A por ellos Becka”
Nos dimos un par de besos, pues le estaba muy agradecida por su ayuda y descendí con sensualidad sobre mis altos tacones, de nuevo hacia la Sala, donde Alice y Sonja, ya habían preguntado por mi, y les habían informado que había subida a cambiarme sin más detalles.
Vi a mis dos amigas, Sonja bajo una mesa, chupándole la polla a un par de invitados, y a Alice tumbada boca arriba en un diván, mientras dos hombres le follaban la boca y el coño respectivamente.
El subidón químico, estaba empezando a sentirlo, lo que me hacía sentir más desinhibida y con un aumento de la calentura sensual.
Casi al final de las escaleras, me detuve y retirando mi falda, mostré con morbo mi cuerpo casi desnudo, mi coño, que la falda cubría y los que ya se había dado cuenta de mi retorno, pudieron observar mi cuerpo desnudo integralmente, solo adornado con las muñequeras en tobillos y manos, mi collar de esclava y mis zapatos de tacón ….., todo lo demás que podían ver, era mi cuerpo desnudo y dispuesto para dar y recibir placer nuevamente.
Alice y Sonja, se sonrieron al comprobar que esta bien y con ganas de fiesta.
Por unos momentos me contemplaron bastantes de los invitados y sus parejas como descendía por la bonita escalinata para reunirme con ellos en la orgía sexual .
Kurt fue el primero en alegrarse de mi regreso halagándome con uno de sus comentarios – “Becka, bella golfa, estás radiante y más seductora que antes” “ estás ya repuesta mi putita?” – me preguntó.
“Oh si, Kurt, gracias” “me ha reanimado mucho lo que me habéis hecho y dado”
Entonces me tomó de la mano y me llevó al centro de la Sala, pero se detuvo un momento junto a una cómoda llena de juguetes y material de bdsm y poniéndome una cadena sujeta a mi collar, me ordenó – “Vamos perra, ponte como tal, que te voy a llevar a pasear y exhibir por toda la Sala”.
Yo obedecí inmediatamente y me puse a cuatro patas mientras el me llevaba de la cadena, caminando como una perra entre los invitados, que me acariciaban y daban palmadas en mi culo y mi sobaban las tetas, o me daban sus dedos a chupar, que yo lamía sensualmente, mojándolos con mi saliva.
Ya sabéis que me gusta mucho exhibirme y ser exhibida, así que dimos un par de vueltas a la Sala, mientras oía a mi espalda toda clase de comentarios calientes “magnífica perra!” ….., o una pareja que comentaba ella a el “Nos la llevamos a casa, para que haga la limpieza y sea nuestra perra personal?, hummm me encantaría, tener esa perra paseando por toda la casa detrás de mi, o sacándola al jardín a mear, para que algún vecino la viese”
Al pasar delante de un hombre mayor, le dijo “Kurt, déjame a la perra en mi regazo, quiero ver bien ese culo jugoso, y para lo que sirve”
Sentado en un mullido sillón y vestido por completo con su trabe beige, me hizo indicación de que me recostase sobre sus piernas, con mi culo expuesto cerca de su muslo derecho.
Me colocó su brazo izquierdo sobre mi cabeza y cuello, y me hizo bajar la cabeza que sobresalía de sus piernas, mientras me decía - “Las chicas de ahora, sois todas muy putas y descaradas, así que no me queda más remedio que castigarte, por ser un puta!” “que pensarían tus padres si viesen que su hijita, se ha convertido en una zorra incorregible! “Muy mal te portas, sencillamente como una puta de la calle”
Tras lo que acto seguido, y sin decir nada más, empezó a azotarme el culo con la palma de su mano,.
Me estaba dando una azotaina como a una colegiala traviesa, y mi culo enrojecía por momentos y lo sentía escocer y calentarse a cada palmada de castigo. El maestro añadió – “I no te quiero oír gimotear, ni llorar ni quejarte, porque estos azotes te los has ganado por puta” – tras lo que continuaba azotándome el culo, lo que me producía una mezcla de dolor, placer y mucho morbo
El viejo continuaba regañándome- “No quiero que mis alumnas seáis un putas, así que cada vez que os pille sin bragas, os voy a poner el culo al rojo vivo” mientras se oía el plas! plas! …. plas!! de sus rápidos y calientes azotes.
Entonces el muy cerdo, me dijo – “seguro que los chicos, te follan además de tu boca de viciosa, tu mojado coño, y también dejas que te follen por el culo como una perra ¡!
“ Pues se acabó, para tu culo de puta, tengo el remedio perfecto!”
y metiendo la mano en uno de sus bolsillos, sacó un Rosebud de medida XL y poniéndomelo la entrada de mi rojo culo, el muy cerdo, me lo fue metiendo hasta el fondo, para que sintiese el placer, de mi culo lleno y apretado por el dilatador.
Me volvió a amenazar mientras me decía “Tienes prohibido puta, sacarte el Rosebud del culo! “Así no te lo podrán follar esos cerdos de muchachos” …… “ que tu perra, a todos les debes decir que si, puta”! apostillando entre risas “Solo te lo podré follar yo, desde ahora, , cuando te lo saque! “Desde ahora tu culo de cerda es solo mío” y mientras me azotaba con una mano, removía y hundía el Rosebud en mi ano, para hacérmelo sentir más.
Me encantaba sentir como me follaba y removía el gordo Rosebud, al tiempo que me azotaba por ser una puta, era excitante y morboso.
Aprovechando que pasaba por nuestro lado Kurt, el abuelo le dijo – “Kurt amigo” “ me encantaría que la próxima vez, a esa caliente zorra, me la vistieses de colegiala, con su blusa blanca, su faldita plisada y sus calcetines blancos altos” “ también sus braguitas de algodón blancas que ya se las romperé yo” añadiendo- “Seguro que a la muy puta, le encanta y se pone cachonda cuando alguno se las rompe, jaja”!
“No se preocupe señor Benatov” –le tranquilizo Kurt- “En la próxima fiesta, se la visto de colegiada como a usted le gusta” “Esta zorra y si quiere alguna más, sin problema se las visto a su gusto” – “estarán muy sexys vestidas de colegialas”
“Gracias Kurt, eres un buen amigo muy atento” – le agradeció el abuelo.
Que de nuevo siguió azotándome el culo con su mano abierta y removiendo el Rosebud dentro de mi culo
Mientras decía – “Creo que tu puta, necesitarías uno más grande que este, para que te quedase bien apretado, porque veo que tienes un culo que ha sido sodomizado muchas veces ya” para terminar diciendo- “esta medida es la más grande, cerda, pero buscaré de otra marca o forma, si tienes de más diámetro, quiero que te entre muyyyy apretado, para que aprendas, so cerda”!
Mientras más me azotaba, más sentía en mi vientres como entre sus piernas su polla crecía por momentos.
Entonces paró de azotarme y poniéndome de rodillas entre sus piernas me dijo “Vamos puta niña, muéstrale a tu profesor, la práctica que tienes en desabrochar pantalones y ponerte a mamar todas las pollas que te ofrecen”! ¡”Vamos!!” me dijo imperativamente.
Yo sumisa, le desabroché el pantalón, y comprobé que el muy cerdo no llevaba calzoncillos, pues su polla apareció erguida en medio de su pelo púbico blanco.
No esperé que me volviese a reñir, así que agarré su polla con las dos manos y mientras le pajeaba su vieja polla, empecé a mamárselo con vicio, porque los azotes y lo que me habían dado arriba, me había puesto caliente como una perra en celo.
Me esforcé en mamársela con vicio y al cabo de unos 10 minutos, sentí como se tensaba, y mientras hundía mi cabeza con sus manos para que me tragase toda su polla que no era muy grande y me tragase su semen, se corrió en mi boca y garganta, entre gemidos de placer mientras repetía – “Así niña, así quiero que me la chupes siempre que te lo ordene” “Sin duda como puta, vas a hacer carrera, Haaaaaa” Siiii” y entre gemidos, me lleno la boca con el escaso semen que consiguió extraer de sus viejas bolas, el muy cerdo, se lo había pasado de vicio conmigo.
La verdad, es que era para mi una nueva experiencia el papel de colegiala y con un profesor de más de setenta años, y mamársela a aquel hombre tan mayor que podía ser mi padre, me dio un morbo especial, que no había experimentado antes.
A pesar de que follar con buenos y deseados machos es mucho más placentero, ser dominada por un viejo, me hacia sentir más puta y pervertida, como si lo hiciese por dinero o con un amigo de mi padre, algo parecido a un semi incesto, fue muy morboso y sucio, tremendamente excitante también.
Mientras el abuelo le hacía señas a Kurt de que recordase su encargo, jaja, desde una mesa cercana, donde había 4 o 5 parejas y una de la esclavas arrodillada, uno de los invitados que estaba sin camisa, solo con los pantalones, me llamo para que acudiese a servirles.
Al llegar junto a ellos, el que estaba semi desnudo, miró con cara de diversión mis rojas nalgas, tras el castigo que me había propinado el viejo profesor, y acto seguido, desabrochándose el pantalón, este caía hasta sus tobillos, y también sin ropa interior, su polla salía disparada apuntándome reclamando mis atenciones, así que enseguida supe para lo que me deseaban, aunque era obvio de entrada.
Mi nuevo “cliente” era un chico de unos 40 años y bien dotado que iba con una rubia, que contemplaba divertida, igual que el resto de parejas de la mesa, como sin reparos, me daba su polla para que se la chupase.
Frente a el desnudos los dos, se la acaricié desde los huevos hasta la punta de la polla mojada con dulce líquido preseminal, comprobando que estaba durísima lista para empezar.
Me arrodillé frente a el y antes de metérmela en la boca, le pregunté – “El señor desea que se la coma sin manos?” a lo que el respondió – “Si, las manos a la espalda y tu, solo usa tu boca y tu lengua”
Frente a el pues y cruzando mis manos en la espalda, empecé a jugar y chupar aquella joven y buena polla, degustando el oleoso liquido preseminal, muy dulce, y empezando a tragar en cada ocasión, más profundo su duro rabo.
El tampoco usaba sus manos y dejaba que mi boca hiciese su trabajo, cosa que hice con devoción y ganas de mamársela, pues estaba muy cachonda ya con los efectos de la pastilla energética de antes.
Me sentía el centro de la atención y el morbo de toda la mesa, que se divertían y se excitaban, viendo como la polla de su amigo, entraba y salía de mi boca golosa.
El gemía muy sutilmente al sentir mi lengua y mis labios calientes y mojados, recorriendo toda su verga, lo que para mi, era todo un placer gozando de esa jugosa polla dura. Suavemente me dijo – “cómeme los huevos puta! y después vuelve a comerme la polla, pero hasta que te entre toda en tu boca”
Así lo hice, me la saqué de la boca y empecé a chuparle sus duras bolas, metiéndomelas enteras alternativamente una y otra, sintiendo como se endurecían, algo que me hacía sentirme orgullosa del placer que le estaba dando.
Cuando terminé con sus bolas, de nuevo, me fui tragando su polla con glotonería, a cada mamada un poco más, hasta que tratando de no ahogarme, conseguí hacerla desaparecer toda dentro y así jugando con mi lengua, la mantuve todo lo que pude, sabiendo que el observaba complacido mi dedicación.
Cuando ya me faltaba el aire, relajé mi profunda mamada y me quedé solo con la mitad de su rabo, dentro de la boca. Entonces el me dijo “Vamos levántate y inclínate sobre la mesa, quiero follarte hasta que grites!
Obedientemente, me levanté y apoyando mis caderas en el bordé, me incliné sobre la mesa junto a los invitados, ofreciéndole mi grupa y mis dos hoyos, al tiempo que movía mi culo pidiendo polla.
Al ver como le tentaba, me dio dos buenos azotes en mis nalgas y seguidamente, abriéndome los labios de mi empapado coño, de un solo empujón, me la metió hasta el fondo, sintiendo como su pelvis golpeaba mi culo, incapaz de penetrar más en mi, porque estaba toda dentro y yo la sentí rápida deslizarse hasta el fondo de mi vagina, mientras mis tetas se balanceaban sobre el mantel de la mesa a cada nuevo pollazo.
Para complacerle más, empecé a gemir a cada nueva embestida suya, también para placer de los invitados de ambos lados, que veían en un primerísimo plano, como mi cuerpo se balanceaba y también las copas, jaja, cada vez que me penetraba con fuerza y deseo incontenido.
La rubia que tenía a mi izquierda me decía “Que tal te folla mi marido? “estoy segura de que te folla con toda su fuerza, porque las putas como tu le vuelven loco y nunca pararía de follar zorras como tu, y como yo, jajaja “
Ocupada como estaba, entre gemidos le indique que me estaba follando muy bien y que gozaba mucho, lo que hizo que el al oír mi comentario, redoblase la fuerza de sus pollazos y empezase a follarme el culo con dos o tres dedos.
Mi lívido volvía a tenerla como una moto, y volvía tras reponerme, de nuevo la golosa zorra de siempre, ansiosa de placer y cosas atrevidas.
Cuando el marido de la rubia, empezó a trabajarme el culo con sus dedos, supe al instante que iba a terminar follándomelo como el hombre y yo deseábamos los dos, acoplados como verdaderos animales en celo, macho y hembra sometida.
Estaba deseando que me llenara el culo con su polla, porque con lo dilatado que lo tenía tras la caliente fiesta y haber sido sodomizada por aquel negro con su polla de casi 11 pulgadas, cualquier polla que lo desease, iba a encontrar mi esfínter, dilatado y abierto como nunca antes lo había tenido.
Antes de abandonar con su polla el calor de mi coño, me cogió del pelo e inclinándose sobre mi, me dijo “Ahora puta, vas a saber lo que es bueno!” porque voy a follarte el culo como si fueses una vulgar cerda, hasta que te desmayes de placer y dolor y sientas como todas tus tripas se llenan con mi caliente y cremoso semen de semental ¡”
No quise quitarle la ilusión, de que pensaba que me iba a “romper” el culo, porque se que eso a los machos le hace mucha ilusión, pero mi pobre culo, esa noche estaba tan roto ya y escocido, que sabía que tendría que dormir boca abajo, porque la polla de Denzel, me había ensanchado y roto el culo, como hacia mucho tiempo que no me hacían.
Los integrantes de la mesa, gozaban viéndome sodomizada por uno de los maridos, y los que alcanzaban a hacerlo, ellos y ellas, me pellizcaban y apretaban las tetas y me metían sus dedos en la boca, como si me la estuviesen follando de verdad, ofreciéndoles yo, miradas de vicio y placer por sus toqueteos calientes.
Entretanto, mis tetas, mi cabeza y hasta la copas, se balanceaban con más ímpetu, a medida que mi follador, me la clavaba en mi culo, con más fuerza, que hacían acelerar mis jadeos y no tardé en correrme, algo que no pasó inadvertido para mi macho que sintió sobre su polla, las continuas contracciones de mi esfínter sobre su rabo.
Dirigiéndose a su esposa le dijo – “esta puta se esta ya corriendo como una cerda” “Creo que deberíamos tener una como ella en casa, para nuestro mutuo uso personal y todo lo que se nos ocurriese” – añadiendo – “Me encantaría ver como te la follas con tu gran dildo de correas cariño”
Ella asentía con la cabeza y otro de su amigos decía – “Todos deberíamos tener una buena puta en casa para fallárnosla cuando nos viniese en gana, aunque nuestra doncella, cuando me la quiero follar, siempre accede la muy puta”
Concentrada en el gozo de mi orgasmo, me sentí inundada al mismo tiempo por el caliente y abundante semen de aquel macho, llenando mi culo de puta con su miel.
Gimió como un cerdo, mientras descargaba todo el semen acumulado en sus bolas y su esposa excitada me pellizcaba con dureza, mi hinchados pezones, mientras sentía bajar resbalando por mis muslos, el caliente semen de el, cuando cambió de agujero y los últimos chorros de su dulce crema, los derramó en mi coño, como si desease preñarme.
Con mi coño rebosando los restos de su semen, me la volvió a clavar en el culo y así, bien enculada se reclino sobre mi, abrazado y con sus manos, presionando mi tetas, quedándose abrazado a mi, la perra que se había follado con deseo, mientras sudorosos los dos éramos acariciados por su esposa y las otras dos parejas, mientras hacían comentarios morbosos, sobre como me había jodido su marido.
El se incorporó, premiándome con unas palmadas de satisfacción en mi culo, mientras su hacía unos minutos, durísima polla me la sacaba del culo ya morcillona y empapada con su propio semen y mis jugos.
Se despidieron de mi, con un “Nos vemos en un rato de nuevo, preciosa”, y yo les di las gracias.
Cuando recorrí con las vista la Sala, vi a Alice entregada en mamarle la polla a un Vip, tumbado en la alfombra boja arriba.
Me dirigí junto a ellos y me arrodillé al otra lado en que estaba mi amada amiga Alice, que seguía mamando aquella jugosa polla del invitado.
Al verme frente a ella, paro un instante de mamársela y me beso con pasión, entrelazando nuestras lengua, y compartiendo conmigo, el sabor de la polla que estaba chupando.
Con una sola mirada nos entendimos, y fui yo quien empezó a chupársela ahora al invitado, mientras ella me acariciaba y acompañaba mi cabeza, al tiempo que le comía los huevos a aquel buen macho.
Aquel cerdo Vip estaba muy bien atendido, con la jefa Natasha besándole y comiéndole la boca, mientras el le sobaba el coño, y Alice y yo, turnándonos en chupar y comerles los huevos y la polla.
Posiblemente ya llevada un buen número de corrida en la velada, porque le estábamos haciendo un “trabajo” muy bueno y a pesar de seguir poniéndosele la polla cada vez más dura, el cabrón no se corría y aguantaba nuestras mamadas de vicio.
Solo era cuestión de insistir, y se iba a correr sin remedio, recordando como dos putas como Alice y yo, se la había mamado a dúo.
Sus pelotas volvía hincharse poco a poco, indicando que la doble mamada prosperaba y pronto iba a dar su fruto.
En tanto Alice, de nuevo se la mamaba y le pajeaba al mismo tiempo, yo me metía sus bolas en la boca y jugaba con ellas, sintiendo el duro placer, de aquellas pelotas de macho dentro de mi boca de puta.
A una indicación de Natasha, Alice se sentó sobre la cara del invitado, ofreciéndole su goteante coño, mientras el agradecía aquel cocho caliente en su boca, mientras le pellizcaba el culo y le metía la lengua muy profundamente, en su coño y también dentro de su dilatado culo de golfa.
Yo ocupé mi lugar entre las piernas del hombre y me dediqué en solitario a mamársela con mucho vicio, ante la mirada complacida de la jefa Natasha y un buen número de invitados, porque el espectáculo lo valía.
A pesar de tener la boca dolorida de tanto mamar pollas continuamente, se la chupaba hasta el fondo, alternando con lametones en su hinchado y enrojecido capullo, lo que era un placer para mi, y mucho más saber que éramos en ese momento el centro del espectáculo como dos buenas putas.
Natasha para animar más la ya de por si, guarra escena, me decía – “Vamos chicas, mostradle al caballero, que las mejores zorras, sois vosotras las que tiene Kurt, son las más putas y expertas de la Isla”
Esas calientes palabras, me ponían caliente como una perra en celo, deseosa de ser follada por todos los machos de la Sala y mientras se la seguía mamando con devoción, le acariciaba los muslos, el culo y sus bolas.
Cuando vi que estaba a punto de correrse, me la sache de la boca abriéndola para recibir su cremosa miel y especialmente, para que todos pudieran ver como brotaban sus chorros de semen dulce, llenándome la boca y la cara con aquella dulce golosina.
El caballero se portó como un gran macho y estampó, no menos de seis o siete chorros de semen, que se depositaron en mi boca mejillas y gafas, dejándome un aspecto muy sexy y guarro, con toda mi cara de zorra, llena de cremosa leche.
Me entretuve con su polla y bolas, mientras el folllaba con todos sus dedos, el coño y el culo de Alice, que gemía como una perra y no tardaba en derramar sus jugos en la boca y cara de aquel invitado.
Mientras los que miraban jaleaban al chico, y le aplaudían por la follada que le había dado a la zorra de Alice, que tras correrse, se tumbó sobre el, todavía con su coño en la base la boca, donde seguía recibiendo calientes lametones.
Tumbada sobre el boca abajó, me encontré con su sonriente cara de placer y vicio y nos besamos con deseo, como perras, sintiendo ella el sabor del semen que me había dado el vip que tenía debajo.
Tras el largo beso, que nos dejó a las dos sin aliento, tras soltar mi boca, se metió la polla del chico en la boca, y le dio varias chupadas, terminando con estamparle un beso en el capullo, tras lo cual las dos nos levantamos y abrazadas por la cintura, como dos putas enamoradas, fuimos a tomar una copa juntas, eso si antes de llegar a la barra, no nos “reclamaban” para tomar otro tipo de bebida más cremosa o para hacer algún nuevo numerito para algún invitado, o varios …….
La fiesta seguía muy animada y con el morbo y las ganas de sexo a tope, os sigo contando ………… porque aún quedaba más de lo que nosotras esperábamos para regresar a nuestro “nidito”…….. hummm