Realmente nuestro primer intercambio (1)

Después de nuestra sorprendente experiencia en Ibiza, estuvimos hablando de la misma y de cómo enfocábamos la nueva situación, estaba claro que algo había cambiado. Hasta ese momento solo habíamos mantenido relaciones sexuales entre nosotros, pero el haber follado con otros y ninguno de los 2 nos habíamos sentido mal, hacía que nos planteásemos seguir tanteando ese campo, sin buscarlo explícitamente, pero si surgía, seguir con ello.

María, como ya os contamos anteriormente, a pesar de sus 45 años, se mantiene fantásticamente, gim varias veces por semana, mantiene su físico pequeño 160, delgadita, senos pequeños y un culito respingón que hace que, ayudada por su forma de vestir, llame la atención. Los 2 somos amantes de practicar el nudismo y siempre que podemos lo practicamos.

En el verano de 2017, alquilamos un velero de 45 pies (14 metros aproximadamente) para dar la vuelta a Mallorca. Salimos de Palma ilusionados ya que disfrutaríamos del mar y de poder disfrutar de la belleza de la costa mallorquina. Nuestro primer destino, la isla de Cabrera. Al poco de salir, los 2 nos desnudamos para disfrutar del sol en nuestros cuerpos y a las 4 horas ya enfilábamos la entrada al puerto natural de Cabrera. Ahí tienes que fondear en unas boyas, previamente reservadas donde se mantiene la distancia con otras embarcaciones, aunque están agrupadas por zonas. Cerca de nosotros había unos cuantos veleros y 2 preciosas lanchas con bandera alemana. Al llegar nos bañamos y nos pusimos a preparar una cena para celebrar la ocasión, donde no faltaba el vino, tinto para mí y rosado para María. Después de cenar nos dispusimos a pasar una romántica velada disfrutando de la noche estrellada. María solo llevaba puesta una camiseta y un pequeño tanga y yo solo el bañador. Prepares unos gin tonics y nos acurrucamos en el asiento de una de las bordas y la bese profundamente mientras empezaba a acariciarles los muslos. Poco a poco fui subiendo hasta llegar al borde de su tanguita y ella gimió levemente lo que aproveché para levantar la tela y tocar suavemente su coñito completamente depilado. Doy un vistazo alrededor y estando todo oscuro no veo a nadie en los barcos próximos, parece que todos están durmiendo. Así que, continuo con las caricias a María y empiezo a abrirle los labios de su coñito, pasándole la yema por la entrada que ya empezaba a estar húmeda.

María: Cariño si sigues así no voy a poder parar.

Juan: Pues ya sabes, no pares, continua, sin prisa, pero continúa disfrutando.

Noto como separa sus piernas y coloca los pies sobre la mesa, quedando completamente despatarrada, facilitando mi labor. Noto que su coño esta caliente y mojado, metiendo poco a poco 2 dedos y su mano ya esta encima de mi polla, peleándose por bajar el bañador. Me incorporo y me lo bajo y María se coloca frente a mi polla y abre la boca empezando a ensalivarla poco a poco. La tumbo y empezamos un lento 69, empleándonos a fondo, yo pasando la lengua de arriba abajo, llegando hasta el agujero de su culo, mientras ella comparte mano y boca en un movimiento masturbador.

Juan: Mmmmmmm, te gusta chupar polla, eres una calentorra y te voy a dar duro.

María: Cómeme el culo, me derrito si lo haces.

Al mismo tiempo empiezo a jugar con un dedo con el agujero de su culo y con la ayuda de mi saliva, empezando a introducir la yema del dedo. María suspira y da un pequeño gritito cuando nota mi dedo entrando en su culo. Al mismo tiempo, con la otra mano le abro los labios de su vagina e introduzco mi lengua lo que puedo y subo hasta succionarle el clítoris. Mientras ella se está comiendo toda mi polla y para no ser menos, juega con el agujero de mi culo introduciendo también un dedo.

María: Te gusta cabrón, mira como se mete en tu culo, te voy a follar, notas como entra el dedo, ya está todo dentro

Yo ya no puedo más, me levanto y me siento, cojo a María la levanto y la pongo de espaldas a mí, con las piernas abiertas y la voy sentando sobre mi polla hacia su coño y la hago ir bajando poco a poco para introducir mi polla.

María: ahhh, como te gusta follarme, eres un vicioso. Estoy muy caliente, necesito follar y correrme.

Juan: eres una golfa y te gusta, tienes el coño chorreando, te imaginas que nos estuvieran viendo, seguro que gusta ser tan zorra.

Estuvimos un buen rato en esa posición hasta que María levanta y se apoya en la mesa y me pone su culo frente a mí, apunto mi polla hacia su culo y empiezo a intentar meterla. Ahora a María ya se le escapan los grititos y rebufa como una perra en celo. En cuanto se la tengo metida, empiezo a bombearle y al mismo tiempo, con la mano empiezo a meterle 2 dedos en el coño. Lógicamente, la situación es insostenible, entre la enculada y el estar al aire libre, hace que nos corramos al mismo tiempo, llenándole de leche el culo y María queda apoyada en la mesa con una fuerte respiración tras su orgasmo. Mientras se reponía en el baño, prepare otros gin tonics y al rato nos fuimos a dormir.

Por la mañana siguiente tras levantarnos, pegarnos un baño en las cristalinas aguas, decidimos bajar a tierra y tomarnos unos cafés con leche en la cantina del pequeño puertecito. Había poca gente que ocupaban parte de las pocas mesas de la terraza, cogimos una mesa y entre para pedir los cafés y unas tostadas. Al salir me encuentro a María hablando con una pareja alemana que estaban sentados en la mesa de al lado (María habla alemán), era un matrimonio de nuestra edad, el algo mas alto que yo y bien conservado, de nombre Peter, ella, Ingrid, una rubia de las que, sin ser espectaculares, llama la atención, 175 aproximadamente, quizá un pelín rellenita y con unos pechos de infarto.

María: Me han dicho que están fondeados cerca de nosotros y que les encanta navegar por la costa mallorquina y tienen una casa en Andratx.

Tras los saludos de rigor y como yo de alemán, ni idea, nos pusimos a hablar en inglés, menos mal, porque si no, menudo desayuno. La conversación giraba básicamente en lo atractivo de Cabrera, de barcos, ellos tenían una lancha de unos 16 metros y realmente estaban cerca de nuestro barco. La verdad que eran muy simpáticos y agradables y las 2 mujeres congeniaron rápidamente, empezando entre ellas a hablar en alemán. Al terminar los cafés, cada pareja cogió su auxiliar y cogimos dirección a los barcos, ellos seguían camino ya que tenían que ver a unos amigos en Porto Cristo y nosotros sin destino definido, también partíamos, nos despedimos y diciendo que quizá nos encontraríamos de nuevo.

María: Juan,

Al cabo de 3 días navegando y disfrutando de la costa, llegamos a Port de Alcudia y decidimos entrar en el club náutico para así poder repostar agua e ir a comprar provisiones y ya que estábamos ir a cenar a algún restaurante del puerto. Amarramos y mientras yo ordenaba el barco, María fue hasta capitanía del puerto. Al poco regresa sonriente.

María: A que no sabes a quien me he encontrado, a Ingrid y a Peter, están también amarrados en el club. He quedado con ellos que, si te va bien, vamos a cenar los 4.

Juan: Pues, bueno, después de 3 días solos, no vendrá mal hablar con otra gente.

María: Pues voy a avisarles y tu reserva el restaurante, sobre las 21,30.

Como ya conocíamos el puerto, ya había pensado el restaurante y solo llame para reservar. Al poco regreso mi mujer y aunque aun faltaban 3 horas, l tiempo paso volando, entre terminar de ordenar, ducharnos y arreglarnos, lógicamente llegamos los últimos, aunque viendo a María, la espera valió la pena, estaba espectacular y sexy, llevaba un vestido blanco ibicenco semi transparente que dejaba más que intuir sus pezones y aunque siempre suele ponerse un tanga, en esta ocasión, me dio la impresión que no llevaba nada.

Al llegar al restaurante, Peter e Ingrid ya estaban esperándonos. Peter vestido con unas bermudas y un polo e Ingrid con un vestido con vuelo, de flores, cortito y con un pronunciado escote que deja ve sus hombros y parte de sus senos, todo muy bronceado. La cena transcurría muy animadamente ayudada por el vino ya que al llegar a los postres nos habíamos bebido 3 botellas de blanco. Un momento dado, noto que un pie se roza con mi pierna, pienso que es fortuito y después que es María, pero me doy cuenta que no es ella. Frente a mi esta sentada Ingrid que veo que me mira con unos ojos chispeantes y además el pie sube hasta donde puede de mi muslo. Meto una mano bajo el mantel y cojo el pie, no me cabe duda de quien es su propietaria, acaricio los dedos y veo que ella cierra un momento los ojos. Los otros 2 están hablando y riendo no se de que ya que hablan en alemán y desde luego no se dan cuenta de lo que sucede bajo la mesa.

Peter nos sugiere tomar las copas en su barco a lo que nos parece fantástico, pagamos y vamos paseando hacia el club náutico. Tienen el barco atracado en el último pantalán del club por lo que vamos las 2 parejas cogidos cogiendo los hombres a las mas que por la cintura por las caderas y con la mano sobre el trasero, de reojo me fijo en el de Ingrid que al tener su marido la mano sobre el vestido, le levanta la tela y se aprecian los cachetes del culo. Llegamos al barco, un espectáculo, una Pershing 64 de color plateado, impresionante. Nos invitan a sentar en un sofá blanco, en forma de U y Peter va a preparar las bebidas mientras María e Ingrid se sientan en el sofá, en el ángulo una al lado de la otra, por lo que yo me siento al lado de mi mujer, al hacerlo, me doy cuenta que la falda de Ingrid ayudado por la apertura de sus piernas, deja ver una tira blanca que tapa su coño.  Buffff, la visión es excitante y como uno no es de piedra, no aparto la vista. La llegada de Peter con las bebidas me hace volver a la realidad y comenzamos a hablar de nuestros trabajos.

Resulta que ambos gerencian una empresa de productos eróticos en Alemania, que abarca desde juguetes, ropa, perfumes, etc. Ante nuestro interés nos dicen que queremos ver su video promocional y conectan la tv que tienen. El video empieza por juguetes de diferentes tipos, entre los que hay una variedad de los que destacan los estimuladores de clítoris y como es lógico las mujeres empezaron a comentar el uso y las cualidades de los modelos. El ambiente se iba calentando por lo explicito de la conversación ya que las 2 se iban animando y los comentarios subían de tono. Seguidamente empezó la presentación de conjuntos de lencería, con un video donde aparecían modelos muy sexys a cada una más provocativas. En esto Ingrid le dice a María que ella tiene en el barco algunos modelos y si quiere se los puede probar, María me mira y sonriente le dice, vamos, el ambiente ya estaba mas que caldeado.

Al poco aparecen las 2 y casi se nos atragantan los segundos gin tonics que nos tomábamos, Ingrit con un body de encaje negro, transparente con la espalda y el culo descubierto y María con un conjunto de 2 piezas rojos, la parte de arriba con 2 tiritas que le tapaban los pezones y abajo un mini tanga a tiras que por detrás dejaba todo su culo al aire. La situación era de los más erótica posible, las 2 se nos acercan, primero cada una a su pareja y no evitamos darles un buen repaso con las manos a sus cuerpos, después se cambian y Ingrid se coloca delante de mi con las piernas abiertas y los brazos en jarra, veo el culo de María que esta delante de Peter y este le coge por el culo metiendo sus dedos por la raja. Yo voy directo a los pechos de Ingrid, se los aprieto suavemente sobre la tela y reacciona agachándose un poco quedando su boca a escasos centímetros de mi cara, no puedo evitar besarla y le meto la lengua en su boca, dejando además una mano que va directa a su entrepierna, le acaricio suavemente sus labios que sobresales por los lados de la pequeña tira de tela. Al separarme, veo a María sentada encima de Peter y este ya le ha sacado sus pequeños pechos y está mordiendo ambos pezones y sigue con su mano explorando el culo. Ingrid, por su parte, no se queda quieta, esta esta desabrochando mis bermudas y mete la mano buscando mi polla que lucha por salir, cuando lo consigue, se pone de rodillas sobre el sofá y baja su cabeza y empieza a pasar la lengua por ella. Me recuesto en el sofá y veo a María también tumbada, cerca del culo de Ingrid con la cabeza de Peter metida entre ellas. María tiene los ojos cerrados y esta suspirando, su mano se acerca al culo de Ingrid y le separa la tirita del body y le empieza a acariciar el coño, un coño rosadito, completamente depilado el cual ya brilla pues empieza a humedecerse. Mientras Ingrid me esta dando una mamada de escandalo que interrumpe para besarme furiosamente, noto el sabor a mi polla en su boca y yo le quito los tirantes del body y le doy unos pequeños pellizcos a sus pezones que están duros como piedras y al dejarnos de besar empiezo a lamérselos.

Menos mal que estamos en el interior del barco, los gemidos y suspiros suben de volumen y Peter se levanta para conectar el aire acondicionado y cerrar las puertas. Eso es aprovechado por mi para quitarle el body completamente a Ingrid que se tumba en el sofá quedando completamente desnuda delante de María y yo. María se agacha sobre ella y busca su boca que devora con pasión y yo voy directo a su coño para empezar a pasarle la lengua y después de abrirle los labios, centrarme en su clítoris que ya esta duro y rojizo por la excitación. Escucho un gritito de María y veo de reojo que Peter le esta comiendo el coño mientras un dedo juega con el agujero de su culo, eso no le impide seguir comiéndose la boca de Ingrid. Las 2 se están besando como unas posesas y hace que los hombres no podamos aguantar mucho mas la situación, Peter esta apunto de introducir su polla en el coño de María y le digo que espere, tengo un capricho, dejo el coño de Ingrid y cojo la polla de Peter y después de darle 2 meneos la acero al coño de mi mujer, quiero ser yo quien la oriente para que se la meta, su polla esta caliente, es la primera vez que toco una que no sea la mía, eso me excita y más me excito al ver y sentir como se mete en el coño de mi mujer. Se va metiendo despacio hasta que con mi otra mano empujo el culo de Peter para que se meta hasta el fondo. María la debe sentir hasta el fondo ya que deja a Ingrid y se coloca arrodillada en el sofá para continuar moviendo el culo acompasado con el mete y saca de Peter.

Ingrid se recuesta en el sofá y se abre de piernas pasando su mano por su húmedo coño y yo voy directa a ella, me agacho y le meto mi polla en ese coñito depilado, puedo ver como se mete fácilmente, esta empapado. Le levanto sus piernas y las apoyo en mis hombros para llegar más al fondo y aprieto, pega un grito. Me apoyo y le como la boca desesperadamente, ella responde y nuestras babas caen sobre ella.

Ahora soy María que escribe:

No veáis como me puso el ver que Juan cogió la polla de Peter, el sentir que entraba en mi guiada por la mano de mi marido, fue explosivo, me corrí al sentirlo. Mientras Peter me estaba taladrando sin parar y al mismo tiempo veía a Juan y a Ingrid follando también desesperadamente. Al tener Ingrid las piernas sobre los hombros de Juan, se veía perfectamente como entraba y salía la polla de mi marido, era demasiado. Me moría de excitación y placer, no recuerdo haber estado así nunca, era inenarrable, creo que perdí la noción, sentía estar follando y al mismo tiempo ver a mi marido con otra, era demasiado. Me volvía a correr y tuve una sensación que hasta ese momento no había tenido nunca, sentí una necesidad de liberación y me meé encima de Peter.

Soy Juan otra vez, al escuchar el gemido de María, me gire y vi lo sucedido, en ese momento, sentí la necesidad de hacer algo que tampoco había hecho nunca, deje a Ingrit y me acerque al coño de María, sacando la polla de Peter y comencé a chupar alternativamente el coño de María y la polla del alemán, la sensación fue rara, pero me llevo al éxtasis. Mientras Ingrid se había quedado observando y masturbándose frenéticamente. Después de marmar la polla de Peter y el coño de María, Peter y yo nos volvimos hacia Ingrid, estaba pornográfica, sentada en el sofá con las piernas completamente abiertas y metiéndose los dedos en el coño y en el culo. Peter se sentó a su lado y la hizo sentar encima de su polla, quedando a mi vista un culo que no pude hacer mas que apuntar hacia él, se acerco María y cogiéndolo, lo dejo justo en su entrada y yo aprete. Se metió fácilmente, sin resistencia, se notaba que lo utilizaban, ella ya gemía de manera brutal. María se sentó al lado y empezó a acariciar sus pechos:

María: Darle fuerte, follarla hasta que reviente, esta deseando sentirse llena, es una puta zorra viciosa que le encanta que la reventéis, follarla fuerte.

Después de eso, se empezó a morrearse con Peter, duramos 3 o 4 minutos, nos corrimos los 3 a lo bestia, llenamos a Ingrid de toda la leche que teníamos, fue una autentica corrida a 3.

Después, nos quedamos los 4 estirados en el sofá, estábamos extenuados, así estuvimos hasta que el sueño nos venció y ahí nos despertamos al día siguiente.

En el próximo capitulo, contaremos lo sucedido al siguiente día.