Realidad, ficción o ambas cosas
Somos un matrimonio que vivimos...
REALIDAD FANTASIA O AMBAS COSAS A LA VEZ
Comenzare el relato diciendo que somos un matrimonio de 49 años, que vivimos en un pueblecito muy tranquilo y a la vez muy aburrido, por lo que para romper un poco la monotonia y poner un poco de morbo en nuestra relacion, nos gusta cada cierto tiempo salir de viaje y tener alguna pequeña fantasia, pero todo muy inocente, pues mi mujer no pasa de ahi, por miedo, por pudor o temiendo que un paso mas decidido pueda arruinar nuestra relacion. De estas pequeñas fantasias lo mas que hemos llegado a realizar es enseñarle las tetas al camarero cuando estamos cenando, o bien bailar un par de canciones con un desconocido en una discoteca y ya como lo mas atrevido hacer top-les en la playa, pero la verdad es que despues de cada una de estas pequeñas experiencias hemos hechado unos polvos que nos han dejado a los dos mas que satisfechos.
Siempre que follamos me gusta calentar a mi mujer imaginandonos situaciones en las que siempre hay una tercera persona, unas veces un hombre y otras una mujer con las que tenemos todo tipo de experiencias sexuales, que la ponen cachondisima, pensando que esta follando con una tia a la que la come el clitoris y las tetas o bien con un tio con una buena polla que la llena todo el chocho y la inunda de leche. Tambien la excita y la pone a mil pensar que a mi me esta dando por culo el tio mientras yo le como el coño a ella. Otras veces follamos viendo una pelicula porno o bien leyendo algunos relatos que nos pongan cachondos a los dos, pero lo mas que he conseguido que haga es follar por telefono.
Ha sido una experiencia maravillosa, pues era de lo mas excitante verla hablando y masturbandose de lo cachonda que se estaba poniendo, mientras yo la comia las tetas y la chupaba los pezones, pues no he dicho que tiene unas tetas preciosas con unos pezones grandes que se la ponen durisimos cuando se calienta y que me encanta chuparlos y lamerlos, y mientras se masturbaba ponia una cara de puta y de viciosa que de solo verla me venia la leche a la polla y tuve que hacer verdaderos esfuerzos por no correrme en las tetas mientras se hacia la paja, pero luego tuve mi recompensa, pues se monto encima de mi y me cabalgo como una perra caliente mientras le sobaba las tetas y le pellizcaba los pezones que los tenia duros como una piedra, hasta que explote y le llene el chocho de leche, dejandome el rabo totalmente seco.
Asi fue pasando el tiempo entre fantasia y fantasia pero sin llegar a nada real con otra persona, hasta que en un viaje de los que haciamos a Madrid, despues de cenar y estar bailando, nos montamos en nuestro coche para ir al hotel. Estabamos muy cachondos, por las copas que habiamos tomado y tambien por que bailando le apretaba el culo para restregar bien mi pene con su chocho, lo que la puso muy caliente. Asi ibamos hacia el hotel, con muchas ganas de follar y metiendonos mano en el coche, cuando pasamos por una calle en la que habia varias prostitutas buscando clientes. Para poner un poco de morbo en la situacion le dije a mi mujer: me gustaria llevarme una al hotel y follarla entre los dos.
Mi sorpresa vino cuando contesto: tu no eres capaz de hacerlo. Di la vuelta y pasando de nuevo por donde estaban le pregunte ¿cual te gusta? me contesto aquella morena que esta en la farola. Nos acercamos, era alta, morena, con la piel cafe con leche y unas tetas grandes y duras, con unos pezones que querian romper la blusa que llevaba sin sujetador. Le dije que queria que nos acompañara al hotel, nos pusimos de acuerdo en el precio y se monto en el asiento trasero del coche. El hotel estaba como a quince minutos, nos dijo que se llamaba Clara, que era de la Republica Dominicana, que se encontraba muy agusto en España y que de momento le gustaba su trabajo y mientras nos contaba su historia se puso detras de mi mujer paso sus brazos por encima del asiento, le saco las tetas y se dedico a sobar con dos dedos los pezones. Mi mujer unicamente gemia de gusto con los ojos cerrados y me acariciaba la polla por encima del pantalon. Paramos en un semaforo poco antes de llegar al hotel, cual no seria la temperatura que habia en el coche, con mi mujer con las tetas fuera, Clara sobandole los pezones y mi mujer tocandome el rabo, que una pareja que habia parado a nuestro lado al vernos comenzaron a tocarse y a meterse mano como si les diera envidia. Llegamos al hotel dimos el numero de habitacion a Clara y le dijimos que subiera en cinco minutos, por eso de guardar un poco las apariencias.
En el ascensor mi mujer no hablaba, se me pego metio su lengua en mi boca y me dio uno de esos besos que ella sabe dar que hacen que te corras. Entre en el servicio y le dije que recibiera ella a Clara, queria ver como enfocaba ella la situacion. Tarde como diez minutos en salir y lo que vi me puso a cien. Mi mujer estaba completamente desnuda y clara tenia puesto solo un pequeño tanga. Estaban abrazadas besandose y cada una apretaba con fuerza el culo de la otra. Me sente en un butacon me quite el slip y empece a acariciarme el rabo mientras contemplaba ese maravilloso espectaculo. Estaban las dos con sus lenguas unidas y restregandose las tetas y los chochos, cuando de pronto mi mujer puso cara de asombro se separo un poco y empezo a pasar su mano por la entrepierna de clara y a medida que la masajeaba comenzo a soltar gemidos de satisfaccion, se separo un poco mas aparto el tanga de Clara y aparecio una polla tiesa y dura de al menos 22 cm. Clara era un travesti.
Nunca habia visto a mi mujer tan excitada, se agacho cogio la verga de clara empezo a masajearla y luego se la fue metiendo poco a poco en la boca haciendola una mamada como no la habia visto nunca hacer, la apretaba los huevos y se la metia y sacaba como si la estuviera follando con la boca. Se tumbaron en la cama, Clara se puso boca arriba con los 22 cm de polla tiesos y duros apuntando al techo, mi mujer se sento encima y fue clavandoselos poco a poco hasta que los enterro en su chocho por entero, estuvo un rato haciendo movimientos circulares y luego comenzo a subir y bajar sacando y volviendo a entrar el pene en su vagina casi por entero. Me dijo que me sentara encima de Clara mirandola a ella, asi lo hice. Solo de ver la cara de puta que tenia se me puso la polla dura la empeze a pellizcar los pezones y a sobarle las tetas mientras que Clara cogio mi rabo y empezo a pajearme metiendoselo luego en la boca y haciendome una mamada que hizo que me viniera en su boca, al mismo tiempo que mi mujer gritaba del orgasmo que estaba teniendo y clara descargaba toda su leche dentro de su coño. Nos quedamos los tres abrazados en la cama, besandonos y acariciandonos durante un rato. Fue una sensacion indescriptible meter los dedos en el chocho de mi mujer y encontrarlo lleno de leche que no era mia.Poco a poco fuimos recuperandonos y Clara le pregunto a mi mujer que le gustaria hacer ahora; lo que dijo al principio me cogio de sorpresa pero luego me parecio que por que no. Se tumbo en la cama boca arriba y yo encima de ella de forma que mi boca quedo en su coño y mi pene en su boca, le aparte los labios cogi su clitoris y comenze a chuparselo y a lamerselo de arriba a abajo mientras ella me mamaba haciendo un 69 a la vista de Clara.
Estabamos en ello cuando siento que alguien me da crema en el culo, era Clara y luego siento como me mete un dedo y cuando este entra y sale con facilidad me mete dos y luego tres. Despues de un rato con los tres dedos entrando y saliendo en mi culo, siento que me los sacan y me ponen una cosa dura que le cuesta entrar es la punta del pene de Clara. Empuja y entra, yo grito de dolor, pero mi mujer sigue chupando y el dolor se pasa, poco a poco noto entrar en mi culo toda la polla de Clara que entra y sale con suavidad y el dolor se va convirtiendo en placer, es una sensacion maravillosa, sentir la mamada de mi mujer, la follada de Clara en mi culo y el cocho de mi mujer en mi boca, estallando los tres al mismo tiempo en un orgasmo que nos dejo a mi el culo lleno de leche de clara a mi mujer la boca llena de mi leche y a mi la boca de los flujos de mi mujer. Clara entro al servicio salio vestida nos dio un beso a cada uno y se despidio diciendonos, ya teneis otra cosa en comun los dos, mi lecheciita. Era de dia cuando me desperte estaba empalmado no sabiendo si lo que habia pasado era realidad o todo fue un sueño que me hubiera gustado haber vivido, si un dia lo averiguo os escribire para deciroslo.