Ramlat As-sabatayn (2)
Sigue disfrutando de las aventuras de este vicioso viceconsul.
RAMLAT AS-SABATAYN (Capitulo II)
Y vaya que si me folló! Notaba mi culo dilatado y si esa enorme polla que me acababa de follar el culo hubiera sido de verdad, el semen debería estar cayendo a borbotones de mi culo.
Pero Merce no estaba dispuesta a darme pausa. Si para mi el desplazarme por el mundo por mi cargo no es complicado para ella convencer a su marido e hijos no había sido tarea fácil y por tanto cada minuto era básico y para aprovecharlo al máximo.
Me tumbó en la cama y colocó mis piernas sobre sus hombros, la conocida postura del yunque, y la polla volvió a entrar en mi hambriento culo. Entro sin problemas, y empezó a bombear mi culo otra vez sin piedad.
Eres una cabrona!!-Le decía.
Y tu un maricón que le gusta que le follen por el culo.
Si, pero esa polla junto a la mía te las voy a meter luego al mismo tiempo en tus agujeritos, zorra!!
Si? Me meterás estos 22 cms en mi culito o en mi coñito?
Como tu quieras zorra, pero fóllame!!!!!
Y los movimientos seguían y seguían y yo con mi polla agarrada masturbándome para ella, de una forma ostensible, clara, descarada. Aquí ya no había cónsul ni nada similar. Solo dos personas teniendo sexo y uno de ellos, no precisamente la mujer, con un buen montón de centímetros en su culo clavados. Me hubiera puesto la banda de cónsul como el bastón si ella me lo hubiese pedido por que estaba extasiado del placer que estaba recibiendo. Me tenía a su merced. Era suyo.
También me magreaba los huevos y tomaba el control de mi polla siendo ella la que me masturbaba. Pero de pronto y aprovechando uno de los envites a mi culo, y con toda esa polla dentro, me bajó las piernas y aprovechando su estatura se metió toda mi polla en su boca. Creía que me volvía loco de placer y en pocos segundos acabe de nuevo en la boca caliente de mi zorra.
Humm, que calentita y rica! Todavía te quedaba!!!Me dijo.
Sí, mi niña.
Me incorpore de la cama, el culo me dolía pero no cabía duda que era un dolor soportable y sobre todo era un daño encantador.
Me di una ducha, solo quería eliminar el sudor y aunque mi culo lo único que ofrecía era una dilatación sorprendente, tenia la sensación de tener litros de semen en mi culito. Es curioso lo que la mente a veces nos hace sentir e imaginar.
Volví a la cama y la verdad que Merce no perdía el tiempo. Se estaba metiendo en su coñito rasuradito lo que mi culo no hacia mucho rato había tenido dentro. Que bonito es un coño rasuradito y sobre todo que bonito es su coñito, por que no decirlo.
Me hice un hueco entre sus manos y la enorme polla para buscar y encontrar su clítoris que desafiante asomaba en su ya colorado coño. Lo ensalivé, chupé e incluso mordisqueé con ansia. Ella aumenta a el ritmo de la autofollada y empezaba a arquear sus caderas y levantaba su culo de la cama.
Su coño se veía enorme, abierto y dilatado por la excitación y por el enorme pollón que su coño estaba recibiendo. El brillo que su flujo vaginal ofrecía lo hacia excitante, cargado de deseo; como aquellos objetos que por su brillo nos eclipsa, nos hipnotiza sin remedio y nos hace comprarlo o cogerlo.
En uno de esos movimientos empecé a buscar su ano. Ya habíamos tenido algo de sexo anal, pero el dolor hacía que dejáramos el tema pero hoy aprovechando a ese inesperado "invitado de látex", por que no aprovechar la ocasión?
Mojé mis dedos con saliva y la hice colocarse de costado mientras ella seguía su loco mete-saca de consolador y tomando la referencia de su movimiento, de la cadencia del ritmo de su cuerpo fui introduciendo un dedo en su ano, luego un segundo y así estuve bastante tiempo. Cuando se corrió aproveché esa ocasión para clavarle hasta los nudillos los dos dedos. Estaba extasiada, su piel brillaba del sudor e incluso lanzaba su culo para atrás como buscando que mis nudillos no cedieran un milímetro del espacio que estaban ocupando.
Cogí el arnés y me lo coloque por encima de mi polla. Era una ocasión única, como único era el sitio donde nos encontrábamos de hacer realidad todas nuestras fantasías. Ella acababa de hacer realidad la mía pero por que no hacer realidad la que miles de mujeres llegan a tener en numerosos momentos de su vida? El pensar o el sentirse deseada, amada o hablemos claro: follada por 2 pollas, 4 manos, 2 bocas...
Pero antes también quería hacer otra cosa con ella. Le pedí que se masturbara, que lo hiciese como en sus notas, en sus enormes y sucosos emails me explicaba, como se abría de piernas y sus dedos se dejaban atrapar por esa devoradora vagina que sin piedad los atrapaba y hacia suyos. Y así lo hizo. Se coloco en la esquina de la cama y empezó a tocarse, con calma mirándome a la cara, hablándome y diciéndome cada cosa que...
Mira cabrón mío. Mira como me lo hago.
Empieza a tocarse la zona interna de sus muslos con una mano la cual alterna con la otra que toca y soba sus pezones, sus grandes y duras tetas, abandona por momentos sus muslos para coger un pecho y acercar su pezón a la boca y chuparlo y mordisquearlo con sensualidad. Siempre mirándome a la cara. Que cara de puta que tiene cuando me mira.
Vuelve a sus muslos, los masajea con detenimiento sus manos recorren la parte interior de los mismos y sus pulgares rozan los labios mayores. El toque es liviano, apenas apreciable pero lo suficiente para que otra vez vuelva a brillar, desafiante, tu coñito. Toca con sus manos sus tetas, cierra los brazos sobre ellos y se ven grandes, desafiantes, apetecibles. Acercas , primero una y luego la otra, a tu boca. Los muerde y chupa mirándome a la cara. Regresa a su coño, que esta lindo y me apetece acercarme y chuparlo.
Necesito tocarme y lo hago con calma, con detenimiento mientras la sigo observando. Ella baja sus manos y se dedica ya en exclusiva en su coño brillante que ahora es intenso. Mete sus dedos en el coño. Primero uno, luego dos y un tercero también se pierden dentro de el.
También se toca el clítoris. Lo veo aparecer y desaparecer por su roce, por su fricción sobre el. Todo su coño esta rojo, la sangre se acumula en ese punto. Todo gira alrededor de su sexo, hasta mi polla también se ha contagiado de ese color y creo que me va a reventar de lo dura y caliente que la noto.
Sigue tocándose y los movimientos cada vez son mas violentos, y aunque parecen descompasados, están regidos por el placer, el éxtasis. Me mira y sus pupilas están dilatadas, su lengua recorre sus labios, secos por no moverse durante todo este ritual de placer que se esta ofreciendo.
Su respiración ya es agitada y empieza a hacerse audibles los gemidos que su boca empieza a generar. Estos aumentan en intensidad y seguidos hasta que en el momento que se pierden sus dedos en su coño, un grito suyo de placer me indica que ha llegado al orgasmo.
Su cuerpo se convulsiona, mientras sus dedos ahora aparecen y desaparecen en su coño mas lentos y mientras mi polla estalla también . El capullo apunta a mi vientre y el semen que aparece con virulencia, pese a mis dos anteriores eyaculaciones, hace un contraste de colores blanco y oscuro por el tono de mi piel. El cual recojo con mis dedos y lo tomo, tan rico y dulce como ella me dice siempre que le sabe cada vez que su boca lo prueba.
Me acerco a ella, nos besamos y aprovecho para oler su cuerpo, su coño...Todo es una mezcla de aromas, de flujos vaginales, de sudor, de perfume pero por una extraña formula, justo en el grado justo que lo hace agradable y tengo la necesidad de pasar mi lengua por el para saber como sabe ese olor que me resulta tan irresistible. Y tal como suponía, era delicioso.
(CONTINUARA)