Ramiro y su madre
Esta es la historia de Ramiro.
Esta es la historia de Ramiro, un alumno de la escuela donde yo trabajo. Un día descubro que Ramiro no prestaba atención en la clase, es más nada parecía importarle y eso me llamo la atención porque el era uno de mis mejores alumnos.
Lo llame al final de la clase y le pregunte que le pasaba. Yo sabía que a principios del año anterior este chico de 16 años había sufrido la muerte de su padre en un accidente de transito. A continuación lo que Ramiro me contó.
"Como vos sabes hace mas de un año que mi padre se mato en un accidente de transito, desde entonces no he hecho mas que sentirme culpable porque el me iba a buscar a mi a una fiesta cuando ocurrió todo.
Ya se que todos me dicen que yo no tuve nada que ver pero al ver a mi madre sufrir por la falta de su esposo no puedo evitar sentirme culpable"
Vale aclarar que Silvia la mamá de Ramiro es una mujer muy joven, solo tiene 33 años y es una verdadera bomba.
Con el correr de los días Ramiro poco a poco fue volviendo a ser el que era y de nuevo le propuse una charla porque realmente me tenía preocupado.
Me dijo que desde que habíamos tenido la anterior conversación el había cambiado la actitud y las cosas habían mejorado mucho en su casa. Me contó que se había puesto a hablar con su madre y que la conversación derivo en algo hermoso y sublime que le cambio la vida a ambos.
Yo más por curiosidad que por otra cosa le dije que me contara lo que habían hablado con su madre.
El dudo si tenía o no que contarme lo que habían hablado ese fin de semana en su casa y que tanto le había cambiado la vida a los dos.
Primero me hizo jurarle que por nada del mundo le contaría a nadie lo que el me iba a relatar a continuación. Cuando le hice el juramento que me pedía Ramiro comenzó a contarme una historia que me puso como loco, tanto me enloqueció que llegue a la casa de mi novia y le di una cogida que nunca se olvidara.
Ramiro comenzó contando:
"El sábado al medio DIA cuando mi mama llego de trabajar yo la estaba esperando, había pensado mucho en todo lo que me pasaba por la cabeza y la encare apenas entro en la casa.
Le dije que me sentía culpable porque ella estaba sola gracias a que papá me iba a buscar esa desgraciada madrugada hace mas de un año. Le comente de las veces que la había sentido llorar en la soledad de la noche.
Mi madre me miraba pero nada me contestaba, me decía que estaba equivocado por pensar de esa manera. Le dije que me había dado cuenta de la falta que le hacia un hombre como papa que la cuidara y la hiciera sentirse mujer.
Ella me dijo que ahora que había pasado el tiempo se daba cuenta que sí, que extrañaba tener un hombre a su lado pero que la pena por eso no era muy grande porque me tenía a mí que era el hombre de la casa. Pero yo no puedo o no debo ser tu hombre le conteste. Ella se sonroja y la conversación termino ahí. Por la tarde veo que mi madre esta navegando por Internet en la computadora que tiene en su habitación.
Cuando ella salió a hacer unas compras me acerco a la computadora y veo que la dejo prendida, cuando voy a apagarla veo que todavía estaba conectada a Internet y la pagina que estaba abierta me dejo a mí con la boca abierta y la pija parada.
Mi dulce y hermosa madre estaba viendo una pagina donde una mujer mas o menos de su edad era cogida por un joven de mas o menos mi edad.
La cabeza me empezó a dar vueltas, había sido una casualidad o realmente mi madre se calentaba con esas escenas, me decidí a descubrir lo que pasaba esa misma noche.
Me metí al baño me bañe, me perfume me puse, por toda prenda de vestir, un boxer que ella me había regalado.
Cuando ella volvió de la calle me encontró en el living viendo una película en la televisión. Me pregunto si iba a salir. Le conteste que no, que me habían llamado mis amigos pero que no tenia ganas de salir.
Ya habíamos cenado y visto una película cuando mi madre me pregunta porque nunca le había presentado una novia. Lo primero que se me ocurrió decirle fue que no había conseguido todavía una mujer que me gustara como para entablar una relación.
Ella me pregunta como tendría que ser esa chica así puedo ayudarte a buscarla.
Tendría que ser como vos mamá le dije, no hay en toda la ciudad una mujer que pueda pararse a tu lado sin sentir envidia de tu cuerpo.
Mi madre me miraba parada desde la puerta de la cocina sinceramente creo que en ese momento mi madre estaba pensando como hacer para enderezar esta situación que se había planteado entre nosotros, ella parada junto a la puerta, y en el sillón en boxer mirándonos fijamente. Ella me dice que no esta bien que yo la mire como mujer, que es mi madre y que yo debería buscar compañía en alguna chica de mi edad. Yo le volví a decir que de todas las chicas de mi edad ninguna me atraía como mujer, ella me pregunto si ella me atraía como mujer. No dude ni un segundo en decirle que si que me encantaba, que por las noches soñaba que era mi amante, que algunas veces la espiaba cuando se cambiaba y que siempre terminaba todo con una paja a su salud.
Ella se tapa la boca con la mano y ensayo un especie de reto: Ramiro no me hables así que soy tu madre.
Pero mamá si estamos hablando con confianza, no te estoy diciendo nada malo, solo te estoy contando las cosas que me pasan cada vez que te veo. Acaso vos me podrías decir si alguna vez en este año y medio no has tenido nunca un pensamiento que para la gente es malo pero vos lo tuviste y punto.
Ella me mira y me dijo, agachando la cabeza, que sí. Que esta tarde había estado viendo una pagina donde una mujer como ella tenia sexo con un muchacho como yo y eso la había excitado. La pija dentro de mi boxer creció mucho al oír la confesión de mi madre, le dije viste que no tiene nada de malo lo que te planteo, somos de carne y hueso y nos pasan cosas, jamas te faltaría el respeto le dije al tiempo que la miraba con ojos que la desvestían con la mirada.
Yo tome coraje y le pregunte: mamá, no te gustaría que por una sola vez, para ver que pasa demos rienda suelta a nuestras fantasías.
Ella solo me mira y salió para su cuarto, yo pense que había ido demasiado lejos y que ahora mi madre me retaría por haber sido tan directo con ella.
Pero una vez mas mi madre, mi hermosa madre, me sorprendió. Volvió de su cuarto sin su pollera negra solo con la camisa y la bombacha. Se veía increíblemente sexy con ese atuendo.
Mirándome a los ojos empezó a desprenderse los botones de su camisa sin pronunciar una sola palabra. No hacia falta que mi madre dijera nada, estaba por dejar de ser mi madre para convertirse en mi amante y la idea de que esto sucediera me hacia dar vuelta la cabeza.
Su cuerpo ahora que lo veía casi desnudo era mucho más lindo que lo había imaginado, solo atinaba a tocarme la pija sobre el boxer mientras miraba como la mujer que me dio la vida se desnudaba para mí.
Cada movimiento que ella hacia se grababa en mi mente para tener material para las pajas futuras en el caso de que mi madre se arrepintiera.
Mi madre se queda quieta y yo interprete esto como una invitación a acercarme, me pare, la abrace y la bese con un cariño y una necesidad de hacerla feliz que fue el beso mas lindo que nadie le diera en su vida. Le tocaba las tetas que eran redondas y duras, gracias al trabajo de algún cirujano que se las arreglo hace cinco años. Le acariciaba el culo que también era muy lindo.
Con pasión mi mamá me tira en el sillón y se arrodillo delante de mí y se trago mi pija de un trago la chupaba con muchas ansias y no tardo nada en llevarme al orgasmo, le pedí que se sentara ella en el sillón y le empece a comer su concha que desbordaba de jugos ella tampoco pudo evitar acabar rápido debido a la falta de sexo que tenia.
Luego ella me sentó en sillón y me monto cabalgándome durante un buen rato los dos acabamos pero seguimos cogiendo sin separarnos ni un segundo, así volvimos a acabar y entonces ella me lleva de la mano a mi habitación, saco la remera que yo uso para dormir y sin decir nada me llevo a su cama, allí puso la remera debajo de una de las almohadas y me dijo: este desde ahora será tu lugar.
Desde ese día cogemos todas las noches y soy el hombre mas feliz del mundo"