Rachel (1)
Estos hechos ocurrieron hace ya algunos años, y narran el despertar sexual de mi prima y yo.
RACHEL
Rachel es una hermosa chiquilla, nos habíamos criado juntos en el rancho de mi padre. Su madre había fallecido en un accidente automovilístico, y su padre no pudo superar el dolor y se sintió incapaz de poder criar a su hija, así que la dejo con mis padres. Venia a visitarla periódicamente, pero eso era todo; la crianza de Rachel estuvo totalmente a cargo de mis padres. Mis padres tienen un rancho en Montana, dedicado a la crianza de ganado de engorde, que luego se enviaba a los mataderos para su comercialización posterior. Yo soy el segundo de 4 hermanos, y el único varón, la mayor se llama Trisha, y en la época que transcurrieron los hechos contaba con 15 años; la tercera se llama Jocelyn y contaba con 12 años; y la última es Cherokee (mis padres le pusieron un nombre indio, no se el porque, pero es un nombre hermoso, como ella) que en esa época contaba con tan solo 11 años. Rachel tenía 13 años y yo 14 (a propósito, mi nombre es Tom).
Nos criamos de una manera casi silvestre, corriendo por el campo, cazando ardillas y perdices y bañándonos en el río, no teníamos límites, el mundo era nuestro y éramos felices viviendo de esa manera casi salvaje. Pero las cosas cambiaron para mí cuando Rachel, mi prima empezó a desarrollar tremendamente, ella siempre había sido delgada, pero súbitamente su cuerpo empezó a adquirir redondeces donde antes no las había, aunque seguía siendo tan inocente e ingenua como antes.
Un buen día descubrimos una caverna, era hermosísima, estaba adornada con estalactitas y estalagmitas y tenía un brillo fosforescente. En el medio de la caverna había una poza de agua cristalina y fresca, y desde que la hallamos se convirtió en nuestro lugar favorito y secreto. Pasamos momentos muy divertidos y entretenidos allí.
Un buen día mis padres y dos de mis hermanas fueron al pueblo de compras, yo me quedé con Rachel y Cherokee. Luego de terminar las tareas encomendadas por mis padres, les propuse ir a la caverna a darnos un buen chapuzón, ya que estábamos en pleno verano y el calor era insoportable. Ellas aceptaron encantadas, así que preparamos una merienda, y partimos al mediodía acompañados por mis perros de caza. Mientras caminábamos íbamos bromeando, jugueteando y riendo de todo y por todo. De cuando en cuando Rachel emprendía una pequeña carrera y se adelantaba yo veía su lindo trasero, redondo y firme, y sus caderas balanceándose al ritmo de su carrera. Sus mejillas estaban encendidas por el ejercicio y el calor reinante y su larga cabellera azabache se desparramaba por su bello rostro mecida por el viento. Y sus pequeños senos se mecían provocadores al compás de su respiración agitada.
Cuando llegamos a la caverna, pusimos las toallas en el piso de roca y dejamos lista la merienda para cuando nos diera apetito, Rachel y Cherokee empezaron a desvestirse sin preocuparse de mi presencia. El problema para Rachel fue que al haber desarrollado su cuerpo, ninguno de sus trajes de baño le quedaban, así que se había puesto un traje de Trisha, el cual le quedaba un poco flojo a la altura de los senos, ya que estos no se le habían desarrollado del todo aún.
Qué me miras tonto?....-escuché que me decía ella.
Oh dios, me había quedado viendo su maravilloso cuerpo como un estúpido y ella me había sorprendido viéndola embobado.
Oh, lo..lo siento Rachel, disc disculpa, -le respondí rojo como un tomate.
Jajajajajajaja pusiste cara de bobo jajajajajajaja, - y su risa fue coreada por Cherokee; las condenadas se estaban divirtiendo a mis costillas.
Saliendo de mi ensimismamiento, me di la vuelta y me quité la ropa, quedando en traje de baño también, al acercarme a ellas, noté que Rachel miraba de reojo el bulto en mi entrepierna, ya que al admirar su cuerpo, mi pene había respondido y estaba semierecto. Noté que desviaba la vista apurada y sus mejillas se teñían de carmesí. Era una delicia y un amor de chica, y me daba cuenta que había dejado de verla como una hermana, como hasta entonces había hecho, para pasar a admirarla como a la bellísima mujercita en la que se estaba convirtiendo a pasos agigantados.
Después de merendar, jugamos, retozamos y nos dimos unos buenos chapuzones en la poza, hasta que Cherokee cayó rendida y se quedó dormida muerta de cansancio sobre unas toallas. Rachel y yo nos tendimos a descansar también y nos pusimos a charlar en voz baja para no despertarla. Luego de un rato, ella me propuso meternos a la poza nuevamente y yo acepté encantado. Riendo y cuchicheando en voz baja, nos metimos a las frescas aguas de la poza, donde reanudamos nuestros juegos. En determinado momento ella empujó mi cabeza bajo el agua, haciéndome tragar agua.
Ahora vas a ver - le dije
Uuuuuuy, y que me vas a hacer?...respondió partiéndose de la risa.
Ella intentó huir nadando, pero la alcancé cogiéndola por uno de sus pies y la atraje hacia mí. Ella se defendía forcejeando y riendo, (todo transcurría entre risas y cuchicheos ahogados para no despertar a mi hermanita). En cierto momento, quedé tras de ella, teniéndola cogida por la cintura; y me di cuenta que en su desesperación por escapar de mí, sus nalgas se frotaban una y otra vez contra mi pene, el cual empezaba a reaccionar de nueva cuenta. No sé si ella se habría dado cuenta de la situación, pero a mi me estaba volviendo loco de excitación. En uno de sus tantos intentos por zafarse de mi abrazo, ella intentó dar un salto hacia delante, pero lo único que consiguió fue que su traje de baño se aflojara y sus senos quedaran al aire, al mismo tiempo que mis manos resbalaban y quedaban engarfiadas firmemente a sus senos Los dos nos quedamos paralizados, sin movernos, me pareció una eternidad, estar allí y sentir la suavidad de seda de esos senos maravillosos; sentía la respiración agitada de Rachel y su firme trasero empotrado en mi ingle, que a estas alturas ya presentaba una erección enorme casi sin pensarlo, empecé a mover los dedos de mis manos, muy suavemente, acariciando sus senos, sintiendo la rugosidad de sus pezones erectos y duros. Ella no se movía para nada, solo su cuerpo presentaba un pequeño temblor y su carne se había erizado por completo. La atraje muy despacio mientras mis manos recorrían su vientre plano y durito, sus senos y le daba pequeños besos en sus mejillas y en su cuello sedoso. Pero no me atrevía a bajar mis manos mas abajo de su cintura, me daba un miedo espantoso romper ese momento mágico. Sentí sus piernas temblar y Rachel tuvo que echar su cabeza hacia atrás y recostarse en mi pecho, con lo cual me resultó mas fácil acariciar sus senos, y pellizcar suavemente sus pezones. Su respiración agitada se había convertido en suspiros ahogados y pequeños gemidos
Cuando he aquí que sentimos a mi hermana rebullirse entre sueños, próxima a despertar; (maldición, hablando de inoportunas) Rachel se separó de mi al instante, se subió los tirantes de su traje de baño y completamente roja como un tomate, se alejó corriendo a vestirse siempre con la cabeza gacha y sin mirarme para nada. Ya para esto mi hermanita se había despertado por completo y le hacía preguntas impertinentes acerca de su sonrojo.
Terminamos de vestirnos, recogimos todas las cosas y emprendimos el camino de regreso. Ella tomó de la mano a mi hermanita y se adelantó caminando a paso firme; por todos los medios evitaba mirarme, y no me dirigió la palabra en ningún momento. Yo me sentía asustado y confundido, le diría algo a nuestros padres?..le diría algo a mi hermana mayor?...pensaría ella que me había portado como un animal, me había aprovechado de la situación y no había sabido respetarla?...Mis pensamientos volaban a mil por hora y cada vez me sentía mas confundido por la actitud de ella en eso distinguimos a lo lejos la silueta del rancho, y vi que ella apuró el paso casi corriendo; no me quedó mas remedio que imitarla, y poco a poco nos fuimos aproximando a la casa, entre los ladridos de los perros .CONTINUARA.
KODIAK