Quien dice que el fanatismo del fútbol es malo

Las apuestas con tu hermana pueden ser buenas, claro si se saben hacer.

Quien dice que el fanatismo del fútbol es malo

Hola, soy Manuel tengo 22 años y soy de la ciudad de Monterrey, la cual tiene dos equipos representativos de fútbol, los Tigres y los Rayados del Monterrey.

El domingo 15 de enero se enfrentaron en la ciudad de los Ángeles, Estados Unidos, en la búsqueda de un boleto para participar en la copa libertadores de América, en la que participan los equipos más sobresalientes del Fútbol sudamericano.

Bueno el caso es que yo soy seguidor de los Tigres y mi hermana Carolina de 19 años, es hincha de los Rayados del Monterrey.

Como es costumbre en estos casos las discusiones por cual es el mejor equipo siempre se daban entre nosotros incluso las apuestas.

Mi hermana se mofaba de mi debido a que en el ultimo encuentro lo Rayados eliminaron en semifinales a mi equipo, y animada por ese ultimo resultado me retaba apostar, yo le dije que no tenia dinero y que no quería apostar, pero ella insistía tanto que me obligo aceptar su reto apostar mi motocicleta.

El objetivo de apostar mi vehiculo era para que ella se retractara y dejara de molestar ya que no tenia nada que ofrecer para igualar mi apuesta, ella río a carcajadas y me dijo esta bien.

Yo le dije como que está bien y tú que vas apostar, riéndose me dijo mira estoy tan segura que mi equipo va a ganar que te apuesto mi cuerpo contra tu motocicleta.

Lo que me dijo rehizo soltar una sonora carcajada y acepte su reto.

El partido inicio, y los tigres tuvieron una oportunidad clara que por mala fortuna no se concreto, mi hermana había sudado frió, enseguida los Rayados contraatacaron y anotaron su gol, ocasionando el alarde de mi hermana que me decía, "ahora tendrás que irte en camión a la universidad, jajajajajjaaa".

La burla duro por espacio de todo el primer tiempo y gran parte del segundo, hasta que los Tigres empataron, entonces era yo quien le decía que esto aun no estaba definido.

Termino el tiempo reglamentario, pero debido a que era un partido eliminatorio tenia que jugarse dos tiempos extra de 15 minutos, en los cuales cayo el gol del triunfo de mi equipo.

El gozo fue tanto que me reía de mi hermana que se encontraba turbada por la derrota de su equipo.

-Espero que seas buena en la cama hermanita y no como ese equipo mediocre, jaajajjaaaaa-, le decía mientras me burlaba de ella y festejaba el triunfo de mi equipo.

Ella sumamente enfadada se levanto y me dijo, "púdrete pinche Tigre apestoso".

Carolina se fue a su recamara muy enojada, mientras yo me subí en mi motocicleta a festejar el triunfo de mi equipo en compañía de unos amigos.

Cuando llegue a la casa me dirigí a mi cuarto con la intención de dormir, ya no tenía intención de burlarme de mi hermana y mucho menos de hacer efectiva la apuesta, ya que desde el principio no la tome enserio por lo que se ponía en juego.

Después de haberme duchado, ya estaba dormido cuando entre sueños siento que me quitan mis calzoncillos y comienzan acariciarme el pepe, yo creí que era un sueño de esos eróticos, estaba realmente excitado sentía las caricias que parecían reales, de cómo una mano tomaba mi pene y lo pajeaba de arriba a bajo y sobándome los huevos.

Hubiese continuado con la creencia de que era un sueño, hasta que sentí que mi pene entraba en una cavidad húmeda y calientes, sentía la respiración de alguien sobre mis vellos púbicos, esa sensación tan placentera me hizo abrir los y valla espectáculo tenia en mi cama, era mi hermana Carolina que vestida solamente con su playera del Monterrey y sus bragas me daba una chupada de fantasía.

Al darse cuenta de mi despertar se saca mi pene de su boca y me dice, "espero que lo disfrutes Tigre mugroso y no se diga por ahí que una rayada como yo no cumple sus apuestas".

Me quede con la boca abierta al escucharla y mas cuando retomaba su trabajo oral sobre mi pene.

Es sensacional sentir como tu verga es devorada por una boca tan linda y más cuando esta corresponde a tu hermana.

El trabajo sobre mi falo era en verdad muy bueno, parecía que mi hermana tenia mucha experiencia en usas su boca para dar placer sexual.

Su cabeza subía y bajaba sobre mi palo que estaba erguido y caliente, estaba tan excitado que lentamente la tome de su cabello para guiar su mamada a un ritmo, al mismo tiempo comencé a mover mi cadera tratando de follarla por la boca.

Ella aguanto por un tiempo mis arremetidas en su boca hasta que me tomo de la cadera y me detuvo para decirme, "espera que me vas a dañar mi garganta".

Lentamente subió por mi vientre, besando y lambiendo cada rincón mientras su mano continuaba con un rico masaje sobre mi verga hinchada, continuo así hasta llegar a mi pecho, suavemente mordía mis pezones provocándome una excitación y un gozo divino.

Quedo completamente arriba de mi cuerpo, su vagina estaba sobre mi verga mientras ella se inclinaba hacía mi para besarme en la boca.

Estuvimos un buen rato besándonos y acariciando mutuamente, yo le agarraba el culo, que aun con sus bragas blancas estaba sensacional tocarlo mientras nuestras bocas jugaban incestuosamente.

De pronto ella se apartado de mis besos para comenzar a quitarse su blusa del Monterrey, que hasta ese momento me parecía fenomenal ya que al no traer sostén hacia que sus pechos llenos de excitación de se marcaran en ella.

Ya una vez que se quito su blusa las bragas fueron las siguientes, quedando así totalmente desnuda sobre de mi.

Su senos me parecieron un rico manjar que me animaba a devorarlos con locura, pero a la vez con suavidad, succionaba y chupaba sus pechos que me sabían a gloria mientras ella se movía sobre mi verga que estaba loca por entrar es su cueva del placer.

Sus gemidos y jadeos se hacían cada vez mas intensos, mi hermana estaba totalmente entregada al placer, puesto que sus palabras eran totalmente claras.

-Dale pinche tigrillo de mierda, lo haces bien cabron para irle a ese pinche equipo de mierda, mmmmmmmm aaaaaaaaaaaaaaaaaaa, mmmmmm siiiii, cupame las tetas perro inmundo, vamos cote las tetas de tu hermanita, mientras froto mi vagina sobre tu verga- decía mientras mis manos sobaban sus nalgas y mi boca devoraba su senos.

Yo en reacción le contestaba, -pues te mueves y sabes muy bien para ser una pendeja rayada, de un equipo por el cual ahora mes estas dando las nalgas, si muévete perra-.

Eso pareció encabronarle por que me soltó una bofetada y me mordió uno de mis labios.

-Debes de agradecer que mis rayados no pudieron hacer un mejor partido, por que sino no te estuvieras cogiendo a tu hermanita, pinche cabron pendejo, que esperas para meterme tu verga- me dijo mientras yo la veía fijamente a los ojos.

En eso reacciono a su suplica y de dos cachetes en el culo la levante para meterle mi pene lo mas profundo de ella.

Su grito se escucho muy fuerte, la penetrada fue salvaje y repentina, pero eso en lugar de inhibirla hizo que se excitará más y contrajera sus músculos internos de su vagina que parecía querían arrancarme la verga por tanta fuerza que ejercía sobre mi pene estaba totalmente dentro de ella.

Se relajo un poco y comenzó a cabalgarme salvajemente mientras sus uñas arañaban mi espalda y yo mordía sus pechos, comerme sus tetas era sensacional, sentir en mi boca sus pezones era delicioso y sentir como ella aprisionaba cada vez más mi palo, que entraba y salía haciéndola gozar.

Su cabalgata sobre mi verga la estaba haciendo llegar a su orgasmo sus brincos eran cada vez mas feroces, lentamente me comenzó a jalar hacia ella hasta quedar acostados yo encima de ella sus piernas se acoplaron a mi cintura y sus manos encajaron sus uñas mientras me decía, -"no pares carbón métemela mas fuerte, muévete, hazme pedazos la panocha, muévete más rápido, cogete a tu hermana como una vil perra, vamos que esperas, mmmmmmmmmmmmm haahaaaaaaaaaaaaaaaaahh"-.

La complací mis arremetidas fueron mas intensas, oír sus gemidos y gritos tan cerca de mis oídos y el sentir como sus uñas arañaban cruelmente mi espalda me hacían gozar como nadie más lo había hecho.

Mi movimiento de cadera fue más rápido y profundo estaba por explotar, sentía que mí orgasmo estaba por llegar, y a la vez sentía que el suyo estaba también por hacerse presente, nuestros cuerpos bañados en sudor estaban convulsionándose mientras derramábamos nuestros respectivos néctares.

Mi leche entro hasta lo más profundo de su vientre y sus jugos inundaron mi verga.

Poco a poco nuestra respiración volvió a la normalidad, yo la veía a los ojos mientras me incorporaba y la ayudaba a levantarse, nos volvimos acostar quedando nuestras caras frente afrente.

Hasta ese momento no habíamos pronunciado palabra alguna después del clímax de nuestro incesto.

Ella fue la primera en hablar, -"vaya hermanito, puedes comprobar que lo que apuesto lo cumplo, pero ya sabes que de esto nada a nadie y tampoco creas que se volverá a repetir"-.

-Huy mi reina nunca pensé que cogerse uno a su propia hermana seria sensacional, y despreocúpate que esto no lo sabrá nadie por que nos meteríamos en un grave problema, en cuanto a si es la ultima vez pues yo creo que eso no va a ser, porque me gusto mucho hacerlo contigo y voy a querer repetirlo y se que tu piensas lo mismo, por que siento como acaricias mi verga por debajo de la sabana-, le dije mientras acercaba mi rostro a su boca para volver a besarlo.

En esa noche lo volvimos hacer y al despertar amanecimos juntos en mi cama, de esta forma tuve sexo con mi hermana Carolina y de esta han seguido otras historias que habré de contar más adelante.