Querido suegros 4
Todos juntos siempre es mucho mejor
EL verano hace meses y el tiempo no invitaba hacer tanto el nudismo pero la casa de mis suegros la verdad que guardaba bastante bien el calor y se podía hacer el nudismo sin pasar frio solo había que subir la temperatura de la calefacción.
Hace un mes nos trasladamos a casa de mis suegros nuestro edificio iba a permanecer en obras debido a una enfermedad que sufre el hormigón y no íbamos a poder usar la mitad de la casa, nuestra casera quería que nos quedáramos pero aun rebajándonos el alquiler no tenía sentido y ya que nuestra relación con sus padres eran tan buena decidimos mudarnos.
La verdad que la casa es muy grande asique entre la habitación de Moni y la habitación de al lado que la usaba yo para mis cosas tuvimos suficiente.
Fue un acierto el mudarnos además de porque la casa es muy grande y la comodidad que da, el hecho de tener a mis suegros en la misma casa había sido un auténtico puntazo.
Mi suegra ya no trabajaba aunque pasaba mucho tiempo fuera de casa ya que se apuntaba a clases de yoga, pintura y demás curso que encontraba en el centro cívico, mi suegro trabajaba cerca de casa y al tener un puesto alto iba y venía cuando quería, yo en cambio tenía la posibilidad de trabajar 2 de cada 5 días de teletrabajo asique pasaba mucho tiempo en casa.
Sin duda la que más trabajaba en esa casa era mi novia que trabaja incluso los fines de semana asique a veces era hasta normal que se perdiera nuestros juegos.
Lo que voy a contar pasó un día entre semana, me había levantado tarde ya que ese día lo había programado de teletrabajo.
Fui camino de la cocina para desayunar y allí estaba mi suegra con una fina bata tomándose el café, al oírme se dio la vuelta y pude ver como no la llevaba atada por lo que se la podía ver su depilado coño y algo de sus pechos.
Estuvimos hablando un rato y me estuvo diciendo lo feliz que era tanto de que viviéramos en casa como que hubiésemos sabido entender sus necesidades sexuales.
Mi suegra la verdad que para la edad que tenía era muy atractiva era de esas maduras que ponen un montón y que sabes que si te coge te va destrozar.
Ya metiéndonos más en materia mi suegra me contaba que desde que estaba su hija en casa su instinto más lésbico estaba en ebullición que a los dos hombres nos deseaba mucho pero que su hija la excitaba mucho.
Yo sabía por mi novia que eso también estaba pasando al revés ya que nunca la vi tan centrada en las mujeres como ahora.
La cosa queda así yo me puse a trabajar y mi suegra se fue a sus respectivas clases, y ya a eso de las tres nos juntamos para comer.
Primero llego mi novia a la cual recibí con un eterno beso, después de hablar un poco subió arriba a quitarse la ropa, bajo con sus zapatillas de invierno y una bata que había encontrado en las barandilla de las escaleras que era la que había usado su madres esa misma mañana.
Empezamos hacer la comida mientras hablábamos de las cosas que habían pasado en la mañana, en ese momento llego mi suegra con el pan y algo de compra y al entrar en la cocina vio a su hija con la bata, y la dijo “oye esa bata es mía quítatela ahora mismo” Moni se la quitó riéndose quedándose totalmente desnuda.
Mi suegra cogió la bata y se fue volviendo a los cinco minutos ya cambiada llevando la bata, yo estaba cortando verdura cuando fui a preguntar algo a mi novia y vi que no estaba.
Se había ido de la cocina y no me había dado ni cuenta me seque las manos y salí al pasillo enseguida me di cuenta que estaban en el salón.
Y efectivamente como me había dicho mi suegra tenía muchas ganas de su hija porque Mónica estaba tumbada en el sofá mientras su madre le comía su jugoso coño, unos ligeros gemidos salían de su boca, mientras su madre se tocaba con una mano las tetas y con la otra el coño.
Yo tenía claro que no me iba a quedar mirando asique me acerque a ella y hundí mi cara en el culo de mi suegra lamiendo cual perro el coño y el culo, note como la mano de mi suegra me apretaba la cabeza contra sus partes no pudiendo respirar con facilidad en ocasiones.
Moni termino corriéndose soltando un largo gemido, se levantó y me vio detrás de su madre, estaba tan metida en la comida de coño que le estaba haciendo su madre que no era ni consciente de que yo estaba en la escena.
Moni cogió a su madre y la sentó en su posición cambiándose los papeles entre ellas la única diferencia fue que yo en vez de chupar cargue mi polla y se la metí a mi novia con dureza mientras le comía el coño a su madre.
La verdad que oír a las dos mujeres gemir como locas era muy excitante, ya nuestros cuerpos resbalaban entre fluido, saliva y sudor estábamos muy lubricados.
Cambiamos de posición y empecé con mi suegra de nuevo y su hija esta vez se puso detrás mío a comerme los huevos y el culo algo que es muy gratificante.
Llevábamos un rato así cuando se oyó la puerta, mi suegro saludo pero no recibió respuesta asique siguió entrando en casa hasta que llego al salón y vio lo que había, como si de un resorte se tratara se desnudó dejando su peluda polla con esa cabeza gorda al descubierto, acercándose donde estábamos y agarrando a su hija y ponerla de cara al otro sofá, se escupió ligeramente en la punta y se la metió, aunque con lo lubricada que estaba no era ni necesario.
No paso mucho más tiempo y yo note que me iba correr y cogí a mi suegra la di la vuelta y apunte con mi polla a su cara, el semen cayo a peso sobre su cara y pelo dejándola hecha un cuadro, ambos nos sentamos en el sofá, viendo como Fede empotraba a su hija con dureza mientras esta solo ponía muecas y casi tenía los ojos en blanco del éxtasis que estaba teniendo.
Fede empezó a gruñir cual becerro señal de que se estaba corriendo dentro del coño de su hija, sacando la polla pudimos ver como caí un poco al suelo, en ese momento mi suegra se levantó para lamer todo lo que saliera del coño de su hija, una escena bastante excitante que hizo que se activara mi polla pero por aquel entonces ya nadie quería follar.
Mis suegros se fueron juntos dirección a su cuarto para ducharse mientras yo me quede abrazado a mi chica en el sofá mientras la daba un beso en la frente.
Seguía bastante cachondo asique poco después cogí a mi novia como si fuera una muñeca y empecé a metérsela de nuevo, ella apenas podía moverse su padre la había dejado anestesiada, una vez se la metí pude notar el semen de su padre aun dentro el cual salía poco a poco cada vez que se la hundía en el interior.
Cambiamos varias veces de posición incluso llegaron a venir sus padres que ya se habían duchado y mirándonos dijeron “ir terminando que hay que comer”.
Para terminar pronto Mónica se sacó mi polla de dentro y empezó a mamármela para que me corriera ponto y la salió bien porque en apenas unos minutos la estaba dejando todo el semen en las tetas.
Fuimos a la cocina los dos empapados en sudor para comer pero mi suegra nos mandó a duchar ya que la íbamos a manchar todas las sillas del semen que tenía su hija por todos lados, asique con las mismas nos fuimos al cuarto de baño y nos dimos una ducha rápida, ya que los dos tenemos bastante hambre y nos habíamos ganado comer ya.
Una vez limpios fuimos a la cocina y allí estaba mi suegro sentado, mientras mi suegra le comía la polla.
Nos miraron riéndose “nos disteis envidia “decía mi suegra, se levantó de su posición y nos sirvió la comida después de la siesta no quedo otra opción que continuar ya que todos seguíamos muy cachondos, aunque ya contaré en otra ocasión que una llamada al timbre interrumpió todo.