¿Que soy?

Gracias a mi hermana descubrí una gran verdad, identificando mi verdadera tendencia sexual, que no era precisamente la homosexualidad.

¿Existe algo peor que la incertidumbre? Si claro la certeza de que tienes un problema.

Pero si encuentras a alguien que te demuestra, que lo que creías un problema es una virtud todo cambia.

Desayunamos todos juntos, poco después despedíamos a nuestros padres que se iban a Zaragoza a la boda de un amigo suyo de la que nos habíamos podido librar, era en segundas nupcias y no habría gente de nuestra edad, después de cerrar la verja del jardín tras la salida del coche, Sandra que aunque solo es tres años mayor que yo siempre ha cuidado de mi preguntó.

Bueno Teo, ahora ya me puedes decir que es eso que te atormenta, no me mientas porque te conozco y sé que algo gordo te preocupa, quizás pueda ayudarte en algo.

Me costaba mucho hablarlo incluso con ella, pero creo que con 18 años ya era momento de afrontar según qué temas, y comencé dando un rodeo al decirle.

El caso es que no soy tan extrovertido como tú, me cuesta mucho relacionarme con la gente de cualquier edad, y mucho más de la nuestra, no me preguntes porque, pero el caso es que no puedo hablar con casi nadie sin sentirme violento.

Entonces fijo sus bellos ojos en los míos y cogiéndome de una mano me hizo entrar en la casa, nos sentamos en un sofá y preguntó.

¿Acaso te gusta alguna chica? Eso descentra a cualquiera, y que yo sepa hasta el momento yo te he contado cosas sobre muchos de los chicos con los que he estado, incluso de alguna de mis amigas, pero tú nunca me has hablado de tus conquistas, incluso Miguel con el que ya llevo casi tres meses me comentó algo al respecto el otro día.

Me quede en silencio y al borde del llanto, me abrazo y como si fuera mamá me acuno hasta que me tranquilice un poco, entonces continuó.

¿He de preocuparme por algo? Te veo muy mal y eso no es propio de ti, hasta hace bien poco eras un tío genial muy ocurrente y alegre, pensaba que ahora solo estabas pasando un mal momento por un revés pasajero, pero tu actitud me hace pensar que se trata de algo más serio.

Entonces sin soltarme de su abrazo le confesé, que son muchos los chicos que me parecen atractivos y que en cambio las chicas no me causan el mismo efecto, en ese momento sonó su móvil, alargo una mano sin soltarse por completo de mí y contesto.

Hola….No, hoy creo que no nos veremos………………….Porque NO, ha surgido una emergencia familiar………………No……………No te contaré nada, cuando pueda ya te llamare y si estas ocupado con otros asuntos, ya nos veremos algún día……………A mí tampoco me hace gracia, pero existe algo que llaman prioridades. Te llamare yo cuando pueda ser…………….Un beso.

Me pareció que no era justo que dejara de salir con Miguel por mi causa y así se lo dije, solo me estrecho más entre sus brazos y me dijo que no me preocupara, que el mundo está lleno de “Migueles” y si ese en concreto, no entendía el concepto “emergencia familiar” tampoco sería tan buen elemento. Y me preguntó de forma directa, casi cruel aunque yo sé que es su forma de ser.

¿Has tenido sexo en alguna ocasión de algún tipo, con chicos o chicas? Porque hasta donde yo sé, si así fuera me habrías contado algo y no ha sido así.

Sin dejarme responder siguió con su monologo.

Creo que simplemente estas confundido, es posible que seas homosexual en potencia, pero hay muchas más explicaciones para tu actitud, puede tratarse de miedo a una relación, o a ser rechazado por una chica, que tengas tendencias bisexuales, que te sientas atraído por una persona que sea un chico no significa que seas homosexual, simplemente sucede en ocasiones, los sentimientos no distinguen entre sexos, sabes porque te lo he contado que hay en mi vida dos “mujeres especiales” con las que practico sexo, y no por ello me considero bollera. Piensa un poco y me cuentas.

Entonces me di cuenta que realmente no sucedía nada de lo que ella apuntaba, y le comente que tan solo se trataba, que de un tiempo a esta parte me fijaba más en los chicos en general que en las chicas, y eso se había convertido en una obsesión que no me dejaba vivir. Muy resuelta como siempre añadió, que ella necesitaba pedirme ayuda en un tema, que quizás nos pudiera beneficiar a ambos y aclaró.

Quiero hacerme unas fotos “picantes”, y como tú manejas photoshop me las podrías hacer, y después borrarme los tatuajes y pixelar el rostro para colgarlas en internet.

Me pareció solo una excusa para pasar el día juntos, pero se lo agradecí de veras, estaba muy desconcertado con todo lo que le había dicho. Mientras iba a su habitación siguió hablando de cosas del todo intranscendentales pero me dijo que preparase la cámara, cuando apareció lo hizo con ropa que no le había visto nunca antes.

Un conjunto, formado por un tanga color carne casi transparente donde quedaban claramente marcados los labios vaginales, un sujetador de media copa que mostraba los pezones apuntándome descaradamente y encima una especie de camisola de gasa, más fina aún que todo lo demás y sin nada de maquillaje, cuando me la quede mirando me dijo.

¿Nunca has visto una chica vestida así, bueno o casi desnuda? Ya comprenderás que no es lo mismo que cuando las ves en una playa nudista, allí todas van igual y aunque unas gustan más que otras, apenas da tiempo para valorarlas individualmente.

Lo cierto es que me quede embobado mirándola, hasta que comenzó a hacer poses y me dijo que ya podía comenzar a hacerle fotos, después de pasarlas al ordenador ya descartaríamos en las que apareciera menos favorecida y de las demás, una copia la dejaríamos tal cual para obsequiar a alguien en su momento, y las que seleccionáramos para colgar en Internet ya las modificaría con el photoshop empleando todo el tiempo que necesitara.

Le hacía fotos cada vez que cambiaba de postura, se iba despojando de prendas y estaba ya tan solo con el tanga, no entendía lo que me estaba pasando, se trataba de mi hermana y además ya la había visto desnuda otras veces, pues en casa no tenemos reparos de esa clase ninguno de nosotros, me di cuenta que tenía una erección exagerada y que la punta del capullo asomaba por la parte superior del pantalón corto que empleaba, entonces me sorprendió con una frase demoledora.

Tú, lo único que necesitas es una primera experiencia, y a partir de ahí tendrás elementos para comparar, eso lo podemos solucionar aquí y ahora.

Acto seguido se pegó a mí, con una mano me acariciaba la verga mientras sus labios mordisqueaban los míos y yo comencé a responder a ese juego, mientras sus duros pezones se incrustaban en mi pecho.

A partir de ese momento mi mente solo procesaba esos estímulos, en algún momento metió la mano en el pantalón, pues cuando tome conciencia de algo más que esas sensaciones tan placenteras, fue que estábamos junto a la cama de nuestros padres, es la habitación más cercana al salón y Sandra me empujaba para que me sentara en ella, tenía los pantalones y bóxer en los tobillos y la camiseta había desaparecido.

Me tendí, estaba como en trance mientras ella se encargaba de hacerlo todo, note claramente cómo se fue “ensartando” en mí y como inicio una follada lenta al principio, eso me fue volviendo a la realidad, pero no quise pensar, era demasiado tarde para tratar de racionalizar todo eso, solo se trataba de continuar y es lo que hice, me cogió las muñecas para guiar mis manos hacia sus pechos para que los acariciara, algo que hice de forma torpe por falta de práctica supongo.

Fue cuando inició lo que sí se convirtió en una galopada sobre mí, que termino cuando después de cerrar los ojos hipar y comenzar a tener una serie de espasmos que marcaron el inicio de un impresionante orgasmo, me sorprendió con palabras ininteligibles y sonidos que no había oído antes, para terminar con un profundo y largo suspiro, abatiéndose desfallecida sobre mi pecho.

De forma inexplicable, seguía dentro suyo con la erección intacta, incluso creo que mayor si es que eso era posible, en muchas ocasiones con mucho menos pajeándome en la soledad de mi habitación, había conseguido eyaculaciones espectaculares, pero nunca sabremos por qué en esa ocasión mi cuerpo reacciono de una forma del todo inesperada y atípica.

Cuando al rato, Sandra fue capaz de notar tal circunstancia me susurro al oído con voz lastimera, como decepcionada y cercana al llanto.

¿No te has excitado ni un poquito conmigo?

La abrace más fuerte y busque sus labios, comencé a comerle la boca y cuando sus pezones habían recobrado toda su dureza, la aparté lo suficiente para poder decirle mirándola fijamente a los ojos.

Me has excitado muchísimo, que no me haya corrido es tan misterioso para mí como lo puede ser para ti, es por lo que llegados a este punto me gustaría que me guiaras, para poder ser yo quien te follara a ti, y ver si soy capaz no solo de proporcionarte otro orgasmo semejante al que has tenido, sino llegar yo también y poder acompañarte en tan grato momento, pues lo cierto es que me he sentido muy bien y creo que tengo para ofrecer mucho más de lo que yo mismo imaginaba.

Sin pensar demasiado y con una sonrisa en sus labios, se tendió en medio de la cama y me hizo arrodillar entre sus piernas que coloco sobre mis hombros, entonces sin palabras apunto mi grueso y circuncidado capullo a la entrada de su cueva y mirándome con sus dulces ojos susurro un ADELANTE, con una certera estocada metí más de media verga, Sandra suspiro profundamente pero siguió mostrando su eterna sonrisa, un segundo empujón llego algo más allá de lo aconsejable, pues detecte un rictus de dolor y entendí que había tocado el cérvix con demasiado ímpetu.

Seguí con una serie de largos caderazos, casi saliéndome del todo, pero quedándome un poco más corto que la vez primera y su sonrisa que había reaparecido, se fue trocando en una máscara que mostraba cada vez más dureza y se mordía los labios, cuando comenzó a cabecear babeando, entendí que le faltaba poco para alcanzar ese segundo orgasmo que pensaba compartir con ella, pero cuando exploto en su interior y me agarro los brazos, como para evitar caer en algún imaginario abismo, seguí dándole con la mayor intensidad que me permitían los espasmos que sacudían todo su cuerpo, hasta que de súbito quedo inmóvil y me asusté.

Cuando pude comprobar que su agitada respiración seguía presente me tranquilice un poco, pero me desconcertaba no haber llegado a eyacular tampoco en esta ocasión, deposite sus piernas con cuidado sobre la cama y me tendí a su lado observándola, a los pocos minutos recobro el sentido, al poco de mirarme intensamente y quizás tratar de pensar en lo sucedido, a trompicones y sonriendo me dijo.

Lo tuyo está muy claro, eres un privilegiado y te lo voy a demostrar si me lo permites.

La abrace, le dije que lo que ella decidiera me estaría bien y que me ponía en sus expertas manos, seguimos abrazados hasta que comentó que tendríamos que comer algo, y además tenía que hacer una llamada que podía ser crucial para los dos o incluso para tres. Eso me desconcertó un poco pero opte por no preguntar.

En unos minutos, mientras yo sacaba algunas viandas frías de la nevera, ella preparo una ensalada y desnudos como estábamos lo comimos con verdadero apetito, quizás por el mucho ejercicio que distaba mucho del esperado esa mañana, en que tan solo habíamos desayunado colacao y un bollo, cuando regrese de preparar el café estaba llamando por teléfono a alguien, y lo que oí me dejo igual que estaba.

Disculpa que te llame de esta forma………….Si también yo te echo de menos………….Sé que resultara raro pero te necesito……………..No, por teléfono no te lo puedo decir, pero necesito que vengas lo antes posible………….¿Te podrás quedar a pasar la noche?..........................NO, NO te arrepentirás………Tendrás una grata sorpresa te lo aseguro…………………Si, unas pizzas estarían bien y así no tendremos que salir, ni preocuparnos por la cena………….Un beso……………Hasta ahora.

Girándose hacia mí, tan solo me dijo que en media hora me llevaría una sorpresita muy agradable. Me dijo que me tendiera en la cama a descansar y que ella se encargaría de recoger la mesa y recibir a quien estaba a punto de llegar, así lo hice y unos 20 minutos después sonó el timbre, corrió descalza hasta la puerta y oí palabras que no logré entender, seguí en la cama y esperé.

Cuando entró en la habitación seguida de nuestra prima Ester trate de cubrirme pues seguía en pelota picada, imaginaba que Sandra me avisaría cuando tuviera que salir, pero sonriente me dijo que no me apurase y girándose hacia Ester le dijo.

¿Qué te parece el niño? Ya ves que no te he mentido en la puerta al decirte que es un fenómeno, después de dos polvos no he sido capaz de conseguir que se le bajara. ¿Crees que entre las dos podremos hacer algo?

Ester que es solo unos meses mayor que Sandra abrió los ojos como platos, fijos en mi verga que estaba tiesa apuntando al techo, había conseguido cubrirme en parte por una sabana pero no antes de que la viera, además destacaba como el puntal de una “jaima”, se aproximó retiró la sabana y se quedo contemplándola, mientras sus labios se humedecían y sus ojos se entrecerraban como si un foco la deslumbrara.

Se giro hacia Sandra y entusiasmada le dijo.

¿Estas segura de querer compartirlo? Es una verdadera joya pero no quiero problemas en el futuro, nosotras nos entendemos bien en nuestro terreno, pero no quiero perder lo nuestro por esto otro, aunque me apetece mucho descubrir si somos capaces entre las dos de poder satisfacerlo y conseguir doblegarlo.

Entonces como si yo no estuviera allí Sandra le dijo que no habría ningún conflicto, solo se trataba de disfrutar los tres y de paso quitarme un pequeño complejo. Que poco sabia mi hermana que el complejo ya había desaparecido después del segundo polvo, ahora solo me preocupaba averiguar porque no eyaculaba después de esos dos soberbios polvazos.

Ester le preguntó a Sandra si se había desnudado sola, cuando esta asintió y le dijo que lo había hecho para que la fotografiara, mirándome fijamente me dijo que saliera de la cama y que siguiera las instrucciones que me iba a dar.

Un tanto confuso, desnudo como estaba salí de la cama y me quede de pie dispuesto a obedecer, entonces comenzaron a lloverme órdenes y consejos por parte de Sandra, a lo que Ester no solo no se opuso sino que su sonrisa mostraba aprobación.

Arrímate un poco más.

Así es suficiente.

Ahora comienza a desabotonarle la blusa.

¡No tan deprisa!

Así esta bien, un botón cada vez, pero rozando la piel que hay debajo.

Hazlo como sin darle importancia, pero al tiempo que parezca que no hay nada más importante en el universo.

Asííííííííí………. ¿Ves como los pezones despuntan?

Ahora antes de retirar el sujetador, unos besitos en lo que ha quedado a la vista.

El cuello, el cuello sobre todo.

Notaba que la polla iba creciendo apoyándose contra uno de sus muslos, pero es que comenzaba a sentirme cómodo a pesar de que Sandra no cesaba de guiarme, eso no me agobiaba más bien me excitaba la forma en que todo estaba resultando.

Ahora sin soltar la falda aprieta su cuerpo contra el suyo.

Que note bien lo que veo, pero que tendría que estar cubierto de momento.

Las manos en la espalda y bésale el cuello.

Acaríciale las nalgas.

Con decisión, como si no quedaran más en el mundo.

¡La mano! Con una mano acaríciale la vulva.

Con la otra suelta el cierre de la falda.

Tranquilo que no tenemos prisa, inténtalo otra vez.

Así esta muy bien pero no la dejes caer aun, apriétate bien contra ella para que quede ahí.

Pensé que era más sencillo denudar a una mujer, pero entendí que no solo se trataba de desnudarla, había que encenderla en el camino y al parecer lo estaba haciendo bien pero con mucha y buena ayuda.

Ahora suelta el sujetador, este tiene el cierre detrás, después te enseñare como hacerlo con uno que tengo con el cierre delantero.

Muy bien, ahora apártate un poco, para que caiga la falda.

Una mano plana sobre la vulva, con la otra sujétale una teta por debajo.

Comienza a lamerla alrededor.

Evita el pezón por el momento.

Trata de meter un dedo en el coño sin apartar el tanga, que solo lo intuya pero que lo espere y lo desee.

Todas estas instrucciones me las daba Sandra mientras Ester estaba ya con los ojos en blanco y todo su cuerpo temblaba como una hoja, entonces comencé a improvisar, solté la teta y pase esa mano detrás para acariciarle las nalgas y apretar su cuerpo hacia delante, mientras retiraba un poco el tanga y torpemente introducía un par de dedos en su mojada vagina.

Comencé a follarla con ellos, trataba de hacerlo de la forma mas parecida que podía a lo que había pasado antes con Sandra y al parecer no lo hacia mal del todo, comenzó a arquearse y susurraba cosas muy raras pero pronto me dijo que parase, aunque me sorprendió un poco pare y me aparté algo, entonces se sentó en la cama y unos instantes después me dijo.

Teo te doy un 10, hay hombres que en 50 años son incapaces de aprender lo que tu en un rato. ¿No opinas lo mismo Sandra? Ahora que has cumplido la primera parte, vamos a intentar desahogarte entre las dos porque te lo has ganado.

Sin decir nada más tiro de mi y se dejo caer de espaldas quedando tumbada en la cama, estaba sobre ella y pensé que quería que la follara como a Sandra, pero hizo un giro y caí a su lado, entonces Sandra la ayudo a colocarme bien y quede boca arriba, se arrodillaron una a cada lado y cerré los ojos.

Quería notar solo las sensaciones, mientras que la una besaba mi pecho insistiendo mucho en los pequeños pezones, una mano se apodero de mis huevos y una lengua comenzó a pasearse por mi polla arriba y abajo. Poco después los besos del pecho fueron bajando, hasta notar que eran dos las lenguas que se paseaban por mi verga, la una centrada exclusivamente en el capullo, mientras que la otra insistía en recorrerla arriba y abajo.

El capullo fue engullido y entonces me agarre a la ropa de cama, esa acción marco un punto de inflexión, una comenzó a follarse la boca mientras notaba que tardaría poco en correrme, la sensación previa a las corridas que lograba al pajearme se hizo patente, pero no trate de interrumpir la labor de esas dos bocas que tanto placer me estaban proporcionando, en ese momento uno de mis huevos estaba dejando paso al otro en una de las bocas, y eso tampoco era una sensación conocida por mí.

Cuando comencé a eyacular pensé que se apartarían o incluso que se enfadarían, pero me sorprendió notar que mientras una trataba de sorber todo lo que le ofrecía, la otra agarraba los huevos y los estrujaba delicadamente como para ordeñarme, hubo un cambio de boca y esta se la metió algo más profunda, pues note como se producían unas arcadas cuando el capullo tocaba la campañilla, pero me había propuesto no abrir los ojos y los mantuve cerrados.

Cuando terminé, aun siguieron un buen rato jugando ambas lenguas con mi capullo hasta que les dije que ya estaba bien y que habían conseguido vencer a “la fiera”, escuche una salva de risotadas y al abrir los ojos pude ver a las dos con una cara de satisfacción, fue Ester la que dijo.

Ahora descansaremos los tres si te parece bien, y luego veremos la capacidad que tienes de reponerte y si la única forma de hacer que te corras es con una mamada, de ser así te aseguro que no te faltara sexo en muchos años.

Ambas apoyaron la cabeza sobre mi pecho, yo alargue las manos tomando una teta de cada una, los pezones se endurecieron enseguida, los retorcía y tironeaba de ellos esperando que protestaran, para mi sorpresa tan solo comencé a oír suspiros, cuando miré pude ver que ellas también se estaban acariciando el clítoris con desespero y me di cuenta que estaba a mil otra vez, tenia la verga como si no hubiera pasado nada apenas diez minutos después de una eyaculación espectacular. No lo dudé y con energía dije.

Ester creo que te toca, Sandra ya ha disfrutado dos orgasmos y creo que lo justo seria que fueras la siguiente.

Sandra sonriendo tomo las mejillas de nuestra prima y le dio un morreo que me desconcertó un poco, pero al terminar salió de la cama y se sentó en una butaca, nos miraba y eso si que me intimidaba un poco, pero deseche la idea de que me miraba y me dedique a tratar de darle placer a Ester, para ello tal y como estaba me arrodille a su lado y comencé a lamer y besar su cuerpo como ellas antes conmigo, su bello se erizó mientras yo iba tomando confianza al comprobar que iba por buen camino.

Después de llegar a la vulva y tratar de introducir la lengua, separó las piernas de tal modo que pensé que se las descoyuntaría y con sus manos apartó los labios mayores, dejando a la vista el rosado manjar con el rojo clítoris que estaba totalmente fuera de su prepucio, lo roce apenas con los labios y comenzó a soltar flujo como una fuente, entonces noté los duros pezones de Sandra en la espalda y su aliento en mi oreja, mientras murmuraba.

Clávasela ya, lo esta deseando y está más que lista para que la destroces, no tengas piedad como no la has tenido conmigo.

Sin pensarlo me arrodille entre sus piernas, Sandra le ayudo a colocarlas sobre mis hombros y sujetándola por los muslos tiré de ella hasta que el capullo rozaba ya su coño, con una mano trate de hacer puntería pero la falta de costumbre me hizo fallar el primer intento, Sandra lo soluciono pronto haciéndose cargo de la situación y una vez apuntado con un fuerte caderazo le metí más de la mitad, ahora sé que hay que ser algo más delicado, pero el caso es que no protestó y tan solo le vi cambiar su expresión unos instantes, que pronto se torno en satisfacción acompañada por profundos suspiros.

Fui cambiando de ritmo, siguiendo instrucciones de Sandra que no se apartó de mi ni un momento, sus pechos en mi espalda, una mano rodeándome el pecho para no desprenderse de mi y seguir el ritmo de la follada, y la otra mano apoyada en mi culo y seguro que manejando su propio clítoris, pues cuando por fin me dijo. METELE FUERTE Y ROMPELA ella comenzó a experimentar también un largo orgasmo, me clavo las uñas en el pecho mientras que su cabeza se apoyaba fuertemente entre el tobillo de Ester y mi cuello.

Ester se retorcía y convulsionaba, pero no deje de darle hasta que se quedó quieta y desmadejada como antes mi hermana, en esta ocasión no me asuste pues ya sabia de que se trataba, tan solo tome sus tobillos y con delicadeza los deposité sobre la cama, poco después me tendí a su lado y Sandra quedo junto a mi, la respiración agitada y las manos temblorosas demostraban que había pasado un buen rato también ella.

Cuando Ester se fue recuperando nos encontró a ambos mirándola, ella a su vez con los ojos entornados preguntó.

¿Es cierto que me he desmayado? Eso no lo había logrado nadie, pero por lo que veo no te has corrido y eso hay que solucionarlo.

Se incorporo lo suficiente para poder llegar a besarme, se unió Sandra y entonces comenzaron a probar diferentes cosas, lo primero fue a cargo de Sandra que con sus pechos talla 100, comenzó una paja cubana que me gustó mucho, cada vez que asomaba el capullo lo lamia un poco, pero en definitiva no consiguió nada más, a continuación fue Ester la que puesta en cuclillas se apuntó la polla al culo y se dejo caer de golpe, me dolió un poco pero no lo suficiente como para no poder continuar, apoye mis manos en sus nalgas y la ayude en su peculiar metisaca, es cierto que la presión que ejercía sobre la polla era bárbara, pero termino por alcanzar otro orgasmo sin conseguir que saliera ni siquiera una gota de liquido preseminal.

Susana propuso descansar, darnos una ducha y tomar algo, en el baño los tres bajo la ducha no dejamos de jugar, ellas se encargaron de dejarme la polla como los chorros del oro pero sin conseguir nada, después de comer unos pates con cava y algunas otras delicatesen, pues pensamos dejar las pizzas para más tarde Ester tuvo una idea brillante y me hizo una pregunta.

¿Cuándo te la pelas tu solo te corres?

Le respondí que naturalmente y entonces me propuso que me la pelara delante suyo. Sin prisas comencé a pajearme, pronto tenía una erección completa y en unos minutos comencé a soltar descargas de semen que pronto se dedicaron a recoger y compartir, estaban alucinadas de ver que en realidad si era una persona “casi normal”, y muy contentas de poder comprobar que “ellas” tan solo conseguirían hacerme terminar con una mamada.

Al rato se turnaron para que siguiera dándoles caña, pero sin lograr que yo llegara en ninguna ocasión, me preguntó Sandra si me sentía molesto por no correrme, y con sinceridad les dije que disfrutaba mucho con todo lo que me estaba pasando, y que cada vez que ellas alcanzaban un orgasmo también yo lo alcanzaba, solo que sin eyacular y eso me permitía seguir jugando con ellas, cenamos las pizzas pasadas ya las doce de la noche y después de eso lo primero que hicieron fue una mamada combinada como la primera que me habían hecho entre las dos.

Pasamos el fin de semana los tres juntos, después de esos días fueron muchas las veces que me acosté con Sandra que dejo a Miguel, algunas veces cuando salían nuestros padres y otras simplemente íbamos a casa de alguna de sus amigas especiales, ellas al igual que nuestra prima Ester son bisexuales, y todas quedaron sorprendidas por mi capacidad para no eyacular y de ese modo alargar la fiesta mientras que el cuerpo aguantara, la mayoría de veces lo que hacía era que ellas me follaran para evitar cansarme tanto.

No sé que sucederá en un futuro pero de momento tenemos una vida sexual plena. Lo principal para mi es que ya no miro a los otros chicos como hace unos meses, ahora los veo de forma natural y sabiéndome un privilegiado, pues sé que esta peculiaridad mía no es algo frecuente.

Se agradecen todo tipo de comentarios, tanto en la propia pagina como directamente a mi correo.

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Pobrecain